Francisco Payri es el responsable de «la Cátedra de Motores Térmicos de la Universidad Politécnica de Valencia” (CMT-Motores Térmicos). A diferencia de otras muchas universidades españolas, en CMT-Motores Térmicos se dedican a investigar y tienen clientes de empresas privadas de prácticamente todo el mundo. Por ejemplo, su experiencia con motores Diesel hace que fabricantes americanos, con menor experiencia y tecnología en estos motores, contraten sus servicios. Pero no sólo americanos.
Traduzco del inglés, porque la página web de CMT está íntegramente escrita en inglés. Ni siquiera en español e inglés. Toda en inglés, otra muestra de su compromiso, al utilizar el idioma internacional de los negocios y de la ciencia.
“CMT-Motores Térmicos siempre ha tenido como objetivo relacionar la investigación y la actividad docente. Este compromiso ha quedado demostrado con el gran número de alumnos que han realizado diferentes proyectos de estudio en nuestro centro de investigación. Se han realizado más de 750 proyectos de fin de carrera durante la historia de CMT, con un promedio de entre 50 y 60 alumnos durante los últimos 10 años. En este periodo se ha producido un notable incremento de solicitudes entre alumnos extranjeros, a causa del elevado número de estudiantes foráneos que acuden a Valencia en el marco de los programas de intercambio”.
Durante las últimas décadas, he visitado varios centros de investigación de diferentes marcas de automóviles y de proveedores de tecnología en diferentes lugares de Europa. En los laboratorios de CMT de la Universidad Valenciana se respira el mismo ambiente que en todos ellos. Ingenieros dedicados a estudiar y realizar pruebas con el objetivo de obtener datos y conclusiones. No tengo capacidad ni medios para juzgar si los equipos con los que trabajan son mejores, peores o equivalentes a los que se utilizan en otros lugares del mundo. Me los han mostrado con detalle durante mi vista por los 5800 metros cuadrados de laboratorios, con una inversión en equipos superior a los 21 millones de euros a lo largo de los años. En el enlace que pongo, se pueden conocer con detalle.
Yo no tengo capacidad para analizar y juzgar los equipos ni a las personas de CMT – Motores Térmicos de la UPV, pero la calidad de sus trabajos está respaldada por contratos con marcas de automóviles y motocicletas que compiten a diario en el mercado y que tienen que obtener rendimiento de sus gastos e inversiones. En su página web, que recomiendo leer con detenimiento para tener una información detallada de todas las actividades de la CMT, aparecen algunos de estos clientes: BMW, General Motors, PSA Peugeot – Citroën, Renault, Ford y Volvo están entre ellos.
Las materias de investigación son variadas, si bien la principal fuente de conocimiento de CMT, según afirma el catedrático y responsable F. Payri, son la sobrealimentación y la inyección, campos en los que son considerados una referencia, según sus palabras.
“En nuestra investigación intentamos conseguir un equilibrio entre el campo experimental y el teórico. En nuestros inicios, la actividad era puramente experimental. Nos basábamos en la prueba y error, prácticamente en exclusiva. En la actualidad ha cambiado enormemente el método de trabajo. La potencia de cálculo de que se dispone ahora permite delimitar mucho mejor el campo experimental, para avanzar con mayor rapidez y competitividad” afirma Payri.
Por lo que he visto y me ha contado F. Payri, deduzco que CMT – Motores Térmicos está basada en esos dos equilibrios: el de experimentación y cálculo y el de empresa y ciencia. “No podemos darnos por satisfechos con nuestro trabajo con las empresas. La producción científica es imprescindible. Hemos dirigido 105 tesis doctorales en 25 años. En la actualidad tenemos 30 en marcha”
A mí, como fundador de km77.com, me gustaría poder colaborar activamente con CMT – Motores Térmicos de la UPV. Me gustaría encontrar vías de colaboración con centros de investigación, universitarios o no, que trabajan para conseguir que los ciudadanos podamos desplazarnos de un lugar a otro, con eficiencia. Por lo menos, darlos a conocer, porque ese un un buen servicio también para nuestros lectores estudiantes. Esa colaboración es sencilla, porque Payri me dice: “A nosotros nos interesan alumnos buenos”. Estoy seguro de que entre nuestros lectores hay alumnos buenos.
No descartamos otras posibilidades de colaboración. Tengo algunas en la cabeza. Les iremos dando vueltas. Si a ustedes se les ocurren formas de colaboración interesantes para todos, no las desperdicien y díganlas. Las universidades tienen que abrirse a la sociedad y entre todos tenemos que buscar formas de conseguirlo.
Es posible que si yo hubiera conocido una cátedra como CMT – Motores Térmicos cuando empecé la carrera hubiera intentado conseguir nota para entrar. No por encontrar trabajo, “nos quitan los investigadores de las manos”, sino por disfrutar mientras estudiaba y por tener posibilidad de aprender más. En CMT – Motores Térmicos trabajan al unísono 13 catedráticos y colaboran entre ellos para mejorar la calidad de las investigaciones que emprenden y de los servicios que suministran.
Las más de 150 personas que trabajan en CMT están repartidas de la siguiente forma: 45 de ellas en el grupo de personal docente, otras 45 son investigadores realizando su tesis doctoral, hay 5 especialistas informáticos, 20 técnicos, 7 administrativos y 45 alumnos realizando su trabajo final de carrera.
Los ingresos medios de los últimos cinco años han sido de 3,6 millones de euros, de los cuales el 60% proviene de la empresa.
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A finales de febrero, CMT-Motores Térmicos ha lanzado una convocatoria de 15 becas para hacer el doctorado a partir del próximo curso. La convocatoria está abierta hasta el 30 de mayo. Las características puedes encontrarlas en este enlace.
Por fin una universidad que parece lo que tendría que ser cualquier otra: un sitio en el que el catedrático de turno no se cree más que nadie y que tiene a un triste becario que le corrige los exámenes y que le da las clases cuando no le apetece levantarse del sillón.
Gran «enseñador» Paco Payri, tuve la suerte de tenerlo de profesor en el último año de carrera, en motores de combustión. Iba predispuesto a aprender por afición a los motores, pero la realidad es que aunque no hubiese tenido predisposición, habría aprendido. Un crack.
Respecto a la CMT, tuve varios compañeros haciendo el proyecto allí y aprendieron mucho, aunque hay opiniones de todo tipo… como en casi todos los ámbitos de la vida.
Sr. Moltó enhorabuena por esta nueva entrada. Es una satisfacción que desee colaborar en la medida de lo posible con instituciones de investigación… pero, por favor, no les hable de la Dra. R Love….
Saludos
Javier, le recuerdo que ya está la Porra en marcha en el foro, por si le apetece participar.
Saludos
No existen malos alumnos, existen malos profesores que no saben enseñar. O eso dice la filosofia oriental. Creo que seria interesante mirarse la mierda de uno, antes de hablar esperando algo de los demas
He desarrollado un sistema motor de 2t,lubrica por cárter y bomba de aceite,de forma similar a los motores de 4t,puede alimentarse e incluso sobrealimentarse por sí mismo.
Como singularidad las válvulas de admisión y escape no merman energía al motor para realizar su apertura. ¿Podría ser de interés a ese departamento el total desarrollo del motor?
En tal caso,¿Qué obtendría de mi aportación? Caso de que se llevara adelante el proceso.
Téngase en cuenta que no existen motores de propiedad española y,no voy a aceptar la transferencia de tecnología a los tudescos,entiéndase,(alemanes).
Mis tels.- 963669339 y 658285779
Cordial y attamente. Manuel.