Ford Ranger Cabina Sencilla (2016) | Impresiones del interior
El Ford Ranger es un vehículo diseñado para un uso profesional al que también se le puede dar un uso doméstico con un nivel correcto de confort. El habitáculo es espartano en presentación y correcto en materiales y ajustes. No hay plásticos acolchados ni de tacto blando, pero los que hay, de tacto duro, aparentan ser duraderos, de buena factura. El equipamiento disponible está un paso por detrás de todoterrenos como el Ford Edge o el Nissan X-Trail, aunque puede ser más que suficiente e incluso tener detalles lujosos.
He probado un Ranger Diesel de 160 caballos con nivel de equipamiento XLT Limited, el más alto disponible para esta versión. El nivel tope de gama es el Wildtrack, que tiene una presentación más cuidada y sólo está disponible para la versión Diesel de 200 caballos. Con Wildtrack la parte superior del salpicadero y los reposabrazos de las puertas están tapizados en un material que simula piel natural y tienen costuras de color naranja como los asientos (imagen).
Además de estos detalles, en el Wildtrack son de serie elementos que en el nivel XLT Limited hay que pagar aparte, como el navegador (454 euros; imagen) y la cámara de visión trasera (486 euros; muy aconsejable dadas las dimensiones del coche; imagen). En la carrocería también hay piezas adicionales que le dan un aspecto de vehículo más enfocado a un uso lúdico que profesional (imagen exterior).
Para acceder al Ranger hay que subirse literalmente. No es un acceso fácil porque las banquetas delanteras están situadas, en su posición más baja, a 88 cm del suelo y las traseras a 91 cm. Es una cota alta, igual o superior a la altura de la cintura de una persona de 1,70 m de estatura. En las plazas delanteras la forma más cómoda es agarrar el asidero del pilar delantero (imagen) y tirar del cuerpo para superar la altura. Salir tampoco es del todo sencillo aunque se disponga de estribos laterales (que son opcionales). Una opción es apoyar un pie en el estribo y, desde ahí, bajar al suelo. La otra es sortearlo con la pierna, pero esto no es fácil porque hay una distancia considerable que salvar desde el borde del asiento. Esta tarea es un poco más sencilla en un Mitsubishi L200 porque su altura es menor y sus estribos sobresalen menos.
El volante se puede regular en altura pero no en profundidad, una desventaja en comparación con el Toyota Hilux y el Mitsubishi L200, que sí la tienen. No obstante, no la he echado en falta porque he podido acomodarme bien (me pasa con poca frecuencia en estos casos). Los asientos delanteros tienen calefacción y el del conductor, además, regulación eléctrica con este nivel de equipamiento (imagen). La postura de conducción es cercana a la de un turismo, con el volante poco inclinado y los pedales cercanos entre sí, suaves a la presión con el pie y de recorrido no muy largo. El tacto de la palanca de cambios es suave y preciso, aunque de recorridos largos.
El tacto de los mandos es normal, ni son bastos como los de algunos vehículos industriales, ni refinados. Por ejemplo, las dos tapas de la guantera bajo el reposabrazos (imagen) cierran con tosquedad y algunas piezas de la cabina y el salpicadero resuenan a veces con las vibraciones del motor. La practicidad del Ranger aplica al espacio para soltar objetos en el habitáculo porque el tamaño de todos los huecos es generoso, ya sea bajo la consola central (imagen), en la guantera (imagen) o en los huecos de las puertas delanteras (imagen) y traseras (imagen).
La consola central es grande y está despejada de botones. La mayoría se concentra en el climatizador, que es de tipo bizona. Estos botones son pequeños y están situados en una posición baja donde apenas se ven (imagen), lo que implica distraer la atención para pulsarlos. Una opción para controlar el climatizador es hacerlo a través de la pantalla central (imagen), pero ninguna de las dos opciones me resulta plenamente satisfactoria por su ergonomía. La instrumentación está formada por un velocímetro central de aguja y dos pantallas a color (imagen). En la pantalla de la izquierda se puede seleccionar información del ordenador de viaje o un cuentarrevoluciones digital de pequeño tamaño. En la pantalla derecha se manejan las funciones del sistema multimedia. No hay disponible en ningún menú información para conducción todoterreno, como inclinación longitudinal y lateral de la carrocería.
El sistema multimedia con más prestaciones que se ofrece para el Ranger es el que Ford denomina SYNC 2. Es decir, no es el más actual de Ford (SYNC 3). Se controla a través de una pantalla táctil de ocho pulgadas o desde los mandos en el volante (imagen). Su superficie se mancha con facilidad con el manejo. Cuando el sol incide directamente sobre ella, la pantalla queda completamente oscurecida y solo se ve la suciedad (imagen).
Para quien vaya a hacer un uso profesional del coche y suela conducir con las manos sucias es posible que esta pantalla sea poco aconsejable. Por debajo hay otra más básica de 4,2 pulgadas asociada al sistema Ford SYNC, con mandos en el volante, y una radio con lector de CD sin pantalla táctil ni mandos en el volante.
El Ranger Doble Cabina tiene una amplitud normal (pese a sus dimensiones exteriores, gran parte de su longitud es sólo caja). Hay mucha altura desde las banquetas al techo, más que en los todoterrenos más amplios, por lo que las personas de gran estatura previsiblemente no tendrán problemas. Sin embargo, no destaca ni por anchura a nivel de hombros ni por espacio para las piernas en las plazas traseras. Hay 145 cm entre las puertas a nivel de los hombros en la parte delantera, nueve centímetros menos que en un BMW X5 y cinco centímetros más que en un KIA Sorento. Es prácticamente el mismo espacio que hay delante en un Toyota Land Cruiser (146 cm), un Nissan NP300 Navara (145) o un Mitsubishi L200 (144 cm).
Atrás hay 72 cm de longitud para las piernas, idéntico espacio al que hay en un Nissan NP300 Navara y un Mitsubishi L200 y, en general, menos amplitud de la que ofrece cualquier todoterreno (tabla comparativa de mediciones de interior). Hay tres centímetros menos que en un Montero 5p, cinco menos que en un Land Cruiser 5p e idéntico espacio al que hay en un Kia Sorento. La altura es buena. El Ranger no es un vehículo inadecuado para transportar a cinco personas (como, por ejemplo, una cuadrilla de trabajo), siempre y cuando se requiera del espacio de carga que tiene. Si, por el contrario, solo es necesario disponer de cinco plazas, capacidad de carga normal y buena movilidad fuera del asfalto, un Mitsubishi Montero es mejor alternativa.
El asiento trasero tiene un mullido firme, es corrido y la banqueta y el respaldo son de una sola pieza cada uno. El respaldo tiene poca inclinación y no es regulable pero sí abatible (imagen). De cara a un viaje largo, la postura es menos cómoda que en un turismo o en un «SUV». El túnel y la prolongación de la consola central no restan mucho espacio para los pies del ocupante central. Hay dos tomas de corriente en la consola central, una de 12 V y otra de 230 V (imagen) y no hay salida de ventilación central. Además de los huecos que cité antes, bajo la banqueta hay dos pequeños vanos donde caben un botiquín, el chaleco reflectante o unas herramientas (imagen).
La caja del Ranger que he probado estaba protegida con una cubierta de plástico rígido que no es de serie (cuesta 200 euros). Ford ofrece accesorios muy diversos para sujetar, proteger o cubrir la carga del Ranger Doble Cabina (en este documento de Ford de 24 páginas aparecen, disponible en esta página). También es opcional la tapa rígida de aluminio (1400 euros) que tenía instalada. En esta ficha de equipamiento aparecen los precios de los accesorios que se pueden pedir opcionalmente al adquirir un Ranger (los precios entre opciones y accesorios originales difieren).
Hay dos tipos de ganchos, con cargas máximas nominales de 200 y 300 kg, para sujetar la carga, que se pueden colocar en distintos puntos de la caja. En el paso de rueda izquierdo hay, además, una toma de corriente de 12 V (imagen). La tapa admite una carga máxima de 220 kg (200 kg en caso de añadir la opción de apertura automática). En la tabla que aparece a continuación están comparadas las dimensiones de la caja y la altura del borde de carga con las de algunos de sus competidores.
Medidas de la caja en «pick-ups» doble cabina (cm) | ||||||
Marca y modelo | Longitud (m) | Anchura máxima | Anchura mínima | Profundidad máxima | Profundidad mínima | Altura borde de carga |
Ford Ranger | 5,36 | 154 | 116 | 146 | 62 | 88 |
Mitsubishi L200 | 5,20 | 146 | 104 | 138 | 86 | 89 |
Toyota Hilux | 5,33 | 164 | 111
| 157 | 78 | 91 |