El Duster 2024 es un coche que, aunque sencillo, no causa una sensación pobre. Al menos en las unidades que nos hemos subido, que tenían el equipamiento Extreme (galería de fotos). Para el salpicadero y las puertas, Dacia ha seguido optando por plásticos rígidos, pero con relieves y detalles en el diseño —distintos colores, inscripciones— que le dan cierto toque «sofisticado». Sofisticación que no existe en la iluminación interior del coche, que es mediante bombillas de filamento de poca potencia (imagen) y de la que carecen los parasoles, aunque estos cuentan con espejo (con tapa; imagen).

Todo lo que se toca parece estar sólidamente anclado, aunque al circular por el campo o por carreteras en mal estado se oyen ruiditos. No es un coche con detalles de gran calidad, pero tampoco de mala. Si se hace una inspección más atenta del interior es posible encontrar algunas piezas que ajustan con poca precisión, como el cajón que hay bajo del apoyabrazos central (imagen). Los fondos de los espacios destinados a dejar llaves, mandos de garaje, bolis u otros objetos menudos no están ni tapizados ni recubiertos de goma (imagen de la guantera), salvo la superficie destinada a dejar el móvil cargando (imagen; el cargador es opcional).

La mayor parte de los asientos va tapizado de un material que recuerda al tacto de un traje de neopreno (imagen). Durante los días que he conducido el coche ha hecho poco calor, pero suficiente para tener constancia de que no dejan transpirar bien. No he terminado de sentirme cómodo en el asiento. La banqueta es corta y no da un buen apoyo a los muslos, sientes como que te fueses a deslizar hacia delante (no hay posibilidad de cambiar la inclinación). Esta apreciación personal quizás no sea compartida por otros usuarios.

El piso del coche no está a la misma altura que el umbral de las puertas y hay que salvar un pequeño escalón de unos siete centímetros. Lo comento para que lo tengan en cuenta aquellas personas que tengan alguna limitación de movilidad. A diferencia de otros modelos pensados también para circular fuera del asfalto, las puertas del Duster no abrazan la parte inferior de la carrocería, por lo esa zona queda expuesta, se ensucia y puede manchar la pierna, la falda o el pantalón al bajarse del coche.

Hacerse a los mandos es una tarea sencilla. No hay botones escondidos y todos están fácilmente alcanzables con las manos (imagen de los que quedan a la izquierda del volante). La pantalla central (sólo a partir del segundo nivel de equipamiento) da servicio al equipo de sonido, a las configuraciones del coche, el navegador (de Here; imagen), el teléfono (vía Bluetooth) y las funciones Android Auto y Apple CarPlay. También a unos menús relacionados con el funcionamiento del coche (ordenador de consumo, muy básico) y la conducción fuera de asfalto (inclinación y reparto del par); ejemplos.

Desde esta pantalla solamente se activa y desactiva el compresor del aire acondicionado, todas las demás funciones del climatizador tienen su correspondiente mando (bravo por Dacia) en una fila de interruptores que hay bajo las salidas de la ventilación, muy a mano (imagen).

La pantalla queda alta y no obliga a desviar mucho la mirada. Durante la semana que he probado el coche han surgido algunos problemas: en una ocasión la pantalla se quedó en negro; varias veces, la imagen de la cámara trasera se quedó congelada mientras el coche seguía retrocediendo; también ha habido tres ocasiones en las que, al seleccionar marcha atrás, no ha aparecido la imagen de la cámara.

En las plazas delanteras hay espacio suficiente para personas de casi dos metros de estatura (sentadas con los respaldos cerca de la vertical), tanto para las piernas como para que la cabeza no golpee en el techo. El volante tiene regulaciones en altura y profundidad, así que creo que será sencillo encontrar una posición correcta de conducción para la mayoría.

En las plazas traseras ocurre lo mismo que en las delanteras: no hay mucha anchura. A pesar de eso, quizás el Duster sea un buen coche para llevar dos sillitas infantiles si un adulto (o un niño) tiene que viajar entre ellas porque los anclajes Isofix están muy desplazados hacia las puertas (imagen) y queda más espacio entre medias (46 cm) de lo habitual. Mediciones del interior.

El maletero queda alto respecto al suelo (78 cm) pero el piso está enrasado con el borde de carga (imagen), lo que facilita deslizar bultos pesados y reduce el esfuerzo necesario para sacarlos del coche. Su capacidad es de 474 litros en las versiones 4x2, de 358 l en las 4x4 y de 348 l en las que pueden funcionar con GLP.

No hay automatismos para accionar el portón, más allá del amortiguador de gas de cada uno. En su interior hay una toma de 12 V, ganchos y el gato, que queda a la vista en el lado izquierdo (imagen). Para ver se dispone de un único punto de luz en la pared derecha (imagen), que puede ser escaso. Una solución es adquirir el accesorio de linterna y anclarlo en la sujeción que hay en la cara interior del portón (imagen) o en el lateral izquierdo (imagen).

Esta linterna forma parte de un sistema de accesorios al que Dacia ha bautizado YouClip. Permite anclar en distintas zonas del coche diversos elementos (un soporte para el móvil, un gancho o un conjunto formado por linterna, portabebidas y gancho). De serie, el Duster trae cuatro con el nivel Essential y seis en el resto (lado izquierdo del salpicadero, uno en el lateral de la consola en el lado del pasajero, otro en las plazas traseras, en la consola central (imagen) y tres en el maletero —uno a cada lado y otro en el portón—). Opcionalmente se pueden instalar dos más en la parte posterior de los reposacabezas delanteros.