El Mazda MX-5 es un pequeño deportivo biplaza que está disponible con dos tipos de carrocería: Soft Top (techo de lona), cuyo precio de partida es de 30 550 euros, y Retractable Fastback (RF, techo de tipo targa), que tiene un precio mínimo de 33 050 euros. Todos los precios.

Desde su lanzamiento al mercado a mediados de 2015, este modelo ha ido recibiendo pequeñas actualizaciones de manera periódica, prácticamente cada año. La última data de octubre de 2023, fecha en la que Mazda instaló unos nuevos faros con la luz diurna incorporada (anteriormente ésta se encontraba en los extremos del parachoques delantero) y unos pilotos con intermitentes de ledes, además de ofrecer un nuevo color para la carrocería (Aero Grey Metallic) y un techo de lona de color Beige.

En el interior, la novedad de mayor relevancia se da en el sistema multimedia, que ahora tiene una pantalla táctil de 8,8 pulgadas y está conectado de manera permanente a internet (Mazda Connect). También hay pequeños cambios en la instrumentación, que sigue siendo una convencional de agujas con una pequeña pantalla para el ordenador de viaje, un nuevo tapizado que, según Mazda, «sujeta mejor el cuerpo en conducción deportiva», un espejo retrovisor interior sin marcos y dos nuevas tomas USB de tipo C (antes USB 2.0 convencionales).

Adicionalmente, desde esta misma fecha todos los MX-5 incluyen un control de estabilidad con una posición intermedia llamada «DSC-Track». Con ella, este sistema de seguridad solo interviene cuando la situación es verdaderamente complicada y el conductor está a punto de perder el control del coche. Según Mazda, es el ajuste ideal para una conducción en circuito.

El MX-5 apenas tiene alternativas en la actualidad. Algunas de ellas podrían ser el Toyota GR86 (no es descapotable y tiene un motor mucho más potente) o el Subaru BRZ (es idéntico al GR86 de Toyota). El Audi TT Roadster también era una alternativa de características parecidas, pero ya no está a la venta.

Los cambios más significativos del MX-5 modelo-año 2019 con respecto al que salió al mercado en 2015 están en los motores. El de mayor potencia, que sigue siendo atmosférico y de 2,0 litros de cilindrada, ha sido profundamente modificado para que la potencia pase de 160 a 184 CV y el par máximo de 200 a 205 Nm (ficha comparativa). Además, el límite superior de revoluciones ahora está situado a 7500 rpm, 700 más que antes.

El motor de menor potencia, también atmosférico pero con 1,5 litros de cilindrada, igualmente recibe cambios para mejorar su respuesta, aunque en este caso son más pequeños y apenas repercuten en el rendimiento: da 132 CV y 152 Nm de par (1 CV y 2 Nm más que antes; ficha comparativa). En el apartado de Información técnica detallamos cuáles han sido las modificaciones efectuadas en ambos motores.

Hasta la fecha únicamente hemos conducido la versión de mayor potencia y lo cierto es que los cambios se sienten desde que el vehículo empieza a circular. Las vibraciones del motor llegan al habitáculo mucho más atenuadas que en el del modelo anterior y alcanza el régimen máximo de giro con mucha facilidad (régimen al que además llega con fuerza). Las prestaciones, sin embargo, no son mucho mejores que las del motor de 160 CV.

No hay cambios en el chasis, por lo que las sensaciones que hemos obtenido son practicamente las mismas a las descritas en el apartado de Impresiones de conducción del MX-5 2015. Se trata de un vehículo prácticamente único y especialmente indicado para aquellas personas a las que les guste conducir, ya sea a un ritmo elevado o al del resto del tráfico. Sus reacciones son las propias de un deportivo ligero, pues obedece a las indicaciones del volante con mucha fidelidad y rapidez y las maniobras bruscas tienen un efecto claro en la trayectoria (aunque en ningún momento pone en aprietos al conductor). En el apartado de Impresiones de conducción damos más detalles sobre estos y otros aspectos.

El MX-5 2019 tiene algunos sistemas de seguridad y ayuda a la conducción que no estaban presentes en el modelo de 2015. Es el caso del sistema de reconocimiento de algunas señales de tráfico (desde octubre de 2023, además, funciona en combinación con el sistema de navegación), el de frenada de emergencia en ciudad con reconocimiento de vehículos y obstáculos (también cuando circula marcha atrás) o la alerta por cansancio del conductor.

En el habitáculo no hay cambios de diseño, pero ahora hay una columna de la dirección con ajuste en profundidad, un elemento que es de serie y que agradecerán especialmente las personas más altas. También es nueva la pantalla para el ordenador de viaje, que ahora tiene gráficos de mayor calidad y la compatibilidad con los los protocolos Android Auto de Google y CarPlay de Apple (es de serie en toda la gama). Como en el MX-5 2015, el habitáculo no es demasiado amplio y además hay pocos huecos para guardar objetos, pero está bien acabado. En el apartado de Impresiones del interior damos más detalles sobre estos y otros aspectos.

Los cambios de diseño son muy pequeños y se limitan a unas nuevas llantas de aleación de 16 y 17 pulgadas pintadas en color oscuro y a un nuevo tono para la capota de la variante con techo de lona (marrón oscuro).