Hyundai i20 N
El coche más interesante para Enrique Calle:
Me gusta porque siempre he sentido debilidad por los coches pequeños, potentes y relativamente sencillos.
Durante 2021 he conducido muchos coches nuevos. Los ha habido casi de todo tipo y precio, aunque no me quedo ni con los más potentes, ni con los más caros. Posiblemente, el que más ilusión me ha hecho ha sido el Hyundai i20 N.
Me parece llamativo y muy atrevido que, en los tiempos que corren, Hyundai haya lanzado un coche que no ha tenido hasta el momento: el deportivo de bolsillo. Y lo ha hecho a contracorriente, ya que otros fabricantes los han dejado de lado ya que no acaban de cuadrar con las tendencias del mercado, ni con los límites de contaminación.
Hyundai explicó en la rueda de prensa del i20 N, no sin vanidad, que se puede permitir un coche así (que ni gasta poco, ni tiene hibridación de ningún tipo) ya que dispone de suficientes modelos híbridos y eléctricos en su gama que ayudan a rebajar la media de emisiones. Puede que sea verdad, al menos en parte. Volkswagen también tiene en su gama un Volkswagen Polo GTI, si bien es un modelo que lo lleva vendiendo muchos años.
Pero el Hyundai i20 N no me gusta porque haya llegado en un momento difícil donde parece que sólo lo teóricamente ecológico tiene cabida. Me gusta porque siempre he sentido debilidad por los coches pequeños, potentes y relativamente sencillos.
Para mi forma de entender la conducción, la clave del disfrute al volante está en el equilibrio. El i20 N tiene potencia más que de sobra para ir deprisa si así se desea y un chasis que te informa lo suficiente de lo que está pasando y de lo que puede pasar. La carrocería tiene el tamaño justo: ni demasiado pequeña (en su interior viajan bien cuatro ocupantes), ni demasiado grande para las carreteras más estrechas. El cambio de marchas es manual y dispone de una función (RevMatching, desconectable) que suaviza las reducciones y hace por ti el punta-tacón. Esta función viene al pelo, porque a veces uno se puede atropollar cuando llega a una curva y no ha hecho los deberes a tiempo.
El i20 N es, en definitiva, un coche que te invita a desplazarse por las vías retorcidas de segundo orden por un precio similar al de otros coches más prácticos, algo más cómodos, pero infinitivamente más aburridos.
DS 9
El coche más interesante para Pablo D. González:
Porque me da pena. Es un tipo de vehículo en decadencia.
Siempre me han llamado la atención las grandes berlinas francesas. Modelos como el Renault Safrane, el Peugeot 607 y el Citroën XM por citar tres ejemplos. Fueron coches que salieron al mercado sabiéndose perdedores en su batalla con los alemanes. Sus fabricantes lo intentaron durante numerosos años, arriesgando en algunos casos con el diseño y en otros atiborrándolos de equipamiento, pero no hubo manera.
Hoy tenemos al Citroën C5 X, un turismo raro que a punto estuve de escoger como mi coche del año, pero creo que el DS 9 es el mejor representante actual de aquella época pasada. O por lo menos uno que me gusta más. Otro candidato que tenía en mente era el Citroën AMI, que algunos ni siquiera lo llaman coche, pero que me marcó como pocos.
¿Por qué he elegido al DS 9 como mi coche de 2021? Porque me da pena. Es un tipo de vehículo en decadencia. No sé si habrá alguien por ahí con el arrojo suficiente para intercambiar 55 000 euros por un un gran turismo (francés) de cuatro puertas. Y mira que me gusta ese tipo de carrocería. No odio los SUV, pero tienen algo que me hace bostezar al mismo instante de subirme en ellos. Tampoco tengo nada en contra de las berlinas de cinco puertas, pero el perfil que suelen tener las de cuatro me parece más esbelto. Y luego el DS 9 tiene un aspecto que puede parecer más o menos acertado, pero que está engalanado con una serie de detalles de diseño que le dan una personalidad diferente.
Por ejemplo, en cada faro hay tres proyectores que rotan 180 grados sobre sí mismo, haciendo una animación que recuerda al de un expositor giratorio de una joyería revelando la joya que oculta. Las luces diurnas son una sucesión vertical de rayas y puntos, y recorriendo longitudinalmente el centro del capó hay un listón cromado que lleva un elegante grabado.
Más cosas. Hay unas luces de posición de color naranja en lo alto de los pilares traseros, la tercera luz de freno casi se extiende de un lado a otro de la luneta y los pilotos con efecto joya son, cuanto menos, llamativos.
No todo es estética. En el DS 9 también hay tecnología avanzada, como el sistema DS ACTIVE SCAN SUSPENSION, que mediante una cámara va leyendo los baches de la calzada y preparando los amortiguadores para absorberlos con la mayor suavidad posible. Es cierto que no es un sistema tan avanzado como el que utiliza Mercedes-Benz y Rolls-Royce, pues estos involucran también a los muelles, que son neumáticos (metálicos en el DS), pero oye, que no hay más marcas que equipen algo parecido.
La guinda del pastel la pone la versión con tracción total de 360 CV. Falla en que la potencia no proviene de un V6, sino de un sistema de impulsión híbrido enchufable con un motor de combustión de cuatro cilindros. Nadie es perfecto. Aunque si como dice el fabricante consigue acelerar de 0 a 100 km/h en 5,6 segundos, no será mucho más lento que mi añorado Audi S8 con su enorme V8 de 4,2 litros y también 360 CV. Más que suficiente.
Y a pesar de todo, el DS 9 es una nueva entrada en la lista de berlinas francesas abocadas al fracaso antes de nacer. Al menos en Europa (dejemos de un lado a Francia), porque en China, que es donde se fabrica, a lo mejor tiene más éxito. Allí gustan las berlinas largas.
¡Feliz año nuevo 2022!
Ford F150 Lightning
El coche más interesante para Alfonso Herrero:
Sirve para trabajar en vez de para presumir frente al vecino.
Bien es cierto que mi cabeza cada vez recuerda peor (mis neuronas deben estar muriendo al mismo ritmo que aumenta la presbicia), pero hay un coche, y sólo uno, que recuerdo especialmente de este 2021: el Ford F150 Lightning (lightning es relámpago en inglés).
Su diseño es como el del resto de las F150, nada que ver con el horroroso, extravagante, madmaxiano y, sin duda, diferenciador aspecto del Tesla Cybertruck. El sistema eléctrico propulsor no es exageradamente potente en términos relativos —571 CV en el mejor de los casos; una cifra lejana a los mil que anuncia el GMC Hummer EV y cifra a la que seguramente se acercará, por debajo o por arriba, el Cybertruck—, ni cuenta con funciones innovadoras —como el modo de avance en diagonal del Hummer—, ni su batería es tan enorme como la de, por ejemplo, el Rivian R1T —nada menos que 135 kWh—.
En resumen, el Ford F150 Lightning no tiene nada de nuevo comparado con las otras pick-up eléctricas que se pueden o se podrán comprar próximamente en algunos países.
Su carrocería es como la de cualquier otro F150. Ford no ha canjeado utilidad por diseño llamativo. Sí la ha hecho de aluminio y, por primera vez en la historia, la F150 tiene suspensión independiente. También se ha acabado el problema de dónde meter el equipaje en una pick-up si no quieres que se ensucie o te lo roben: bajo el capó delantero hay un maletero generoso porque ya no es necesario meter ahí un motor de seis u ocho cilindros.
La batería se usa, además de para mover al «relámpago», para suministrar energía a uno de los ¡¡11 enchufes!! que hay repartidos por el coche. Puedes conectar un taladro, una lámpara, un compresor, un microondas, cargar una bicicleta eléctrica o enchufar el cortacésped, eso sí, con un cable bien largo si tienes que dejar bonita toda la pradera del rancho.
Llegados a este punto, supongo que os estaréis preguntado ¿y por qué el F150 Lightning es el coche que más te ha llamado la atención de 2021? Yo también me lo estoy preguntado, creo que es por lo siguiente: por un lado, porque disfruto más conduciendo por el campo que por el asfalto; por otro, porque los coches grandes me gustan y el F150 sin duda lo es. Y finalmente, porque dentro del brutalismo que impera entre el cuarteto de pick-up eléctricas mencionadas es la única pensada para ser usada tal y cómo yo concibo una pick-up: sirve para trabajar en vez de para presumir frente al vecino.
Peugeot 308
El coche más interesante para Carlos Fernández:
Me ha defraudado por su ergonomía imposible. No me gustaría tenerlo en mi garaje.
A riesgo de quedar como el cascarrabias del grupo, he decidido hablar sobre el coche que menos me gustaría tener de entre todos los que he conducido en 2021. Supe que el nuevo Peugeot 308 tendría este peculiar honor en el mismo momento en que me bajé de él tras una prueba de conducción por los atascados alrededores de Niza. Es muy extraño que a mí no me apetezca conducir un coche, el que sea, o que tenga ganas de soltar un volante. Aquel día me pasó y les voy a explicar por qué.
Lo interesante es que el 308 no es mal coche. Mucha gente lo comprará y no tendré motivos para argumentar que se han equivocado porque probablemente no lo hayan hecho. Tiene un chasis que ya lo quisieran muchos de sus rivales, con una suspensión equilibrada y eficaz. Además, es cómodo porque rueda con suavidad y está bien aislado de la mayoría de ruidos exteriores.
Pero es ahí, más o menos, donde acaban sus virtudes y empiezan a molestar (a mí al menos me molestan) una serie de ideas peregrinas que se vienen cocinando desde hace algún tiempo, con cada vez más condimentos, en el departamento de diseño de Peugeot. Su receta consiste en crear el habitáculo de aspecto más rompedor con el único objetivo de impresionar a los posibles compradores.
Esta apuesta radical por el diseño sobre la función hace que en el 308 yo me sienta desarropado, perdido e incómodo. Me lleva pasando lo mismo en otros modelos de Peugeot desde hace años, pero yo confiaba en que, al introducir un modelo de nueva generación, habrían pulido el concepto que persiguen y que la ergonomía se habría cuidado un poco. Nada más lejos de la realidad: lo que ya era controvertido, ahora lo es todavía más.
Por mucho que me cuenten lo bien que funciona el pequeño volante, al agarrarlo me siento como si condujera un coche de juguete, y por mucho que me cuenten lo buena idea que es la instrumentación i cockpit, yo ni siquiera puedo verla porque entre ella y mis ojos inevitablemente está el volante, aunque lo coloque muy abajo, casi entre mis piernas. La propia instrumentación es un festival de datos mal colocados y animaciones largas y desquiciantes que ocupan la pantalla cada vez que se pulsa alguno de los botones de control.
Imagino que buscando un efecto deportivo, Peugeot ha diseñado una consola central anchísima que consigue hacerte sentir encajonado (esto puede resultarle agradable a algunos; a mí no me disgusta), pero que, en última instancia, reduce mucho el hueco que queda para las piernas, hasta el punto de que no hay una plataforma suficientemente grande para descansar el pie izquierdo y el acelerador queda demasiado cerca de la pared derecha. Yo voy con el cuerpo un poco retorcido, con las piernas en tensión y no consigo sentirme a gusto y relajado. Tampoco van a gusto los pasajeros traseros, que siguen teniendo muy poco espacio a pesar de que ahora la distancia entre ejes es mayor que en el modelo precedente.
Tras un rato de lidiar con estas cosas (y algunas otras que no hay tiempo de contar aquí) no pude evitar sentirme defraudado. ¿Cómo alguien ha concebido un coche tan poco práctico? ¿Estaban tan centrados en darle al interior ese aire futurista que se han olvidado de todo lo demás? En mi día a día este coche sería un incordio, sin lugar a dudas. Yo compraría otro más honesto, en un sentido amplio de la palabra.
Es cierto que Peugeot y el resto de fabricantes franceses nos tienen acostumbrados, desde siempre, a ideas rompedoras. Algunos de sus modelos (a todos se nos ocurren rápidamente los más míticos) han quedado en el imaginario colectivo entre los más geniales jamás fabricados. El diseño atrevido es una característica habitual de esos coches, pero todos serán recordados por algo más, ya sean soluciones técnicas innovadoras o conceptos inéditos. Sospecho que el nuevo 308 nunca formará parte de ese club. Lo que resulta impresionante de él no tardará en dejar de serlo y, cuando eso pase, no habrá casi nada que lo haga memorable.
Renault 5 Prototype
El coche más interesante para Fernando Ríos:
La mayoría de ellos han seguido al pie de la letra un patrón común: uno o dos motores (por supuesto eléctricos), xxx kilómetros de autonomía, nivel 2 de conducción autónoma y un sistema multimedia con una pantalla más grande que el televisor del comedor
Si echo la vista atrás, creo que podría nombrar, una a una, las novedades que más me han impactado de los últimos ¿¿20, 30 años?? Y no me refiero únicamente a coches que haya tenido oportunidad de conducir (porque tengo muchos pendientes), sino también aquellos que simplemente han sido presentados y que por el motivo que sea, no han pasado por mis manos.
Sin embargo, este año he de reconocer que dicha tarea me ha resultado mucho más complicada. Pero mucho. Sí, han llegado coches muy llamativos, muy potentes, muy grandes y muy tecnológicos, pero la mayoría de ellos han seguido al pie de la letra un patrón común: uno o dos motores (por supuesto eléctricos), xxx kilómetros de autonomía, nivel 2 de conducción autónoma y un sistema multimedia con una pantalla más grande que el televisor del comedor.
No me considero un «talibán» en el mundo del motor; me gustan muchos coches, tengan motor de combustión o eléctrico, carrocería descapotable o SUV o sean de una o nueve plazas. Pero de un tiempo a esta parte las cosas se han «homogeneizado» hasta tal punto que se han vuelto incluso aburridas. Cuestión de costumbre, supongo, pero de momento me está costando aceptar e incluso entender la rapidez con la que están llegando los cambios a este mundillo que desde niño, me ha fascinado.
Pero como diría Paco Umbral: «yo he venido aquí a hablar de mi libro», o más bien, en este caso, a hablar del coche que más me ha llamado la atención de este 2021. Y si, efectivamente, el elegido es uno eléctrico, tiene una batería y —supongo; no hay imágenes del interior— también pantallas en el habitáculo. Pero se nota que es un coche hecho con cariño y utilizando una fórmula que particularmente me atrae mucho: tomar como punto de partida la imagen de un vehículo popular entrado en años.
Estoy hablando del Renault 5 Prototype, un coche que Renault presentó a inicios de 2021, cuando Filomena estaba pegando duro, y que al menos en la redacción de km77 caló hondo por su originalidad. No es más que un prototipo, sí, pero la esperanza de que llegue al mercado algo parecido me parece muy interesante.
Y me parece interesante por el concepto en sí (coche pequeño, urbano y eléctrico), pero por supuesto y por encima de todo, por el aspecto. Y es que este tipo de fórmulas casi siempre han funcionado bien (véase los Fiat 500 y MINI, unos auténticos bombazos de ventas desde su lanzamiento), pero además creo que son clave para atraer a aquellas personas que se quieren adentrar en el mundillo del coche eléctrico y no lo tienen claro, sea por un motivo u otro. Es decir, que aportan un elemento «pasional» o «nostálgico» adicional en el proceso de compra, elemento que en muchas ocasiones será determinante para dar el paso (somos seres irracionales, al fin y al cabo).
No sé si este coche llegará al mercado o si lo hará con una imagen tan fiel al R5 original, pero creo que lo tiene todo a su favor para ser un auténtico superventas (dentro de un orden; los eléctricos aún son caros). Y sí, me veo en uno, ¿por qué no? Parafraseando a Doc Brown en Regreso al futuro: si tenemos que ir con un coche eléctrico en el futuro, ¿por qué no hacerlo con estilo?
Felices Fiestas, cuídense y que tengan un fabuloso año 2022
Muy bonito artículo, he disfrutado leyendo, gracias por el regalo en el nuevo año 🙂
Feliz año nuevo a todo el equipo de Km77. Os seguiremos leyendo y esperaremos con impaciencia vuestros acertados análisis.
Mi coche más interesante de 2021… la verdad ninguno. A ver si podemos ir dando el salto al hidrógeno ya sea en motor de combustión o en pila. Creo que tenemos que abandonar los coches contaminantes pero también dejarnos de baterías recargables (que contaminan parecido para fabricarse y al final de la vida útil). Me niego a creer que ese sea el futuro de la movilidad.
Hace años que leo sus artículos y disfruto mucho con ellos, por su rigor pero también cuando muestran su lado más humano como en este artículo. Des de Barcelona les deseo muy buen año 2022 a todo el equipo de km77!
Opino como Paco; creo que el futuro debe pasar por el hidrógeno. A ver si en 2022 vemos despegar esta tecnología.
Buena selección de coches interesantes. Yo añadiría el Mazda CX-30
Dices que el DS9, con sus 4.92m, es demasiado largo, pero hay muchos coches más largos. Por ejemplo el Panamera mide 5m, el clase S mide 5.18, el BMW Serie 8 mide 5.08m, el Rolls-Royce Phantom 5.84m, el Lincoln Navigator 5.6m…
Interesante artículo.. Yo también muy fan del R5 prototype… Aunque esperemos a ver que presentan al mercado… Que me he llevado montón de chascos con el paso del prototipo a la realidad.. (Tanto por dentro como por fuera)..
A ver si empieza a aparecer algún eléctico no muy lejos de los 4metros.. y con opción a 4×4… que caramba, nos habían vendido que con los eléctricos sería muy fácil ofrecer la tracción total…
Bonito artículo, voy a discrepar un poco, o mucho con la opinión del Sr. Carlos Fernandez.
He tenido 10 coches en propiedad (una media de 3 años por coche de diferentes marcas y modelos, y Peugeot no patrocina esta opinión.
Estoy repitiendo mi 2º Peugeot con el volante pequeño y la instrumentación por encima. Hoy mi otro coche me parece que tiene un volante de carro. Mido 1,78 y mi pareja mide 1,70 y ambos conducimos este vehículo.
Pues oiga Sr Carlos, los 2 usamos el asiento en la misma altura (3 movimientos de la palanca desde la posición mas baja) y el volante no bajo de todo. En esa posición a pesar de la diferente distancia al volante que necesitamos, ambos vemos las indicaciones del cuadro perfectamente sin necesidad de bajar casi la vista (o la cabeza) mientras conducimos.
Por otro lado el diámetro reducido del volante implica menos manoteo en maniobras de aparcamiento, en mi caso hago perfectamente un giro de volante entero tanto a derecha como a izquierda cogiendo el volante por la zona inferior con una mano. El diámetro ayuda también haciendo que la distancia al cuerpo de la zona inferior y superior del aro del volante sea menor teniendo que estirar y recoger menos los brazos en curva y maniobras. Como si el volante estuviera más vertical digamos.
En los viajes largos la postura de los brazos y hombros me queda mas natural, mas descansada.
Vamos que no será el i-cockpit lo que me eche para atrás en otra compra.
Y repito, hablo de ergonomía, la marca no me paga.
Peugeot ha sacado un 308 con un interior un poco más convencional, le han llamado Opel Astra.
Además tiene un precio más asequible. Aunque para mi, aun le falta algún mando, como los de la climatización.
Pues yo también me quedo con ese R5 eléctrico!
Me parece bonito, y además pinta que no costará lo que un coche «premium» alemán de combustión (espero!!!)
Eso si, todos sabemos que normalmente los prototipos suelen ser preciosos, y por no se que razón, el producto final lo suelen «homogeneizar» y no suele parecerse demasiado al prototipo.
Esperemos que esta vez no pase.
Yo desde luego desearía que su diseño fuese idéntico al prototipo, y por supuesto, que el precio de ese eléctrico fuese por fin mas o menos en línea con el precio medio de compra de vehículo nuevo en España, que ronda los 20.000€ (en línea con el salario medio en España, que también ronda ese importe).
Ante todo feliz año.
Tenemos un 508 de la segunda generación con el cockpit nuevo y mi mujer, que es quien lo conduce, dice que de los 6 coches que hemos tenido para ella es el más sencillo de conducir y maniobrar y eso que es el más grande de todos ellos.
Antes de comprarlo le insistí mucho que lo probase bastante porque había oído hablar de los problemas que les daba a mucha gente. tiendo a pensar que las personas que sobrepasan el metro 80 están más incómodas con ese diseño que las personas que son más bajas. Desde luego para ella, que es baja, le resulta comodísimo y no se le hace grande el coche.
Muito bom artigo, bom ano!
Feliz 2022. Creo que el reportaje y comentarios son excelentes y seguid así porque lo hacéis genial . Un saludo a tod@s.
Sin duda alguna para mí el coche del año es el Mondeo diesel, cuya fabricacion se acaba este año fabricado en Valencia, diseño atemporal elegante y deportivo, maleterazo y rueda de repuesto, máxima fiabilidad y seguridad y equipado al máximo. El último de 30 años de grandes berlinas turbo diesel, con diseños frugales y altas prestaciones, cambio de aceite y mantenimiento sencillisimos.y sí, no nos olvidemos: made in Spain. Bye bye hasta siempre.
No puedo estar más de acuerdo con el señor don Carlos Fernández.
Peugeot supedita la ‘estética’ a la ‘función’ sin entender que la primera es cuestionable y la segunda irrefutable.
Y no es que lo nuevos Peugeot me parezcan feos; al contrario, son bastante atractivos. Pero no puedo con sus interiores. ¡Mira que lo he probado intentando replantearme mis principios (por si era cosa mía), pero nada! Incluso, preguntando a personas de mi entorno que tienen uno de estos con el i-cop… todos me dicen que es lo peor de su coche.
Supongo que habrán hecho sus estudios de mercado y todo eso, pero sólo con aquella parte (pequeña) de población que se adaptan al coche.
Yo siempre pensé que erael coche el que debía adaptarse a nosotros; a todos y cada uno.
Felicidades a tosolos integrantes y lectores de km77.
@16 DavidVR
Todos los humanos tenemos la costumbre de creer que lo que nosotros pensamos / opinamos es lo correcto y solemos tener en cuenta solamente las opiniones similares a la nuestra. Esto nos ahorra muchos dolores de cabeza.
Solo los datos pueden intentar modificar ese comportamiento. Y ni así, hoy salen los datos del paro y siendo el pasado un año de recuperación clara de empleo habrá quien lo niegue. Vamos igual que negar que de esta pandemia nos están sacando las vacunas.
Tomando a VW, marca que tradicionalmente en España se emplea como referencia de buen concepto de vehículo.
Los datos de unidades vendidas 2021 dicen:
VW Polo 8.511 Peugeot 208 13.144
VW Golf 6.993 Peugeot 308 6.694
VW Passat 1.676 Peugeot 508 2.588
Con estos datos del mercado español, ¿podemos decir que I-cockpit de Peugeot no da resultado comercial?, ¿podemos decir que es no es aceptado por los conductores?, ¿podemos decir que han hecho los estudios de mercado solo con (y cito su comentario) «aquella parte (pequeña) de población que se adaptan al coche»
Pues no lo sé. A lo mejor los raros somos muchos.
Saludos y Feliz año nuevo
@Alex.
No todos los humanos creemos estar siempre en lo cierto; al menos yo no. Y por eso pregunto y me intereso sobre qué opinan otros. Y no sólo no me molesta, sino que me gusta promover la discrepancia argumentada. Casi siempre se aprende algo, incluso de aspectos diferentes a los que creías debatir.
Los datos son solamente un apoyo a los argumentos y casi nunca son definitivos ¿cuántas veces el mismo dato se ha utilizado por una parte y por la contraria? Más frecuentemente de lo que parece los datos se dan “cocinados” o no se acompañan de la necesaria explicación de cómo se han obtenido. Otras veces no son siquiera comparables por no provenir de muestras equivalentes. No se fíe de los datos sólo porque llevan un número, si no sabe en qué circunstancias se ha obtenido.
Nos compara las ventas de varios vehículos de VW con las de Peugeot. Al parecer la primera es “una marca de referencia de buen concepto de vehículo”. ¿Quiere decir que Peugeot es marca de mejor concepto porque tiene cifras más altas? ¿Que como ha batido en ventas a VW a la gente le gusta más o le perece mejor? Que Peugeot tenga esas cifras se puede interpretar de muchas formas. Que un modelo tenga más unidades venidas depende muchísimos factores y casi ninguno está estrechamente relacionado con la calidad del mismo. Pero si quiere decir que “más unidades vendidas” es equivalente a “mejor resultado comercial”, pues tampoco es así. ¿Acaso sabe cuánto gana Peugeot en cada coche vendido y cuánto VW? Vender mucho no es sinónimo de ganar más. De hecho hubo, hay y habrá modelos que se dejan de vender porque la marca está ganando poco con ellos, incluso con cifras de ventas respetables.
Además está el aspecto del que compra. Que se haya vendido mucho un modelo no implica forzosamente que, pasado un tiempo, todos y cada uno de sus nuevos propietarios estén plenamente satisfechos con el bien adquirido. O sí lo estan “en general”, pero no con «todos sus aspectos». Que levante la mano el que no encuentra defectillos o grandes defectos a su coche, el mismo que adquirió y escogió en su día.
Lo que quería decir en mi primera intervención se la resumo.
Primero. Todo elemento del diseño que al tiempo debe ser operativo, se enfrenta a una dualidad: estética/funcionalidad. A todos nos gusta la estéticamente agradable, pero es un concepto con alto componente subjetivo. Lo que para unos es muy atractivo puede ser horroroso para otros. Y no sólo; uno mismo puede evolucionar y cambiar su percepción acerca de una estética concreta con el tiempo. La funcionalidad es muy poco subjetiva: es accesible o no lo es; está al alcance o no; lo ves o queda oculto; accedes con el tacto sin mirar o necesitas fijar la atención tras dar varias pulsaciones; refleja o se ve sin reflejos; etc.
Noes nada fácil, pero hay marcas que en esta dualidad se inclinan más por la estética, aún a costa de perjudicar a la funcionalidad. No pasaría nada si la estética y originalidad se lograra sin menoscabo de la función. En mi opinión, Peugeot es una de las primeras (aunque no la única, por desgracia general). Creo, porque así me lo han manifestado más personas, que no soy el único que así piensa. Incluídos algunos poseedores de Peugeot modernos. Seguro que no todos, por supuesto.
Segundo. Al referirme en el primer escrito a la adaptación coche/conductor vs. conductor/coche, lo hacía siendo consciente de que existen personas a las que la disposición/configuración del i-cockpit les “sienta” bien de manera natural por su anatomía. Pero también que hay otras que jamás encontrarán la posición adecuada simplemente porque es un diseño que no es para todos porque no ha buscado eso, sino la estética. ¡Vamos!, que hay que probar muy bien el coche es este aspecto, porque es la persona la que se tiene que adaptar al coche y no al revés. Y esto es una peculiaridad/condicionante del i-cockpit de Peugeot y no tanto en otros puestos de conducción para las mismas personas.
Y no, no hablo de tallas extremas.
Yo también me quedo con las berlinas. He visto alguna turbodiesel mildhybrid, creo que Mercedes aunque el Kuga made in Spain también lo lleva, pero es un Suv. Resumen: Mercedes td mhybrid con etiqueta ECO, con dos bemoles le planta cara a todos estos antidiesel. Y sí el Mondeo diesel es el último de esa extirpe de vehículos maravillosos
@17 Claro hombre. Las fábricas de Ford en Alemania e Inglaterra emplean sólo turcos y paquistaníes.
Busque usted en Google: List of Ford factories, From Wikipedia
@ David VR,
No se complique tanto, VW en España ha sido el referente siempre. Sobre todo el Golf. Cualquier segmento C se compara siempre con el como referente.
Es mas simple que eso. ¿Ha perjudicado a Peugeot su nuevo I-cockpit?. Pues debe ser que no porque lleva 10 años en el mercado y se aplica a todos sus turismos e incluso a la Partner.
Los datos que he propuesto provienen directamente de esta página, KM77 y no están «cocinados». Los señores de KM77 podrán decirnos aquí de donde salen (de Faconauto supongo) https://www.faconauto.com/
Por lo tanto tras su compleja y larga y argumentación, es un error el i-cockpit? yo creo que no, da una estética de marca y comercialmente funciona y, (esto es opinión mía) ergonómicamente tras 10 vehículos en propiedad también me funciona.
Sobre resultado comercial ya le digo yo que VW gana más en cada coche que otras marcas. Se lo ganó trayendo el Golf (por miles de ellos de 2ª mano cuando entramos en Europa) y claro comparado con un Seat / Citroen o Renault de la época se notaba la diferencia. Así que VW se permite en España vender ganando más por unidad. Y como referentes escandalosos están los precios de los industriales Caddy y Transporter que a mí al menos se me escapa como alguien en su sano juicio compra un Caddy un 15 o 20 % mas caro que un Kangoo o Tourneo o Berlingo.
Un gusto.
@19, Toni
Tras su diatriba conspiraonica, nos suelta la fantasia de «Me baso en muestreos reales hechos por mí»
Por favor, cuentenos mas acerca de esos intentos y exhaustivos muestreos que hacen que se replantee vd la veradicad de los datos oficiales. Estoy deseando saber mas.
PD: mi muestreo real hecho por mi dictamina que me he follado al 66% de las tias de mi promocion universitaria. Datos, no opiniones.
@25 Slayer, ¿66 por ciento?
Inutil, es Vd un inutil (aparte de que será crucificado por machista), yo que la universidad me quedo lejos le doy un dato mas realista. He follado con el 100% de aquellas mujeres que han querido hacerlo.
Un gusto como siempre.
Dejese ver.
Pues siento disentir, porque el artículo me ha parecido un poco desperdicio. De 5 opiniones, una sobre alguien que le parece interesante mencionar un coche simplemente porque es más largo que la media, otro que menciona un prototipo (el modelo definitivo puede ser muy diferente o no llegar ni a producirse) y finalmente otro que habla de un modelo que le ha sorprendido para mal.
En resumen, solo saco algo medianamente interesante de 2 de los 5 modelos citados.
Hola,
He mandado a la carpeta de Spam comentarios firmados por Toni, Indira, Cris y Soni al confirmar que todos ha sido enviados desde el mismo origen.
Desconozco las intenciones de la persona que envía estos comentarios, pero no tiene ningún sentido que una misma persona debata consigo misma y que nos llene de comentarios con poco sentido.
Es posible que sean varias personas de una misma casa. Por favor, debatan en su casa.
Siento mucho las molestias y la pérdida de tiempo.
Javier
Feliz 2022
O
Este comentario no tiene nada que ver con el artículo, pero como no se dónde ponerlo y anda por aquí Moltó…
Ayer publicaron la prueba del 911 GT3, y no hay video de la esquiva. Hace un par de semanas, en la prueba del R8, lo mismo.
En el canal de YT, la esquiva del AMG GT R tiene 3M de visualizaciones, y la del 911 Turbo S, 2,5M. En cambio, andan publicando terapias (1K) y videos varios.
No hay nadie al mando?
Qué extraño me resultó el tractrac (que no tractat) sobre el 308, y digo extraño porque no es habitual que un periodista del motor hable mal de un coche.
Aunque critica lo que cualquiera puede ver, y le puede convencer o no; varios contertulios dicen lo contario.
Pero me resulta extraño leerlo en un medio del motor; y me gustaría ver más opiniones de periodistas en el mismo sentido.
Pero mostrando lo que la gente, los compradores, no pueden ver: como el rodamiento IMS de Porsche, o los más de 27 m/s de los pistones de los V8/V10 4.2/5.2; y de esto nunca se dice nada de nada y eso que dichos modelos superan, por mucho, los 100.000€.
Sera que VAG es más untuosa* que las demás marcas? O que Stelantis es rata con los periodistas?
* Que unta más.
Hola, uno.
Hay veces que llueve, veces que no disponemos de la pista y veces que no tenemos tiempo para hacer todo lo que nos gustaría hacer en una prueba. En esta ocasión sucedieron las tres cosas a la vez.
Un saludo.
Me gustan los coches también. He visto varios turbodiésel semihíbridos; Creo que Mercedes los tiene, sin embargo el Kuga construido en España también los tiene, pero es un SUV. Resumen: Mercedes td mhybrid con insignia ECO, con dos pisos, supera a todos estos vehículos antidiesel. Y sí, el Mondeo diésel es el último de una larga lista de fantásticos vehículos.
El Hyundai i20 N es una versión orientada al rendimiento del i20 hatchback estándar, diseñada para ofrecer una experiencia de conducción estimulante con dinámica deportiva, estilo agresivo y tecnología avanzada. Es parte de la división de desempeño N de Hyundai, que se enfoca en crear variantes de alto desempeño de sus modelos regulares.