Todavía quedan 24 horas de 2012. ¿Renunciamos a ellas?
Normalmente, dejamos de felicitarnos el año en curso a mediados de enero. ¿Por qué?
Todavía queda un día de 2012. Sean felices y disfrútenlo. El futuro es importante, sí, pero el presente por lo menos tanto como el futuro. Por lo menos.
¡Feliz 2012, encore!