BMW Serie 6 (2004) | Suspensión, ruedas, dirección, frenos y ayudas electrónicas al conductor
La suspensión es la misma que tiene un Serie 5. Delante tiene un sistema McPherson con dos brazos como elementos inferiores (el superior siempre es el amortiguador). Detrás lleva un paralelogramo deformable con un gran trapecio inferior y dos brazos superiores. En todo caso, los muelles son helicoidales, no los hay neumáticos.
En España tendrá de serie el sistema de estabilizadoras activas «Dynamic Drive», que da muy buen resultado en el Serie 5 y en el Serie 7 (más información). Este sistema prácticamente elimina el balanceo de carrocería cuando el coche va despacio (en ciudad) y lo limita mucho en marcha (hasta en un ochenta por ciento). Por lo visto en otros BMW, el efecto es muy positivo para la capacidad del coche de entrar en la curva.
Tiene de serie unas ruedas muy grandes para un coche de este peso: 245/45, en llanta de 8 x 18 pulgadas. Las llantas de serie son de fundición de aluminio; hay unas opcionales de aluminio forjado y 19 pulgadas de diámetro.
Los neumáticos son del tipo («run flat») que permiten seguir circulando aunque pierdan todo el aire, un mínimo de 150 km a menos de 80 km/h. Estos neumáticos tienen flancos reforzados y un compuesto de goma resistente a la temperatura alta que se alcanza si pierden presión.
La llanta que lleva permite sustituir estos neumáticos por uno normal, si no se pueden reparar ni se encuentra otro del mismo tipo (una solución que, para ser provisional, es cara).
Todos los sistemas de seguridad activa siguen funcionando aunque el neumático esté deshinchado (aunque el agarre es menor, claro). El 645Ci tiene de serie un sistema de control de deshinchado de las ruedas, que funciona por comparación del giro entre ellas.
El 645Ci tiene de serie la dirección de cremallera con asistencia variable según la velocidad («Servotronic») y también desmultiplicación variable. Este sistema consiste en que, cuando el coche está parado o circula muy despacio, hay que mover muy poco el volante para obtener mucho giro, lo que hace al coche muy maniobrable. A medida que el coche gana velocidad, aumenta la desmultiplicación hasta que, a 120 km/h, se convierte en una dirección normal.
Por lo que se desprende de la información que ha dado BMW, en el Serie 6 la dirección de desmultiplicación variable puede seguir indicaciones del control de estabilidad (DSC), para variar el ángulo de las ruedas: «la dirección activa modifica ligeramente el ángulo de giro de las ruedas delanteras para corregir el ángulo de giro del coche y estabilizarlo. El sistema interviene en la dirección más rápidamente que un conductor normal maniobrando con el volante y, por lo tanto, el sistema DSC interviene con menos frecuencia».
Al menos en el Serie 5 esto no era así en junio de 2003, según nos contó entonces un técnico de la empresa que ha desarrollado este sistema (ZF Lenksysteme). Según dijo este técnico, el sistema no estaba preparado en ese momento para que la centralita del control de estabilidad gobernase a la de la dirección activa (son independientes). Lo que sí hay es una comunicación entre ellas a través de la red de datos, de manera que cualquiera de las dos está informada de si la otra está actuando, pero no se cruzaban órdenes entre ellas.
Como ayudas al conductor integradas en el control de estabilidad, tiene antibloqueo de frenos (ABS), control de frenado en curvas (CBC), control de tracción (ASC) que interviene en los frenos y en el motor si hay riesgo de deslizamiento excesivo en tracción, control de retención (MSR) que acelera el motor si la retención puede provocar excesivo deslizamiento.
También tiene también el sistema DTC, que equivale funcionalmente a un autoblocante porque frena la rueda motriz que patina en tracción. Este sistema se conecta manualmente y, al hacerlo, varía la programación del control de estabilidad para que tolere una desviación mayor de la trayectoria. En el Serie 5, funciona hasta 70 km/h. La información que ha dado BMW no dice que tenga o pueda tener un autoblocante mecánico.