Citroën C-Crosser (2007) | Información general
El Citroën C-Crosser es un todoterreno ligero de 4,64 metros de longitud, tracción total y cinco o siete plazas que está disponible desde 30.160 € (todos los precios). Llegó al mercado en junio de 2007. Es el mismo coche que el Mitsubishi Outlander y el Peugeot 4007, excepto por las diferencias en el diseño —los tres se fabrican en la planta que Mitsubishi tiene en Mizushima (Japón)—.
No es un modelo recomendable para circular por zonas no asfaltadas complicadas pero sí puede dar buen resultado sobre suelo uniforme aunque sea resbaladizo (nieve o barro). Es una opción interesante si se necesita un vehículo amplio, mayor altura respecto al suelo que en un turismo —no mucho más— y tracción total. En función de la utilización que se le vaya a dar hay algunos vehículos que, sin tener carrocería de todoterreno, son una posible alternativa al C-Crosser como el SEAT Altea Freetrack —derivado de un monovolumen— o el Skoda Scout —derivado de un turismo familiar—, ambos con tracción total y una altura al suelo algo mayor de lo normal.
El C-Crosser tiene una buena respuesta en carretera. Junto al BMW X3 o el Volkswagen Tiguan, es uno de los mejores en este aspecto. También resulta muy agradable de conducir porque tiene una suspensión confortable y un motor Diesel 2.2 HDi de 156 CV de buena respuesta —esta versión se denomina comercialmente 2.2 HDi 160 FAP—.
Actualmente sólo está disponible con ese motor Diesel y caja de cambios manual o automática («DCS»), ambas de seis velocidades. Anteriormente, entre abril de 2008 y septiembre de 2010, también se podía adquirir una versión de gasolina 2.4i de 170 CV. Lleva un caja manual de cinco marchas o una transmisión automática de variador continuo («CVT») de seis relaciones.
Disponible desde 30.160 €, sólo con cinco asientos, el C-Crosser es claramente más costoso que un Renault Koleos, un Opel Antara, un Nissan Qashqai+2 y un KIA Sorento (ficha comparativa). Sí es más asequible que modelos como el Honda CR-V, el Volvo XC60 o el Mercedes-Benz GLK (listado ordenado por precio).
Citroën ha realizado ligeros cambios en el motor 2.2 HDi de 156 CV para que consuma ligeramente menos (ficha comparativa). Es el mismo que lleva el Peugeot 4007 y una variante del motor de 170 CV que llevaban el Peugeot 407 y el Citroën C5 —en éstos había dos turbocompresores en serie, no uno como en el C-Crosser—. Su funcionamiento es muy satisfactorio. En el C-Crosser y en el 4007, este motor da 156 CV de potencia máxima y un par de 380 Nm (más información técnica). Según nuestras mediciones, el C-Crosser 2.2 HDi de 156 CV es todo lo rápido que debe ser un coche de su potencia y peso (tabla de prestaciones); el consumo es normal (más información en las impresiones de conducción).
El sistema de tracción permite elegir entre tres modos de funcionamiento mediante un mando giratorio que hay entre los asientos delanteros (imagen): «2WD» —tracción delantera—, «4WD» —tracción total— y «LOCK» (más información). No tiene reductora, ni una suspensión pensada para superar zonas complicadas fuera del asfalto. Tampoco tiene ningún tipo de ayuda para controlar la velocidad en un descenso ni facilitar el arranque en rampa.
La suspensión es independiente en los dos ejes, de tipo McPherson en el delantero y de paralelogramo deformable con un elemento longitudinal en el trasero. A diferencia de otros modelos de Citroën, el C-Crosser no puede tener una suspensión neumática.
Habitáculo y equipamiento
Es un coche amplio si se van a usar sólo cinco plazas. Se pueden usar las siete si las dos de la tercera fila las ocupan niños o adultos no muy altos en trayectos cortos: son plazas incómodas (más información en las impresiones del interior).
El volumen del maletero es 510 litros si los asientos de la segunda fila están totalmente adelantados. Pueden desplazarse hasta 8 cm (más información en las impresiones del interior).
El Outlander sólo se comercializa en versión de siete plazas, mientras que el 4007 está disponible tanto con cinco como con siete asientos. De entre los todoterrenos ligeros que tienen siete plazas y un tamaño parecido al C-Crosser, el más económico es el Nissan Qashqai+2, que se puede adquirir desde algo más de 20.000 €. Los demás tienen unos precios similares al modelo de Citroën (listado ordenado por precio).
El C-Crosser está disponible con dos niveles de equipamiento: «Seduction» y «Exclusive». El primero reemplazó a uno denominado «XTR» en mayo de 2011. Todas las versiones llevan de serie, como mínimo, seis airbags, control de estabilidad, faros antiniebla, climatizador y llantas de aleación de 18 pulgadas. La versión más asequible no puede llevar, ni siquiera en opción, elementos como faros de xenón, tapicería de cuero, navegador o alarma (fichas de equipamiento).
El navegador de la versión «Exclusive» tiene un disco duro de 30 Gb y pantalla de siete pulgadas. Ésta también muestra, entre otras cosas, la imagen que recoge una cámara trasera cuando está engranada la marcha atrás, junto con guías para facilitar el aparcamiento. Hay una función para poder controlar el consumo y el tiempo empleado, entre otros parámetros, en tres trayectos diferentes. La información también se consulta mediante la pantalla de la consola.
Precio del seguro y otros detalles
Es una póliza calculada para un conductor casado de 50 años con 30 de carné y seis sin siniestros, que utilice el coche a diario, realice hasta 20.000 km anuales, aparque en un garaje colectivo y resida en León.
Un seguro a todo riesgo con franquicia se puede obtener desde 420 € —franquicia de 1.200 €— con Balumba. Si se desea rebajar la franquicia a 300 €, hay que pagar algo más por la póliza (435 €). También es una prima ofrecida por Balumba. El seguro a terceros ampliado —robo, incendio y lunas— más asequible es de Balumba y cuesta 338 €.
Citroën presentó en 2001 el prototipo C-Crosser, que mostraba cómo podría ser su todo terreno ligero en el futuro y que se parece bien poco a este modelo.