Como contamos en la entrada anterior, el primer incidente no se hizo esperar. El Clio (#cliokm77 en twitter) sufrió daños en la carrocería pero no de importancia. La parte frontal izquierda del paragolpes quedó ligeramente rajada y hundida, y la puerta posterior izquierda con dos surcos más o menos profundos.
A simple vista no parecía nada importante, pero nos cabía la duda si los bajos de la carrocería se vieron afectados en alguna medida. Con esa intención acudimos al taller de BricarBox de Alcalá de Henares. Es un lugar donde, además de servicios de mecánica como en cualquier otro taller, hay alquiler de puestos de trabajo que pueden ser con o sin elevador.
Allí advertimos que la pieza de plástico que cubre el paso de la rueda delantera izquierda tenía una raja de formas irregulares de varios centímetros de longitud. No observamos ningún otro daño.
Aprovechamos que teníamos el coche subido en el elevador para hacer fotos de la parte inferior de la carrocería al completo. La mayor parte de la superficie inferior de la carrocería está carenada. La excepción es la parte central —que va recorrida por el tubo de escape— y la parte posterior a la altura del eje trasero. El Renault Captur tiene una cobertura inferior similar, si no igual.
La cita en este taller la fijamos por teléfono. Es un taller de aspecto bastante sencillo y el trato fue correcto. El personal se encargó indicarnos las maniobras necesarias para colocar el coche junto al elevador de la manera más adecuada, a continuación colocó cada una de sus cuatro patas bajo la carrocería y comprobó que el coche estuviera bien asegurado. Durante nuestro trabajo, cada vez que requerimos ayuda (por ejemplo, les pedimos un trozo de papel, un producto limpiador y usar un compresor de aire) la atención fue satisfactoria.
El precio por el uso del box y el elevador fue 12,27 euros con IVA, para un tiempo de utilización de 46 minutos.