El Miray es un prototipo que, según Chevrolet, «combina un exterior inspirado en un avión con propulsor de tecnología híbrida avanzada».

De su diseño llama la atención la poca altura de la carrocería y que no tiene techo. Las puertas se abren pivotando desde su parte delantera hacia arriba. Parte de la carrocería está fabricada de plástico reforzado con fibra de carbono, como en algunos modelos próxima producción (como los BMW i3 e i8). Chevrolet dice que hay una iluminación ambiental en la parte inferior que crea una línea de luz ondulante cuando el coche está en movimiento.

Las llantas son de distinto tamaño en cada eje: en el delantero son de 20" y en el trasero de una más, 21". Están hechas de aluminio y fibra de carbono. Los retrovisores han sido reemplazados por unas cámaras de vídeo. También hay una cámara frontal que recoge imágenes sobre las que luego se superponen los datos del navegador.

El sistema de propulsión híbrido está formado por un motor de gasolina y dos eléctricos. La batería es de iones de litio y tiene 1,6 kWh de capacidad (que es más bien poco). Se recarga durante las deceleraciones y por el trabajo del motor de gasolina, que hace trabajar como generador a los motores. No se puede recargar conectándola a la red eléctrica como ocurre en el Chevrolet Volt.

El motor de gasolina tiene cuatro cilindros, 1,5 litros de cilindrada y sobrealimentación. Va colocado en la parte trasera del coche. Los dos motores eléctricos están situados delante, cada uno genera 15 kW. Según funcione un tipo de motor u otro, la tracción es delantera o trasera. Chevrolet no dice que pueda ser total, así que parece que da a entender que los tres motores no pueden funcionar simultáneamente (tampoco da la potencia máxima ni la del motor de gasolina). La caja de cambios es de doble embrague.