Después de ver el Cañón del Colorado en avioneta y mientras regreso en autobús a Las Vegas desde el aeródromo me asalta la idea de que España es un país a escala.
La idea no surge por ver el Cañón del Colorado, aunque también. La idea surge de las inmensas llanuras.
¿Acaso no tenemos llanuras en España, me preguntarán ustedes? Infinitas, les respondo. Un viaje cualquiera en coche por la meseta norte española te pone al final de la calle. Llanura infinita por delante y por detrás, a izquierda y derecha. Llanura infinita. Observación inapelable. Mi vista no alcanza más lejos en la llanura española que en la de Estados Unidos, por lo que las llanuras de Estados Unidos no me pueden parecer mayores que las españolas. ¿Entonces, dónde está la escala?
Tendría que acabar mi artículo, pero no lo hago. Las llanuras de Estados Unidos me parecen mayores que las españolas. Porque no se trata de una llanura solitaria. Las llanuras que yo he visto no son una llanura. Son una llanura infinita y, a lo lejos, casi perdido en el horizonte, pero a la vez diáfano enorme y limpio, un macizo montañoso. Ese macizo situado en el infinito proporciona una referencia que permite calibrar mucho mejor la extensión de la llanura. Con límites, el infinito es mucho mayor.
Esos bloques montañosos inabarcables con la vista a lo alto y a lo ancho y esos valles como océanos son los que me dieron la idea de la escala. No sabría decir exactamente la relación de escala entre España y Estados Unidos, pero que hay una relación es incuestionable. Se da en todos los órdenes de vida.
Nuestros desfiladeros y sus cañones son a escala. La superficie global del país, la longitud y el caudal de sus ríos, el rango de temperaturas, el tamaño de los árboles… España es un país como de juguete. Delicioso. Ni más bonito ni más feo, pero definitivamente a otra escala. Casi de caramelo.
Una vez se me instaló la idea de la escala, me di cuenta de que es aplicable a todos los órdenes de la vida. El tamaño de los platos y el volumen de comida, el tamaño de las personas, en altura y diámetro de cintura, el tamaño de los coches. Cualquier coche grande europeo parece pequeño en las carreteras de Estados Unidos al lado de los hipopótamos que ellos utilizan como vehículos, el tamaño de las autopistas con cinco carriles por banda.
En las próximas semanas les iré poniendo fotos. Para que vean. Mientras tanto, un aperitivo de la escala.
Cañón del Colorado
Estribaciones del Valle de la muerte.
Alrededores de Lone Pine
Lone Pine. Diaz Lake.
Lone Pine. Whitney Portal Road
Lone Pine. Whitney Portal Road
Interestatal 395 California.
Yosemite Valley. El Capitan.
Y si extiendes la comparación a Europa, especialmente a esa Centroeuropa repleta de mini-Estados, la escala es todavía menor! Siempre he dicho que Europa es el continente de los pitufos ;), en comparación con la enormidad de países y paisajes (incluso soles ponientes!) en América Norte y Sur, África o Asia.
Hala lo que ha dicho. El continente de los pitufos!
Aùn recuerdo cuando en una tienda de ropa en EE.UU, estaba en la zona de tallas grandes (acostumbrado a la mayoría de tiendas similares en España) y vino el dependiente a preguntarme para quién quería la ropa. Le dije que para mi. Se rió y me dijo amablemente que me fuese a la zona de ropa normal. No sólo tenìa razón, sino que ademàs tuve que comprar una talla que no era la màs grande.
Por cierto, què tal el Focus por esa carreterilla nevada?
Señor Moltó
Le doy la razón en lo de que el ver el Cañón del Colorado, es todo un espectáculo. Cuando yo lo vi por primera vez en 1981 todavía te daban un paseo en helicóptero y te bajaban hasta el rio colorado, podías pasar la noche en una posada y te recogían al día siguiente, para que vieras el espectáculo desde abajo sin tener que pasar el suplicio de bajar a lomos de una mula, que según dicen nunca se caen por la cuesta abajo, pero que te acojonan totalmente, amen de no poderte sentar en la semana siguiente.
Pero si quiere usted impresionarse con la inmensidad de un país y sus llanuras dese una vuelta por Rusia y cuando llegue a Moscú saque un billete para el Transiberiano y viaje hasta Vladivostok, ya se que desde los Urales no es Europa sino Asia pero sigue siendo el mismo país, Rusia, tendrá una sensación parecida a la que debieron de tener los colonos que recorrían en tren las llanuras del centro-oeste de EEUU.
Y si quiere una sensación todavía mas emocionante, similar a la del oeste americano del siglo XIX, tome la nueva ruta del transiberiano, la llamada Baikal, sin demasiada dificultad vera a los bandidos intentando asaltar el tren y a los soldados rusos defendiéndolo con sus Kaláshnikov. En la siguiente ciudad importante por la que pase seguro que se baja y corre al aeropuerto para terminar el viaje en avión… craso error, después de sacar el pasaje cuando vea de cerca el avión seguro que volverá corriendo para subirse al tren… y sus hombres armados de AK47.
Un saludo
Lud
Que razón tienes Pilotillo, yo tengo una hermana viviendo en Miami y hace unos años fui con mis padres para verla, y recuerdo que mi madre, gorda como la mayoría de las madres de los que ya pasamos de los sesenta, entro en una tienda de esas y salió flotando en pleno éxtasis, la dependienta le dijo lo mismo que a ti y claro el complejo que llevaba acumulando durante años se desvaneció al instante, desde entonces no nos perdona que esperáramos quince años para ir a ver a mi hermana.
Un saludo
Lud
Es que vaya comparación.
Hace poco preparando un viaje a Colombia, tuve una sensación parecida, con la agravante de que yo pretendía hacer algunos recorridos en coche y menos mal que me advirtieron de que 800 kms en algunas partes del mundo son como varias semanas, aunque en al mapa figure como carretera.
Tambien me pasó lo mismo en USA pero a mi lo que me llamó la atención fue ver que había gran cantidad de personas de 2 metros perfectamente atléticas (sobre todo de raza negra), caminando por la calle y no eran marcianos.
Me sentí como Alfredo Landa.
Es cierto que es «otro mundo».
Recuerdo que eso mismo pensé cuando salí de Yosemite por Tioga Pass camino de Death Valley: «aquí hasta el horizonte es más grande que en casa». Como bien dice, sabes que físicamente eso no es posible, pero la percepción es exactamente tal y como la describe.
Lo mismo le pasa a los americanos que vienen aqui, pero al revés. Tardé un par de horas en quitar de la cabeza a un yankee que su pretensión de viajar de madrid a roma en coche y en un día no era muy realista :D.
A él le parecía que, mirando al mapa, estaba al lado 😀
A mi me pasa cuando vuelvo de Argentina (Concreso de Psicoanalistas claro !!!) y cuando empiezas a ver España piensas: ¡¡¡ que cosa más pequeña, todo del mismo color, marroncito, seco… !!! claro, eso depués de ver la tierra de fuego, calafate, las cataratas de iguazú y ver paisajes diferentes… España está seca seca eh !!!! ¿Tan desvirtuados están los mapas?: http://www.marilink.net/2010/10/12/el-verdadero-tamano-de-africa/
Lo que marca la diferencia de las llanuras entre EE.UU y España por poner un ejemplo son los detalles del decorado.
En nuestro país, aunque lejos se verá una casa, una gasolinera, un pequeño pueblo, una fábrica perdida en la lejania, catenarias de tren,elementos que indican existencia de vida humana.
En EE.UU. quitando la carretera y sus señales, puedes perder la vista a lo lejos y no ver rastros de civilización. Únicamente rocas, montañas, desierto o praderas, kilómetros después quizás se perciba un largo trén de mercancias con cincuenta o más vagones tirado por dos máquinas diesel, pero nada más. Es esta diferencia lo que más llama la atención.
Ráfagas, GTO.
@Para esto último que Vd. dice creo que «lo más» es Australia.
Nunca he estado allí.
Africa también tiene buenas extensiones infinitas de terreno. Las vistas del Kilimanjaro desde Amboseli en un día despejado son bastante «chulas» 🙂
Si España está en miniatura… ¿como está Japón?
JC
La idea de escala, se la escuché por primera vez a mi padre al regreso de su primer viaje de trabajo a los EEUU, tendría yo unos diez años, mientras comentaba sus impresiones del país: » Las montañas, los ríos, los coches, las personas, las carreteras, las vallas publicitarias, todo allí es grande. Aquí es lo mismo, pero en pequeñito».
Al cabo de casi veinte años, lo comprobé personalmente….¡seguía siendo todo grande!. Tuve la oportunidad de ver desde el avión la visión del Mississippi desbordado, ¿se lo imagina?, inabarcable, parecía un mar. A su lado, nuestro Ebro, un riachuelo.
Por cierto, cuando he visto la foto de Lone Pine. Diaz Lake, pensaba que estaba viendo el Cráter del Ngorongoro ( ¡tengo una foto casi idéntica!) en Tanzania. Y, para inmensidad, en ese mismo país, el Parque Nacional de Serengeti, que en lengua swahili quiere decir precisamente, llanura infinita.
En fin, que España es una «maqueta» ( nuestra y adorable) al lado de esos parajes.
Al viajar por España comprobamos que es cierto.. es un país de escala, los panoramas que ofrecen los paseos por lugares como Granada y Lugo son envidiables! La gente, la comida y música hace de España un país que se debe visitar al menos una vez en la vida!
Sea donde sea a mi me gusta disfrutar del paisaje mientras conduzco. Es una sensación de libertad inigualable! En vacaciones siempre alquilamos un coche. Además, si buscas hay ofertas interesantes para alquilar en empresas conocidas como Europcar. Tienen un 5% de descuento publicado en una web de promociones de primeras marcas que se llama memimo. Un saludo!