Hace unos meses estuve en la azotea de la factoría de Lingotto. En la pista de pruebas. Siempre quise subir y nunca había tenido la oportunidad. Esta vez tuve suerte. Subí en coche y grabé en video la rampa de subida y la llegada a la azotea. Son más de dos minutos, el tiempo que se emplea en subir la rampa. A mí me vale la pena ver cada columna.
Todo me parecía digno de ser fotografiado para el reportaje. La curva desde lejos.
Desde cerca.
Desde el suelo. Bajo mis pies se fabricaron millones de coches. Los probaban en esta pista. Pasaban por este asfalto, por encima de la cámara.
Hubiera dado mi cámara de fotos por dar una vuelta a la pista. A diez por hora. Imposible. Las bolas sobre el suelo impiden el paso. Desde la azotea se ve Turín. Pero no sólo.
La pinacoteca de la familia Agnelli.
La cúpula del antiguo despacho de Agnelli, hoy reconvertido en restaurante:
El edificio de oficinas, al lado de la fábrica,
Y la zona de las oficinas del jefe. Sergio Marchione.
¿Que tendrán los italianos que suelen tener tan buen gusto en el diseño?
Recientemente me enteré que en Buenos Aires existió un edificio que sirvió de fabrica de Chrysler y en su azotea tambien tenia una pista, hoy me entero de este otro edificio y me pregunto si era una practica común, y las razones para hacer eso en un momento en que la tierra no era tan cara y hacer una pista a nivel del piso no sería un gasto demasiado excesivo.
El edificio de Buenos Aires, hoy está dentro una zona de gran valor inmobiliario y fue convertido en apartamentos (pisos, en españa).
Saludos.
Una pasada. Sería una buena forma de ahorrar espacio, aunque los accidentes seguramente era de aúpa.
Recordad los MINI y los Alfa en la película original «The Italian Job» corriendo por esa azotea.
Tremendo edificio, una joya. Con la fabricación ascendente en espiral terminando construidos los vehículos en la pista de pruebas de la azotea. Más si pensamos que fue terminado en los años 20. Acabo de buscar el dato y era en su época la más grande fábrica de coches después de la de Ford.
Del del 2005 al 2006 estuve viviendo en Turín, y durante ese año visité un buen puñado de veces el Lingotto y su circuito peraltado.
La primera mitad del año la visita era fácil porque la rampa por la que usted subió estaba abierta (aunque no al tráfico) y si no siempre podías colarte desde alguna de las salidas de incendio del centro comercial en el que se ha convertido la antigua fábrica.
Con la llegada de 2006 el acceso se fue poniendo difícil porque llegaron las olimpiadas de invierno y el Lingotto era una de las sedes para los voluntarios y deportistas.
En abril vino a visitarme un amigo, y le llevé a visitar el edificio.
Cuál fue nuestra sorpresa cuando a medida que subíamos por la rampa nos adelantó un Delta Integrale, y al llegar a la pista superior nos encontramos una reunión del Club Lancia que conmemoraba el centenario de la marca. Un par de decenas de Integrales, de todas las versiones y colores, aparcados delante de un bar improvisado, nos esperaban mientras unos camareros servían prosecco. Nos tomamos unas copichuelas a la salud del buen, viejo Delta.
Efectivamente, como dice Dethkarz, la cadena de montaje comenzaba en la planta baja, montando las ruedas y los ejes a un precario chasis para que se pudiese avanzar rodando, a lo largo de los 500 metros de edificio, hasta la rampa que llevaba al piso imediatamente superior, y así hasta llegar a la pista peraltada, donde se probaba el coche un par de vueltas para comprobar que todo funcionaba y bajarlo de nuevo a la calle, para subirlo a los trenes que paraban al lado de la fábrica y de ahí distribuír los coches al resto de Italia.
No se si se fijó en las vigas y nervios de la rampa, pero son una maravilla. Tanto el cuidado con que están ejecutados como su disposición, similar a los nervios de refuerzo de muchas cajas de cambio y bloques de los motores.
Un saludo.
Hola Pelícano,
No me fijé en nada en la rampa porque iba con la cámara de video, sujeta con las manos, dentro de un coche, y lo único que miraba era la pantalla de la cámara para intentar que no se moviera el encuadre. (Lo conseguí sólo a medias).
La bajada también la grabé. Luego me di cuenta de que no tenía sentido publicarla.
A ver si luego tengo tiempo y consigo unas fotos que tengo en otro ordenador y las pongo por aquí.
Saludos.