El BMW X3 es un SUV de cinco plazas y 4,76 metros de longitud. En la gama actual hay una versión Diesel (197 CV), dos de gasolina (208 y 398 CV) y una híbrida enchufable (299 CV). Todas llevan cambio automático y tracción en las cuatro ruedas (xDrive). El precio de venta parte de 63 100 € (datos, precios y equipamiento de la gama BMW X3 2025).
Sus dos principales competidores son el Audi Q5 y el Mercedes-Benz GLC. Frente a ellos, el X3 no presenta ninguna cualidad dinámica que le haga más ni menos recomendable. Es cómodo de suspensión, está bien aislado del ruido, los sistemas de ayuda a la conducción funcionan correctamente y es estable en curva. Por precio también está en un punto intermedio, como se puede observar en esta ficha comparativa de las versiones básicas de gasolina y en esta otra de las versiones básicas Diesel. El habitáculo y el maletero son amplios (impresiones del interior).
Por el momento solo he conducido la versión Diesel de 197 CV. Me parece la elección acertada para aquellos que realicen muchos kilómetros al año, especialmente si son fuera de ciudad, porque su consumo de carburante es el más bajo de toda la gama. En un trayecto que realicé de Madrid a Soria gastó una media de 6,3 l/100 km, yendo constantemente por autopista a un ritmo elevado. Esta versión tiene un sistema de hibridación ligera a 48 voltios, como el resto de la gama BMW X3, y por tanto le corresponde el distintivo ECO de la DGT. La excepción es obviamente el BMW X3 híbrido enchufable, que tiene el distintivo 0 Emisiones.
Al ralentí, el habitáculo está perfectamente aislado de las vibraciones que produce el motor Diesel y el conductor solo percibe el leve murmullo del característico claqueteo de los motores de este tipo. En marcha, el ruido a Diesel se hace más evidente, aunque nunca me ha parecido molesto. Más adelante, en el verano de 2025, BMW añadirá a la gama un segundo motor Diesel, pero con seis cilindros en vez de cuatro. Seguramente este tendrá un funcionamiento más refinado y, además, proporcionará mejores prestaciones. Esta versión de 197 CV no anda mal, pero su aceleración puede que se quede escasa para aquellos que les guste sentir una respuesta contundente.
La versión híbrida enchufable (BMW X3 30e xDrive) tiene una autonomía eléctrica WLTP de 90 km. Es un dato que está claramente por debajo de los 123 km que ofrece Mercedes-Benz en el GLC 300 e 4MATIC (ficha comparativa; del Audi Q5 todavía no hay versión híbrida enchufable). La batería tiene una capacidad neta de 19,7 kWh y solo se puede cargar con corriente alterna, a un máximo de 11 kW (la del GLC tiene 24,8 kWh y admite hasta 60 kW con corriente continua). Esta versión alcanza 140 km/h en modo completamente eléctrico.
Con respecto a la anterior generación de X3, BMW asegura que ha hecho cambios en el chasis para alcanzar un mejor compromiso entre confort y agilidad. Una de las medidas que ha tomado para lograr ese objetivo ha sido emplear barras estabilizadoras ligeramente más delgadas apoyadas en casquillos más rígidos. Esto hace que la transferencia de fuerzas entre las ruedas sea más instantánea y por tanto, que el efecto de contención del balanceo de la carrocería se perciba antes y, a la vez, al ser las barras un poco más delgadas, se logra un confort de marcha ligeramente superior. La vía delantera es 16 milímetros más ancha y la posterior, 43 mm más. Personalmente, no he apreciado ninguno de esos beneficios. Quizás necesite más tiempo de conducción.
También hay un nuevo mecanismo de asistencia eléctrica para la dirección, que proporciona mejor tacto y una respuesta más natural. Además, esta ahora tiene una mayor tendencia al autocentrado porque BMW ha incrementado un 19 % el avance mecánico (mechanical trail en inglés), lo que repercute en mayor sensación de estabilidad a alta velocidad. De nuevo, no he percibido una mejoría en este campo.
En la suspensión —MacPherson con doble tirante inferior para el eje delantero y multibrazo para el posterior— hay novedades. Por ejemplo, los muelles son distintos y BMW ha reajustado la firmeza de los amortiguadores utilizando una combinación diferente de las arandelas que restringen el paso del aceite para conseguir de esta manera un control más preciso del movimiento del vástago. En opción hay disponible una suspensión de firmeza variable, con una frecuencia de adaptación de 10 milisegundos.
La versión M50 xDrive de 398 CV tiene cuantiosas modificaciones (con respecto al resto de la gama) encaminadas a acentuar su dinámica en conducción deportiva, o lo que es lo mismo, a darle un tacto más ágil, directo y preciso. Modificaciones como refuerzos adicionales en el chasis para incrementar la rigidez, un diferencial de deslizamiento limitado para el eje posterior, mayor caída negativa en las ruedas delanteras, casquillos más rígidos, muelles y amortiguadores más firmes, barras estabilizadoras más gruesas.
La superficie frontal del BMW X5 2025 es de 2,66 m² —mayor que la del Audi Q5 y el Mercedes-Benz GLC: 2,64 y 2,60 m² respectivamente—, pero como el coeficiente aerodinámico es inferior —Cx de 0,27, por los 0,30 del Audi y 0,29 del Mercedes-Benz—, la resistencia al avance del BMW es la menor: 0,72 m² frente a los 0,79 del Audi y 0,75 del Mercedes-Benz. Los faros son siempre de ledes, si bien en opción hay disponibles unos de tipo matricial (son de serie en el M50 xDrive). Las llantas puede ser de 19, 20 o 21 pulgadas.
El X3 cuenta con multitud de sensores para asistir a los sistemas de ayuda a la conducción. En concreto, BMW cita una cámara frontal de 8 megapíxeles de resolución, un radar delantero de largo alcance (hasta 300 metros), cuatro radares de corto alcance (uno en cada esquina del vehículo) y doce sensores de ultrasonidos (seis delante y seis detrás). Los asistentes que utilizan estos sensores son, entre otros, el programador de velocidad activo con función de cambio automático de carril, el sistema de mantenimiento en el carril, el asistente de aparcamiento (controla tanto la dirección como el acelerador y el freno) y la reproducción automática marcha atrás de los últimos metros recorridos (memoriza los últimos 50 metros recorridos y los puede deshacer marcha atrás). El X3 también dispone de un sistema de proyección de información en el parabrisas con realidad aumentada (superpone flechas y otros iconos sobre la carretera para ayudar a seguir las instrucciones del navegador).
El BMW X3 se fabrica en Estados Unidos, en la planta de Spartanburg, excepto la versión híbrida enchufable, cuyo montaje se realiza en la planta de Rosslyn, en Sudáfrica. Esta es la cuarta generación del BMW X3, código en clave G45. Reemplaza a la tercera generación (G01; más información del X3 2022) con la que comparte plataforma (denominada CLAR), si bien es un vehículo completamente diferente por diseño, con novedades en puntos importantes del chasis —como en la suspensión y la dirección—, con una gama de motores renovada y con mejoras en el equipamiento. La primera generación del BMW X3 salió en 2003, la segunda en 2010 y la tercera en 2017. De todas ellas tenemos información y pruebas que pueden leerse pinchando en este enlace.