Los sindicatos amenazan con una huelga general. Los trabajadores de este país, sobre todo los parados, necesitamos darles motivos para que la convoquen.
El Estado del Bienestar de España es insostenible. Mantener el sueño de perpetuarlo sólo ahonda nuestra ruina. El peligro de no afrontar la realidad es mucho peor que vivir con la ilusión permanente basada en el deseo.
Tenemos que afrontar que no nos queda más remedio que competir con otros países, que vivimos en un mundo abierto, que no hay forma de generar riqueza si no somos capaces de generar productos a menor precio que nuestros competidores, que no se genera riqueza si no tenemos las mejores herramientas, los mejores procesos para generar valor, la mejor investigación.
Estoy convencido de que ese cambio del modelo productivo sólo es posible mediante una profunda reforma laboral. No tengo la certeza de que sea condición suficiente. Sí de que es condición necesaria.
La dialéctica capital-trabajo es una reliquia del pasado. Vivimos en un mundo de clientes y proveedores, todos clientes y todos proveedores. Todos somos empresa. Todos tenemos que asumir riesgos y beneficios. No queda otra posibilidad.
El consumo basado en la confianza de un puesto de trabajo garantizado es un mito perjudicial para cualquier economía. Esa garantía no puede existir. No existe de hecho, por lo que el consumo tienen que estar basado en ahorros anteriores no en garantías ficticias de futuro. Igual que las empresas son dignas de crédito podemos serlo los particulares sin necesidad de contratos garantizados. Con diferentes asunciones de riesgo.
La situación es peliaguda. Estamos en el Euro y la rigidez del tipo de cambio nos obliga a los Estados miembros a ser competitivos dentro de la zona de cambio. Si no lo somos, la única alternativa es el paro.
Necesitamos una revolución social. Necesitamos que los sindicatos dejen de realizar acciones cuyo único objetivo es mantener sus privilegios, proteger a un grupo de ciudadanos con la ‘garantía laboral’ de contrato blindado, cuando ninguna empresa en este país tiene contratos blindados con sus clientes. Los sindicatos no protegen a los parados. Al contrario. Son una de las principales causas del elevado número de parados que hay en España.
No podemos permitir que nos chantajeen con las huelgas generales. Son un lobby de presión para defender los intereses de un grupo de privilegiados. No cedamos. Que convoquen huelgas no debe intimidarnos.
Necesitamos que el gobierno (el que sea) presente una reforma laboral que incentive la colaboración de las sociedades con una parte de sus proveedores (los que cobran mediante nómina). Que incentive la movilidad laboral, las relaciones independientes sin convenios artificiales que nada tienen que ver con la realidad de cada actividad, sin privilegios de unos trabajadores sobre otros, que incentive la asunción de riesgos y el estímulo para trabajar cada día.
Los sindicatos son un grupo de presión más, ahora son un grupo de privilegiados que pretende mantener sus prebendas. Estoy seguro de que en tiempos de grandes privilegios para los empresarios, para los poderosos, era necesaria esta presión por parte de los trabajadores, porque no tenían otra alternativa de conseguir beneficios para ellos. Ese tiempo ha pasado.
En occidente no los necesitamos para evitar la explotación del hombre por el hombre. Ahora lo que tenemos que hacer es acabar con los privilegios de todos, de empresarios y de trabajadores. Eso no se consigue mediante grupos de presión con intereses opuestos en los que cada uno lucha por su parcela, porque la mayoría no estamos en ninguna parcela y nos quedamos fuera de ese reparto de poder. Tenemos que buscar otras herramientas para conseguir que no existan privilegios, ni para unos ni para otros.
Ahora mismo, los sindicatos forman parte del grupo de abusadores (como los veteranos en la mili), que prefieren llevarnos a todos a la ruina antes que renunciar a sus cuotas de poder, de garantías, de blindajes. A lo que ellos llaman derechos ganados con años de lucha, que no son más que prebendas basadas en el chantaje. Es posible que en otro tiempo fuera imprescindible porque ‘el capital’ era el poderoso y ventajista. Eso se acabó. Tenemos que acabar con los privilegios del ‘capital’ y de los ‘trabajadores’, que es bien distinto a otorgar prebendas a unos y otros.
No cedamos a su chantaje. Eliminemos los privilegios de unos trabajadores sobre otros, para que no les quede más remedio que competir cada mañana de tú a tú por su puesto de trabajo. Como hacemos todos los demás.
«Necesitamos una revolución social. Necesitamos que los sindicatos dejen de realizar acciones cuyo único objetivo es mantener sus privilegios, proteger a un grupo de ciudadanos con la ‘garantía laboral’ de contrato blindado, cuando ninguna empresa en este país tiene contratos blindados con sus clientes. Los sindicatos no protegen a los parados. Al contrario. Son una de las principales causas del elevado número de parados que hay en España.»
Cuánta razón hay en esas palabras. En especial, en la última frase.
Ya basta de privilegios, de chantajes y de proteccionismo. Aquí, o follamos todos o la puta al río.
Si mañana se convoca una huelga general, se respetará mi derecho a ir a trabajar?
Claro, tu quita los sindicatos (que aún con todo estoy totalmente de acuerdo con la afirmación del comentario 1).
Donde los curritos ya están explotados y ninguneados por los empresarios…
El se humano es egoista por naturaleza. No se puede dejar en manos del empresario el que él decida ser bueno con sus trabajadores, ya que no lo será. Para la mayoría rentará mas tener a curritos 6 meses currando por 4 duros en jornadas de 12 horas para echarlos a la calle y poner a otro los siguientes 6 meses. Y si renta más eso harán…
Hay que establecer unas normas del juego que mantengan la equidad. Hay que producir, pero también hay que vivir. Trabajamos para vivir, no vivimos para trabajar.
Y estas normas hay que velar por su cumplimiento. Si la jornada de trabajo son 8 horas, se trabajan 8 horas y punto. Y eso hay que vigilarlo y sancionar el no cumplimiento.
Por la misma, si la jornada de trabajo son 8 horas, se trabajan 8 horas y se produce esas 8 horas. Si no produces esas 8 horas, a la puta calle… Equidad…
Lo jodido es que ahora se trabajan 12 horas y si no produces, te vas igual a la calle. Y eso es vivir para trabajar. Para el que lo quiera…
España no va a salir de esta, en muchísimos años. Los privilegios de los que ud. habla no son tales, sino derechos de los trabajadores. Esa situación no se deshace por nadie que tenga necesidad de ser votado en unas elecciones, imposible, somos un país lleno de estúpidos que creen que el estado y el empresario (que grandilocuente suena esa palabra en este país, la gente se los imagina en un Clase S, Rolex de oro y un puro, aunque sea el tapicero de la esquina o el frutero) están para ser exprimidos, y no para trabajar junto a ellos por un beneficio común.
Despido libre es para mí lo ideal, ganarse el puesto día a día, eso es lo que hacen las empresas, que se la juegan con la compentencia en cada jornada que pasa, y eso hacemos los autónomos, si el cliente no está satisfecho se va a otro profesional y punto. No hay drama, símplemente sana realidad, cuanto más y mejor das, mas y mejor recibes. Si tu puesto de trabajo no depende de esto, sino de que se cumpla un mínimo y de machacar al empleador en caso de necesitar (o querer) despedir a alguien, lo que se hace es pisar la gallina de los huevos de oro.
Si una persona decide poner en juego su patrimonio personal en embarcarse en una empresa, se le debe dotar de los mecanismos necesarios para que funcione, de forma flexible. Si hay movimiento, habrá empleo, pero si deshacerte de un trabajador ineficiente para que sea sustituido por otro que si lo es, o símplemente por que las ventas bajan y no se mantiene la empresa, se hace criminalizando al empresario y castigándolo, pues entonces no hay manera de funcionar y competir con otros mercados. El resultado es el paro y una sociedad estúpida que cree que tiene derecho a muchas cosas y pocas obligaciones, pero que una vez en paro no tiene nada (salvo papá estado).
No creo que la huelga general sea beneficiosa, la veo improbable, salvo que el gobierno adopte las medidas necesarias para mejorar la competitividad, que anularán gran parte de los «derechos» de los trabajadores. Lo cual iróncamente resultará en una mejora cuantitiva y cualitativa del principal derecho de un trabajador: El trabajo.
Mientras la sociedad esté entretenida con Belen Esteban y similares, el fútbol, no les falte el pinchito de gambas y una copichuela los fínes de semana, no hay nada que hacer.
Seguramente lo que digo se le atragantará a mas de uno que trabaje por cuenta ajena, lo siento, pero desde el extraradio (mas bien fuera) del estado del bienestar se ven las cosas con otra perspectiva. Que se preparen que vienen tiempos dificiles, mas aún de lo que hemos vivido.
Buen finde.
Tendré que hablar con mi sindicato, esto de trabajar los fines de semana en el despacho en asuntos que no me van a pagar es intolerable,todo un abuso por parte de los clientes, ¡que explotación! llamaré a papá estado para que me proteja 🙂
El señor Moltó ha dicho muchas cosas. Algunas me parecen reflexiones interesantes. Me quedo especialmente con esta:
«La dialéctica capital-trabajo es una reliquia del pasado. Vivimos en un mundo de clientes y proveedores, todos clientes y todos proveedores. Todos somos empresa. Todos tenemos que asumir riesgos y beneficios. No queda otra posibilidad.»
La idea de acabar con esa proverbial dicotomía me parece fundamental. Pero, yo sí voy a intentar dar otra posibilidad.
Que todos tengamos que asumir riesgos y beneficios, supone que todos nos asimilamos en la parte del capital. Eso, tal y como están las cosas, parece una dosis de cruda realidad. Someterse a la realidad está muy bien, pero hasta cierto punto; de no vencer ese sometimiento a la realidad, el hombre no habría avanzado desde las sociedades paleolíticas.
Como esto es un problema social, y la sociedad la formamos todos, todos tenemos el poder de cambiar las reglas de un sistema que se ha tornado ineficiente. Eliminemos los riesgos hasta el mínimo imprescindible y reduzcamos los beneficios hasta el mínimo razonable; por ley. Esto debería ser así en todos los productos y servicios básicos. Con normas (y horarios) muy claros que permitan a todos vivir y tener tiempo de disfrutar de sus vidas.
El que quiera ofrecer valores añadidos y aumentar sus beneficios, que asuma el riesgo y disfrute de esos beneficios, pero nunca sobre bienes necesarios; siempre encontrará compradores en algún mercado.
Como bien han dicho por ahí, vivir para trabajar es totalmente estúpido. Si los que no tienen más remedio que hacerlo no se rebelan, no lo vamos a hacer los que tenemos «condiciones blindadas». Si vuestras condiciones son mejorables, luchad por mejorarlas. Hacer tabula rasa para perjudicar a los que están mejor me parece un poco mezquino.
Estaría bien que alguien también se acordara de la clase empresarial de este pais.
Esos mismos cuyo representante hundió (o se le hundió, beneficio de la duda) una de sus empresas y sigue presidiendo a los empresarios del pais.
Esos mismos que no pagan horas extras, o lo hacen en negro, los que contratan trabajadores por debajo de su categoria salarial, los que complementan los sueldos en negro, o en dietas u otros conceptos no cotizables, los que contratan inmigrantes ilegales, los que no aseguran a los trabajadores, los que no facilitan ni cumplen la seguridad y salud en el trabajo para ahorrarse dos duros de los equipos de seguridad y salud en el trabajo, los que teniendo dos empresas contratan a los trabajadores alternativamente en una y en otra durante años para que los currantes no acumulen derechos, los que no invierten un euro en formación a los trabajadores o en I+D, pero si en BMW´s, los que defraudan el IVA, los que desgravan hasta los muebles de dormitorio de su casa, etc.
Y no me refiero a los grandes empresarios, que también, sino a muchas PYMES y similares, cuyos amos ya bien enriquecidos en los años de las vacas gordas, no consideran a sus empleados un activo de la empresa sino un gasto mas, que se debe reducir al máximo siempre que se a posible.
Esos mismos que sostienen la economía sumergida del país, pues todo el mundo se acuerda de los trabajadores que no curran, que viven del paro o que no pagan impuestos. Pero ¿quien facilita eso? ¿Quien paga en negro a proveedores y empleados y defrauda a Hacienda? ¿Quien cobra en negro, especula y no declara beneficios? ¿Quienes encarecen los productos y hunden sectores como la agricultura o la industria?
Y que conste que no apoyo la huelga, por que ya es tarde..
Y ahora voy a por un paraguas…
Se me olvidaba,
Esos empresarios que hacen ERE’s encubiertos para tirar a trabajadores y conseguir que dos currantes hagan el trabajo de cuatro, la indemnización de los despedidos sea la mínima y si es posible, el Fogasa page el 40% de la misma. Los que abogan por el despido libre, y a la vez solicitan subvenciones para sus sectores en crisis, pero que además se quejan cuando se pretenten aumentar los impuestos sobre los beneficios en los tiempos de bonanza. Los que reclaman al Estado que les solucione sus problemas, pero a la vez defraudan todo lo que pueden.
Esos mismos.
Voy a por un paraguas y un chubasquero.
Aunque como empresario no soporte el sindicalismo considero que es necesario ya que en el fondo estamos igual que en el siglo XIX. El obrero vende su fuerza de trabajo al capital.
Es curioso que en tiempos en que se habla reformar y de regular incluso en estados unidos el mercado bursatil y bancario para evitar nuevas crisis aquí hablemos de liberalizar y aumentar el capitalismo salvaje que sufriran los más débiles que son los asalariados. Que en el fondo no tienen nada y que de un día para otro lo pueden perder todo.
Su magnifica solución es que todos pasemos a estar muy jodidos. Ya sabe lo que dicen mal de muchos consuelo de tontos. No le niego que con la que está cayendo se tiene de hacer algo en este campo, pero que el actual gobierno, -que personas como ud. ha defendido encubiertamente y que a día de hoy en quiebra, al borde del precipicio e intervenidos por europa no se atreve a culpar del adebacle económico y social y se limita a decir «Necesitamos que el gobierno (el que sea)»-, tiene la culpa y tiene de largarse esto si. Si, j’acusse.
La reforma laboral es sólo el primer paso para salir, pero no la única. Se ha de ayudar a reactivar la economia y no sólo con políticas keynesianas, reduciendo impuestos y cargandose unos cuantos ministerios y entre otras la más importante dar sensación de confianza.
Bajo la nueva religión de la competitividad hay la humillante realidad de la esclavitud que sufren los trabajadores en los paises en vías de desarrollo. No sólo són los horarios y el salario de subsistencia, también influye y mucho no tener de ocuparse de los residuos ni de la contaminación, ni de la seguridad. Así claro que es barato producir en otros sitios! Y esto es competir en las misma condiciones?
El actual sistema capitalista global se ha basado «la empresa listilla» que se iba a producir por cuatro duros al extranjero mientras «los otros» continuaban trabajando y pagando a sus trabajadores aquí. Como la burbuja inmobiliaria se basaba todo esto en la mentira, la de la avaricia humana, al final todos se han largado y no va haber consumidor con poder adquisitivo para comprar los caros productos fabricados por cuatro duros.
A la pregunta, los sindicatos de este país son buenos? Para mi son unos trepas que viven de los presupuestos generales del estado; son unos sinverguenzas que con la que esta cayendo no hayan echo nada. Están comprados por el gobierno. La Paz Social a día de hoy es igual a «dame mas dinero». Són los peores esquiroles que sufren la clase trabajadora. Los liberados indignantes, y una metáfora del sistema de castas y amiguismos que hay en este país.
Aún así, considero que los auténticos sindicatos como USO, que viven de las cuotas de sus afiliados, son más necesarios que nunca para defender los derechos de los trabajadores, contra una patronal arrojada por su incompetencia al beneficio explotador y cortoplacista; y como foco que alumbre a un gobierno oscuro, resentido, inepto y ciego en su narcisismo.
Sobre la revolución social yo voy más lejos el actual estado de las autonomías no se puede mantener con el gasto actual. Sin ir mas lejos no encuentro lógico las exenciones fiscales de navarra. Los peajes en cataluña o el estatuto.
El taifeo normativo para montar una empresa. Los oligopolios encubiertos en muchos sectores. Como es posible que la fruta y la verdura cuesten lo que cuesta? Y que incluso sea aun más cara en las grandes superficies (abanderadas por los neoliberales de la competitividad y que su limitación de aperturas provoca que no haya competitividad en algunas zonas y más inflacción)? Las gasolinas de juzgado de guardia. Y otros muchos que no sabes y el día que te enteras te coge un cabreo monumental. Cuando solucionemos esto empezemos a replantearnos de finiquitar el estado del bienestar.
Lo que es necesario es un cambio de gobierno que no va a llegar ahora mismo, ya que son unos parásitos sin verguenza, para dar confianza a los inversores que no se fían de nosotros y no nos compran ni la deuda pública aunque la demos unos precios de ganga. Nos espera un mes de junio y julio de infarto en este tema.
Hasta entonces sólo nos queda esperar ver como los socialistos viven en su mundo feliz ZP del mundial de fútbol! Señores a disfrutar de la selección y de Sara Carbonero!
Por cierto se me olvidaba…
ZAPATERO DIMISIÓN!
Existen leyes y existen abogados y juzgados. El trabajador no necesita barbudos de siglo XIX aireando discursos de máquina de vapor sustentados en que el empresario que les da trabajo es un delincuente potencial que sólo busca la ruina del trabajador quien por otro lado es necesariamente imbécil, débil, desinformado y necesita de los resentidos sociales para defenderse. Esos que no supieron progresar, esos sin valía que no promocionaron. Encontraron en la vía sindical la excusa que legitime su mediocridad.
La sociedad es meritocrática. Las más de las veces. A veces, el dinero, es reflejo de la valía de quien se lo gana.
La defensa del abuso está en las leyes, en los abogados y en los jueces. Hay justicia social gratuita, hay turno de oficio.
Se necesita una interlocución social, se necesitan unos sindicatos, pero no con éstos roles. El sindicalismo español, se quedó en el vapor.
JM
¿Y una huelga general de una mañana servirá de algo?
No podría estar más de acuerdo en lo de la reforma laboral y en el papel de los sindicatos, desde luego, pero, ¿nadie ve que la pata que más falla en España es la clase política? Una panda gigantesca de analfabetos, egoístas que no hace nada pero que tiene un sueldo asegurado de por vida, sin haber pasado ni una oposición… eso es insostenible. Yo , después de estudiar una ingeniería, aprender idiomas, hacer cursos formativos, estar de becario-ni-mileurista, estoy en el paro. No lo digo para dar pena, porque no soy el único ni el que peor está. Por de pronto yo pongo mis ojos en el extranjero.
Eso sí, aquí nos dan fútbol y telebasura, y todos tan contentos. Yo me deprimo de pensar que nadie salga a la calle para quejarse, para exigir una reforma integral y no sé qué puede hacer un individuo al respecto. Señor Moltó, usted tiene un poco más de poder y bastantes más de cultura, ¿no se puede hacer algo, desde aquí, desde donde sea…?
Es ya cansino hablar de lo mismo siempre cien veces… el primer problema es la clase politica (+1 Javi) y sin esto arreglado da igual lo que hagamos.
Luego, eso si, sindicatos y patronal los montamos en pateras y a hacer prácticas de tiro desde el Juan Sebastián el Cano. El trabajador que quiera sindicatos que los pague de su bolsillo. El empresario que quiera patronal que lo pague de su bolsillo.
Quizás, llegados a este punto, podamos pensar en un cambio estructural dirigido, al menos, por personas mediantemente competentes.
JC
si claro ,me lo veo venir
http://www.rnw.nl/espanol/article/suicidios-entre-trabajadores-chinos
Vale, muy bien. En general muy sensato y muy razonable, y de acuerdo con casi todo. Pero ¿ahora? Un poco tarde ¿no? Todos este desastre y estos problemas vienen de hace mucho tiempo atrás. Pero mientras algunos los advertían claramente, observando con impotencia que no se hacía nada y que predicaban en el desierto, los demás no querían ver que el rey estaba desnudo y tachaban de loco al que osaba insinuarlo; o con suerte, lo ignoraban.
España es un país condenado por la mentalidad de muchos españoles, y la gente válida, preparada y competente sencillamente se va, porque aquí difícilmente pintamos algo.
Alguien me dirá que más vale tarde que nunca. Yo en cambio, lo que pienso es que más vale prevenir que curar. Ahora el herido ya está crítico, y aunque se llegue a curar, padecerá secuelas.
Fonsi,
El empresario, como usted le llama, es empresario porque no le queda más remedio. Pongamos que yo consigo un contrato de un fabricante de coches para suministrarle bombillas. Invierto el dinero que requiere la maquinaria para montar esas bombillas. Esa maquinaria está en un local que alquilo yo. A mí me pagan en función de las bombillas que me pide el fabricante. ¿Por qué motivo no puedo yo llegar a un acuerdo del mismo tipo que tengo yo con el fabricante con las personas que vienen a mis instalaciones a montar bombillas? ¿Por qué no les puedo pagar yo en función del número de filamentos que monten, de las roscas que inserten, de lo que sea que hagan? ¿Por qué si yo tengo un contrato en el que nadie me garantiza un ingreso fijo tengo que pagar yo un ingreso fijo independientemente de cuántos coches se vendan al final? ¿Por qué esas personas que vienen a trabajar a la cadena en la que yo he invertido dinero tienen más garantías de las que tengo yo? ¿Por qué el salario tiene que medirse en función de una jornada laboral de x horas y no en función de las bombillas que se montan y se venden?
¿Por qué los trabajadores que están en la línea de montaje no pueden ser tan empresarios, que cobran en función de lo que se vende, como el que ha conseguido el contrato inicial?
No encuentro ninguna explicación racional para eso. Eso de trabajar para vivir o de vivir para trabajar queda muy bonito. A mí me encantaría trabajar la mitad de tiempo. O una cuarta parte. Pero ¿Es posible? ¿Lo permiten las condiciones reales? La cantidad de trabajo que hay que realizar no depende del deseo. Depende únicamente de la cantidad de riqueza que se genera y de si esa riqueza. Si me pagan 10 céntimos de euro por cada bombilla que fabrico, tendré que fabricar 1000 bombillas al día para ganar 100 Euros. No sé si eso son 7 horas, 5 horas o 16 horas. Sea lo que sea, si quiero ganar 100 Euros al día y no sé hacer otra cosa no me queda más remedio que trabajar lo que haga falta para llegar a esa cifra.
¿Existe otra posibilidad? Sí, poner precios ficticios, sueldos ficticios y que las empresa quiebren cuando los ingresos no cuadran con los gastos. El paraíso no existe. Podemos soñar con mundos idílicos, pero la realidad es la que es y si nos olvidamos de ella el paro se dispara.
ZSQ. no se trata de mejorar a los que están mejor. Se trata de que todos los trabajadores tengan exactamente las condiciones. A mí lo que me parece mezquino es negar a los demás la posibilidad de competir en igualdad de condiciones por un puesto de trabajo. Quienes tienen empresas no pueden impedir que salgan competidores por todos lados. ¿Por qué motivo hay algunos trabajadores blindados que sí tienen el privilegio de impedir a los demás que compitan con ellos por un puesto de trabajo?
Sr. Lobo. Estoy de acuerdo. La clase empresarial de este país es nefasta. Hay muchos empresarios muy malos. La cosa podría cambiar si ser empresario fuera más fácil. Pero no es fácil montar una empresa. Sólo de pensar el montante de indemnizaciones que hay que pagar en el caso de que las cosas vayan mal muchas personas con buenas ideas renuncian a emprender su proyecto.
Joan, mi solución no es magnífica. Por desgracia no conozco soluciones magníficas. Sería feliz si me las presentara. Si la alternativa que me propone es que unos tengan privilegios para mantener su nivel de vida a cambio de que otros engrosen el paro y el conjunto de la economía pierda competitividad, no me convence. De esta forma cada vez será mayor el número de personas que vivan peor. Si existe alguna alternativa a la competitividad, me alegraría que me la contara. Yo no la zonozco. (No sé de dónde se saca que yo he defendido a Zapatero, pero me da igual que piense eso o lo contrario o sea que no me voy a molestar en desmentirle)
Javi, JC, los políticos no van a cambiar por voluntad propia. Estamos en la misma situación que con la economía. La responsabilidad del cambio es de los ciudadanos. La realidad es que los políticos no van a cambiar. O hacemos algo nosotros o todo seguirá exactamente igual. (De un partido o del otro)
PagoPago, ¿Vamos a dejar de hacerlo porque sea tarde? Yo llevo por lo menos 18 años cuestionando la indemnización por despido. Hay personas que llevan mucho más años que yo. Pero la inmensa mayoría de la sociedad, incluso los parados, sueñan con que nada cambie y acceder algún día a esa posición de privilegio. Algunos llevan más de 15 años de contrato temporal en contrato temporal, y siguen defendiendo la indemnización por despido.
La mayoría de ciudadanos no piensa que las cosas están difíciles porque la realidad es tozuda, sino porque los empresarios se lo llevan crudo.
Yo me pregunto, ¿los ejecutivos con sueldos superiores a 200.000 Euros al mes, que hay muchos, también merecen indemnización por despido, también están explotados por los empresario? Está claro que en algún lugar habrá que poner el listón.
Es cierto que algunas empresas tienen unos beneficios descomunales y que a esos beneficios hay que ponerles coto. Algo falla en el mercado para que una empresa obtenga 10.000 millones de Euros de beneficio sin apenas inversión. O no existe suficiente competencia o el mercado se distorsiona por algún motivo que se debe analizar y compensar.
Pero ese problema no se soluciona haciendo que la economía en conjunto sea menos eficiente. Legislar en general para corregir las excepciones es la peor decisión posible.
Me parece extremadamente ingenio e impropio de Vd. el comentario «i no somos capaces de generar productos a menor precio que nuestros competidores».
No es posible reducir infinitamente los costes, como tampoco lo es producir cada vez más. Los recursos son limitados.
Es cierto que necesitamos una reforma, pero no puede estar basada en continuar con el mismo esquema que nos ha traído a este abismo.
Me parece más utópico luchar por los derechos de todos los trabajadores en una sociedad globalizada (lease china) que aceptar reducir la calidad de vida de una parte (lease españa) para aumentar la competitividad. Pero como de la utopía no se come, es más sensato que nos apretemos el cinturón, lo que no significa que sea más justo.
No obstante, sr Moltó, me parece que no tiene defensa la opinión de que las condiciones de trabajo deban ser fijadas por los empresarios, que es lo que se deduce de su artículo.
saludos,
Quisiera hacer una puntualización a Fonsi:
Sin duda alguna lo de «tener a curritos 6 meses currando por 4 duros en jornadas de 12 horas para echarlos a la calle y poner a otro los siguientes 6 meses» es algo que pueda funcionar en determinados trabajos de muy, muy baja cualificación, y aún así lo dudo.
Conseguir que un trabajador sea rentable requiere un tiempo (y por tanto inversión) muy grande, y cuanta mayor sea la cualificación mayor es ese tiempo e inversión. Por lo que tal afirmación no se sostiene, es una más de la idea de «empresario explotador» que tenemos en este país y por la que así nos va.
Yo soy ingeniero, he trabajado por cuenta ajena muchos años y llevo ya unos cuantos como empresario (pequeño, sin Rolex ni nada de eso). Pasando las de Caín y trabajando 18 horas al día 7 días a la semana, sin tener siquiera derecho a paro aunque pague mis cuotas a la seguridad social.
He tenido empleados que me han «chupado la sangre» y de los que me ha costado dinero deshacerme, y ese mismo dinero en parte hace que igual tenga que prescindir de otros empleados rentables, que me costarán no solo el dinero del despido, sino el descalabro de perder a un empleado valioso en el que he invertido tiempo, dinero y esfuerzo. Mal para mi, mal para ellos.
Personalmente, siempre he sido un defensor de que se valore y se pague a los empleados (siendo yo asalariado entonces) por su trabajo, por su rendimiento, no por las horas que «trabajan». Harto de ver como otros cuyo trabajo era muy inferior al mío recibían mayores compensaciones porque estaban hasta las 9 de la noche en la oficina (navegando por la red, que no trabajando). ¿A quién creéis que hace más daño ese tipo de trabajador? ¿a la empresa o a sus compañeros?
Coincido plenamente en que uno de los pilares que hay que derruir y construir de nuevo es la clase política. En estos años he podido comprobar de primera mano, con amargas experiencias personales, que los políticos sólo están por su propio interés (no importa el color), por salir en la foto para garantizarse el puesto en las siguientes elecciones, por ganar más poder. Invierten nuestros fondos en proyectos imposibles que quedan muy bien en la foto, y jamás se preocupan de si ese proyecto realmente se llevó a cabo, si tuvo algún fruto: la noticia pasa y ya nadie más se preocupa, sólo queda en el recuerdo la inauguración de aquello tan bonito.
Y así, tenemos una clase de «empresario» cuya especialidad es hacer productos que nadie quiere para conseguir subvenciones de las que vivir. Son especialistas en moverse por los intrincados pasadizos que hay que recorrer para conseguir una subvención, tan intrincados que los que sólo tenemos tiempo para producir algo que los demás quieran comprar no tenemos tiempo de recorrer.
Ahí tenéis otra cosa que debería desaparecer: las subvenciones.
Y ahora voy seguir fabricando mis bombillas…
Como casi siempre, yo tengo más dudas que opiniones.
¿Por qué es el precio la única medida de la competitividad? No es necesario hacer productos más baratos que la competencia. Alemania no produce los coches más baratos del mundo, por ejemplo. Suiza no fabrica Casio. Italia no confecciona ropa para Inditex. Francia no vende queso naranja del McDonald’s. El papel reciclado es más caro. Los vinos con denominación de origen, también. Incluso la agricultura bio avanza en muchos países a pesar de la clara desventaja de costo. Y eso quedándonos sólo en los productos. Es el sector servicios el que tiene mayor potencial en este sentido. Las políticas que más nos interesan no serían las laborales (que también), sino las de educación e I+D. ¿Cómo? ¿Que se ha recortado el gasto en qué?
Por otro lado, si desblindamos a los funcionario ¿qué propone como mecanismo que vele por su neutralidad frente a los cambios de gobierno?
En cuanto al despido libre ¿cómo evitar que provoque un aumento de los sueldos? A mayor riesgo, mayor recompensa ¿no es ése uno de los principios del capitalismo?. Por otro lado, si yo voy a arriesgar mi puesto de trabajo cada día, ¿por qué hacerlo por cuenta ajena? El único sentido de trabajar por cuenta ajena es la mayor seguridad laboral, la reducción de incertidumbres. ¿Quiénes serían los empleados del futuro? ¿Los incompetentes y/o incapaces de hacer frente a la vida económica? ¿Es ésa la fuerza laboral que querríamos?
Dudas, ya le digo.
Para que no confundamos los términos: el despido es libre (a salvo de unos supuestos, escasos, en los que la nulidad es automática).
El problema no es que no sea libre, es que es caro.
En un negocio, los ingresos pagan la nómina. Si no se vende, no hay ingresos para pagar la nómina del personal. Y si bien uno tiene toda la facilidad del mundo para adecuar su plantilla sumando trabajadores, sucede lo contrario al restarlos, porque una legislación paternalista te los adhiere como garrapatas en un momento en el que el dinero es escaso. En muchos casos, empresas con viabilidad han tenido que cerrar por no poder hacer frente al blindaje de los trabajadores. Sí, los trabajadores tienen un blindaje.
Un mercado laboral eficiente es uno en el que uno puede sumar y restar trabajadores con idéntica facilidad. Uno en el que el que crea empleo no sea tachado de delincuente cuando el mercado no le permite mantener el nivel de empleo que había logrado.
JM
Sr. Moltó, leyendo su último comentario percibo en ud. una preocupante falta de corrección política. ¿no le da verguenza hablar de estos temas «sociales» tan importantes haciendo un análisis basado en la razón y no en la ciencia infusa que le pueda proporcionar una chaquetilla de pana e ir descamisado? ¿que se ha creido ud.? Ud, es todo un radical, un neocon, un liberal, un explotador, un antitodoslosderechosdelostrabajadores…. q
Antes que nada, gracias una vez más por el buen tono del debate. Debatir sobre este asunto y que no nos tiremos unos al cuello del otro vale todavía más que el debate mismo. Mil gracias.
Fer, estoy totalmente de acuerdo con usted. También en que soy ingenuo, pero no viene al caso. No es posible reducir infinitamente los costes, pero sí es posible trabajar sin márgenes. De hecho, es hasta posible vender por debajo de coste. Adam Smith no se imaginaba de qué hablaba cuando hablaba de competencia infinita. Competencia infinita significa margen cero. Y nos dirigimos hacia eso, salvo que encontremos ese nuevo esquema que usted menciona.
A mí el sistema capitalista me parece una barbaridad. El concepto de que hay que consumir para aumentar la riqueza es un disparate conceptual. Efectivamente, los recursos no son infinitos (¿O sí?). Si lo fueran tendría sentido, si no lo son, nos lo cargamos todo.
Estoy de acuerdo con usted. Me encantaría encontrar un nuevo esquema. De momento, el capitalismo es el menos malo de los que conozco (que ya es decir). Mientras no encontremos uno mejor (yo creo que nuevo) tendremos que seguir las reglas del que tenemos.
Sangralunas. Ni por los empresarios ni por los trabajadores. Por la ley que se aprueba por mayoría. ¿Con qué legitimidad los sindicatos convocan una huelga para protestar contra una ley democrática? Las bases del contrato entre empresa y trabajador tienen que estar reguladas por la ley. Lo único que propongo es que sea una ley diferente a la actual.
Gracias Daneel por contar su experiencia.
pgonzalezs. Para no competir por precio necesitamos un cambio de modelo productivo, necesitamos innovación y desarrollo y esa innovación y desarrollo se dan en ambiente donde se estimula la creatividad y donde existe necesidad de invertir y desarrollar. Una sociedad adormecida investiga poco y genera poco valor añadido. Claro que no es necesario competir por precio, pero no se llega a ese punto de competitividad por arte de magia, ni por real decreto. Tiene que participar toda la sociedad para alcanzarlo. Por eso decía yo que no sé si es condición suficiente el cambio de legislación, pero sí es condición necesaria.
Sólo deben tener garantías los funcionarios cuya independencia del gobierno es necesaria. Jueces, por ejemplo. No es necesario que todos los funcionarios sean independientes y tampoco es necesario que mantengan su puesto de trabajo de por vida. Existen otras personas con las mismas ganas de trabajar que ellos. Que les dejen competir por su puesto.
Claro que el despido barato desemboca en aumento de sueldos.Así es, pero no cuando la tasa de paro es del 20%. Cuando una economía es competitiva y puede vender productos de alto valor añadido, y la tasa de paro es baja, suben los salarios. Y el Estado genera recursos para proteger a los débiles en la medida de sus posibilidades. En cambio, si la economía no es competitiva, aumenta el paro, y en España, un grupito de trabajadores mantiene unos salarios desproporcionadamente altos y el resto se va a la paro.
En España, con un 20% de paro, tendría que haber una deflación galopante. Tendríamos que tener una deflación del 5% anual durante dos o tres años. Pero no, seguimos con inflación, perdiendo competitividad frente a nuestros vecinos, a pesar de la enorme bolsa de desempleo. No hay quien lo entienda.
Ante todo buenos y prósperos días. Todo lo anterior le he expuesto en un ataque de ironía. No se lo crea. Tampoco importa nada.
🙂
EJ25MT5, no me creo nada. Nunca. (Ríase, venga) 🙂
JE JE JE, sus deseos son órdenes…..mi tótem……. Es ud. todo un master of puppets.
🙂
Por cierto, retome el tema de los coches eléctricos, puede que en España también tengamos algo interesante que aportar al respecto. (si la Administración lo permite).
Los funcionarios tienen puestos indefinidos a partir de una legislación promovida para evitar que el funcionario siempre baile al son del político de turno.
Elimine usted este derecho… y dará poder absoluto a los politicuchos tras cada elección… eliminará totalmente la neutralidad del trabajo del funcionario.
Por otra parte… Alemania tiene fuertes sindicados. Los EEUU tiene fuertes sindicatos… ¿por qué razón nosotros tenemos que prescindir de ellos?
Uno de los problemas de España es que cualquiera quiere simplificarlo todo y arreglarlo en dos patás.
¿hacemos un análisis a conciencia? ¿valoramos unas cuantas tesis doctorales para sacar conclusiones?
Qué va… ¿pa qué? me leo dos artículos por ahí, y leo algo de Milton Friedman… y ya tengo la solución (tal vez es que nadie más haya descubierto al bueno de Milton).
La cultura del pretender obtener grandes resultados con poco esfuerzo… se refleja no sólo en el trabajo a pie de máquina… sino en algunos artículos de prensa…. ¡en dos ratos hago un artículo y arreglo España!.
Ale… así… sin esfuerzo… sin formación… sin años de investigación… sin necesitar prestigiosos catedráticos… da igual… escribo en un ratillo que el problema es el proteccionismo y los sindicatos y yastá.
This is the Spanish way.
(Tal vez debería preguntarse porqué numerosos catedráticos de economía con mucha más formación que usted y que yo, abogan por la tercera vía… ni Milton Friedman… ni Maynard Keynes… y porqué en muchos países avanzados, siguen existiendo sindicatos).
Con esto no quiero indicarle que no haya cosas en su artículo en el que tenga razón… Las más básicas y evidentes son, obviamente, ciertas.
Pero el eliminar los sindicatos y el proteccionismo de los funcionarios… es un imposible.
Basar el consumo exclusivamente en el ahorro, como sugiere, también es un error. Una cosa es que sea negativo sobreendeudarse… pero la financiación es buena… si yo voy a disfrutar un producto durante 10 años…. ¿por qué razón es negativo que lo pague, en vez de todo de golpe… durante la primera mitad de todo el tiempo que lo voy a disfrutar?
No lo es en absoluto.
Qué manía de devolver la pelota al cuerpo, emprendeitor. Que sí, que ya sabemos que no damos el nivel, que esto es de ociosos, de barra de bar, un debate de salón entre diletantes. ¿Usted no había dicho que no volvía más a perder el tiempo?
Puesto que, manifiestamente ha cambiado de idea y prefiere seguir pasándose por aquí ¿no podría ahorrarnos el fustigamiento, las ínfulas y el aire de superioridad? O sea, recorte usted su intervención anterior para dejar sólo los argumentos, y oiga, todos tan amigos. Tenga en cuenta que algunos ya hemos superado según qué complejos.
Jolines, ya.
Un día podemos hablar de esas momias anquilosadas de conocimientos desfasados que pululan por limbos ajenos a la realidad.
Esos que usted denomina «prestigiosos catedráticos».
Los hay. Pero pocos que sean merecedores de ese prestigio en España. Los más huelen a naftalina y skai.
JM
Emprendeitor, como mi vuelo tiene un retraso de media hora, voy a aprovechar para contestarle antes de subir al avión. Suscribo lo que dice pgonzalezs. Es usted un maniático. Y lo digo para empezar porque voy a hacer una excepción y también me voy a dirigir al cuerpo, como hace usted.
Discute usted como los políticos, con el único objetivo de ganar, con descalificaciones al otro («contrario» lo llaman los políticos), y se olvida de los argumentos. Lea por favor todos los mensajes que le preceden. En todos ellos, salvo en las puyas a la persona de Joan y un «ingenuo» cariñoso de Fer, el debate se centra en las ideas. Usted no. Usted sólo se preocupa en destacar que es el más culto de todos nosotros, pero se guarda bien de aportar nada al debate. Y, además, ni siquiera lee con detenimiento lo que dicen los demás porque contesta a bulto.
No le voy a contar lo que yo he leído porque no sirve de nada. Mucha gente lee libros y más libros y no se entera absolutamente de nada de lo que ha leído. Quizá usted haya leído mucho lisbros, pero ni siquiera le ha seervido para aprender a escribir con una corrección mínima. No le pido que escriba usted como Galdós, pero ya que se permite arengarnos sobre cultura, lo menos que debiera hacer es conocer la sintaxis del idioma que utiliza a diario. Sus textos son difícilmente inteligibles. Siempre, con reiteración y alevosía.
Además de discutir como los políticos y de carecer de comprensión lectora (Aquí nadie ha defendido que se eliminen los sindicartos) renuncia, no sé si intencionadamente o no, a entrar al fondo de los asuntos que menciona.
Habla de los sindicatos alemanes y de Estados Unidos. Aparte de mencionar su fortaleza ¿Por qué no analiza su modo de financiación por ejemplo, sus atribuciones, las responsabilidades que asumen con relación a los trabajadores? Si compara, hágalo de verdad. De nada sirve que los mencione si no se mete en el análisis que de verdad puede aportar algo al debate.
Claro que hay catedráticos que cuestionan. Lo único que sucede es que sus argumentos tienen que convencer, como los del resto. Hay catedráticos que aportan ideas interesantes y otros que no. Y entre ellos tienen ideas diferentes.
Quién ha dicho que vamos a solucionar ningún problema. Lo que hacemos aquí es debatir, que ayuda a pensar mejor. A usted le molesta que nosotros debatamos. Pues muy bien. Nadie le obliga a debatir con nosotros. Pero deje ya de molestar, de darnos balonazos, de empujar y de amonestarnos.
De todos los que hemso escrito aquí, el que a mí me parece más ignorante de todos es usted, porque rehúye el debate, porque renuncia a presentar ni un solo argumento, porque sólo sabe dar balonazos.
Veo que no ha entendido nada de lo que he escrito yo. Pero da igual, ya sé que siempre pasa lo mismo con usted. Pero da igual. Haya entendido lo que haya entendido, lo pero no es eso, sino que no da ni un argumento ni a favor ni en contra. Sólo descalifica y aprueba. Así sin más.
Un día dijo que no iba a participar más en estos debates. Cúmplalo, por favor. Nadie le pidió que lo hiciera.
Sobre su posible apoyo o simpatía al actual ejecutivo es una sensación. Como personaje público y periodista que es, yo hablo aquí sin identificarme no como ud., entiendo y respeto que no se moje en este tema.
El tema de «eliminar» los sindicatos, no estos sino la auténtica idea sindical como verdaderos representantes de los trabajadores, o cualquier otro contrapoder es limitar el derecho a la libertad de exprensión de la gente. Derecho que coartado y mal reconducido puede desenvocar en brotes de violencia y agitación social de consecuencias inimaginables. Y a la larga va en contra de la justicia y de una auténtica competitividad.
Considero que una huelga general mas que en contra de los empresarios, va en contra del gobierno como una questión de confianza sobre lo que está haciendo. Por eso hasta el día de hoy los sindicatos mal llamados mayoritarios, amigos del gobierno, están desojando la margarita.
Ciertamente no puedo proponer opciones mejores que puyas com indica. Tenemos una gangrena y se tiene de cortar. Pero lo que me molesta y no quiera reconocer que en vez de salir de esta con un hueso roto y algunos puntos, por la incompetencia de los gobernantes, perdamos algo mas y tengamos secuelas que no sabemos aún a donde ni a que nos pueden llevar. Esto me preocupa y mucho. Hay un probervio que dice «Guardate de vivir tiempos interesantes». estamos viviendo tiempos demasiado interesantes.
Y como toque final, i si la oposición no está por la labor…
ZAPATERO DIMISIÓN!
Sr. Moltó.
Aunque pueda estar en desacuerdo con Vd. en algunos temas (y de acuerdo en otros), no quiero pasar la oportunidad de felicitarle por haber promovido un debate civilizado y manifestarle mi respeto.
Vaya, ¡qué simpático es usted!
Yo opino, porque la opinión es libre. Es a lo que uno se arriesga cuando escribe un blog, que le toquen las narices con opiniones contrarias (no creo haber llegado al insulto nunca, ¿verdad?, ni lo haré jamás). No entiendo muy bien que mis textos vayan con alevosía ¿alguien me explica en qué sentido?.
Tampoco pretendo ningún tipo de erudicción. ¿por qué lo creen? Ni soy el más listo, ni el más tonto. Eso creo.
Sus textos, en mi opinión (modestísima, aclaro), parece que intenten sentar dogma.
Es mi opinión, ojo. Por eso me irritan ligeramente. Por su estilo, que yo encuentro dogmático.
No dejan de ser artículos, los suyos, de opinión. De su opinión.
Pero expresa afirmaciones con una contundencia que (de nuevo) en mi opinión están totalmente fuera de tono:
«Ahora mismo, los sindicatos forman parte del grupo de abusadores, …, que prefieren llevarnos a todos a la ruina antes que renunciar a sus cuotas de poder, de garantías, de blindajes»
Ale. Toma tono moderado. Alguien debería meter a esos abusadores que nos arruinan en la cárcel, ¿no?. Parecen gente realmente muy malvada.
«El Estado del Bienestar de España es insostenible. Mantener el sueño de perpetuarlo sólo ahonda nuestra ruina».
Para mí, sinceramente, eso es algo incorrecto… lo dice usted como si fuera una verdad absoluta (no veo ningún «yo opino» por ningún lado).
Es una afirmación muy contundente (es cambiar de arriba abajo un sistema que lleva utilizando Europa durante más de 50 años).
Si esa opinión la emite un doctor en ciencias económicas, o una persona de prestigio reconocido (un premio nobel, algo así)… tendré que darle bastante credibilidad (y tendré que preocuparme)…
Pero ante tanta contundencia… resulta que no indica de dónde saca esa opinión, en qué se fundamenta.
Ningún problema si expresara dudas sobre su continuidad… si creyera que no es sostenible mantener el mismo nivel de servicios y que debería cambiar de algún modo.
Usando el condicional, planteando la duda de su sostenibilidad….
Pero no. «es insostenible». Y mucha gente lo lee. Le cree, y se queda con la idea de que «es insostenible» y hay que eliminarlo.
Desde mi punto de vista, un blog que depende de una página que tiene un cierto prestigio en su ámbito, se toma como cierta referencia.
Mucha gente lo leerá, y no todo el mundo lo analizará.
Y en mi opinión… eso le puede convertir en un «creador de opinión». Y creo que los creadores de opinión tienen ciertas responsabilidades… y deberían tener ciertas precauciones en la forma de afirmar estas cosas.
Eso es todo.
Ah, y me meto aquí, porque miro blogs del motor, y están casi sin actividad. En «últimos comentarios», me meto a ver de qué se habla… y si todo el mundo dice «verde», y yo veo «rojo», no me voy a abstener de decir «rojo». ¿Qué estoy equivocado? Tal vez… pero tal vez también esté en lo cierto.
En fin…. para gente a la que le guste los temas de economía y sociedad… sugiero leer a Samuelson y una de las ediciones de su fantástico «Curso de Economía Moderna» (que lleva 60 años siendo un libro de referencia) (en muchos aspectos piensa como usted… yo también… soy partidario de más liberalismo económico que el actual… aunque menos que el que promueven algunos medios).
Pero que pesada está la gente con la moderación.
Entonces… ¿nos vamos de huelga? ¿contra quién? sindicatos, políticos, empresarios, trabajadores o contra el sistema directamente, del que somos cómplices, tanto de haber creado como de haber mantenido hasta ahora.
La verdad que algunas veces veo este gobierno (en el más amplio sentido de la palabra, tanto el central, autonómico y local) como un adolescente déspota y a los ciudadanos como unos padres poco preocupados de lo que realmente hace, que lo único que hacen es trabajar para mantener a una familia en la que el mando no lo tienen ellos, sino ese adolescente que le sangra todo lo que puede y más. Y que lo único que puede pasar es que o el adolescente acabe con nosotros o nosotros con el (espero que sea esto último).
No me entiendan mal, es como los padres que no se dan cuenta que sus hijos los «maltratan» hasta que no llegan al límite de poder vivir. Entonces es cuando le plantean o que cambien o que se marchen. Y de verdad que no nos veo con esa mentalidad, todavía no nos han «maltratado» a los ciudadanos lo suficiente como para que nos demos cuenta que esto así no funciona, que o cambia el estado o lo cambiamos. Lo que es una lástima, por lo que seguiremos así durante mucho tiempo.
Saludos a todos.
Pues como el consumo dependa del ahorro de las familiar no va a comprar un coche aqui ni dios….nadie que yo conozca que tenga un coche de unos 20000 euros ha tenido ese dinero en su cuenta en la vida. Por otro lado, si me pudieran despedir de un día para otro, me limitaría a vivir asustado en un cobertizo, consumiendo productos de primera necesidad (soy un miedoso). Además, creo que cuando hay negocio, da igual la legislación laboral, contrato pq hago negocio con el empleado. Ahora mismo, ya pueden regalar la indemnización por despido, y hacerlo libre, que no contrararía a nadie, pues pa tenerlo parado mirando el periodico me lo ahorro. Discrepo de casi todo lo que dice, pero bueno, quizás por eso me gusta leerlo. Un saludo
las ayudas que se dio a la banca para tapar sus pufos no iban a venir de marte precisamente ,lo que estamos viviendo es solo una de sus consecuencias.el crecimiento o milagro español de estos años atras solo fue una quimera ,sólo basado en la inversion especulativa,acompañada de un fenomeno llamado globalizacion ,que solo significa reparto igualitario de la misera .les recuerdo que los españoles son los que menos ganan en sueldo medio de toda la UE a excepcion de grecia ,portugal y los paises del este de la UE ,y uno de los paises donde mas horas laborales tiene de promedio al año , y si con estas cifras por parte del asalario español , la produccion industrial española no levanta cabeza ,es sencillamente por que falla algo mas gordo que el problema de los excesos de los de derechos de los trabajadores y sus nominas.
sólo pongo como ejemplo a alemania y sus exportaciones y su tejido industrial ,que pese con crisis ,aun sigue creando empleo (de momento ). para vender algo en un mundo competitivo ,no sólo debe ser barato (no tiene por que serlo para venderse mucho)sino mucho mejor en calidad y ser único ,y aqui en españa (salvo botijos) no hacemos ni lo uno ni lo otro . para fabricar con calidad y tecnologicamente tener un producto avanzado que ofrecer al mercado hace falta muuucha inversion I+D ,es decir hacer inversiones casi perdidas ,cosa impensable y de locos en españa.
para fabricar mas barato ,ademas de esquilmar salarialmente al trabajador ( legislativamente todo se andara) se debe optimizar muchos los procesos de fabricacion y distribucion de los productos ,una vez mas el I+d juega su papel primordial. aqui la disyuntiva se deriva en seguir el modelo de produccion y economico aleman o el chino ,todo con el paso del tiempo se verá.saludos
Con tanta literatura como se ha escrito aqui, no queda mas que resumir las ideas clave para una próxima reforma creible por los mercados (y que alguien nos la copie y la lleve a cabo):
1) Cambiar la imagen y la idea de empresario: Empresarios somos (y debemos ser) todos, y regirnos por algun modelo empresarial viable y justo. Se acabaron las barbas.
2) Reparto de los beneficios obtenidos (y de las deudas generadas, en su caso) entre trabajadores y empresarios, proporcionalmente al riesgo asumido por cada uno.
3) Desaparicion inmediata del modelo actual de sindicatos, financiación de los mismos por sus propios medios, sin subvenciones.
4) Desaparición de los partidos políticos actuales con listas cerradas, volver a la representación de la demarcación y a ganarse los votos de sus representados. Instaurar primarias.
5) Financiación de las empresas y creación de las mismas. La Administración debe encargarse de que esto se haga de modo rápido y eficiente, resolviendo tramitaciones y créditos. Debe ser su responsabilidad que el modelo funcione de forma eficiente y competitiva
6) Redefinición del modelo administrativo actual: Una sola administración en lugar de tres. Que sea sostenible e igual para todos, sin hechos diferenciales. Temas fundamentales como el idioma, la educación, y la justicia iguales para todos.
7) Reducción a la mitad del número de funcionarios, con salarios de mercado y posibilidad de despido.
8) Desaparición de las prebendas especiales en cuanto a jubilación, salarios, etc. de las clases políticas. Igual que los demás.
9) Modelo salarial de la administración: El mayor salario el del presidente, los demás de ahí para abajo, sin excepciones.
10) Impedir que las empresas con beneficios hagan ERES y cosas parecidasa costa de los impuestos.
11) Desaparición de todas las «empresas públicas» que hacen por duplicado el trabajo de la administración y cuestan una pasta (algunas de ellas nio siquiera estaban contabilizadas en el registro de empresas públicas).
12) Presupuestos generales del estado: Sin deficit, nos gastamos lo que recaudamos. Nos financian, si es necesario, con intereses concertados zona euro.
13) Fin de los nacionalismos trasnochados, bien comun por encima del regional, cordura en las inversiones y nada de hacerse el AVE hasta su casa (Felipe a Sevilla, Jose a Valladolid etc.)
14) Independencia judicial: que los partidos no nombren a los jueces, que la forma de influir en la justicia sea mas transparente y ecuánime.
15) Fin de la cosa real.
Y seguro que funciona. Pero no lo verán nuestros ojos. Entender todo esto en clave abierta y con algo de ironía.
Sigo pensando (y lo seguiré siempre) que abaratar el despido es un error. Si es procedente, ya se puede hacer, y si es improcedente es que el jefe es un sinvergüenza.
Tengo una amiga a la que acaban de despedir. Y es muy válida en su puesto, más que su jefe (motivo de su despido, claro). Menos mal que han tenido que indemnizarla con una cantidad suficiente.
Si los afectados por EREs a los 50 años ya se las ven negras para poder encontrar otro trabajo, imagínense que fuese así siempre: cuando llegues a cierta edad, te despido para contratar a un becario veinteañero por menos de la cuarta parte de sueldo.
Hola a todos y gracias por el debate.
Me llevaría más tiempo del que tengo ahora mismo opinar sobre las más que interesantes cuestiones que habéis planteado, pero al menos si me gustaría saber si alguien puede ayudarme con un par de cuestiones, más o menos relacionadas con el debate, que me persiguen desde hace algún tiempo:
1.- Si una empresa de 100 trabajadores se ve en la necesidad de despedir a 50, a partir del día siguiente el Gobierno deberá asumir el coste mensual de su desempleo. ¿No podría el Gobierno negociar con la empresa para asumir parte de la nómina de estos trabajadores, de modo que tanto la empresa como el Gobierno salgan económicamente beneficiados?. (Esta cuestión surgió en un piso de estudiantes, y después he oído en alguna tertulia de radio -pudo ser la de Julia Otero-que en algunos países como Alemania ya se habían llevado a cabo acuerdos similares, pero no explicaron porqué aquí no).
2.- La otra surgió dándole vueltas a esta frase del padre de un amigo: «la democracia es una forma de dictadura»; un tanto exagerada, si por algún motivo uno no puede reírse, al menos un poco. La cuestión tiene que ver con la validez de los votos en las elecciones, por ejemplo generale. Con los medios de hoy en día -acceso a la red en bibliotecas, etc.- no habría alguna forma de añadir a cada voto un cuestonario, por ejemplo con diez preguntas básicas sobre el programa electoral del partido o candidato votado, de modo que si, por ejemplo, no hay al menos ocho aciertos el voto sea nulo?.
Se me acabó la batería.
Un saludo a todos.
Chandler, ¿Cómo puede decir que lo seguirá pensando siempre? Quiero decir, cómo puede obligarse a pensar siempre lo mismo. Ese planteamiento convierte una idea, rebatible, falsable, sujeta a todo tipo de vapuleos intelectuales, en en un prejuicio inmutable (totalmente alejado de la realidad por ese motivo, ya que usted no permite que la realidad lo ponga a prueba)
Yo no sé qué pensaré mañana. Convénzame usted de que es mejor un despido caro y cambiaré de forma de pensar.
Me duele que usted, un hombre comprometido con el saber (por su profesión) renuncie por principio a admitir la posibilidad de que lo que usted piensa pueda demostrarse equivocado.
Fíjese en el caso de su amiga. Existe la posibilidad de que no hayan podido despedir al jefe porque era demasiado caro despedirlo y que por ese motivo hayan despedido a su amiga, que era mejor que él (No sé si es su caso, pero es una situación muy frecuente).
Pues depende para qué trabajos, puede que sea mejor contratar a un becario de 20 años que a un hombre de 50. Por ejemplo, en los que se requiera fuerza física. Con una pala en la mano, un becario de 20 será capaz de construir una casa para él y una casa para el hombre de 50. el hombre de 50 (o de 60) quizá no sea capaz de construir porque no tenga fuerzas, ni una casa para él.
Si le damos los medios de producción a quien tiene más capacidad para generar riqueza, tenemos más posibilidad de crear un estado de bienestar que proteja a los que tienen menos capacidad. Si les damos los medios de producción a los que tienen menos capacidad, es imposible que creemos un estado de bienestar.
Pensar sólo en el hombre de 50 nos lleva a mirar sólo la mitad del problema. Tenemos que mirar al conjunto para crear soluciones beneficiosas para la mayoría.
Esos becarios veinteañeros de los que habla usted en ocasiones tienen muchas ganas de trabajar y lo hacen muy bien. En km77.com hay varios veinteañeros, tienen el mismo derecho a tener oportunidades que cualquier otra persona (igual que yo quería tenerlas con 20 años) y además se esfuerzan mucho para trabajar muy bien. También hay personas de más de 50 años porque en km77.com no realizamos un trabajo que requiera esfuerzo físico. Los de 50 años no trabajan ni mejor ni peor que los de 20. Así es la vida. Pero en otros casos sí puede haber diferencias.
El primer principio de la termodinámica existe. TEnemso que trabajar para transformar las energías de la naturaleza en energías utilizables por el hombre. Ese proceso tiene un rendimiento. Necesitamos obtener el mayor rendimiento posible, porque la energía primaria es escasa y el producto que extraigamos de esa energía es lo que nos dará bienestar a todos. Si ese proceso no lo realizamos con eficiencia, seremos todos más pobres y habrá muchos que vivan peor.
A mí me preocupan más los que no tienen trabajo que quienes tienen trabajo. Pero, además, o asignamos bien los recursos o la mauyoría vivirá peor.
Podemo aplicar métodos sintomáticos como la reducciónd el gasto público o la devaluaciónd e la moneda. Pero la única solución a largo plazo es obtener un buen rendimiento de ese motor que transforma energía.
José Ángel,
Primera pregunta
Esa es una política de subsidios que se utiliza en muchos países, también en España de una forma o de otra. Por ejemplo en las ayudas de compra a los coches. Como se venden más coches gracias a las ayudas públicas, hay menos personas en el paro y el dinero que se destina a las ayudas se ahorra posteriormente en los subsidios de desempleo. es una política económica que ataca el síntoma, pero que no supone una solución real a largo plazo.
Y no es solución a largo plazo porque la única solución a largo plazo es generar riqueza (transformar enería de forma eficiente), no mover el dinero de un sitio a otro en actividdes que no generan riqueza, que no son competitivas.
En ocasiones, sin embargo, es necesario aplicar medidas sintomáticas. Lo hacemos en España y en Alemania. Pero, como no se genera riqueza, al final la energía disponible (el ahorro) se consume y no hay forma de prolongar esa medida en el tiempo.
Para la segunda pregunta no tengo respuesta clara. No tengo opinión. Me parece una buena idea para pensar sobre ella.
Para emprendeitor. Entrevista en el diario Expansión a Sir Howard Davies, director de la London School of Economics and Political Science (LSE), una institución muy relacionada con la tercera vía.
http://www.expansion.com/2010/06/07/economia-politica/economia/1275868581.html
No sé si este «catedrático» le parece que tiene autoridad suficiente. Para mí no la tiene, pero dice lo mismo que digo yo. Ni lo suyo ni lo mío tiene ningún valor. Son sólo opiniones falsables. Yo agradecería un esfuerzo por demostrar que están equivocadas.
Lo que tenemos ahora, el sistema actual, funciona mal (salvo para unos pocos) y que en otros países funciona menos mal.
No sigo respondiendo, que mañana tengo que generar riqueza 🙂 Pero seguiré.
Muchas gracias por la respuesta Javier.
Lo de «lo seguiré pensando siempre» es porque soy muy cabezón (soy casi perfecto, pero algún defectillo tenía que tener… 😀 ). Por supuesto, me refería a que no se ha presentado una alternativa que sea válida para mí, porque las razones que leo para abaratar el despido me parecen (en mi opinión) un error.
Por supuesto que un trabajador de 20 años tiene todo el derecho. Pero piense una cosa: si una persona ha trabajado en lo mismo desde los 20, y al llegar a los 45 la despiden porque hay otro de 20 al que poder pagar menos, ¿ese de 45 en qué va a encontrar trabajo? ¿Quién va a querer contratar a una persona de esa edad que no tiene experiencia en nada más? Por ese motivo me parece mal el abaratamiento del despido. Y estoy pensando en la mayoría (hay más de 40-50-60 años que de 20).
Y pienso en que el banco quiere seguir cobrando su cuota de hipoteca, y el crédito del coche, con lo que pienso en que querré una cierta estabilidad laboral para no llevarme sorpresas de encontrarme con 50 años en el paro y sin saber dónde podrán contratarme.
Por supuesto, si alguien no vale para su trabajo, tiene que ser despedido. Pero siempre con un motivo justificado. Y si se demuestra que es justificado, tendría que ser a coste cero.
Sr. Moltó, no entiendo a qué se refiere con su idea «la generación de riqueza debe ser un proceso igual de eficiente que la transformación de energía». Me gustaría que la desarrollara, si es posible.
Le digo esto porque me cuesta mucho ver el mercado de trabajo bajo los principios de la máxima eficiencia termodinámica. Sería algo así como beneficio obtenido / costes empleados. Objetivo: máximo beneficio, mínimo coste.
Un empleado trabajando x horas genera x unidades de un producto/servicio. La energía invertida (denominador) vendría por parte del coste de la materia prima, costes propios de la producción, costes logísticos, costes de mercadotecnia, beneficio industrial y coste del trabajador (ayúdeme, por favor, en las cosas que se me olviden). En el numerador tenemos la energía útil: el valor que el producto/servicio genera en el mercado en el momento de salir a la venta.
Para hacer ese proceso más eficiente se me ocurren multitud de factores susceptibles de modificar (aquí se han expuesto algunos) antes que el gasto que supone el trabajador (que es, a la vez, la parte más débil del sistema productivo y el consumidor potencial del producto/servicio).
Desde que se produjo la Revolución Industrial el coste de cada trabajador (derechos sociales) ha ido aumentando de forma casi ininterrumpida. El sistema ha sido cada vez más eficiente. Se ha producido cada vez más y a menor coste. No termino de entender dónde está el punto de inflexión que obliga a revertir esa tendencia. ¿Realmente se busca el coste tendente a cero? ¿A quién beneficiaría? ¿A quién perjudicaría?
Podemos hacer el proceso más eficiente (no sé cuantos puntos más) eliminando los derechos sociales del trabajador. Podríamos, incluso, volver a la esclavitud; eliminando el salario (coste), aumenta el beneficio. ¿Dónde está el límite? Un motor está formado por piezas sin sentimientos; se pueden exprimir sus cualidades hasta obtener el máximo rendimiento. El mercado está formado por personas; aplicar el mismo procedimiento sería mezquino.
Considerando que, como muy bien puntualizó usted, la dicotomía capital-trabajo es una reliquia del pasado, que todos somos productores y consumidores a la vez, ¿qué sentido tiene modificar un sistema que, obteniendo más beneficio por un lado, crea necesariamente un perjuicio añadido en su complementario? Si el sistema se muestra inútil, empleemos el tiempo en buscar un sistema nuevo y no parches para el existente. Pienso.
Agradecería sus opiniones.
ZSQ, es exactamente como usted lo plantea, con dos variables más, que hemos tenido una energía muy barata durante el último siglo pero que ha dejado de ser barata (no tanto por coste sino por lo que contamina) y que ahora la competencia tiene a infinito con la facilidad del transporte y de las telecomunicaciones.
En el último siglo, con la apariciónd el petróleo, la riqueza mundial ha crecido cientos de veces más que en todos los milenios anteriores juntos. El petróleo (y antes el carbón) ha permitido esos incrementos desconocidos de la riqueza y por tanto de los salarios.
Pero ahora el petróleo ya no llega para alimentar con esos márgenes a todo el mundo. Se dispara su precio por la demanda d China y de India y esos países se han empeñada en aplicar eficiencias mayores que las nuestrs, con menores salarios, porque a ellos les compensa (y a nosotros nos toca fastidiarnos)
O buscamos procedimientos tecnológicos que no estén a su alcance (muy difícil porque ellos tienen ahorro y las comunicaciones facilitan que se copie todo) o competimos con ellos en eficiencia.
La historia de la economía no es lineal. Surgen nuevos factores que cambian su evolución.
No cabe duda de que el día que la humanidad sepa aprovechar la energía del sol para el consumo humano, o que encuentre una forma de generar energía limpia y prácticamente gratuita e infinita con la fusión fría se acabarán los problemas de pobreza de la humanidad.
Pero hasta que llegue esa nueva situación, la transición de la economía del petróleo al sistema energético que lo sustituya, será dolorosa para muchos países de la tierra.
Creo que entiendo lo que quiere decir, pero no sé si estoy de acuerdo con ello.
Luchamos contra enemigos temibles: los costes de partida se disparan a causa de la demanda de los países emergentes, el beneficio final disminuye a causa de la feroz competencia de esos mismos países. Lo que no entiendo es la expresión: «…esos países se han empeñado en aplicar eficiencias mayores que las nuestras, con menores salarios, porque a ellos les compensa…» ¿Quiénes son esos «ellos»? ¿Los dirigentes políticos de esos países? ¿Las grandes corporaciones internacionales? A ellos sí les debe compensar. A la inmensa mayoría de los 2500 millones de habitantes de China y la India supongo que no. Hablamos de países con una conciencia social nula; uno con un sistema de castas intolerable en el siglo XXI, otro con un capitalismo neoliberal salvaje dirigido desde las estancias políticas de ese extraño comunismo.
¿Cómo debemos competir con ellos? ¿Cómo podríamos? ¿Rebajando nuestro estado de bienestar (derechos, prestaciones y sueldos) hasta equipararlos a los suyos? Mientras no hagamos eso, y espero que tal cosa no vean mis ojos, nunca podremos competir con ellos. No veo cómo. Hablar de I+D+i, y de valor añadido, cuando uno se echa a temblar nada más ver la evolución de los productos chinos e indios…
No tengo ni idea de cuál es el camino, pero creo que ése que usted propone no lo quiero transitar. Aunque, quizá, es que aún no le he entendido del todo.
ZSQ, la expresión: “…esos países se han empeñado en aplicar eficiencias mayores que las nuestras, con menores salarios, porque a ellos les compensa…” es medianamente jocosa. Ese se han empeñado es jocoso, porque nosotros nos quejamos de la crisis y en China y en India nunca habían transformado tanta energía como ahora, nunca habían sido tan ricos. Esas jornadas de 16 horas al día que hacen los chinos y que a nosotros nos parecen cercanas a la esclavitud para ellos son un bendición de la economía de mercado, riqueza para comer. No sé por qué cree que no les compensa. Nunca habían tenido estas oportunidades. Lo de más cornadas da el hambre de los toreros españoles de la posguerra es aplicable a 1,3 milones de chinos.
Usted dice que no quiere transitar este camino. Me parece bien que lo diga, pero eso no cambia nada. A eso es a lo que me refiero continuamente. No es una cuestión de voluntad. Eso es como decir que no quiere que exista el primer principio de la termodinámica. Por mucho deseo que le ponga, el primer principio existe.
No tiene ningún sentido empeñarse en negar la realidad, porque el resultado es un 20% de paro. Eso hacen los gobiernos y los sindicatos en este país. Es la diferencia con Alemania, que ellos afrontan la realidad. Nos quejamos porque sus medidas van a sacrificar nuestro crecimiento. Pues sí. Y es lógico que sea así. Ellos saben por experiencia qué significa quemar todos sus ahorros de la noche a la mañana. Dos veces en los últimos cien años. Miren sus medidas y miren su capacidad para exportar. Miren las nuestras y miren nuestra capacidad para exportar. ¿No les da miedo?
Mecachis. Moltó ha escrito «exclavitud».
Córcholis!
Ahora resultará que no se escribe así.
Yo pensaba que ya se había terminado. Y que cuando las cosas terminan se escriben con ex.
Como extinto. (Ahora blanco)
Ahora va a resultar que no se ha terminado. Eso sí que es una confusión.
(Gracias, lo corrijo)
Sin terminar de leer todos los comentarios (aún, que lo haré) no me queda más remedio que preguntarle a emprendeitor, sobre su comentario Nº26, ¿no estamos dirigidos todos los españoles por uno de esos a los que usted critica? Uno que aprendió economía en dos tardes, con las lecciones del señor Sevilla? (ni Milton ni Keynes). Si Mr. Bean, el solo, a pecho descubierto, sin la ayuda de nigún asesor, (porque a todos los deslegitima tarde o temprano) puede dirgir el país, ¿porque el señor Moltó no puede intentar arreglarlo en un blog como este?
Pues así nos va. con una política económica dando tumbos, basada en directrices dogmáticas.
El Sr. Moltó puede decir lo que quiera… pero eso no le da credibilidad.
Aunque coincido en alguno de sus planteamientos… lo que me resulta un poco chirriante es el caracter dogmático de su exposición.
Considero que para afirmar como realidades lo que no son más que opiniones, lo correcto es, o bien plantearlas en tono no absoluto («considero que…» «opino que…»), o bien, si se hace en tono absoluto «esto es así» «los sindicatos son tal» etc. es sólo porque debe haber detrás un bagaje contrastado que justifique que una afirmación tiene credibilidad sin necesitar ser demostrada.
Actualmente, para ser catedrático, es requisito necesario (no suficiente) ser doctor, y haber publicado un determinado número de artículos de cierta extensión en revistas especializadas.
Para mí, un catedrático que tiene dicho bagaje, tiene la suficiente credibilidad como para hacer afirmaciones en ese tono. Aunque luego puedan ser discutibles.
En resumen, y en mi opinión, el autor:
No está contando realidades contrastadas, sino opiniones.
No tiene una credibilidad basada en un currículum extenso relacionado con el tema.
No emplea un tono que sugiera que lo que expone es su opinión, sino que, al contrario, el tono sugiere que lo que cuenta es como es, y punto.
Lo hace en un blog que es visitado debido a que está relacionado con una buena página informativa sobre el motor… el tener el blog vinculado con una página con cierto prestigio en un área concreta, le convierte de algún modo en un generador de opinión.
Eso es lo que veo altamente inadecuado:
Una persona se conviernte en un generador de opinión que está exponiendo su propia opinión (no hechos contrastados), no tiene ningún prestigio profesional relacionado con el tema que haga suponer que sea un experto… y las explica como si fueran hechos.
Sobre la temática en concreto… hay centenares de blogs, muchos de ellos en páginas tipo «liberalismo.org» etc., en el que se habla de estos temas con mucha más profusión.
Ponerse a discutir en este blog que hoy trata de esto, y mañana de lo otro, sobre ello… lo encuentro aburrido, cansino e inútil.
Hoy discutes de esto aquí… mañana lo haces con la cajera del Dia… pasado con el que te sirve un café y unos churros en el bar… Al principio es divertido, al cabo del día, acabas hasta las narices.
Para terminar, sugiero que cada uno se alimente su propia opinión en base a diversas fuentes de información (no de opinión), de diferente orientación política… y que nadie deje que su opinión sea formada por una única fuente, o sólo por las fuentes de determinada orientación.
O mejor… donde he dicho «fuentes de información», lease mejor bibliografía, libros, textos, ensayos, artículos…
Creo que si todos nos limitamos a formar nuestra opinión basándonos en los artículos de opinión…. entonces, al final llegaremos a un «bipartidismo ideológico» similar al político.
Creo que cada cual se debería formar de forma independiente, y no se deje dirigir ni manipular por nadie, creando su propia opinión en base a su criterio, a su formación y a muchas informaciones. Y nunca en base a opiniones.
(en eso coincido con Flanders: no leer artículos de opinión, para evitar que la opinión de otros influya en la nuestra).
Emprendeitor, no puedo estar más de acuerdo con usted (salvo en la sintaxis) cuando dice: «Para terminar, sugiero que cada uno se alimente su propia opinión en base a diversas fuentes de información (no de opinión), de diferente orientación política… y que nadie deje que su opinión sea formada por una única fuente, o sólo por las fuentes de determinada orientación.
O mejor… donde he dicho “fuentes de información”, lease mejor bibliografía, libros, textos, ensayos, artículos…»
Bueno, yo no lo sugiero. Lo pido encarecidamente. Pero no hace falta que lo haga. Ya ve cuántas opiniones que discrepan de la mía han aparecido aquí. ¿Cree que todo el resto de lectores es tonto y que sólo usted se da cuenta de que yo escribo aquí mi opinión? No hombre no. Todo el mundo sabe que es mi opinión. No hace falta que yo escriba explícitamente que opino eso. De tan evidente es innecesario. Si fuera malo diría que hasta usted se ha dado cuenta.
Usted ha escrito un último mensaje muy melifluo con varios opino, creo, sugiero… pero es innecesario que lo haga.
¿De dónde saca usted que es dogmático lo que yo digo? Si fuera dogmático, ¿Lo sometería a debate? No hombre no. Los dogmas no existen.
Hay catedrátiucos completamente garrulos y otros que no lo son. El título no le da valor a ninguna idea. Que sean doctores o no es totalmente indiferente.
Lo único que tiene valor son las ideas, no quien las diga. Lo único que tiene valor es El Quijote y no quien lo escribió. Lo que yo pienso no son ideas mías, son ideas. Da igual que lo diga yo o que lo diga el lucero del alba. Usted se empeña en buscar y aceptar la autoridad. Me parece muy bien. A mí me parece que en las ideas no hay autoridad posible. Existen argumentos, deducciones y conclusiones. Me da igual que usted coincida conmigo o no. Que los dos pensemos lo mismo no significa que una idea sea mejor, ni me siento arropado porque piense lo mismo que yo ni inquieto porque piense de forma diferente.
A mí me gustan las refutaciones inteligentes. Doy todo mi tiempo para ellas. Cambio de opinión apasionadamente cuando alguien me muestra que me equivoco. Mi opinión no vale nada, como la de nadie. Se trata únicamente de pensar y de intentar encontrar el camino que nos ayude.
Parece mentira que le tenga que explicar todo esto. Eso es evidente en este blog. Pero usted se empeña en discutir como los políticos. En decir de esto no toca hablar hoy o no toca hablar aquí. Aparte de que sea más o menos aburrido su discurso, lo peor es que no aporta nada al debate.
Yo le pido que debata si le apetece sobre los asuntos de los que hablamos todos, que exponga sus ideas y que deje de decirnos a los demás qué debemos hacer con nuestro tiempo. Este sitio no es su sitio, quienes estamos aquí debatimos con felicidad y frescura. ¿Por qué nos dice lo que tenemos que hacer? ¿Qué le hemos hecho?
Por cierto. Tampoco somos una autoridad en coches. Las autoridades no existen. Todo lo que decimos, absolutamente todo, más incluso sobre coches que sobre cualquier otra materia, debe ser contrastado por todos ustedes. Por su propio bien.
Repito que actualmente un catedrático es una persona que ha realizado una tesis doctoral, y además ha publicado en diversas revistas especializadas artículos de temática especializada.
Se supone, pues, que tienen un dominio sobre un tema, ya que son personas inteligentes que han dedicado un tiempo muy significativo a la temática concreta.
Una persona con formación generalista que ha leido un par de artículos y tres libros… obviamente no ha dedicado el mismo tiempo… y es de suponer que todo lo que diga sobre ese tema, será pobre, comparado con lo que pueda aportar una persona con conocimientos muy avanzados en el tema.
Por lo tanto… raro es que sean unos garrulos en los temas de los que son catedráticos… alguno habrá, pero al menos con los criterios actuales, es raro.
Digo que es dogmático porque utiliza afirmaciones de forma absoluta, sin ponerlas en duda ni sugerir que son realmente opiniones…. y no las apoya con datos.
Considero que eso es negativo, porque lo crea o no, el buen trabajo hecho en km77 les ha convertido en una referencia en cuanto a información.
Por cierto… todo su planteamiento se basa en considerar como causa de nuestra baja competitividad lo oneroso que resulta el despido…. pero no ha considerado que, pese a que en nº de días por año trabajado sí estamos por encima, debido a que los salarios son más bajos que en otros países… en realidad, el coste del despido en España es inferior que en otros países de Europa.
Por otra parte, la falta de competitividad en nuestra industria… se debe más a los directivos y su política empresarial poco basado en el I+D… que a los trabajadores de base.
En mi empresa… se hacen cursos de formación si son gratis… si no, nada… ya se nos supone formados (y es una empresa de notable prestigio en su sector en la que las cosas no nos van mal).
Estoy de acuerdo en que la rigidez laboral es un problema… pero ni de lejos es nuestro mayor problema.
Por lo tanto… plantear esto ahora es, en mi opinión… como a un enfermo de neumonía indicarle que lo que tiene que hacer es ejercicio para tonificar su musculatura.
Sin duda es bueno tener tonificada la musculatura… pero el problema no es ese.
Según mi experiencia, nuestro problema es más bien de mandos intermedios y, sobretodo, de dirección… malas estrategias, o inexistentes, poco I+D, poca inversión en formación e innovación, etc.
Nuestro problema no está en Telefónica o en Zara, empresas en las que por cierto es probable que haya un cierto poder sindical.
Nuestro problema está en las miles de empresas medias y pequeñas en las que no hay cultura de la innovación y la inversión en recursos humanos.
Nuestro problema de competitividad no está en el coste del despido. Está en la escasa capacidad de los líderes de nuestras empresas.
Créame, Sr. Moltó, que cuando le leo cosas como:
«Lo único que tiene valor son las ideas, no quien las diga.»
o
«A mí me gustan las refutaciones inteligentes. Doy todo mi tiempo para ellas. Cambio de opinión apasionadamente cuando alguien me muestra que me equivoco. Mi opinión no vale nada, como la de nadie.»
…no puedo dejar de felicitarme por ser tan inteligente como para decidir emplear mi tiempo en leerle.
Seguramente me ha quedado en tono irónico pero no hay nada de ironía en la afirmación. De todos los años que llevo leyéndole (van para cinco), lo que mejor he aprendido es que me vuelvo más inteligente cuanto más consciente soy de lo equivocado que puedo estar.
Sinceramente, le deseo que no pierda ese talante (iba a decirle que no cambie pero no, precisamente aquí creo que no aplica).
Hay que tener cuidado también con las refutaciones inteligentes.
El Mein Kampf está lleno de refutaciones inteligentes, y usted podría perder perfectamente un debate contra un defensor acérrimo de su contenido.
Leamos todos muchas cosas… y confiemos muy poco de las opiniones ajenas, aunque estén bien argumentadas.
Desde mi punto de vista, es preferible tener una opinión propia que esté equivocada, que tener una opinión acertada que sea ajena.
Cambiemos poco a poco nuestra opinión en función de los análisis que nosotros mismos hagamos en función de todas las experiencias, no en función de lo que nos argumente un tipo.
La sabiduría está dentro de nosotros mismos. Hoy me he despertado socrático.
(y como dijo Sócrates: «¿que he bebido quéeee?»)
¿Leer muchas cosas? ¡Qué pérdida de tiempo!
¿Para qué elaborar una opinión propia a través del análisis cuando la puedes tomar prestada de alguién que ya echó un ratito en ello?
Yo leo única y exclusivamente al señor Moltó. Suscribo todas y cada una de sus opiniones, las que ya ha dado y las venideras. Sus órdenes son deseos para mí. ¿Usted no lo hace, D. Empren? Pues debería.
¡Sigamos al líder! ¡Sigamos al líder!
.
.
D. Empren, diríase que da igual lo que escribamos en nuestras intervenciones. Como no voy a poner en duda su capacidad de comprensión escrita, tendré que pensar que ni las lee. Parece que, escribamos lo que escribamos, usted sólo nos atribuye lo que he puesto un poco más arriba.
¡Es que si sólo escribe y no pone dibujitos!
A veces cuando respondo no respondo para nadie y sólo pienso en voz alta.
Haga usted lo que quiera. Ni me gustan los seguidismos, ni me gustan los artículos de opinión, ni me gusta que se afirme como cierto lo que sólo es una opinión.
El recurso del «sólo sé que no se nada» (no es que siga socrático, es que es lo que uste dice), fue genial cuando se dijo por primera vez. Ahora es muy facilón. Lo ha empleado el Sr. Moltó, y lo ha empleado usted.
«soy más inteligente cuanto más consciente soy de mis errores». ¡’nga hombre!. Es exactamente igual de inteligente, sea consciente de sus errores o no lo sea.
«mi opinión no vale nada. Como la de nadie».
Sí, ya. Y la tierra es del viento.
La opinión de Hitler valió aproximadamente 6 millones de civiles muertos. La opinión de Pol Pot valió aproximadamente 2 millones de muertos.
Diría que hay opiniones que sí valen algo.
Por lo visto, está de moda ser humilde.
«los discursos inteligentes hacen cambiar mi opinión». «soy listo cuando me doy cuenta de mis errores».
Bah. La humildad está bien para los que son humildes. Para los que somos magníficos en todos y cada uno de los aspectos imaginables, la humildad no es virtud, sino defecto.
(la falsa modestia es aún peor que la soberbia… la falsa modestia es, en realidad, una de las formas más desagradables de soberbia).
«Desde mi punto de vista, es preferible tener una opinión propia que esté equivocada, que tener una opinión acertada que sea ajena.»
Ya.
Peloteos y complejos de culpa a parte, se están desviando del tema. Emprendeitor, la vida académica está en muchos casos profundamente divorciada de la realidad. Conozco a más de un catedrático que teoriza sobre aspectos que no son de ningún interés y que morirán sin haber podido aportar nada aprovechable a la disciplina que siguen con tanta desconexión. Por otro lado, la mayor dificultad de un doctorando es encontrar materia que no haya sido ya trillada, y eso en según qué disciplinas es sinónimo de artificialidad y esfuerzo baldío al doctorando y a la disciplina en favor de un reconocimiento que aporta poco a la sociedad y generalmente menos de lo que pensaba al erudito de la borla.
Hay que reinventar las universidades.
Con los catedráticos a la cabeza.
JM
No termino de entender que hace por aquí el señor emprendeitor. Aunque lea más y más comentarios suyos no consigo sacar una conclusión (u opinión, propia, claro) sobre el tema. Si no le gusta que le adoctrinen (que creo que no es a lo que se dedica aquí el señor Moltó) ¿por qée sigue pendiente de esta conversación? Y debe llevar el día entero!! No debe causarle tanto hastío como usted dice. Debe serle mucho más entretenido discutir aquí de lo que manifiesta.
Por otro lado, no sé cuanto llevará siguiendo este blog, pero los que llevamos leídos unos cuantos posts del señor Moltó, ya sabemos como se expresa. Su aparentemente dogmática forma de hablar (o escribir) es simplemente su manera de expresar las cosas. Igual que usted tiene las suya.
A parte de todo eso, si las opiniones no se deben tener en cuenta, ¿por qué sigue dandonos las suyas una detrás de otra? Si seguimos sus indicaciones, está usted perdiendo el tiempo en teclear larguisimas respuestas que nadie debería leer.
Y por último, a usted, que le parecen tan interesantes los catedráticos, le ponía yo delante a un par de los que me formaron a mí en mi carrera. (Sólo espero que se hayan jubilado ya, por el bien de la humanidad). Probablemente habrían escrito artículos de considerable extensión y tuvieran una formación de la leche, pero sacar algo de conociemiento de ellos era una tarea heróica.
Con el permiso de D. Amasador, voy a rescatar aquí un enlace que nos ha regalado en el foro de km77. Lo mejor del día (mi día fue duro).
http://www.youtube.com/watch?v=nPB-41q97zg
No conocía a Sir Ken Robinson. Buen fichaje.
«Nuestro problema de competitividad no está en el coste del despido. Está en la escasa capacidad de los líderes de nuestras empresas.»
En eso estoy de acuerdo.
Haríamos mejor poniendo al frente a los líderes de los sindicatos, no te fastidia. Todos son capaces de opinar, menos de reflexionar. Esa afirmación construida sobre el vacío argumental y huérfana de un miserable indicio de prueba me vale tanto como el azar.
JM
Eh. Que no se vale hacerse trampas a uno mismo.
¿Qué significa tener una opinión ajena? Si se tiene una opinión es que es propia. ¿Cómo se puede tener una opinión ajena? Eso es imposible. Por tanto, la frase no tiene ningún sentido.
Más tramposa con uno mismo es no hacerse más preguntas tras la siguiente opinión:
“Nuestro problema de competitividad no está en el coste del despido. Está en la escasa capacidad de los líderes de nuestras empresas.”
No sé si lo que se afirma en esa frase es cierto o no. Pero, si fuera cierto, lo lógico es preguntarse a qué puede deberse esa falta de competencia y qué formas tenemos de solucionarla. Una de las posibilidades es precisamente que los conocimientos de los líderes de las empresas se queden viejos y que no haya forma de sustituir a esos líderes a causa del elevado coste del despido.
A mí me parece que el despido es especialmente caro precisamente para los cargos ejecutivos. Y que el despido tendría que ser proporcionalmente más barato para quien más responsabilidad tiene en las empresas. Por ejemplo, yo considero que sería muy beneficioso para nuestra economía el despido gratuito para todo trabajador con un sueldo superior a 60.000 Euros año (por poner una cifra orientativa). Y hacerlo progresivo, como el impuesto sobre la renta, para sueldos inferiores.
A menor sueldo, mayor coste proporcional de la empresa para los despidos individuales.
Los requisitos actuales para ser catedrático son distintos que los que había hace años.
Al menos en las universidades técnicas. Al menos en las que yo conozco. Doctorado, y un número elevado de artículos técnicos en revistas especializadas, o libros, o conferencias en universidades. En general, los catedráticos nombrados en los tiempos recientes son bastante superiores a los que llevan muchos años en el cargo.
Lo de los directivos lo digo basado en mi experiencia. Es cierto que no lo estoy demostrando… pero lo que yo he visto en mi experiencia en la industria es poco espíritu de innovación. El «esto siempre lo hemos hecho así» es algo que se oye todos los días.
Escasas multinacionales con sede en España. Escaso riesgo, escasa innovación.
Bajísima colaboración entre universidad y empresa. Bajísimo número de patentes comparado con otros países (estos dos aspectos sí que son objetivos y cualquiera los puede consultar por internet).
Hay excepciones muy meritorias y muy notables. Y cuando se producen, destacan un montón sobre el resto. Y todos conocemos algunos ejemplos.
Pero deberíamos preguntarnos porqué muchas de nuestras empresas son poco competitivas comparadas con empresas de países vecinos con mano de obra más cara…. cuando además, la mayoría de nuestras empresas tienen un porcentaje de mano de obra elevado cuyo coste del despido es CERO.
¿qué empresa mediana o grande no tiene al menos un 10% de su plantilla contratada con ETT, y otro tanto con empresas de servicios… siendo el coste de indemnización absolutamente cero?.
(en mi empresa se ha despedido a una cuarta parte (25%) de la masa trabajadora… con cero euros de indemnización, porque todos los despedidos eran ETT… ¿en qué mejora que se baje de 45 días a 20 días? ¡es mejor cero, que es lo que ya hay ahora de facto!).
Lo de que el despido es más caro en España que en el resto de países de nuestro entorno inmediato, en realidad, no es cierto.
Si lo medimos en una unidad tan artificiosa como «días de trabajo por año», sí.
Pero si lo medimos en euros, no. Es sólo cuestión de matemáticas.
Despedir a un obrero alemán sale más caro, en euros, que despedir a un obrero español.
En conclusión, nuestro sistema laboral está anticuado, se debe mejorar.
Nuestros sindicatos son de pena.
Pero la causa de la falta de competitividad en España no hay que buscarla en los sindicatos.
No son los que han causado esta crisis… y si no existieran, tendríamos la crisis que tenemos exactamente igual… por tanto… aunque no es que esté mal el meterse a solucionar este problema…. en realidad, en este momento la importancia no es muy significativa.
Otra cosa es que realmente la modificación es necesaria hacerla algún día… y ahora se aprovecha el momento, porque hay una sensación de que hay que hacer cosas para salir de la crisis…. lo cual hace que sea más fácil argumentar que por la competitividad, etc. es necesario perder esos derechos… (A río revuelto, ganancia de pescadores).
Pero, ni la principal causa de falta de competitividad en España es la legislación laboral o el coste del despido (creo haber argumentado que en realidad es más barato que en otros países… y en un número muy elevado de casos el coste es cero)… ni arreglarla ahora va a suponer ninguna mejora en el corto plazo.
O sea, que después de todo lo que ha largado censurando la ausencia de base de los demás, resulta que todo lo que usted decía se construía sobre el reducido espectro de su personal experiencia empírica.
Cuando hablaba de la escasez de miras de «los directivos» todo se reducía a una extrapolación bárbara del puñado de directivos que usted haya podido conocer.
Pues no pida mucho rigor a la concurrencia y comience por buscárselo para usted mismo.
JM
Los datos de colaboración universidad empresa están ahí y son datos objetivos.
El número de patentes está ahí y es un dato objetivo.
El supuesto Sr. Lobo que ha comentado este blog no es el Sr. Lobo que uds. conocen y que tiene usuario registrado en el foro «madre» de km77.com.
Dado que el sistema de comentarios implantado en este blog no tiene opción para usuarios registrados la única forma de evitar esta suplantación de identidad es llamar al orden al interfecto de turno.
Si uds. me conocen tan bien como es de esperar después de tantos años de postear deberían haberse percatado ya que mi esperable respuesta a un post como este sólo puede ser:
Sr. Moltó, si cada vez debemos ser más competitivos, lo que implica dar más por menos o dicho de otra forma, rebajar nuestros costes productivos y hoy en día dichos costes se recortan primordialmente a través de la automatización de procesos ¿quién y dónde va a trabajar para ganar el dinero para consumir esos bienes? ¿Hacia dónde tiende esa gráfica? No me cansaré de repetirlo pero ya están tardando en ver Zeitgeist Addendum, el próximo 10 de Julio pueden escuchar al Sr. Jacques Fresco quien a sus 95 años sigue dando la vuelta al mundo para explicar porque una economía monetario está irremediablemente condenada al fracaso y porqué una economía basada en recursos es la única opción viable de superviviencia que tenemos como especie.
interfecto, ta.
(Del lat. interfectus, part. pas. de interficio, matar).
1. adj. Der. Dicho de una persona: Muerta violentamente, en especial si ha sido víctima de una acción delictiva. U. m. c. s.
Mecachis en la mar, Mr. Wolf, no se ponga usted así. A lo mejor se trata sólo de una coincidencia. No hay necesidad de recurrir a las amenazas veladas.
Chau
«Pretty please, with sugar on top, clean the fucking car.»