Aprovecho que tengo nueva conexión a internet para estrenarla con una crítica a una película de Gracia Querejeta: Felices 140.
Empiezo por atrás. Me duele que se hagan películas así. Me duele que nos engañen a los espectadores y que vayamos a ver películas así. ¿Quién me ha engañado? Supongo que me ha engañado un apellido.
Voy a destrozar al película, aunque no hay nada que destrozar. Si les preocupa que les cuente someramente de qué va, no sigan leyendo.
En la película aprovechan una casualidad, un premio de lotería, para reunir a unos amigos del mismo nivel cultural, intelectual y emocional que los protagonistas de las reuniones de Gran Hermano o Sálvame. Nunca he visto Gran Hermano ni Sálvame. He visto la película de Gracia Querejeta. Sé con qué me puedo encontrar.
Una mujer irrealmente estúpida, de pronto es millonaria. Se reúne con amigos tan estúpidos como ella y no paran de decir sandeces durante los 90 minutos que dura la película. Todo es casualidad, frases comunes, lugares prefabricados y sitios viciados… aburrimiento. Pero, además, como son rematadamente tontos, unos y otros sufren por estupideces y rencores párvulos.
Me duele una película así. Me duele que personas que tienen la capacidad de convocar a espectadores y de hacerlos pensar les den bazofia para entretenimiento de cerdos. Ya tenemos Gran Hermano, Sálvame y no sé cuántos tomates más en la tele. ¿Tenemos que llevar esa morralla al cine? ¿Podemos permitirnos desaprovechar así el poder de convocatoria?
Sobre los actores. Da la impresión de que hacen bien su papel de tontos de remate. Le dan un aire convincente a su estupidez. No parece que actúen. Lo que me pregunto es si se trata de un papel o sí en realidad no necesitan actuar. ¿Están ellos mismos, como actores, reflejados en esta película? ¿Aceptan hacer una bazofia de este calibre a cambio de dinero o creen de verdad que es una peli buena?
Me hace feliz ver películas fallidas. Me hace feliz y disfruto al ver guionistas, actores y directores que asumen riesgos y se equivocan. Lo que no soporto son películas sin riesgo, películas que imitan a Gran Hermano y a Sálvame. Apuesta segura, sin riesgo. Comida para animales.
Lo mismito que hizo Almodovar con sus «Amantes pasajeros». Aprovechar su nombre para ganar dinero con un producto peor que mediocre, y lo mismo que los «8 apellidos Vascos» que tanto exito tuvieron.
Para que se le pase el cabreo y pueda comparar le recomiendo 3 películas de los últimos 6 años, similares en tipo de cine (diversión) y en presupuestos hechas en el país de al lado. Seguro que el Sr. 4Ruedas se pasa por aquí y nos da su opinión sobre ellas:
-Bienvenidos al Norte, risa y tópicos para parar un tren, con un guión como poco bueno, (seguro que los de los apellidos vascos no copiaron ninguna escena / idea de esta).
-Pequeñas mentiras sin importancia, tragicomedia, no se pierdan los primeros 10 minutos. La película es capaz de hacernos reir mucho y llorar también.
-Dios mio, ¿pero que te hemos hecho?, esta igual les suena por actual, mucha risa, escenas delirantes, y un mensaje del mundo global que nos espera.
Hala, ahí le quedan.
Le noto distinto, Moltó.
¿Se ha enamorado? ¿Desenamorado?
No tiene que ver, o si, pero hace taitantos años en la tele veías la clave, la bola de cristal, un mundo feliz, cine en ¡¡¡¡¡B/N!!!!, solo tenias tres opciones, la 1, la 2 o no ver la tele. No había medidas de audiencia o daban igual. ¿Será que no nos conviene tanta libertad, tantas opciones?
Parezco un abuelo coñon.
Buf.