Hay una marca de juguetes que se llama Porsche. El Cayman S PDK probablemente sea el que todos los niños pediríamos por Reyes.
* * *
Los Porsche son coches para jugar. Para jugar a todas horas y sin parar. Quien se compra un Porsche, quiero decir, quien se compra uno de los Porsche bajitos, tiene que hacerlo salivando, degustando en la boca los minutos de disfrute. Los Porsche altitos también permiten jugar, porque como bien sabemos en este blog, jugar es una cuestión de voluntad. Las furgonetas, cualquier furgoneta, es un juguete maravilloso. Pero hablo de otro juego. Del que se juega con los Porsche bajitos.
Para ese juego, el Cayman (Información detallada en km77.com, con precios y datos, imágenes de diferentes colores y versiones y dibujos técnicos) no tiene la arrogancia del 911, su historia, su pretensión de cetáceo perfecto, de señor de los coches deportivos. No. Es claramente menos costoso, más ágil en curva, menos señorial y potente y quizá todavía más divertido de conducir para quien disfruta al conducir rápido en circuito y en carreteras de curvas.
Al Cayman uno le puede exigir sin miramientos, casi sin precauciones. Hace años que no conducía en un circuito con la despreocupación que he conducido el Cayman. Si te equivocas (dentro de un orden) no pasa nada. El cambio PDK, con levas en el volante, facilita tener las dos manos siempre a punto para girar ese tipo de dirección, con asistencia eléctrica, que hace unos años era anatema y ahora mismo son perfectas
La única preocupación con este juguete es decidir qué combinación de color de carrocería, tapicería llantas y color de pinzas de freno (Las pinzas amarillas son con frenos cerámicos). Una vez has decidido y pagado versión, color, color de las pinzas de freno, tapicería y equipamiento opcional, todo lo demás es fácil (Hasta que llegue la gasolinera y las revisiones)
Para facilitar elección de color, tapicería y pinzas de freno, en mi escaparate muestro algunas soluciones cerradas.
Llanta: Carrera S, de 20 pulgadas. Carrocería: Rojo Guardia.
Carrocería: Rojo Guardia. Tapicería: Cuero negro.
Llanta: Carrera Classic, de 20 pulgadas. Carrocería: Amarillo Racing.
Carrocería: Amarillo Racing. Tapicería: cuero negro.
Llanta: Carrera Classic, de 20 pulgadas. Carrocería: Plata GT.
Carrocería: Plata GT. Tapicería: cuero negro.
Llanta: Carrera Classic, de 20 pulgadas. Carrocería: Blanco.
Carrocería: Blanco. Tapicería: cuero bitono. Gris Ágata/Oro Lima.
Llanta: Carrera Classic, de 20 pulgadas. Carrocería: Caoba Metalizado.
Carrocería: Caoba Metalizado. Tapicería: cuero Beige Luxor.
Llanta: Carrera Carrera S, de 20 pulgadas. Carrocería: Gris Ágata Metalizado.
Carrocería: Gris Ágata metalizado. Tapicería: cuero bitono. Gris Ágata/Naranja Ambar.
Llanta: Carrera Carrera S, de 20 pulgadas. Carrocería: Azul Aqua Metalizado.
Carrocería: Azul Aqua Metalizado. Tapicería: cuero Beige.
A mí el color me importaba poco. Si hubiera podido elegir hubiera intentado probar una unidad con pinzas de freno amarillas y otra unidad con pinzas rojas, para comparar. Pero no podía ser, porque tenía la cámara instalada en un coche con pinzas rojas. En este primer video, a quien seguíamos era a Álex Riberas, piloto del Junior Team de Porsche. Hablaré más de Álex Riberas en este blog algún día. Hoy me conformo con decir que tengo la excusa perfecta: iba más rápido que yo porque llevaba pinzas amarillas 🙂 (No sé que pinzas llevaba, pero si no eran amarillas debían ser naranjas). Al final de la grabación la cámara empezó a torcerse y enfoca casi más al tío feo que conduce que al coche de delante, pero aun así lo dejo porque espero que el sonido del coche, los comentarios de Álex y la vuelta al circuito valgan la pena.
[youtube https://www.youtube.com/watch?v=BNEGfdR6fgw?rel=0&w=640&h=360]
Como la cámara se había torcido en la grabación anterior, tenía la excusa perfecta para repetir. En esta ocasión me tocó detrás de Walter Röhrl. También tengo excusa. Las pinzas amarillas. Y mi mala cabeza. Entre una tanda y otra el coche en el que yo tenía la cámara instalada fue utilizado por otros periodistas, que cambiaron la configuración. Cuando me subía yo, más pendiente de grabar bien y de poner bien la cámara que del coche, no me fijé e hice todas las vueltas con el botón «Sport Plus» desconectado. Como aceleraba igualmente a fondo y llevaba el cambio con las levas, creo que no me retrasaba en nada, salvo cuando actuaba el control de estabilidad. Pero tampoco noté diferencia entre cómo entraba el control de estabilidad con relación a la tanda anterior. Así que seguro que no perdí nada por llevar el «Sport Plus» desconectado. Pero me sirve de excusa. Eso y las pinzas amarillas, claro.
[youtube https://www.youtube.com/watch?v=07kYhlenDNg?rel=0&w=640&h=360]
Después de todas las vueltas que hemos dado todos los periodistas al circuito, estoy convencido de que gastarse el dinero en poner frenos cerámicos es tirarlo. En la última frenada que hice en el circuito, unas 30 vuelta después de la primera, los frenos iban exactamente igual de bien.
¿Se sabe que le pasaba al conductor del tercer coche del video de Walter Röhrl? es un poco desesperante ver como frena en medio de la curva.
Lo que si percibo por los videos es que necesita irse a una de esas competiciones de karts de su compañero de blog para quemar adrenalina.
Advierto un error… donde dice «Carrocería: Caoba Metalizado. Tapicería: cuero bitono. Gris Ágata/Naranja Ambar», creo que el color de carrocería en realidad es Gris Ágata. Y precisamente esa sería mi combinación elegida en mi carta a los Reyes Magos. A saber…
«Queridos Reyes Magos,
Este año he sido un niño muy bueno… y quiero un Porsche Cayman S PDK en color Gris Ágata con tapicería de cuero bicolor Gris Ágata/Naranja Ámbar. Déjenlo en mi plaza de garaje, allí encontrarán el café y las pastas. Gracias»
Ains, qué bonito es soñar…
Hola oscar_v, gracias por el aviso. Corregido.
Su petición a los Queridos Reyes Magos ya está en curso, con el color correcto.
Sí. Qué bonito es soñar. (Gran suspiro)
Se aprende más una vuelta detrás de estos maestros y con conos en el circuito que en mil vueltas que diera uno solo al trazado por bueno que sea. Gracias por estos vídeos, sirven de referente si un día tengo la suerte de ir a Portimao.
Por cierto, vaya jueguecito se llevan con los colores entre Celedonio y Usted…
¿ha comparado ud. un Cayenne con el Tourneo? Me gusta su forma de pensar, no se si Ud. lo pasó mejor con el TOurneo en la nieve o persiguiendo a Walter Rohrl.
¡Que trabajo más duro tiene ud!
Saludos
Esa llanta de 20 hace que los enormes discos parezcan de mentirijilla…
Es Usted la desesperación en persona en la primera vuelta de los dos vídeos. Porque Alex y Röhrl tienen un 911 en lugar de otro Cayman S??
Por cierto, en mi carta de Reyes también hay uno de estos. Y para que vean sus majestades lo bueno que soy, que elijan color, llantas y pinzas…con tal de que me lo traigan….
Cuanta envidia!
Muchas gracias por los vídeos, hace tanto que no me pierdo por un circuito!
A pesar de la Edad, a Vd. (y al Cayman) les resulta imposible seguir al anciano Walter y su 911 en las rápidas (Que edad tiene ya el maestro,?).
Se emociona Vd. y se pasa de frenada un par de veces en las últimas curvas de la última vuelta, pero sale bien parado y hasta le da tiempo a hablar la primera vez que se cruza, la segunda antes de la recta ya va demasiado pasado y ni habla (¿es Vd. o el ESP el que recupera el control cuando se le cruza?).
Pero ha hecho esforzarse al maestro. Great driver!
¿Miró Vd. por el retrovisor a ver que pasaba con Juan Collín?
Están geniales los vídeos, estos y otros como los de la fregoneta. Siga haciéndolos por favor.
Si pudiese comprarse sin preocupaciones un juguetito de estos para hacer tandas de vez en cuando sin mirar antes la cuenta corriente, preferiría un 911 o un cayman?
Salu222
La vuelta final tras Rohrol, antológica, para contar a los nietos. Qué gozada de liebre oiga…
Qué bien va el Cayman. En las dos semi coladas que hace con otro coche se hubiera arruinado la vuelta, en el Cayman todo vuelve a la normalidad a velocidad y facilidad asombrosa.
El contravolantede la última curva… jeje un excelente colofón para dar suspense al final de la película. Imagino que al llevar el ESP on tuvo algo de frenada…
Me he divertido viendo su la última vuelta. Han ido rápido y finos la mayor parte del tiempo. Detrás del pisapedales que ha llevado el resto del tiempo, no. Vd tiene manos.
Gracias por compartir los videos!
¿Es habitual encontrarse en estos eventos gente que conduzca tan mal como los dos a los que lleva delante en el primer y el segundo video? Parece que no tengan la más mínima noción de como trazar y abordar las curvas…
Por el contrario me encantó la vuelta tras Röhrl, qué artista, parece que va sobre raíles, lo hace fácil mientras usted tiene que pelearse con el volante para poder seguirle. Seguro que si llevara un Cayman como el resto y no 911 será igualmente imbatible, con o sin pinzas amarillas ;-P
Loren,
no tengo ni idea de por qué llevaban ellos un 911. En este circuito el 911 es más rápido que el Cayman, creo yo, pero probablemente más difícil de conducir. Intuyo que algo más rápido, pero no sé cuánto.
Joaquín,
Yo no creo que fuera demasiado pasado en la entrada a recta. El coche se descoloca muy poquito. Si hubiera llevado el «Sport Plus» hubiera pasado casi desapercibido creo yo. Pero al no llevarlo conectado, al entrar el ESP todo es mucho más aparatoso. En esa curva, se puede pasar muy rápido, porque tiene mucha salida. Es difícl trazarla bien, porque a la entrada es ciega. Por ese punto pasaba a unos 140 km/h e iba con el coche bien encarado. Hay espacio para corregir con suavidad.
Me ha hecho sonreír con su última pregunta. ¡Claro que miré por el retrovisor para ver qué pasaba con Juan Collín!
El lo explicaba cuando nos bajamos del coche.
«He perdido tiempo en una curva y ya no he conseguido cogerte. Me has sacado unos 30 ó 40 metros y ya no he podido recuperarlos»
Fanso (se me hace la boca agua sólo de pensarlo)!! El Cayman, creo yo. Porque te diviertes lo mismo con menos preocupaciones. Es muy facilito de conducir y cuando se va de atrás apenas hay que preocuparse. Con el 911 hay que empezar a pensar en los momentos polares de inercia 🙂
Manoloster. Yo no tenía la sensación de ir fino y sobre todo no iba por la trazada buena, ni frenaba en los sitios adecuados. Me perdía en el circuito. Demasiadas curvas parecidas para mi memoria. Tampoco tenía la sensación de ir rápido de verdad. Es verdad que íbamos muy rápido (como decía Juan Collín), pero no íbamos a tope. Yo iba pensando en la cámara y en explicarlo, no solo en conducir bien a tope.
Quizá soy un inconsciente, pero no tenía la sensación de ir a por todas ni de ir muy fino. Cuando uno no cnoce bien el circuito, es difícil ir fino. (Quizá, si hubiera ido a por todas hubiera ido más despacio)
Kastor, uno de los motivos por los que no le seguía es porque me peleaba con el volante 🙂
La buena vida es cara, la hay de más barata pero no es vida.
Lo peor de los dos tipos (igual es el mismo en los dos vídeos) es que luego escribirán para alguna publicación, o alguna web del motor y encima se las darán de entendidos. Para saber cómo va un deportivo, hay que llevarlo cerca del límite, como bien ha hecho el señor Moltó. Con respecto al coche, parece que éste Cayman es muy noble. Creo que para pasárselo en grande en circuito, no hace falta tener tropecientos mil caballos. Con un buen chasis y unos buenos frenos es suficiente. Este Cayman, podría ser un candidato fantástico.
En el vídeo se nota que no se conoce el circuito de memoria y que no va a cuchillo en las frenadas, está claro. Hace un par de coladas. Pero también se nota que sabe trazar y manejar la salida de las curvas acelerando y dosificar la frenada, a eso me refería, que iba «fino» dentro de las posibilidades. Además no hay mejor muestra de que empieza a ir rápido y a necesitar concentración para seguir a Rohrl que el hecho de que llegado a un punto deje de hablar. A Walter le salta el ABS levemente en alguna frenada, osea que tampoco iban de paseo.
Claro que se puede ir mucho más rápido y fino, pero suficiente ha sido desde este lado de la pantalla. Y llevar a esa gloria delante de guía haciéndolo todo tan fácil tiene que ser… eso, gloria.
Gracias por contarlo Javier. En mi lista de juguetes no está el Cayman S, sino el Boxster, por aquello de porder seguir meciendo la melena al viento. Una duda … ¿Crees que merece la pena la versión S frente a la versión normal?
En mi lista de juguetes para Reyes estaba un 991 o en su defecto un 993 Turbo, y finalmente me trajeron un 997 GT3 RS.
El problema es que se equivocaron de escala …. 1:14….
Por cierto, ayer vi un 991 blanco… simplemente precioso. Jamás pensé que a un 911 le quedase tan bien la pintura blanca.
Hace unas semana me hice con una Auto Bild especial Porsche, se la recomiendo totalmente. Incluye una entrevista a Walter Röhrl entre otras cosas.
Saludos cordiales,
James Marshall.
Seguro que el señor que llevaba delante se llamará a sí mismo periodista del motor. Pero por favor, si hasta yo lo haría mejor… iría seguramente más lento, pero al menos trazaría las curvas por su sitio.
Señores de Porsche, para el próximo evento dejen a ese señor en tierra y llévenme a mí.
Interesante vídeo, sobre todo siguiendo a Walter pues el tal Alex iba reprimiendo en demasía. El interior del Plata GT no es negro sino marrón espresso.