Mercedes-Benz Clase C All-Terrain (2022) | Información general
Se diferencia de un Clase C Estate en que tiene una suspensión específica y unas ruedas de mayor diámetro que alejan la carrocería 40 mm del suelo. También dispone de serie de tracción total y de dos programas de conducción para circular fuera de la carretera. Está a la venta desde 54 437 euros con un motor Diesel de 200 CV (C 220 d 4MATIC), el único posible al menos de momento (en otros mercados hay disponible una opción de gasolina de 204 CV). Por lo tanto, es 3 339 euros más caro que el Clase C familiar con el mismo motor y sistema de tracción (ficha comparativa).
Los principales rivales de este nuevo modelo son el Audi A4 Allroad y el Volvo V60 Cross Country. El más costoso es el Audi, seguido de cerca por el Mercedes-Benz, mientras que el Volvo tiene un precio claramente inferior (ficha comparativa).
El Clase C All-Terrain no está pensado para salvar grandes obstáculos fuera del asfalto, pero su sistema de tracción total parece muy eficaz en terrenos deslizantes y el aumento de altura libre permite pasar por encima de baches más complicados que un turismo convencional. Además, las reacciones en carretera del All Terrain son tan buenas que, sin haber conducido el C Estate normal, no creo que sea menos recomendable en modo alguno para viajar.
Es la primera vez que Mercedes-Benz tiene un Clase C familiar sobreelevado, pues hasta la fecha sólo existía el Clase E Estate All-Terrain.
Además de los modos de conducción habituales en el resto de la gama (Eco, Comfort, Sport e Individual), el Clase C All-Terrain tiene otros dos: Off Road (para terrenos ligeramente accidentados) y Off Road+ con control de descenso de pendientes (DSR), recomendado para terrenos más complicados. Al elegir uno u otro, cambia la respuesta del motor, del cambio de marchas, de la dirección, del control de estabilidad y del sistema de tracción total. Si el vehículo va equipado con el sistema de faros matriciales Digital Light, estos disponen de una función «luces para todoterreno», que da una visión más amplia y que funciona hasta 50 km/h. Por lo demás, el equipamiento disponible para el Clase E Estate All-Terrain es similar al del resto de la Clase C Estate.
Los motores de gasolina y Diesel, siempre con hibridación ligera. El cambio de marchas es siempre automático de 9 relaciones. Mercedes-Benz no ha confirmado por ahora si más adelante habrá opciones híbridas enchufables.
He conducido de manera muy breve un Clase C All Terrain con el motor Diesel de 200 CV (C 220 d) por caminos de tierra y otro con el motor de gasolina de 204 CV (versión C 200) por una carretera de doble sentido. He podido sacar pocas conclusiones, pero coincido con mi compañero Enrique Calle, que ha probado el Clase C berlina (enlace a la prueba), en que el motor Diesel es preferible por suavidad de funcionamiento y el menor nivel de ruido que produce cuando se acelera con intensidad.
La conducción fuera del asfalto transcurrió por un circuito de pruebas de Mercedes-Benz en que la mayor dificultad reside en la pendiente acusada de algunos tramos resbaladizos. Como es de esperar, el sistema de control de descenso de pendientes es muy eficaz, se hace cargo de la situación y mantiene constante la velocidad del coche sin que el conductor tenga que hacer nada. Esto sucede tanto yendo hacia delante como marcha atrás. En una subida muy pronunciada (creo que muchísimo más de lo que un usuario normal esperaría afrontar con este coche) no tuvo problema para coronar, aunque tuvimos que pasar con cierta velocidad por encima de unos baches profundos porque en caso contrario no conseguía continuar subiendo. En la carretera de curvas he tenido la impresión de que el coche se desenvuelve con mucha soltura: tarda poco en apoyar en las curvas, cambia de trayectoria con presteza y rueda con suavidad.
Los Clase C Estate All-Terrain están hechos a partir de la línea de equipamiento exterior e interior que Mercedes-Benz denomina Avantgarde. Sobre esta base, el Clase C Estate All-Terrain se diferencia porque tiene elementos decorativos específicos como la parrilla, los paragolpes o los pasos de rueda, que están recubiertos por unas piezas de plástico de color gris oscuro, que también están presentes en los umbrales de las puertas. Esas piezas hacen que la longitud y anchura de la carrocería aumenten ligeramente frente a un Clase C Estate convencional. El interior se puede elegir en tres «conceptos cromáticos»: de color negro, beis o una combinación de negro y marrón. El espacio para los ocupantes es el mismo, así como la capacidad de maletero.
Como en otros Clase C, las pantallas de la instrumentación y del sistema multimedia se pueden elegir en dos tamaños. Para el Clase C Estate All-terrain hay un menú específico donde aparece la inclinación lateral y la orientación de las ruedas directrices. También hay una brújula y un indicador de las coordenadas geográficas donde se encuentra el coche (imagen). Los neumáticos de serie son unos 225/55 R17 y en opción hay unos 245/45 R18 y unos 245/40 R19.
Existe un gancho de remolque opcional que se despliega automáticamente al pulsar un botón que hay en el maletero y la carga máxima remolcable son 1800 kg. El control de estabilidad puede actuar para estabilizar el remolque si se producen movimientos indeseados en el mismo a más de 65 km/h. Si se añaden las cámaras de visión de 360 grados, hay un asistente de maniobra con remolque que regula automáticamente el ángulo de orientación de las ruedas delanteras en función del tipo de maniobra que desee el conductor (previamente la habrá seleccionado desde el sistema multimedia) e incluso también está la función «remolcar en línea recta y marcha atrás». Funciona hasta 5 km/h y con pendientes de hasta el 15 %.