Entiendo perfectamente el cabreo de Esperanza Aguirre. Entiendo perfectamente el arrebato, la reacción instantánea, las ganas de irse, de dejar plantados a esos policías, tantas veces chulitos, que se demoran en la detención, que se regodean con la pérdida de tiempo a la que te someten. Entiendo a Esperanza Aguirre. Yo he tenido muchas veces las mismas ganas de marcharme. «Y si arranco y me voy, ¿qué?», he pensado tantas veces.
Hay una diferencia. Nunca me he ido.
Para quienes no lo sepan a estas alturas, Esperanza Aguirre tuvo ayer un altercado con agentes de la autoridad madrileños, en plena Gran Vía. Por lo que leo, Aguirre realizó ayer declaraciones en prácticamente todas las cadenas de radio y televisión y diferentes versiones de la noticia inundan internet. Una mínima búsqueda les permite encontrarlo.
Hace más o menos un mes, unos agentes de la autoridad madrileños me pararon, cerca de las doce de la noche, cuando iba camino de casa después de una cena con unos amigos. Nada personal. Paraban a todas las motos por lo que pude ver durante los más de 20 minutos que me tuvieron retenido. Su lentitud exasperante y su actitud, entre chulesca y paternalista, invitaba a desencadenar la tercera guerra mundial. Ni siquiera me hicieron soplar. Era un control rutinario, lento, tedioso, ineficiente. Si llego a tener una metralleta cometo un acto vandálico, sin la menor duda.
Pero no. Aguanté pacientemente, no puse ni una mala cara (bueno, casi) y cuando me dieron paso para irme, me fui.
Entiendo a Esperanza Aguirre, pero su actitud es indefendible y reprobable. Esa chulería, todavía mayor que la de los agentes, da la razón a Ignacio Escolar en este artículo que se titula «Aguirre, a la fuga» cuando escribe:
«Este suceso relata (…) la evidente falta de consideración por la ley, por la autoridad, por los funcionarios, por todos los ciudadanos a los que ha representado y que no se pueden permitir estos excesos sin que se les caiga el pelo. El cinismo de alguien que da lecciones sobre la nación, la libertad y el respeto a la policía mientras se aplica este cuento. La falta de pudor. La prepotencia. La sensación de impunidad que se tiene que tener para actuar así y salir luego a explicarlo, culpando encima a los agentes por la «bronquita», sin que se te caiga la cara de vergüenza.»
Todo esto que escribe Ignacio Escolar es cierto. Es vergonzoso y execrable que nuestros políticos se comporten como si el país fuera suyo, como si todo estuviera permitido para ellos, porque son inmunes a los castigos que prevé la ley, porque todo vale y si un juzgado les condena serán indultados. Como si la ley que ellos redactan y aprueban sólo fuera una herramienta para tener atenazada y controlada al resto de la población.
Yo entiendo a Esperanza Aguirre, pero ni la justifico ni la disculpo y espero (me gustaría tener capacidad para exigir) que se le aplique la ley de forma estricta, igual a como se hubiera aplicado a cualquier otro ciudadano.
P.D. ¿Qué les pasa a los del PP de Madrid con los coches? ¿En cuántos líos se han visto envueltos por conducir borrachos, por pérdida total de los puntos y accidentes posteriores con fallecidos mientras conducen sin carnet, por accidentes en las calles de Madrid por exceso de alcoholemia? Es muy extraño que estos señores que nos gobiernan tengan tantos incidentes relacionados con el automóvil. Quizá sea una cuestión de actitud. Porque al volante (ahora voy a ser yo paternalista, como los agentes de la autoridad) la humildad es la vida.
Muy mal por la Aguirre.
Pero, por otra parte, ¿tiene un Toyota Verso? Un monovoumen generalista de más o menos 20 mil euros…
Para ser una política de nivel que es, me parece un coche notablemente humilde. No defenderé la actitud incorrecta de esta señora (primero, por aparcar en un carril bus, esto por sí sólo ya es impresentable, y luego, por lo otro, aún peor).
Pero hay un par de detalles que me despiertan simpatía:
Eso de ir ella corriendo al cajero mientras tiene mal aparcado su monovolumen generalista con los warning puestos… me parece tan de «persona de a calle»…. que lo encuentro hasta entrañable.
Uno se imagina que un cargo así, mandaría al guardaespaldas mientras espera en su coche oficial charlando con su chófer en un A8 hipermotorizado (posiblemente pudiera tener derecho a ello como ex-presidenta y ex-alcaldesa)…
Vamos, creo que, aunque sea bastante chulapa (muy bueno ayer Buenafuente diciendo que Esperanza Aguirre siempre habla cantando un chotis), demuestra cierta humildad.
Pese a bochorno, para mí, esta señora ha ganado puntos y mi simpatía.
Por algo tan sencillo como no hacer uso de los privilegios, por no tener cargos que pudiera tener. Por aparcar mal un humide Toyota, poner los warning, salir corriendo al cajero… como cualquier ciudadano, sin mandar al guardaespaldas, sin chófer, sin Audi blindado.
En este caso, como en muchos otros hay que estar al detalle. Y el detalle es que no eran policías municipales los que retuvieron a Aguirre, sino agentes de movilidad, que son funcionarios, pero no autoridad pública. Este detalle es importante porque los agentes de movilidad de Madrid no pueden ni obligarte a parar ni retenerte y lo más que pueden hacer es tomar tus datos o tu matricula para interponer una denuncia. En resumen: ella podía irse cuando le diera la gana.
Su error fue rozar y tirar al suelo la moto de uno de los agentes (que estaba parada enfrente de su coche cortándole el paso) al arrancar.
Eso si: la mayoría de los titulares que he leído ayer y hoy no cuentan esto, sino que se dio a la fuga y arrolló a un policía. No sé si todos esto debería darle más vergüenza a Aguirre o a la «prensa» de este país.
Perdon que le corrija, pero ha escrito mal una frase:
«Como si la ley que ellos redactan y aprueban sólo fuera una herramienta para tener atenazada y controlada al resto de la población.»
debería de decir:
«La ley que ellos redactan y aprueban sólo es una herramienta para tener atenazada y controlada al resto de la población.»
Ni mas ni menos que la misma impunidad (aunque éste ya en grado superlativo) que disfruta nuestro loado y bienamado monarca. «Como se que soy intocable, me lo paso todo por el forro de los cojones».
Y uso «cojones» porque está en el diccionario y porque representa muy bien como piensan y lo que les importamos.
Cómo nos gusta la literatura; qué ganar puntos ni qué ganar nada. Menuda novela. Esta señora ya no tiene Audi A8 blindado.
Lo que tendría que haber hecho es, en vez de pasar por encima de la moto, quejarse públicamente de lo que se tuviera que quejar, en respuesta a la noticia segura de su multa, haciéndonos un favor a todos los que nos hemos sentido igual (pero que no hemos actuado igual) y como primer paso a tomar diligencias para cambiar estas cositas.
Lo llaman política y lo llaman representar al ciudadano. Y en este caso no se han cumplido ninguna de las dos cosas.
Ya basta.
Bravo Borja O. por fin alguien se para a pensar un poco y no se centra simplemente en atizar a Aguirre (o el PP que ya que nos ponemos siempre podemos soltar una perlita del PP) o aplaudirla cual fan incodicional.
Yo quiero leer lo que dicen la denuncia de los agentes de movilidad -si es que finalmente la interponen-, quiero saber que van a contar los guardaespaldas de esta Sra, y finalmente me gustaría saber como se han sabido todos estos detalles de forma tan prolija, no la versión que ha dado esta señora sino la otra.
además, esa zona está probablemente plagada de cámaras de vídeo, supongo que tarde o temprano saldrán las grabaciones.
A mí lo que más me sorprende, es ver que hay gente que hilando muy fino, intenta justificar la actitud de ésta señora, por ser quién es (y a dónde pertenece) y pese a decir que no la justifica. Este lavado de cara de los acólitos, es de vergüenza. Se ríen de nosotros y todavía hay quien se pone de su lado.
Esta señora que ha demostrado ser una demagoga y una prepotente, simplemente se ha visto ofendida por creerse intocable y ha apelado al «usted no sabe con quién está hablando». Ni ha recaído en que un agente de movilidad no puede detenerlo para irse (a no ser los supuestos que permite la Ley de enjuiciamiento Criminal para cualquier ciudadano y el irse tirando una moto y tal vez poniendo en riesgo la vida de los agentes es delito y por tanto motivo según el art. 490), ni lo ha pensado. Ha actuado así porque se cree una casta superior. La sarta de memeces que ha ido soltando desde ayer, añadiendo y quitando datos, el sacar a su anterior asesor de imagen a que envuelva en márketing la realidad del acontecimiento, sólo hace confirmar la gravedad del hecho y la calaña de la lideresa.
Quien además ejerce día sí y día también de epítome de la moralidad y ejemplo ciudadano, luz, guía y espejo de los españoles, merece una reprobación especial.
Creo, Borja O, que está usted equivocado. Que si esgrime usted la ordenanza al respecto y me saca loss colores, no tendré reparo en aceptarlo, pero a mí me parece recordar que el cuerpo de Agentes de Movilidad se creo ad hoc como agentes de la autoridad, dado que el Ayuntamiento contaba con sentencias en contra dado que los antiguos vigilantes de la ORA eran jubiladetes de la EMT, sin consideración por el forro de agente de la autoridad y por tanto sus sanciones nulas de pleno derecho.
Otra cosa es que parezcan seleccionarlos entre los suspensos más irredentos de la ESO.
En respuesta a CURVONE: tiene Ud. razón; los Agentes de Movilidad de Madrid SÍ son agentes de autoridad, pero NO son Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado.
Su autoridad en esta materia se limita a: «El encauzamiento de la circulación rodada y peatonal, la vigilancia de los estacionamientos públicos e intersecciones viales y los demás cometidos que tiendan a dar fluidez y seguridad al tráfico.»
Entiendo pues que la diferencia práctica a estos efectos con un policía municipal es que éste puede retenerte para identificarte (ni un minuto más) mientras que el agente de movilidad puede darte indicaciones en materia de tráfico que debes obedecer, pero no puede retenerte.
Algunos me critican por mi post.
Sin embargo, Fraga, tuvo coche oficial (audi blindado) hasta el final, pese a ser ex-presidente de Galicia. Rodriguez Ibarra se mueve en un coche oficial con chófer (rodriguez Ibarra tiene asignados un Audi A8, un A6, y un 407, con chófer).
(mira, uno de cada).
Por lo tanto, pese a la situación «rara», me parece de una sorprendente humildad, que esta tipa, con su pasado político, se mueva en un coche del montón, sin chófer, ni guardaespaldas, ni nada.
Repito, a mí, esto, me ha caído simpático. Y para mí, ha ganado enteros como persona a la que admirar.
Aunque me parezca fatal aparcar en un carril bus.
(de todos modos, una vez puesta la multa, ¿porqué te retiene la policía? ¿vemos correcto que la policía retenga en general a quien comete una infracción? ¿es que no es suficiente con la multa?).
Supongo que los antipperos y antippsoeros en general, verán bien que se retenga, que se detenga, o hasta que se le pegue con una porra en el colodrillo (esto os pondría tontorrones, eh, pillines?). Pero yo no veo muy allá, que una vez puesta la multa, te retengan porque sí. A mí no me gustaría que, por una multa de aparcamiento, además de la multa, como castigo extra, me inmovilizaran el vehículo y me dejaran retenido durante al menos 15 minutos.
@BorjaO: Tras la lectura del parte publicado por la Policía Municipal, entiendo que los Agentes de Movilidad tienen la potestad de iniciar procedimientos sancionadores y recabar la información necesaria para ello. Ignoro si tal potestad incluye la capacidad de retener infractores (que lo dudo) o si deben para ello solicitar la colaboración de la Policia Municipal.
Saludos
Bueno, ya se han tomado medidas para que en el futuro #AguirreALaFuga no pueda volver a invadir ningún carril BUS (pagándolo ella de su bolsillo, claro).
Con vds. «el bus que se comía a los automóviles»:
http://youtu.be/uO5asUTbCR0
Señor emprendeitor, no se equivoque ud. Que ayer cazaran a esta señora en su vehículo particular no quiere decir que no disponga ni haga uso de coche oficial.
Señor Borja O., como ud. bien dice los Agentes de Movilidad no tendrán potestad para retener a nadie, pero si la Policia Municipal que posteriormente le dió el alto tras derribar una moto y de la que hizo caso omiso.
Sin tener ningún interés en partidísmos ni colores políticos, la actitud de la señora Aguirre en este asunto me parece suficiente motivo para que abandone su carrera política. Esta es la gente que nos representa y así nos va.
A trazo grueso, la derecha predica la libertad, el individualismo, el distinguirse a cualquier precio, etc, etc, el coche es el simbolo de ese anhelo, normal que cueste ceñirse a las normas de convivencia que promulga esa terrible entidad alienigena que es el estado. ¿Quien me tiene que decir a mi cuantas copas he de beber?
Aguirre es el ejemplo, casi la caricatura, del descredito de los politicos españistanis. Valiente en las tertulias organizadas por los amigotes pero cagada cuando el peligro es real, liberal pata negra pero aristocrata, y critica de mamandurrias despues de toda la vida viviendo de lo publico, ella y su entorno. Todo regado, que digo, anegado, de un populismo de tercera mano, de nivel gamba rebozada y palillo en los dientes, para entendernos, que le ha permitido arrasar eleccion tras elección, señal inequivoca de que representa a la perfeccion a sus votantes.
Lo mas divertido del caso, los efectos colaterales, a saber:
one, l@s chavalill@s de NNGG Madrizzz en tromba a defender a su lideresa. Lamer culos es el activo mas importante a la hora de hacer carrera, estos chicos estan bien adiestrados.
two, la reacción del resto del partido, mas bien tibia. Calladitos pero a esto de decir jodete, Aguirre parece acabada dentro del PP, o sea, acabada a secas
@12 Emprendeitor, tenga cuidado, creo que losantos o pedrojota se le han colado en casa, seguramente mientras usted estaba cagando, y han escrito desde su PC un panegirico tipo esto esta mu mal pero es que…
Cuando me han puesto una multa por mal aparcamiento, me han retenido lo justo para comprobar seguro, papeles, etc. Claro que yo no les he intentado explicar quien soy yo ni me da miedo la foto pillado en falta, en esas circunstancias entiendo que los minutos parecen horas
Ya que me pongo:
http://politikon.es/2014/04/04/aguirre-y-las-multas-de-trafico-en-perspectiva-comparada/
Pues a mi me parece que el problema comienza mucho antes.
Desde que el honorable Blesa se infiltró en Caja Madrid, el servicio a domicilio para Dña Esperanza Aguirre y Gil de Biezma, funciona fatal.
Esto hace que la miss haya de salir al cajero público (por diosss, ya está bien) y perjudicarse las manos y perder su preciosísimo tiempo en detraer de la pared unos míserables doblones.
Y el engorro de las claves y los números pines.
Sr, Cajero: no sabe vd. quién soy yo!!
Los de izquierdas son exactamente igual solo que en lugar de Toyotos van en Range Rover
Cayenne (mientras dure).
No se han visto en otra.
Sera para tanto???
Gracias por el enlace. Conocía la historia, pero rememorarla me siente bien.
#1 emprendeitor
Sinceramente; usted tiene síndrome de Escocolmo y ceguera seria.
No hay más ciego que el que no quiere ver.
Moltó brillante al igual que Escolar en su artículo.