Estoy medio loco, o locoentero.
Llevo tiempo compitiendo, no mucho, pero el suficiente para haberme dado cuenta que lo barato sale caro, o al menos, frustrante muchas veces. Salir a correr una prueba y no terminarla por que el coche se desmonta en pedazos, no es la mejor manera de correr. Es verdad que en mi caso no he destinado el suficiente dinero a repasar ese coche de autocross que es el kadett, con el fin de cambiar las piezas de desgaste. Si lo hubiera hecho, habría mejorado algo la cosa.
Así que he decidido dar un paso adelante, tener un buen coche de rally, en este caso para asfalto. Mi idea es poder montar el coche en el remolque, ir a una prueba, correrla sin intención de ganarla pero si de divertirme, volverlo a montar en el remolque y a casa. Lo mejor es cuando puedes repetir esta operación una vez tras otra sin más repaso que un vistazo a los niveles y al estado del coche en general.
Tengo dos opciones: o me compro un coche hecho, que siempre ha sido mi favorita, o lo monto desde uno de calle. La primera opción es la que siempre recomiendo, pero para los coches que me gustan hay que preparar de 15.000€ en adelante. Además son coches con más de 10 años de batallas en los tramos, que pueden estar muy bien mantenidos, pero nunca sabes al 100% si se han llevado un golpe fuerte, si ese mantenimiento está bien hecho, etc.
Para que os hagáis una idea, pregunté por un coche que vi en un anuncio. Whatsappeé largo y tendido sobre el auto en cuestión, la preparación, etc. y le pregunté si había tenido accidentes, a lo que me contestó con un rotundo nunca. Casualmente, tras mucho buscar la matrícula en google images, encontré la venta de un siniestro de ese coche dos años antes de que el lo comprara. Lo dicho, nunca sabes a ciencia cierta si el vendedor miente o no sabe, pero el golpe ahí está.
Parto de la base que mi coche de calle es un Renault Clio Sport 197 cv del año 2007 que compré de segunda mano.
En estos momentos hay que hacerle la distribución y repasarle la caja de cambios, que en este modelo han dado muchos problemas. La inversión es cerca de 2.500 euros, lo que me ha dado el empujón para decir: ¿y por qué no monto el Clio para correr?
La idea como he dicho es poder tener un coche con el que pueda correr en cualquier sitio, llegar, disfrutar y volver a casa, así que creo que mi decisión es acertada. No es barata, pero me aseguro tener un coche que de serie ya es lo suficientemente potente, con un buen chasis y fiable para poder disfrutar de las carreras. Por supuesto, ojalá fuera un Clio R3, pero va a ser un grupo N.
Ahora mismo estoy en la fase ‘pedir presupuestos’, que merece un capítulo aparte. Tengo bastante claro lo que quiero, así que no me ando con rodeos. En todos los sitios pregunto por las mismas cosas, pero la velocidad de respuesta va desde 5 minutos más tarde, a no recibir contestación alguna, pasando por los que tienes que llamar 3 veces para conseguir algún dato. Me desespera. Además no pido presupuesto de unas tuercas para las ruedas, el importe total es alto.
Os cuento lo que voy a montar:
· Arco de seguridad. Es uno de los puntos más complicados, por la variedad de opciones. Según la ficha FIA solo puedo montar el de Renault Sport, pero no es el plan, se me va el presupuesto. Para haceros una idea, un arco hasta torretas de OMP vale unos 2.100€. Tampoco quiero uno básico, unos 700€, ya que monto el coche al menos que si tengo un accidente, me salve. Al final creo que un Sparco va a ser el elegido, a ver en que empresa lo monto.
· Backets, arneses, extinciónes, cortacorrientes, etc. Toda la parte interior va a se en la que ajuste el presupuesto. Aquí si que no quiero lujos. El backet será de fibra, pero el más barato, como los arneses de 6 puntos o la extinción automática, que será de accionamiento manual.
· Grupo corto y autoblocante. Esto es obligatorio. Si un coche queremos que sea divertido de conducir por los tramos esto es más importante que la potencia del coche. Mi duda, por si alguien puede resolvérmela, es si Torsen o de discos. Tengo entendido que el primero no tiene mantenimiento, punto a favor, pero que para correr se necesita uno de discos ya que actúa mejor. Aprovecharé para que me repasen la caja, así que a esto le tendré que sumar la mano de obra de montarlo todo.
· Neumáticos. Mi idea es poder comprar 6 ruedas de seco, 4 de compuesto medio y 2 de compuesto más blando. Tengo que hablar con los distribuidores a ver que montaban en este coche. El anterior tardaba mucho en calentar las ruedas traseras, así que por eso pienso en los blandos. Hay varios fabricantes, pero por precio/calidad estaré entre Hankook o Dmack.
· Frenos. Aquí poco cambio voy a hacer. Cambiaré los latiguillos por metálicos, buen líquido y buenas pastillas.
· Homologación. Para que pueda correr tendré que homologar todo, en ello estoy. Tengo que buscar dónde y cuánto me cuesta. Es algo que no puedo evitar, pero buscaré el que me resulte mejor. Os hablaré de esto cuando lo haga, hay una diferencia abismal en algunas comunidades autónomas.
· Motor. Esta es la parte que más me gusta, no le voy a hace nada. Para qué. Disfrutaré de la potencia y fiabilidad de este motor, que mucho tengo que aprender para decir que me hace falta más. Tal vez unos tacos más rígidos, ya veremos.
Hasta el apartado anterior me llega el presupuesto. Siempre cuento con un colchón para aceites, distribución, imprevistos, etc.
Quedan cosas por hacer, como la suspensión, que tengo que pensar por precio entre una roscada sin poder de regulación, una H&R o KW Clubsport con regulaciones y que es la preferida en muchos foros a irse de las manos cuando hablamos de una de 3 o 4 vías, algo por lo que ni pregunto precios.
La línea de escape será el ‘bonus track’ si me queda algo de dinero, pero no prometo nada.
Como veis lo tengo bastante decidido, aunque acepto consejos, cualquiera es bueno. Poco a poco os iré contando el proceso de montaje, hasta que finalmente pueda salir a la primera carrera, que espero sea para la primera del campeonato de Aragón el año que viene.
Os dejo un vídeo de como montan un Clio R3, que no es mi caso, pero es lo más parecido que encuentro…
