Audi A6 (2001) | Impresiones de conducción del 3.0 V6 de 220 CV
El motor 3.0 V6 de 220 CV sustituye al anterior 2.8 V6 de 193 CV de potencia. En términos generales es un motor mejor, pues gasta menos y —sobre todo— corre más. El consumo medio es de 9,7 litros cada 100 km y alcanza 241 km/h.
Tiene 300 Nm de par a 3.200 rpm, además, entre 2.200 y 5.200 rpm ofrece el 90% del total del par. También tiene distribución y admisión variable. La distribución variable modifica tanto el calado del árbol de levas de admisión (un máximo de 42º) como el de escape (un máximo de 22º). Otro sistema para mejorar el llenado de los cilindros es el colector de admisión de doble recorrido de aire; hasta 4.200 el recorrido que hace el aire es largo, a partir de 4.200 rpm el recorrido es corto.
Es un motor que funciona muy bien. Es muy elásticopero va claramente mejor a partir de 3.000 rpm. Tiene un cierto tacto deportivo, por la entrega de potencia y por el sonido que hace. No es un sonido alto y sí bonito; esto ocurre cuando aceleramos mucho, si no, es muy silencioso.
Aunque no he probado versiones más potentes, me parece que es un motor recomendable para aquellas personas que valoren las prestaciones (hay potencia de sobra en todas circunstancias) y un buen motor.
Como ya ocurría últimamente con la antigua gama A6, la nueva se vende con suspensión deportiva de serie. Aquellos conductores que quieran, podrán poner la suspensión blanda sin coste alguno.
Lo malo que tiene la suspensión deportiva es que resulta un poco seca y dura para un coche de estas características. Es un poco incómoda en carreteras en mal estado. En carreteras con buen piso da más confianza al conductor y más sensación de control.
Para aquellos conductores que no suelan conducir rápido o no quieran una respuesta más directa del coche, es aconsejable optar por la suspensión blanda.