Nace el F-Type, un nuevo Jaguar
Jaguar acaba de anunciar, en el Salón de Nueva York, el próximo lanzamiento de un nuevo modelo: su F-Type. Recupera así uno de sus dos estereotipos, abandonado desde el S-Type, para denominar sus productos: una letra seguida de “Type”, o bien una X seguida siempre de otra letra, y a veces, además, de un número. Es una más de las señas de identidad de una marca cuyo diseño le ha distinguido tanto o más que su mecánica, sus éxitos deportivos o la calidad de sus acabados. Si, en general, la industria británica nos tiene acostumbrados a que, muy encima de la fiabilidad y prestaciones de sus mecánicas, sea su diseño tanto exterior como interior el que defienda su prestigio, en el caso de Jaguar este fenómeno se potencia hasta el paroxismo. Muy pocas marcas hubiesen podido sobrevivir al evidente bajón de calidad por el que pasó Jaguar durante casi dos décadas sin perder por completo su prestigio, por no decir su continuidad. La recuperación no ha estado exenta de riesgos; pero tras el paréntesis en el PAG (Premier Automotive Group) de Ford, que inició el despegue, ahora, con Tata, parece estar no ya en velocidad de crucero sino en plena aceleración.
Pero siempre sigue siendo el diseño el que marca de modo especial cada una de sus nuevas creaciones; cada vez que se anuncia un Jaguar nuevo, lo primero que se viene a la imaginación del aficionado no es ¿qué mecánica llevará?, sino ¿qué aspecto tendrá? Y en paralelo, se ha producido una noticia a la inversa, sólo que cambiando un modelo por una persona: ha fallecido el diseñador del 911; alguien que, como no podía ser de otro modo, llevaba el apellido Porsche. También aquí el diseño ocupa un lugar permanente, y de continuidad para la imagen de marca. Tanto el 356 como el 911 han sido, y el 911 sigue siendo, coches de larga ejecutoria, sin dejar de ser iguales a sí mismos. Los 928, 924, 944 y 968 eran todos continuación estética unos de otros; tan sólo el 914 (único tropezón de la marca), el actual XF y el Cayenne (obligatoriamente) han supuesto una ruptura más o menos radical, porque Boxster y Cayman, pese a su estructura específica, tienen un diseño que entronca perfectamente con el del 911 o el Panamera.
Así que veamos qué es lo que nos ofrece el F-Type; y poniendo el acento en ver porque, al margen de unas cuantas fotos con uniforme de camuflaje, poco más ha dejado filtrar Jaguar acerca de un modelo cuyo lanzamiento se anuncia de este modo: “La información técnica, así como los detalles completos del F-Type, se comunicarán a finales de 2012. El vehículo saldrá a la venta a mediados de 2013”; o sea, que la cosa va, si no para muy largo, sí para tomárselo con calma. Como es habitual, la aparición del que, más que concept ya es prototipo, se justifica con la habitual mentira, aunque no piadosa: “En septiembre de 2011 expusimos el concept CX-16, y la reacción fue tan positiva que hemos acelerado el desarrollo del nuevo Jaguar”. Nadie se cree que, sólo porque a la gente le haya gustado en un par de Salones, de un concept carrozado como coupé se pase a un convertible, prácticamente definido de cara a la producción, en un plazo de seis meses, si no está ya todo en marcha desde mucho antes. Por cierto, ¿a alguno de Vds le han hecho nunca una encuesta en un Salón, preguntándole si le gusta o no un concept y si querría que se fabricase? Porque la respuesta casi siempre sería que sí (en no teniendo que soltar dinero, todos somos muy valientes), y la aglomeración de gente mirando tampoco es muy de fiar, porque ante una novedad siempre hay expectación, aunque luego el coche no acabe de gustar ni por asomo.
Pero en el comunicado de prensa sí que se filtra alguna que otra información, ya que no datos concretos, que permite adivinar por dónde van a ir los tiros: “El atractivo fundamental de los Jaguar es su corazón deportivo, y ese corazón latirá más fuerte que nunca en el F-Type. Su desarrollo es una elocuente expresión del deseo de producir un líder de mercado en un segmento del que hemos estado alejados durante demasiado tiempo. Pero ahora esto se ha acabado: llega el F-Type. Aprovechando los conocimientos en desarrollo de carrocerías de aluminio, el F-Type se comercializará como riguroso biplaza convertible, claramente orientado al disfrute del conductor. Se ofrecerá una completa gama de motores de gasolina, incluida una nueva familia de propulsores, todos ellos caracterizados por impresionantes prestaciones deportivas. El desarrollo tecnológico del F-TYPE se ha centrado en intensificar el nivel de gratificación dinámica de la experiencia de conducción.”
Por su parte, Ian Callum, Director de Diseño de Jaguar, remachaba esta insistencia en la deportividad del comportamiento del futuro F-Type: “Un auténtico deportivo debe ser puro tanto en esencia como en forma; tener la oportunidad de producir un vehículo de esa naturaleza para Jaguar, ha sido un verdadero privilegio para mí y para mi equipo. Los Jaguar C-Type, D-Type y E-Type son deportivos que, en su época, respetaron fielmente este principio, y el F-Type seguirá haciéndolo en la suya, una época que está a punto de llegar”. Pero, al margen de todas estas frases, más o menos rimbombantes pero que indican una clara dirección, ¿tenemos algo concreto a lo que agarrarnos?. Sí, y está en una de las primeras citas copiadas más arriba, y se trata de la referencia al CX-16 como fuente de inspiración.
Lo de menos es que este concept fuese un híbrido; lo que cuenta son otros detalles: su diseño, su tamaño, y su estructura. Ésta, siguiendo el camino emprendido con la gran berlina XJ hace ya más de nueve años, y continuado con el concept ALC (Advanced Lightweight Coupé) presentado en Detroit de 2005, era de tipo espacial, y enteramente de aluminio. Hasta el momento, el XJ sigue siendo el único modelo de producción con este tipo de estructura y en dicho material, pero con el F-Type se va a añadir un nuevo miembro a la familia de los Jaguar de aluminio (los C-Type, D-Type y E-Type Lightweight, al margen ser modelos de competición, sólo llevaban carrocería de aluminio, y el bastidor seguía siendo de chapa de acero).
Lo segundo es analizar el tamaño, y para ello vamos a ir viendo, pero en retrospectiva, el de un par de convertibles de la época que pudiéramos considerar como moderna en Jaguar, es decir del E-Type en adelante; y estamos hablando ya de medio siglo. Los anteriores, los XK-120, 140 y 150 son muy bonitos, pero es evidente que su diseño era una actualización del de los últimos años 30, porque en los 40 apenas si hubo evolución, debido a la II Guerra Mundial durante su primera mitad, y a la recuperación de la misma durante la segunda. Tan sólo algunos pequeños pero meritorios atisbos del diseño italiano, y poco más.
Pero el E-Type, en 1961, fue una revolución; del diseño hablaremos luego, pero ahora fijémonos en el tamaño, en concreto el del convertible de dos plazas, que es hacia el que, más o menos, parece que pretende retornar el F-Type, incluso por el orden alfabético. Pues bien el E-Type tenía una batalla de 2,44 metros, una longitud de 4,45 m, una anchura de 1,66 m y una altura (sin capota) de 1,22 m. Y ya con el motor 4.2 de 1968, pretendía pesar sólo 1.180 kilos en vacío, cifra que nos parece más que optimista; pero tengámosla en cuenta. En comparación, el actual XK, en su versión RS más “rabiosa”, tiene una batalla de 2,75 m, una longitud de 4,79 m, una anchura de 1,89 m y una altura de 1,31 m; el peso se dispara hasta 1.795 kilos. Como puede verse, las declaraciones referentes al F-Type, hablando de retornar a “un segmento del que hemos estado alejados durante demasiado tiempo”, y citando los modelos C, D y E-Type, tienen amplia justificación.
Así pues, está claro que se quiere hacer un convertible biplaza más compacto y más ligero; pero también se nos dice que está inspirado en el concept CX-16. Pues veamos cuáles son las cotas de este último, sin olvidar que se trata de un coupé; pues bien, la batalla es de 2,62 m, la longitud 4,45 m, la anchura 2,05 m y la altura, 130 m. Es decir, que se trata de un coche de exactamente la longitud del E-Type, la altura de parabrisas del actual XK y una batalla que, si bien todavía 18 centímetros superior a la del E-Type, ya ha sido recortada en 13 centímetros (5 pulgadas) respecto a la del XK. En cuanto al peso, y a pesar de su desmesurada anchura superior a los dos metros, está limitado a 1.600 kilos, rebajando en 200 el del XK.
Si tenemos en cuenta que el F-Type no será más ancho que el XK, sino más bien al contrario (pongamos sobre 1,85 m), bien podría estar en un peso de no mucho más de 1.500 kilos, y esto ya es muy digno de tenerse en cuenta. Y falta por saber cuáles serán los motores de esa nueva familia que se anuncia; porque si responden a la actual tendencia a la miniaturización, bien podríamos tener otra rebaja de entre 20 y 50 kilos, en función de lo radical del nuevo diseño. En fin, que unas cosas con otras, parece que el F-Type pretende meterse en el terreno del Mercedes SLK y del BMW Z-4.
Y ahora vamos ya con el diseño, utilizando como guía, y siguiendo el orden en que están colocadas, la serie de ilustraciones que hemos reunido. Empezando por la primera del CX-16, nos encontramos con un frontal muy trabajado: gran toma de aire central (recuerda a los actuales Maserati), dobles tomas de aire laterales (se supone que para frenos y radiadores de aceite), e incluso un pequeño faldón inferior negro. Además, el clásico abultamiento longitudinal central en el capó, ya iniciado hace 60 años en los C y D-Type de competición, y que ha sido marca de la casa desde entonces; lo mismo que lo fueron, dobles a cada lado, mientras se montaron cuatro faros en horizontal. En la segunda, el CX-16 se nos presenta como un coupé de línea clásica muy pura (como los XK y sus primos Aston-Martin); al no haber referencias, no se aprecia bien lo compacto del tamaño, con menos de 4,5 metros de longitud. Al tratarse de un coupé, hay que hacer un cierto esfuerzo de imaginación para encontrar la derivación al convertible F-Type.
Y pasemos ya al actual convertible de producción, el XK en la versión RS de 550 CV. El frontal se ha ido haciendo más barroco respecto a los primeros diseños de los XK modernos; hay muchas entradas y salidas de aire, quizás necesarias dada la potencia. Pero al pasar a la segunda foto, el XK recupera el diseño lateral puro y limpio, tan sólo ligeramente enturbiado por el alerón fijo al final de la tapa del maletero. También apreciamos la casi nula practicidad de las plazas posteriores, al menos con los asientos delanteros situados en la posición de la foto. Pero en el F-Type no habrá este problema: de salida está diseñado como biplaza, y punto.
Y llega el momento de analizar las fotos camufladas del coche que da origen a esta entrada. En la foto 1 vemos que se ha retornado al frontal de los primitivos XK: una única entrada primaria de aire, con la clásica forma ovalada; por encima del discreto faldón inferior hay otra entrada, mucho más estrecha tanto en horizontal como sobre todo en vertical. La vista lateral deja muy claro que el perfil básico, detalles aparte, apenas si se diferencia del actual XK; sólo que aquí el alerón posterior es móvil, como en algunos coches alemanes (Audi y Porsche, en concreto). Y en la tercera vista, en tres cuartos trasero, y ya que los pilotos están camuflados, todo lo que me ocurre comentar es que la zaga recuerda una barbaridad a la de algún Porsche ya veterano, como los cabrio de la familia 924/944/968, con una tapa de maletero muy alta, y plana hasta el final. Con todo lo cual, es legítimo plantearse una pregunta: ¿tiene necesidad Jaguar de un concept, si sus coches de serie se suceden uno a otro sin solución de continuidad?
Y que la respuesta podría ser perfectamente negativa lo avala la siguiente foto lateral, la del inmortal E-Type. Cierto que hay una primera diferencia, pues no en vano ha transcurrido medio siglo: entonces los parachoques eran metálicos, cromados, y separados de la carrocería. Y la otra única diferencia entronca con lo indicado para la zaga, ya que aquí la tapa del maletero va cayendo para dar lugar a una elegante aunque poco práctica (capacidad de maletero) línea fusiforme. Eso, y un parabrisas algo más vertical, son las mayores diferencias; porque como la inmensa mayoría de quienes están leyendo esto saben, el frontal ya llevaba la clásica toma de aire ovalada. Que viene de más atrás, como ilustra la foto que viene a continuación, con dos mitos de la competición: un C-Type del 51/53, todavía con la parrilla vertical, estilizada respecto a la berlina Mk.VII de por aquel entonces, y un D-Type del 55 (todavía sin la deriva tras la cabeza del piloto), en el que se estrenaba la toma de aire ovalada horizontal. Y lo cierto es que, con todos estos precedentes, la respuesta negativa se confirma: al menos en una marca con la tradición de diseño de Jaguar, los concepts apenas si son necesarios.
Claro es que en algo tienen que emplear su tiempo, y justificar su sueldo (bastante elevado), los componentes de los equipos de diseño, en este caso con el excelente Ian Callum al frente. Al cual, por cierto, no me he resistido a presentarlo en la siguiente foto, saludando efusivamente, en el Concurso de Elegancia de Pebble Beach (California), a los afortunados y sin duda riquísimos propietarios de ese inmaculado Jaguar E-Type que no es ni siquiera un Lightweight de competición (que era un E-Type con carrocería de aluminio y un hard-top específico), sino una versión muy especial, cuyo origen desconozco y ni en la propia web de Jaguar aclaran; desde luego con carrocería de aluminio, pero con parabrisas y vantanillas de competición, una deriva tras la cabeza del piloto al estilo del D-Type, y unas curiosas tomas de aire en las elevadas aletas traseras, sin duda para refrigerar los frenos in-board situados a la salida del diferencial. Una joya única.
Y cerraremos con unas citas del propio Ian Callum respecto al diseño de un deportivo, y de un Jaguar deportivo en particular: “En un deportivo, el diseño debe centrarse en la relación entre la mecánica y la carrocería, entre la forma y la función. En Jaguar, este diseño siempre ha consistido en arropar lo más ajustadamente posible la forma (carrocería) alrededor de la función (mecánica)”. Que esto haya sido siempre así, sería discutible; que deba serlo, es innegable. Pero, al margen de este planteamiento básico, es indudable que el diseño de Jaguar, especialmente en los deportivos, ronda lo que para algo tan relativamente joven como el automóvil, podría considerarse como poco menos que eterno. Esperamos con ansia al F-Type.
Fallece Ferdinand A. Porsche, diseñador del 911
La fama de la saga Porsche, como diseñadores de coches, está muy bien repartida entre las tres generaciones que, al menos hasta el momento, han saltado a la fama como tales, y todos bajo el nombre de Ferdinand. El patriarca fue el creador del VW “Escarabajo”, pero también tuvo mucho que ver en el Auto-Union de carreras de los años 30, y en múltiples proyectos anteriores, como el Austro-Daimler, y algunos más. Su hijo, conocido por el diminutivo de Ferry, fue el creador del Porsche 356, el coche con el que se inició el mito de la marca. Y el nieto, que acaba de fallecer a la edad de 76 años, recuperó el nombre completo de Ferdinand, si bien (como indica el comunicado de prensa facilitado por la marca) se le añade habitualmente su segundo nombre, Alexander, para no confundirle con su legendario abuelo.
Como se ve, los tres tienen sobrados motivos para pasar a la historia del automóvil como grandes creadores; e incluso, de forma colateral, no nos olvidemos de Ferdinand K. Piëch (ingeniero de Porsche y Audi), 16 meses más joven que su “primo”, el que acaba de fallecer, ya que la familia Piëch-Porsche forma un entramado tanto técnico como industrial, financiero y de clan familiar, realmente fascinante. Pero no estamos aquí para entrar en estos asuntos, ni tampoco en las idas y venidas de la familia Porsche entre Stuttgart (Alemania) y Zell am See (Austria), en los años de 1943 a 1950. De hecho, su origen es austriaco; y un cierto magnetismo debe existir en este origen, porque recuerdo haber pasado por Zell am See durante dos presentaciones de Audi, separadas por algunos años entre sí.
Ferdinand Alexander Porsche era Presidente Honorario del Consejo de Vigilancia de esa empresa que responde al curioso y largo nombre (que nunca dejan de poner completo en todos sus papeles oficiales, por estrambótico que parezca) de “Dr. Ing. h.c. F. Porsche AG, Stuttgart”; los alemanes son tremendamente ceremoniosos para esto de los títulos, y prueba de ello es que una de las cosas que recuerda la nota necrológica es que, en 1999, el Presidente de la República austriaca le concedió el título de “Professor”. Porque en los países germánicos se puede ser Ingeniero, Doctor Ingeniero, o Profesor Doctor Ingeniero; y que a nadie se le ocurra olvidar citarlo.
Pero retornemos al diseño automovilístico, que es la razón de esta entrada en el blog. Y en esa necrológica hay una frase que sí tiene un profundo significado: “Como creador del Porsche 911, estableció en nuestra empresa una cultura del diseño que viene caracterizando a nuestros coches deportivos hasta la fecha. Su filosofía del buen diseño es un legado que nos dejó, y que honraremos para siempre”. El caso es F.A. (como dicen que le llamaban sus colegas) entró en el departamento de ingeniería y diseño de la empresa familiar en 1958, con 22 años, y al poco ya había diseñado, en plastilina, el primer sucesor del 356 obra de su padre Ferry.
Pero fue en 1962 cuando pasó a dirigir el departamento de diseño, y al año siguiente creó su obra inmortal: el Porsche 901, que hubo de ser rebautizado como 911 porque Peugeot tenía patentadas (y se supone que debe de seguir teniéndolas) todas las cifras de tres dígitos con un cero en el centro. Un diseño, el del 911, que está a punto de celebrar su medio siglo de existencia, y que como acaba de demostrar su séptima generación (la del 991), es como los buenos vinos: mejora con la edad, pero permaneciendo fiel a su origen; y se ha convertido en el que es, probablemente, el icono de diseño automovilístico más exitoso y respetado de la historia, con permiso del citado Jaguar E-Type, y los Ferrari 250-GTO y 275-GTB Scaglietti.
No obstante, el 911 no fue su única genialidad automovilística; pasando al campo de la competición, también diseño el Typ 804, el Fórmula 1 de 1,5 litros de los primeros 60, propulsado por el motor “boxer” Fuhrmann, de cuatro árboles de levas. Pero sobre todo, el 904 Carrera GTS de motor central, bien sea con el motor antes citado pero en versión 2.0, o ya con el también 2.0 y de seis cilindros opuestos original del 911; el 904 está considerado como uno de los coches de competición de diseño más bello y limpio que jamás se haya diseñado.
Y no acaba ahí la trayectoria diseñadora de F.A. Porsche; porque en 1972, ya retirado de funciones ejecutivas en la fábrica de automóviles, fundó en Stuttgart, junto con otros miembros de la familia (siempre la familia), el “Porsche Design Studio”, cuyas oficinas centrales fueron domiciliadas en Zell am See (siempre Austria) en 1974. Y durante varias décadas, de dicho estudio salieron diseños de relojes, gafas de sol, material de escritorio, máquinas de fotos e incluso electrodomésticos.
Su estilo de diseño era fuerte y claro, siguiendo un credo que se refleja en unas cuantas de sus citas: “El diseño debe ser funcional, y la funcionalidad debe ser transformada visualmente en estética, sin necesidad de adornos que requieran una previa explicación”. “Un producto diseñado con coherencia no requiere adornos; debe destacar simplemente por sus formas”. “El aspecto de un diseño debe ser fácil y rápidamente comprensible, y no debe distraer respecto al propio producto y su función”. Y para cerrar: “El buen diseño debe ser honrado”.
Ferdinand Alexander Porsche, como no podía ser de otra modo, ha sido enterrado en el panteón familiar de Schüttgut, en Zell am See (Austria).
“El diseño debe ser funcional, y la funcionalidad debe ser transformada visualmente en estética, sin necesidad de adornos que requieran una previa explicación” Eso habría que contárselo a algún diseñador en alguna presentación…
Ya. Pero el 928 no pinta en esa frase de continuidad. Sí los 924, 944 y 968 pero la plataforma s.e.u.o del 928 era otra diferente.
JM
@Celedonio
Siendo justos, quizás estamos hablando de la esencia de la ingeniería, el alma del conocimiento
y la capacidad para construir conforme a la idea.
Lo más dificil en suma y lo que diferencia a un buen ingeniero de un genio.
Creo que el XK también lleva la misma construcción que el XJ.
Y la ultima foto de la parte de Jaguar tiene toda la pinta de ser el E1A/E2A, los prototipos que se construyeron para sustituir al D-Type en el mundo de las carreras, con la nueva regulación de motores de 3 litros que entro en 1959, si no recuerdo mal, pero que como no resultaron acabaron transformándose en el E-Type de calle.
El XK lleva una construcción similar al XJ, y se fabrica en Solly. Los alemanes utilizan todos esos títulos civiles y alguno más, muy acertadamente, incluso cuando están jubilados, añadiendo esta palabra después del nombre. Es un uso del siglo XIX. La burguesía enriquecida por la revoluciones industriales tenía dinero, pero no podría entrar en los exclusivos círculos sociales de la aristocracia nobiliaria. La solución fue muy ingeniosa, adoptar un sistema de títulos basados en méritos civiles, estableciendo una aristocracia del mérito, paralela a la aristocracia tradicional, y con un acceso directo a la vida política. A la vista de lo que ocurrió después no sé si esto fue bueno o malo. En cualquier caso, hoy por hoy, si quieres ser algo en Alemania, tienes que hacer una tesis doctoral.
Se me fue el dedo, quise decir que se fabrica en Solihull.
“Un producto diseñado con coherencia no requiere adornos; debe destacar simplemente por sus formas.” Tal vez este gran ingeniero se muriera al ver un Cayenne GTS.
Todo coche que se diseñe mirándose en el E-Type va a ser forzosamente decepcionante, el original es tan bueno que no consiente copias ni evoluciones, y no se si me gusta mas el coupe o el que tiene techo. Paradójicamente lo que mas se acerca a este último es un BMW. Lo mismo reza para la berlina XJ y para el Mk. II, la marca lo tiene crudo para hacer coches que no parezcan anodinos u horteras comparado con sus ancestros.
Hablando de británicos, estaría bien que A. de A. nos deleitara con un artículo sobre las marcas semiartesanales de la isla, en plan TVR o Marcos.
Hola,
No sé ni por donde empezar ante este disparate de letras juntadas.
No entiendo nada del artículo. Y por más que lo intento, sigo sin encontrar hilo conductor ni razón de ser de este artículo. Lo que encuentro es una especie de lugares comunes y opiniones académicamente correctas pero con poca realidad de verdad y, sobre todo, muchas palmaditas en la espalda.
Unas breves notas, para no alargar demasiado el tema, porque no lo merece:
Curiosamente, se está hablando de tres asesinos del diseño en todo su sentido: el Jaguar E-type, Ian Callum, y FA Porsche. Los tres han arruinado sus marcas respectivas en aquello que pueden hacer, y sobre todo, las han dejado sin futuro estético y futuro práctico. Casi hizo lo mismo De Silva con Alfa. Porsche lleva 50 años haciendo copias a escala de un diseño que nació con intenciones de practicidad, y ha acabado siendo un pastiche. Ian Callum lleva 15 años haciendo exactamente lo mismo para Aston Martin, desde aquel DB7. El DB7 tuvo su sentido en su tiempo. Ahora ya no. Y el E-type es un coche bello en fotografía, pero muy decepcinante en su realidad física. Y, sinceramente, frente al DS, pierde muchos puntos. Y ojo, que hablamos de coches contemporáneos. Ojo, que a diferencia de Iam Callum y del 911, el E-type sí que tuvo un dignísimo sucesor que dentro de unos 10 años empezará a valorarse mucho más de lo que se ha valorado hasta ahora, que es el XJS [Jaguar parece que debe sus éxitos estéticos a errores de planificación, puesto que todos sus grandes éxitos han sido fruto de dichos errores].
Ni el Porsche 911 es un hito contrastado [se debe más a cabezonería que a otra cosa], ni mejora con el tiempo como el vino. Si lo hubiese hecho, seguiría siendo un GT de cuatro plazas útiles que es el concepto con el que nació. Y no lo es. Han tenido 50 años para ir mejorando un vehículo que está donde está el resto de la competencia, ni más ni menos. No creo que tenga mérito alguno ni como concepto, ni como diseño. Es un lugar común, que ya va siendo hora de abandonar. De hecho, más que el éxito del concepto, personalmente me indica el fracaso de Porsche de no saber qué hacer para crear algo que pueda ser capaz de atraer a los clientes en base al valor añadido de cuestiones propias que no sean ni la marca [Porsche] ni un modelo concreto [911]. Cosa que otras marcas o constructoras tienen que hacer constantemente, desde Hyundai, hasta Daimler Benz o el grupo VAG con Bentley.
Se está ensalzando constantemente cosas hechas por un nombre, no por su hecho en sí. Cada vehículo es hijo de su tiempo, ni más ni menos. Lo mismo que generaciones actuales empezarán a decir que los vehículos de F1 de los primeros años 80 son auténticas bellezas y estéticamente puros. Fair enough.
Por último, creer que el ingeniero es el artífice de todo es un error garrafal, puesto que trata de evitar el gusto estético en algo que no puede evitar dicho vector de trabajo. Y creer que este tipo de cosas son resultados de genialidad es otro error, casi pueril. Son simplemente horas de trabajo.
Y para cerrar, las citas:
«Su estilo de diseño era fuerte y claro, siguiendo un credo que se refleja en unas cuantas de sus citas: “El diseño debe ser funcional, y la funcionalidad debe ser transformada visualmente en estética, sin necesidad de adornos que requieran una previa explicación”. “Un producto diseñado con coherencia no requiere adornos; debe destacar simplemente por sus formas”. “El aspecto de un diseño debe ser fácil y rápidamente comprensible, y no debe distraer respecto al propio producto y su función”. Y para cerrar: “El buen diseño debe ser honrado”.»
Hay tanta falacia encerrada en estas letras, y tantos lugares comúnes -otra vez-, que resulta hasta cándido. Hay mucho candor en repetir el mantra de las escuelas de diseño y de artes y oficios desde el s.XIX, desde Chicago, Viena, Bruselas y Glasgow, hasta las ya relamidas Dessau y Brno [hace ya más de 100 años!].
Hola Valmo,
Si los ingenieros [los diseñadores industriales lo suelen tener ya bastante asimilado y aceptado, que tienen que tener un determinado discurso de cara al público] hiciesen suyas esas palabras, aberrarían el 90% de la producción actual.
De hecho, es vox populi en el sector que el diseño hace mucho tiempo que ha pasado a ser cosa oriental, en concreto, de japoneses y de coreanos.
Respecto a los herederos del E-Type, es una cuestión sencillísima. Abra los ojos, y mire mucho más allá de lo establecido.
Toyota GT2000, Toyota Supra II, Matra Bagheera, Corvette Stingray, Volvo P1900 [sí, 1900], Saab Sonnet 94, Mazda RX7 III, Hyundai S-Coupe FX [sí, aquel bulboso], Maserati Khamsin, Lamborghini Urraco, Fiat Coupe, Isuzu Piazza… hay tantos que TAMBIÉN están en la memoria colectiva y que son fácilmente rescatables, que la dificultad está en digerirlos y seleccionarlos.
Hola Ambassador, para mi la mejor técnica para ver si un coche es realmente guapo, si tiene belleza, es preguntarle a alguien que tenga buen gusto pero que no sea aficionado a los coches qué le parece. En general el E-Type gana por goleada, y el Volvo P1900 también suele gustar. A su lista añadiría el primer Audi TT, el primer Alfa GTV, algunos Maseratis y seguro que hay mas ejemplos. Eliminaría unos cuantos también. En todo caso, yo no conozco a nadie a quien no le guste el Jaguar. Que después no tenga maletero, apenas se quepa dentro, tenga las vias muy estrechas y todo eso es otro cantar, y en mi opinión esos condicionantes impiden que su diseño se pueda superar. Aunque ya se sabe, para gustos…
Hola a todos y, sobre todo, ami admirado Arturo Andrés.
El coche que aparece en la fotografía con la errónea denominación de «Jaguar E Lightweight» es un Jaguar E2A. Fué la primera versión de competición del Jaguar E Type e hizo su aparición antes que el coche de serie, ya que Mr. Williams Lyons deseaba desarrollar el modelo sometiédolo a las exigencias de la alta competición.
Se trataba de un monocasco de aluminio, con un motor XK de carrera corta limitado a 3000 cc. y con la nueva suspensión trasera independiente. Debutó en las 24 Horas de Le Mans de 1960 inscrito por el equipo del norteamericano Brigss Cuningham, de ahí sus colores. Se retiró por problemas de inyección tras haber marcado el segundo tiempo en entrenamientos. Posteriormente corrió en EE.UU equipado de un motor 3,4 y se retiró al final del mismo año.
Un saludo
@10 Creo que el tema de la belleza es sin duda subjetivo, pero en mi opinion debe ir acompañada de contenido para que sea realmente bella. Por ejemplo, un Audi TT podra ser atractivo esteticamente, pero nunca podra ser bello, por planteamiento y «entrañas». En cambio el viejo motor V6 Busso de Alfa Romeo aunaba belleza tanto al ojo como al oido y tambien rendimiento. Esto es belleza para mi.
No entiendo una cosa: ¿Por qué un Fiat Coupe o un Hyundai S-Coupe tienen un «planteamiento y entrañas» mas adecuados para la belleza que un Audi TT? Que conste que no me gusta Audi como marca, pero para una vez que hace un coche guapo…
Por entrañas estamos en el mismo caso, coupes basados en berlinas o compactos familiares, pero creo que en planteamiento estamos en casos distintos. El Fiat y el Hyundai no intentan esconder sus origenes humildes, mientras que el Audi cargando un precio, una imagen y un planteamiento que en mi opinión no se corresponden al producto final (la segunda generación es un caso ligeramente distinto). Es decir que Volkswagen Scirocco si, pero el TT mk1 no lo veo yo.
Es como el caso el A2 y el A1. A mi el A2 me gustaba mucho, un coche de planteamiento y soluciones inteligentes, con marca y precio acordes. En comparación el A1 parece un insulto a nuestra inteligencia.
Buenas!
«ambassador», relájese y tómese este artículo como una pequeña monografía, o doble monografía si me permite, sobre «Butzi» Porsche y el nuevo Jaguar F-Type, relacionados aprovechando que ambos son noticia estos días. Tan sólo para despertar interés y rendir homenaje.
Y recordarle que las citas, citas son, no las ha dicho el Sr. de Andrés, son del Sr. Porsche y del Sr. Callum y criticarlas me parece, como mínimo, pretencioso. Ya que las pone de vuelta y media, decirle también que el arte, la belleza y la estética son subjetivas, que lo que gusta a uno puede no gustar a otro. En cambio que un diseño sea bueno o no es objetivo, se puede medir, hay parámetros que respaldan la afirmación, sea para bien o para mal. Dicho esto, en el artículo el autor no ha entrado en sí algo era bonito o no, ha racionalizado los datos de los que dispone para poder hacer una valoración, punto.
Y por último, volviendo con las citas de F. A. Porsche, permítame que le diga que es totalmente equivocado relacionar dichas citas con las Escuelas de Diseño Modernistas de finales del s. XIX, herederas del Arts & Crafts inglés, ya que estas preconizaban todo lo contrario, que la función seguía a la forma y que lo verdaderamente importante era el adorno porque conllevaba belleza. También es equivocado relacionar dichas escuelas de Viena, Bruselas, Glasgow, París, Darmstadt, Barcelona y Chicago con la Escuela Bauhaus de Dessau ya que esta, si bien en sus orígenes de Weimar fue expresionista (antes de 1925), en su etapa de Dessau y Berlín (desde 1925 hasta 1933) fue claramente racionalista, siguiendo el Movimiento Moderno y con unas enseñanzas que bien podrían haber sido las que dice el Sr. Porsche.
Le recomiendo el libro «Historia Crítica de la Arquitectura Moderna» de Kenneth Frampton.
Saludos
Este blog permite aprender no solo de Arturo de Andrés, sino de algunos de los participantes asiduos, y de otros te sorprendes por lo masoquistas de seguir leyéndolo, críticándo todo y parecer enfadados.
Los dos artículos presentados me acercan a la mezcla de emoción y razón que convierten una aficción en algo atractivo, el diseño de Jaguar siempre ha hecho volverte a mirar, independientemente que algunos de los modelos no los consideraras ni cuando soñabas con la lotería.
Lo de Porche, es otra historia, y me recuerda a esos grupos, cantantes o compositores que se mueven dentro de un estilo, ya propio, que algunas veces suena demasiado igual, pero que nos atrapa por su capacidad de reinterpretar una idea con colores, formas y ritmos diferentes, lo que les hace reconocibles y únicos. Ferdinand A. Porsche consiguió que su idea sirviera para tantos años que no podemos desdeñar su aportación. Hay coches mas completos, mejores, mas eficientes y eficaces, mas fáciles de conducir, mas económicos, pero ¿Quien no ha querido conducir un Porche 911? Yo todavía guardo uno de juguete.
Hola,
Por partes.
Estimado Albert. Todo lo que dice puede llegar a ser cierto, hasta que no lo es [cortesía de Gabriel Rios]. No entiendo por qué criticar citas es pretencioso, ni mucho menos. Y lo digo sin acritud y sin ganas de ofender. Al final, el pensamiento crítico lienal debe ser crítico en ambas direcciones. No se supone que tenemos quecaminar hacia una meritocracia, según los actos, y no los currículos?
Y al grano. William Morris tenía algo que [qué casualidad, y qué anatema] le unía a Adolf Loos, y posteriormente, a Dessau -no en su rama arquitectónica, sino en otras ramas que fueron casi más importantes a nivel industrial que la arquitectónica, como textiles y procesos de producción-. Y que, sin aparecer en Frampton [que está bien como lectura de Metro, hace muchos años que lo leí], sí que aparecen en otros muchos libros y ensayos de arte/diseño anteriores al mismo, desde Kostoff hasta Gombrich, y que en mi opinión, superan a Frampton y a Benévolo en su capacidad de aceptación de los aspectos sociales que se entroncaron con cada época social [que no histórica]. Ambos hacen de la función, forma. Otra cosa es que Función se entienda de una forma cerrada y crítica: para William Morris, la decoración o el ornamento tenía una función muy marcada y determinada para su época social.
Una de las cosas que se me olvidó mencionar, y que es también reflejo de la época contemporánea, es la crítica constante de muchos de los diseñadores y de nosotros como público respecto a la influencia asiática y de otros puntos del globo que empiezan a afectar, y que empiezan a colonizar el mundo del automóvil.
La cuestión es que esta colonización de emergentes va a suponer cambios radicales en muchos de los aspectos del automóvil y de la estética del mismo, pero sobre todo, cambiará el concepto de función que como productos tienen.
Albert, te recomiendo no sólo una lectura cruzada de Ornamento y Delito [en alemán, que si no se pierden muchas cosas en el camino] y «Of time and fetishization of the City» de K. Christiaanse, además de algunas cosas de Hella Jongerus -nunca me acuerdo de cómo se escribe su apellido- y de Bruno Munari, el principal teórico del diseño que ha habido hasta hoy en día.
Respecto a lo que comenta Juanjo, nunca se sabe cómo va a reaccionar el resto del mundo, y es un poco lo que quería decir. No se puede generalizar que Jaguar sea la epítmoe del diseño, puesto que no existirían los drifters japoneses o los «tuneadores» actuales, nos gusten o no. Son una realidad -bastante refrescante, todo hay que decirlo-.
Respecto a tener o no tener un 911, enhorabuena: ya ha encontrado a alguien a quien éste coche no le dice nada más que la capacidad de inversión que las primeras series, si se encuentran a buen precio, pueden tener.
Estimado Ambassador, cuánto tiempo ha pasado y al leerle sólo me cabe que ha respondido por orgullo así que, por lo mismo, permítame que le responda.
Usted lo ha dicho, para Loos función es forma y para Morris forma es función. Aunque parece que no lo ha entendido, por lo que le recomiendo que no se lea el Frampton en el metro por favor, hágalo como se merece, con papel y lápiz.
¿Hella Jongerus? Jongerius supongo. Es la primera noticia que tengo sobre la señora Jongerius como critica de arte. ¿No será que se pasó recientemente por el showroom de Vitra, vió su mobiliario y le gustó su nombre?
¿Kees Christiaanse? ¿El mismo urbanista que diseñó la ciudad portuaria de Hamburgo a finales de los 90? ¿Lo compara usted con Adolf Loos? ¿El arquitecto del primer cuarto del siglo XX? ¿Churras con merinas?
En fin voy a ver vídeos de Munari, pero de Sandro. Como le dije en el primer mensaje, relájese.
Cuánto tiempo ha pasado de esto!
Y sí, churras con merinas. Porque al final, la lana se hace de poliester.
Yo estoy francamente relajado. Pero también relájese vd. Si no entiende qué es cultura contemporánea, no se preocupe. Hay a mucha gente que le pasa lo mismo. Y el Frampton se lo recomiendo como lectura de metro o como soporte de mesa.
Que tenga un buen día.
Por supuesto, que sí, que igualmente.