Hoy aparece publicada en km77.com la prueba del Dacia Duster. Es el segundo todoterreno más vendido en España en lo que llevamos de 2011. Un todoterreno que se vende mayoritariamente con tracción delantera…
Es un coche curioso por varios motivos. Está basado en el Logan, que a su vez está hecho con «retales» del Clio anterior al actual. No me parece malo por ello, si bien es cierto que en los test de Euro NCAP el Duster ha sacado mala nota y sacar mala nota en un examen al que las marcas van con «chuleta» pues no causa buena impresión, independientemente de la opinión que tenga uno sobre los test de Euro NCAP.
Tiene un aspecto «pintón», aunque a algún lector de estos blogs le parezca feo. Lo cierto es que es de esos coches que la gente se queda mirando. Incluso un par de personas me han parado por la calle para preguntarme por él.
La bella y la bestia. Que cada uno elija… (foto de J.A. Díaz)
Lo he conducido. Y me ha echo volver atrás en el tiempo, a mi cuando tuve mi primer coche, un Fiat Uno 45S, con el estupendísimo motor Fire. Me lo ha recordado no por el motor, sino por las cosas que se sienten al conducirlo. Y es que el coche se «nota», debe ser cosa de la falta de aislamientos y elaborados silent-blocks. Eso y su sencillez. Si tuviese un motor con carburador y delco podría ser el típico coche de «hágalo usted mismo».
Los acabados son sencillos, muy sencillos, pero no es un coche «impresentable», ni mucho menos. Comparado con los TATA en los que me he subido, el Duster es casi un coche premium. Aunque tiene algún detalle mejorable…
Tapizado descolgado. Nada que no arregle un buen pegamento de contacto.
El anclaje para las sillas infantiles, no los dos Isofix que van en el hueco entre el respaldo y la banqueta sino el tercero (para el TopTether), va colocado junto al marco inferior del portón trasero, por lo que hay que cruzar el maletero con la correa. Esto también pasa en el Golf e inutiliza más el maletero que en el caso del Duster.
Sirve para sujetar una red o el TopTether de una sillita infantil.
Pero también tiene cosas sorprendentes, como un hermoso amortiguador para mantener el capó abierto que uno no encuentra ni en algunos coches de 30.000 euros.
Nada de varillas cutres. Un Señor amortiguador para sujetar el capó.
Es un coche. Sin más. Ni le sobran cosas innecesarias ni le faltan cosas imprescindibles (salvo el control de estabilidad a la mayoría de las versiones y los airbags de cabeza). Aquí podéis leer la prueba.
Celedonio.