El último coche con el que hemos realizado la maniobra de esquiva y eslalon es el Škoda Kodiaq. Se trata de un SUV de tamaño grande (4,76 metros de longitud) orientado a la practicidad y facilidad de uso. Puede tener hasta 7 plazas, aunque los dos asientos adicionales ofrecen poco espacio.
La versión que hemos probado ha sido la que recibe el nombre comercial de 1.5 TSI mHEV 150 CV DSG. Es decir, su motor de gasolina va asociado a un sistema de hibridación ligera, el cambio de marchas es automático y la tracción a las ruedas delanteras. Esta combinación nos ha parecido muy buena. El consumo de gasolina es muy moderado, la suavidad de funcionamiento notable y la capacidad de aceleración totalmente suficiente.
Nuestra unidad de pruebas tenía opciones que conviene citar porque afectan a las cualidades dinámicas: ruedas de 20 pulgadas (neumáticos 235/45 R20) y la amortiguación adaptativa con varios niveles de dureza que Škoda ofrece junto con la Dirección dinámica.
Hemos hecho pruebas tanto con la suspensión ajustada en modo Comfort y Sport. En ambos casos las reacciones del coche han sido muy buenas, aunque en el modo Sport es como hemos conseguido los mejores resultados. En todo caso, nos ha resultado muy fácil e intuitivo de conducir.
Os dejamos ya con el vídeo donde hay más detalles. Esperamos que os guste:
Quique siempre top como siempre