Bentley Flying Spur (2020) | Información general
El Bentley Flying Spur 2020 —una berlina de lujo de cuatro puertas— sustituyó al modelo de 2013 (información). Mide 5,32 m de longitud, por lo que es 3 cm más largo que antes. Sigue siendo igual de ancho y de alto, pero la distancia entre ejes es 13 cm mayor, lo que habitualmente conlleva más espacio para las piernas de los pasajeros de la segunda fila. Todos los Flying Spur tienen tracción total y cambio automático de ocho marchas.
Versiones
Bentley lo presentó en junio de 2019 inicialmente con un motor de doce cilindros (versión W12) y 635 caballos, cuyo precio de partida era de casi 250 000 euros (ficha técnica). Esta versión ya no está a la venta en la actualidad. En octubre de 2020 añadió a la gama la versión V8 con 549 caballos y en julio de 2021, la híbrida enchufable de 544 CV.
En septiembre de 2022 llega la última novedad. Bentley presenta el Flying Spur Speed y viene a reemplazar al Flying Spur W12. El motor es el mismo que lleva el Bentayga W12 y también tiene 635 CV. Sus prestaciones son las siguientes: puede acelerar desde parado hasta 100 kilómetros por hora en 3,8 segundos y su velocidad máxima es 333 kilómetros por hora.
El Flying Spur Speed se reconoce porque tiene detalles a acabados en negro en la parrilla, los faros (imagen) o los pilotos (imagen), y hay insignias en las aletas que hacen referencia al la versión. Las llantas son de 22 pulgadas. En el interior hay gráficos específicos para la instrumentación y el sistema multimedia, pedales deportivos, así como emblemas y umbrales de las puertas iluminados con la palabra Speed.
La versión «Hybrid» tiene un sistema de impulsión compuesto por un motor de gasolina de seis cilindros en uve con 416 CV, uno eléctrico síncrono con rotor de imanes permanentes de 136 CV y una batería de iones de litio con 18 kWh de capacidad. La potencia máxima combinada es de 544 CV y la autonomía en modo eléctrico de 41 kilómetros. Según Bentley, son necesarias un mínimo de 2,5 horas para realizar una carga completa de la batería (a 7,2 kW, que es lo máximo que admite el cargador embarcado). La toma de carga se encuentra en la aleta trasera izquierda.
Como en otros modelos híbridos enchufables, el Flying Spur Hybrid tiene tres modos de gestión de la energía: EV Drive (mueve el coche con el motor eléctrico, siempre que haya carga en la batería), Hybrid Mode (el sistema se encarga de gestionar qué motor o motores utiliza en función de la demanda de potencia, de la orografía y del tráfico) y Hold Mode (mantiene la carga de la batería a un nivel determinado para utilizarla posteriormente). Estéticamente, son pocos los detalles que distinguen a esta versión del resto: un emblema en la parrilla, unas llantas y unas salidas de escape diferentes e instrumentación y sistema multimedia con menús específicos.
Según Bentley, el Flying Spur V8 está orientado a clientes que conducen su coche, ya que es más «ágil y se beneficia de un mayor rango entre paradas». El Flying Spur V8 es 100 kg más ligero que el W12 y el peso está mejor distribuido entre los ejes (según el fabricante). El W12 gana en prestaciones brutas (velocidad máxima y a aceleración), si bien la diferencia no es abismal (ficha comparativa). Una forma de distinguir al Flying Spur menos potente es que tiene cuatro salidas de escape de sección ovalada en lugar de dos de gran tamaño.
Equipamiento
Dispone, al igual que puede tener el Bentayga, de un sistema eléctrico a 48 V para alimentar las barras estabilizadoras activas y la dirección en las ruedas traseras, elementos que son opcionales en el V8. Estos dispositivos, el equipamiento multimedia y de asistencia son parte de las novedades que lo distinguen del Bentley Flying Spur de 2013, al que sustituye. La lista de posibles alternativas a este coche es muy reducida pues, aunque por tamaño lo pueden ser las variantes de carrocería larga del Audi A8, el BMW Serie 7 o el Mercedes-Benz Clase S, por precio (habitualmente) están más cerca un Mercedes-Maybach Clase S o un Rolls-Royce Ghost.
Los faros tienen tecnología LED, con las luces dispuestas en una matriz que permite iluminar la vía creando diferentes patrones de haz de luz, para adaptarlo a la carretera, el tráfico que hay delante y la señalización. Esta función de alumbrado no estaba antes disponible. También los pilotos alumbran mediante ledes. Las llantas de serie tienen 21 pulgadas de diámetro y, en opción, pueden tener 22 (con «Especificación Mulliner»). Uno de los detalles de diseño que Bentley recupera después de años en desuso es el emblema retráctil sobre la calandra (imagen), rediseñado para celebrar el centenario de la marca y que se ilumina y despliega en una secuencia coordinada con la iluminación exterior de cortesía, conforme el conductor se acerca al coche.
Para fabricar el nuevo chasis, Bentley ha empleado aceros de alta resistencia, aluminio y composites (plásticos reforzados con fibra de carbono), aunque no especifica dónde. Es el primer Bentley que dispone de dirección en las cuatro ruedas. Para actuar sobre las traseras, Bentley ha empleado unos motores eléctricos conectados al sistema a 48 V. Como en otros coches que disponen de esta función (el Audi A8 y el Q7, por ejemplo), a velocidad baja las ruedas traseras tuercen en sentido contrario para ayudar a maniobrar y, a velocidad alta, cambian el sentido de giro hacia el mismo lado que las delanteras.
La suspensión dispone de amortiguadores de dureza regulable y de muelles neumáticos (con una estructura de tres cámaras que almacenan hasta un 60 % más de volumen de aire que antes, lo que permite una regulación más amplia y diferenciada entre el ajuste más confortable y el más deportivo). Este sistema neumático compensa permanentemente la altura al suelo de la carrocería cuando aumenta la carga del coche. Las barras estabilizadoras son de tipo activo (Bentley Dynamic Ride), movidas a través de actuadores eléctricos a 48 voltios (como en el Bentayga). Los discos de freno delanteros, hechos de fundición gris, tienen 420 mm de diámetro.
Con el nuevo Flying Spur están disponibles sistemas de asistencia a la conducción que no podía tener el modelo anterior, como el aviso de obstáculos en el ángulo muerto del retrovisor, el de tráfico que cruza por detrás al maniobrar marcha atrás, información proyectada en el parabrisas, cámara de visión nocturna o un circuito de cámaras que crean una imagen cenital del vehículo para ayudar al aparcamiento. Bentley ofrece tres equipos de sonido distintos, uno básico con 10 altavoces, otro intermedio de Bang & Olufsen con 16 altavoces (con rejillas iluminadas) y el tope de gama, de Naim, con 19 altavoces, cuyos algoritmos pueden crear ocho ambientes acústicos diferentes.
La instrumentación se visualiza a través de una pantalla. En el centro del salpicadero hay una consola rotatoria que permite elegir entre ver la pantalla multimedia táctil de 12,3 pulgadas, unos indicadores de aguja de diseño clásico (termómetro exterior, brújula y cronómetro) o simplemente un recubrimiento de madera que deja la superficie despejada de elementos que distraigan. Hay, además, una superficie para recargar dispositivos móviles y sendos conectores USB. El sistema multimedia admite diferentes configuraciones de pantalla para mostrar de uno a tres menús distintos a la vez.
Para las plazas traseras también hay una pantalla táctil sobre las salidas de ventilación (imagen), con los controles del equipamiento de confort. Esta pantalla se puede desencastrar de su soporte para manejarla como un control remoto. El techo puede ser, opcionalmente, de cristal, de tipo panorámico (cubre todo el habitáculo), con apertura delante y unas persianas tapizadas en Alcantara.
Motores y sistema de tracción
El motor V12 tiene doce cilindros en W, con 6,0 litros de cilindrada, doble turbocompresor, 635 caballos de potencia y 900 Nm de par máximo. El sistema de escape tiene unas válvulas que controlan el la cantidad de ruido que emite. La caja es automática de doble embrague con ocho relaciones de ZF. La séptima y octava marcha son de desahogo (para circular a alta velocidad con el motor a bajas revoluciones).
El motor V8 a 90 grados tiene 4,0 litros de cilindrada y está sobrealimentado por dos turbocompresores de doble entrada. Tiene un sistema de desconexión de cuatro de sus ocho cilindros para ahorrar carburante. Esta desconexión se produde cuando la demanda de aceleración es pequeña y el motor gira por debajo de 3000 rpm. Es el mismo motor que tienen otros modelos de Bentley.
En condiciones normales, la tracción es a las ruedas traseras y, mediante un embrague multidisco intermedio, la gestión electrónica deriva potencia a las ruedas delanteras cuando es necesario (en el modelo anterior, la tracción era permanente, con un reparto habitual en proporción 60:40). En el modo de conducción Comfort, el sistema envía hasta 480 Nm al eje delantero. En modo Sport, sólo hasta 280 Nm, para producir un efecto más sobrevirador al acelerar. Adicionalmente, para mejorar el paso por curva, el sistema Torque Vectoring aplica de forma selectiva los frenos en cada rueda.
La oferta estándar está compuesta por 17 colores de carrocería disponibles y 15 de interior. Para personalizar el habitáculo hay un catálogo de nuevas maderas (simples o en combinación de dos diferentes). Adicionalmente, a través de Mulliner es posible personalizar el coche a capricho con «un espectro ilimitado de colores», además de con accesorios adicionales manufacturados, como pedalier en aluminio, otras molduras de madera o emblemas bordados en los asientos, así como pieles con patrones de bordado en forma de diamante en tres dimensiones para las puertas (imagen). Los asientos pueden disponer de calefacción, ventilación y funciones de masaje.