El Citroën C2 que se vende desde finales de 2005 tiene un aspecto ligeramente distinto y algunas mejoras de acabado y equipamiento. Está a la venta desde 9.035 € en la versión básica de gasolina, hasta 14.425 € el gasolina más potente y equipado (precios de la gama). Además, se puede comprar una nueva versión (1.4i 16v Stop&Start) que ahorra gasolina y contamina menos.

El C2 es un coche de cuatro plazas menor que un C3: mide 3,66 m de longitud. Su corta distancia entre ejes (2,31 m) favorece a que el radio de giro (9,6 m) sea inferior a lo normal en coches de este tipo; por lo que es muy maniobrable en ciudad. Por su buena estabilidad, la respuesta de sus motores y sus prestaciones y consumo, este coche también es adecuado y apto para circulación por carretera.

Exteriormente cambian los pilotos, que ahora llevan parte de la tulipa transparente (imagen del antiguo y del nuevo). En el interior muestra algunos cambios que Citroën también realizó al C3: consola central rediseñada, mejora en los materiales del salpicadero, cuadro de instrumentación con la pantalla de cristal líquido más grande, nuevas tapicerías (en cuero y cuero/tela), nuevos paneles de puertas y un pomo para la palanca de cambios semi-transparente.

En el C3, el resultado de estas mejoras es muy positivo. Los cambios interiores hacen que el C3 dé más impresión de calidad que las versiones anteriores, con un aspecto interior por encima de la media.

El C2 tiene una nueva versión denominada «Stop & Start» que lleva un motor de gasolina de 1,4 l con 88 CV de potencia máxima, asociado a un cambio automático «SensoDrive» de cinco velocidades.

Esta versión (semejante al C3 «Stop & Start») se caracteriza porque ahorra gasolina y contamina menos, ya que el motor se para completamente cuando el vehículo se detiene.

Para ello, lleva un alternador reversible controlado electrónicamente. Cuando se está a punto de detener el vehículo (si se circula a una velocidad inferior a 6 km/h), el motor se prepara para su desconexión y se enciende el testigo verde «ECO» del cuadro de instrumentos. El motor permanece apagado mientras el pedal de freno está pisado. Durante esta fase, el C2 Stop & Start no consume gasolina, no emite gases contaminantes, y se suprime el ruido y la vibración del motor. Cuando se suelta el pedal de freno, el motor se pone en marcha automática y suavemente.

Este sistema se puede desconectar a voluntad del conductor. Su utilización supone un descenso en el consumo y en las emisiones de dióxido de carbono. Según Citroën, en el ciclo urbano disminuyen alrededor de un 10 por ciento; en el ciclo mixto, la ganancia se sitúa en torno al 6 por ciento. Si la circulación es muy densa, el ahorro puede llegar al 17 por ciento.

Puede comprarse desde 12.275 euros, con seis airbags, climatizador, automatismos para luces y limpiaparabrisas, entre otros elementos de equipamiento. (Más información del equipamiento de serie y opcional). Un inconveniente de esta versión es que no puede tener control de estabilidad ni opcionalmente.

Existe una versión deportiva denominada «C2 VTS», que lleva un motor de gasolina de 122 CV. Se caracteriza por tener una suspensión más dura, una dirección más rápida, y algunos detalles exteriores y de equipamiento específicos.

El C2 tiene de serie doble airbag frontal, antibloqueo de frenos (ABS) con repartidor de frenada y servofreno, cierre automático de puertas y maletero al iniciar la marcha, cierre centralizado, elevalunas eléctricos, asientos traseros independientes con regulación longitudinal (más información), fijaciones Isofix, tres posavasos, ordenador de viaje, apagado retardado del alumbrado, dirección eléctrica con asistencia variable y portón trasero dividido en dos partes (más información).

Según versiones, puede tener airbags laterales y decabeza (de tipo cortina), control de estabilidad, climatizador, volante de cuero, tapicería de cuero, regulador de velocidad, sensor de aparcamiento trasero, automatismos para luces y limpiaparabrisas, equipo de sonido con mandos en volante, navegador y conexión Bluetooth para el móvil.

Puede elegirse con cinco motores de gasolina (1,1 l con 60 CV; 1,4 l con 73 CV; 1,4 l con 88 CV; y 1,6 l en versiones de 109 y 122 CV) y un Diesel (1,4 l con 68 CV).

Todos las versiones del C2, excepto dos, tienen caja de cambios manual de cinco velocidades. Las dos versiones que no llevan cambio manual («Stop & Start» y la que tiene el motor gasolina de 109 CV) tienen una caja de cambios automática «SensoDrive».

Este cambio automático es básicamente igual al manual, con automatismos para la selección de marchas y el embrague (no tiene pedal). Tiene cinco velocidades y dos modos de funcionamiento: automático o con accionamiento manual, mediante la palanca o con unos mandos en el volante. Puede ir con cualquier motor, salvo el de menor y mayor potencia.

Para el resto de características del Citroën C2, sigue siendo válida la información referente a la gama C2 del 2004.