Audi A6 Avant 2.7 TDI 6 vel (2005) | Las plazas traseras son amplias y el maletero muy aprovechable
El acceso a las plazas traseras es aún mejor que en la berlina, en donde es muy bueno. Las puertas se abren ampliamente, el suelo está bajo, hay espacio más que bastante para poner el pie.
La forma del asiento es más adecuada de lo normal para tres personas; aunque las dos plazas laterales son envolventes, la parte central del asiento es suficientemente ancha para dar un apoyo uniforme a la espalda. Si no es más cómodo para un tercer pasajero atrás es porque el túnel central es muy voluminoso; hay que llevar las piernas separadas, porque encima no se pueden poner.
Para dos personas sí es muy cómodo. El ángulo del respaldo es adecuado, tiene un apoyo lumbar algo mayor de lo normal (muchas personas se sentirán cómodas con él) y el reposacabezas queda en una posición muy positiva para la comodidad (permite viajar con la cabeza apoyada) y la seguridad (sujeta bien la cabeza en caso de alcance). El cinturón también queda a una altura adecuada.
Tiene una salida de aire (no dos independientes), pero con dos mandos orientables; no se puede ajustar la temperatura, sólo el caudal de aire. Tampoco tiene salidas de aire para la cara o cortinas para las ventanillas traseras. Sí hay dos buenas luces de lectura y, dentro del reposabrazos, un hueco específico para el botiquín.
Hay varios elementos opcionales que pueden ser interesantes para quien use a menudo las plazas traseras, muchos de ellos reunidos en paquetes de opciones: paquete portaobjetos asientos con calefacción cortinillas argollas Isofix paquete de iluminación interior
El maletero es amplio y aprovechable; mide 119 cm de fondo, 109 de ancho y 44 cm de alto (medido hasta la cortina) Si se abate el respaldo trasero, la longitud aumenta hasta unos 2 m (depende de la posición en la que estén los asientos delanteros; sólo se abate el respaldo, la banqueta es fija.
Hay dos soportes para cortinas en el maletero. Uno es el de la cortina opaca horizontal que lo cubre. El otro es el de una cortinilla translúcida que separa verticalmente el habitáculo del maletero, y que llega hasta el techo. Este segundo soporte se puede colocar en dos lugares: por detrás del respaldo trasero y, si el respaldo trasero está abatido, por detrás de los respaldos delanteros; la pieza que aloja las cortinas encaja fácilmente en unas sólidas guías que hay tras los respaldos traseros. Estos dos soportes son pesados y largos, pero relativamente fáciles de manipular; en los dos casos los mecanismos para fijarlos en cada posición funcionan bien.
El A6 tiene de serie dos rieles con cuatro robustas argollas que se pueden fijar a lo largo de esos rieles. Además, la unidad que hemos probado tenía el «Set de fijación para el maletero» (185 €), que consta de una separación de aluminio y una separación de un tejido semejante al del cinturón de seguridad. Los extremos de cada una de estas separaciones se pueden fijar en cualquier posición de los rieles, porque la separación de aluminio es telescópica y la de cinta tiene un carrete que se tensa automáticamente (como el cinturón de seguridad). Por tanto, se puede dividir el fondo del maletero de muchas maneras o crear los espacios necesarios para llevar bien sujetos objetos de cualquier tamaño.
El maletero tiene un doble fondo. Si no se quiere utilizar ninguna de las separaciones porque hace falta todo el volumen del maletero, caben perfectamente debajo. El suelo del maletero se desliza hacia fuera con facilidad y también se puede plegar en tres parte (en «Z»).
Además de que todos estos elementos me parecen muy útiles, su calidad de construcción es notable y están hechos de manera que resultan muy fáciles de manejar. Lo único que requieren es un poco de práctica o leerse el manual; quien saque conclusiones por ponerse a forcejear con ellos durante cinco minutos las sacará erróneas.