El BMW X5 es un todoterreno que mide 4,89 metros de longitud, 1,94 de anchura y 1,76 de altura. Puede tener 5 o 7 plazas y está a la venta desde 58 250 euros (todos los precios). Desde la primera generación, el X5 siempre ha tenido un sistema de tracción total permanente. Ésta es la primera vez en la que hay una versión sin este tipo de tracción (sDrive25d, tracción trasera).

Hay cinco versiones con motor Diesel —sDrive25d (218 CV), xDrive25d (218 CV), xDrive30d (258 CV), xDrive40d (313 CV) y M50d (381 CV)— y dos con uno de gasolina —xDrive35i (306 CV) y xDrive50i (449 CV)—. Todas ellas cumplen con la norma europea Euro 6, tienen un cambio automático de ocho velocidades, sistema Stop&Start y un modo de conducción llamado ECO PRO que, en determinadas circunstancias, engrana el punto muerto para disminuir la pérdida de velocidad y aumentar la autonomía.

En otoño de 2015 se podrá adquirir una versión híbrida denominada xDrive40e. Tiene 313 CV y su batería, que se recarga en un enchufe, da para recorrer 31 km en modo eléctrico. Hay más información en el artículo del X5 híbrido enchufable.

En julio de 2014 BMW modifica las relaciones del cambio de las versiones xDrive30d, xDrive40d, M50d y xDrive 50i y logra reducir el consumo medio homologado de ellas (desde 0,1 l/100 km en el caso del M50d, hasta 0,8 l/100 km en el del xDrive50i). También incrementa el equipamiento de serie y aumenta el listado de opciones (más información). Los precios ascienden entre 1350 y 1550 euros.

Hemos probado la versión xDrive30d, que tiene un motor Diesel de seis cilindros en línea, 3,0 litros de cilindrada y 258 caballos de potencia máxima. Este motor funciona con suavidad y tiene fuerza sobrada para mover con brío un vehículo tan pesado como éste (la masa de esta versión es 2145 kilogramos). El consumo de carburante no es bajo en términos absolutos —ha consumido entre 8 y 9,5 l/100 km durante la prueba—, pero parece razonable para la masa que debe desplazar. La suspensión de muelles helicoidales —en opción hay una neumática— sujeta muy bien la carrocería en las curvas, pero hace que el X5 sea menos cómodo que varias de sus alternativas (más información en impresiones de conducción).

El X5 es un todoterreno poco preparado para circular por pistas con grandes obstáculos (las suspensiones tienen poco recorrido, no tiene caja de cambios reductora, etc.), pero sí permite circular fuera de asfalto con mayor tranquilidad que en un turismo convencional por su mayor altura con respecto al suelo.

El habitáculo es amplio, de los más grandes entre sus alternativas (mediciones del interior), y puede tener hasta siete asientos distribuidos en tres filas —en configuración 2+3+2 plazas—. La tercera fila de asientos cuesta entre 1814 y 2536 euros en función del motor y, según BMW, están indicados para personas de estatura igual o inferior a 1,50 metros. Los asientos de la fila central pueden tener regulación en inclinación del respaldo en 10 grados, así como una banqueta que se puede deslizar 8 centímetros.

El maletero tiene un volumen de 650 litros que puede ampliarse hasta 1870 litros abatiendo los respaldos de los asientos traseros, divididos en una proporción 40:20:40 (de serie). El portón es de doble hoja con apertura en sentido vertical y accionamiento eléctrico de serie (más información en impresiones del interior).

Con el motor Diesel de 258 CV —versión xDrive30d— el BMW X5 está a la venta por 67 100 euros (69 449 euros si se quiere con siete plazas). Cuesta más que un Jeep Grand Cherokee 3.0 V6 de 250 CV, un Audi Q7 3.0 TDI de 245 CV y un Volkswagen Touareg 3.0 V6 TDI 245 CV (ficha comparativa). De ellos, el Jeep es el que tiene el equipamiento de serie más abundante. Igualando éste en lo posible, el Jeep es unos 13 000 euros más asequible que el siguiente modelo con el precio más bajo, el Volkswagen Touareg. El precio del Audi Q7 y BMW X5 quedan con un precio muy parecido y claramente por encima del resto. El consumo de carburante de esta versión es claramente inferior al del resto (consume entre 1,0 y 1,3 l/100 km menos que el resto).

Con el motor de gasolina de 449 CV y siete plazas cuesta 95 750 euros (98 286 euros si se escoge la versión de cinco plazas). Un Cadillac Escalade 6.2 V8 de 409 CV es más barato (89 576 euros), pero su equipamiento es más pobre (ficha comparativa). Comparado con un Mercedes-Benz GL 500 (435 CV) y un Land Rover Range Rover Sport 5.0 V8 (510 CV), el BMW es más asequible, acelera mejor de 0 a 100 km/h, consume menos carburante y su equipamiento de serie es parecido (ficha comparativa).

La reducción de consumo con respecto al X5 de la generación anterior es importante. Uno de los principales causantes de este hecho es la mejora del coeficiente aerodinámico (Cx) y del valor de resistencia aerodinámica (SCx). El Cx del X5 de tercera generación varía entre 0,31 y 0,35 en función de la versión, mientras que antes lo hacía entre 0,33 y 0,38. Por su parte, el SCx en la actual gama del X5 varía entre 0,88 y 0,99 metros cuadrados, mientras que en la generación anterior lo hacía entre 0,95 y 1,09. Por tanto, la resistencia aerodinámica de la carrocería al avance es ahora menor y el motor necesita menos carburante para moverla. Además, en julio de 2014, algunas versiones han visto revisados sus desarrollos de transmisión y reducido aún más el consumo. Así, el X5 xDrive30d de 2014 consume 1,5 l/100 km menos que la versión equivalente de la anterior generación (ficha técnica comparativa). En el caso del X5 xDrive50i esta disminución llega a ser de 2,9 l/100 km (ficha técnica comparativa). Además de mejorar el consumo, también hay una mejora en las prestaciones.

La versión de menor consumo es la sDrive25d, de tracción a un sólo eje (el trasero): 5,6 l/100 km. La versión xDrive25d —con el mismo motor, pero con tracción total— consume 5,8 l/100 km. El X5 xDrive30d consume 5,9 l/100 km. Actualmente, el único todoterreno de similar longitud que tiene un consumo por debajo de 6,0 l/100 km es el Mercedes-Benz ML 250 BlueTEC 4MATIC con 5,8 l/100 km (listado comparativo ordenado por consumo).

La versión M50d tiene un motor Diesel de 381 CV. Es un motor técnicamente peculiar, porque es el único que se comercializa actualmente con tres turbocompresores (información técnica de este motor).

En el BMW X5 no hay niveles de equipamiento. De serie tiene, entre otros, los siguientes elementos: programador de velocidad con función de frenado, conexión automática de luces y limpiaparabrisas, sensores ayuda al aparcamiento delanteros y traseros, conexión Bluetooth para teléfonos móviles y entrada para dispositivos USB. Además, en las versiones xDrive50i y M50d la tapicería de cuero es de serie. Desde julio de 2014 también son de serie los faros de xenón, el control de presión de cada una de las ruedas, la alerta por cambio involuntario de carril y el sistema de frenado de emergencia en ciudad (funciona hasta 60 km/h y puede actuar sobre los frenos automáticamente, aunque nunca aplicando la máxima fuerza de frenado). Estos dos últimos sistemas formaban antes parte del paquete opcional «Driving Assistant». 

En opción hay un paquete denominado «Driving Assistant Plus», cuyo sistema de frenado de emergencia sí puede aplicar toda la fuerza de frenado posible para detener el coche antes de que se produzca un posible impacto.

Entre nuevos elementos opcionales disponibles, destaca el asistente de conducción en atascos. Este asistente funciona hasta 60 km/h y mantiene el coche dentro de las líneas del carril así como una distancia determinada con el vehículo precedente sin necesidad de intervenir en la dirección, el acelerador o el freno.

Otro sistema opcional es el sistema de visión nocturna —BMW Night Vision—, que tiene una función que busca animales y peatones cuyo movimiento tenga una trayectoria que potencialmente pueda causar un impacto con el vehículo y en caso de detectar peligro alarma al conductor con señales acústicas y luminosas y adicionalmente da una ráfaga de luz para resaltar dónde está el peligro —Dynamic Light Spot—.

Asegurar a todo riesgo sin franquicia un BMW X5 xDrive30d de 258 CV tiene un coste mínimo anual —para un varón de 50 años, casado, que viva en Madrid, tenga plaza de aparcamiento y recorra 25 000 kilómetros al año— de 1103 euros con Nuez seguros, cuya póliza es la que mejor relación tiene entre calidad y precio —7,73/10—. La aseguradora que ofrece la póliza de mayor calidad para este caso es Mapfre —8,37/10 y relación entre calidad y precio de 4,19/10—, con un coste de 5516 euros al año. Se pueden hacer otras simulaciones con el comparador de seguros de km77.com.