Qué tal amigos y amigas?
He vuelto. No soy original, porque siempre vuelvo. Tendría más sentido si tardará meses entre un post y otro, pero la verdad es que pocas veces me ausento tanto.
La semana que viene me vacuno (si no pasa nada) y empezaré a ver definitivamente la salida del túnel. Después de todo este tiempo, del jaleo, de la soledad, de los líos, del cabrón de mi perro despertándome cada día a las cinco de la mañana, de todas las noches que no he podido cenar con mis colegas. De la puta vida de clausura.
Ya viene siendo hora.
Me hace ilusión hasta pasarme doce horas en un avión a cualquier parte, yo que le había cogido alergia. Por favor, que vuelvan esos avioncejos a los brazos de papá.
Y tal y como prometí, hoy voy a comentar la última película de Zack Snyder: El ejercito de los muertos. Lo mejor es que el amigo Zack vuelve a los zombis, género en el que se maneja de la hostia; la mala es que salió de allí algúna vez, lo que no le ha sentado muy bien.
La mejor película de Snyder es (sin duda) El amanecer de los muertos.
Creo que es la mejor peli de zombis que jamás se ha hecho. Era brutal, original (aun siendo un remake), profunda, humana y perfecta. Tenía unos títulos de crédito de soltar la baba y unos créditos finales que te hacían explotar la cabeza. No había ninguna estrellaza en el reparto, pero eran todos perfectos. En resumen: era acojonante.
De su filmografía posterior solo me gusta (y mucho) 300. Porque es una adaptación potentísima de un comic complicado de adaptar y porque era lo que le pido a una película que voy a ver al cine: espectáculo, espectáculo y espectáculo. Lo siento, siempre he sido más de blockbusters que de comedias francesas y dramas italianos. Confío en que sabrán perdonarme.
De las otras cosas que ha hecho, pues miren, prefiero no recordarlas demasiado. Es cierto que El hombre de acero tiene algunas cosas que me gustan mucho, pero la última media hora es para matarlo (al hombre de acero y a Snyder). Sobre lo demás, corramos un tupido velo.
El ejercito de los muertos es montarte en una montaña rusa y que la vagoneta se desmadre porque el señor que controla la palanca de velocidad se ha quedado dormido y la ha desplazado hasta la posición de ‘descarrilar’.
La premisa es sencilla, pero tiene su gracia: un grupo de ladrones con un encargo especial en Las Vegas. Robar 200 millones de dólares que alguien tiene allí. ¿El problema? Que la ciudad sufre un brote zombi y está llena de muertos vivientes con ganas de hincarle el diento a algo fresquito. Además, estos zombis podrían competir en los Juegos Olímpicos (porque corren que se las pelan), están organizados (ojo) y hasta tienen líder.
Lo mejor es que la peli se lo toma todo a coña y por tener tienen hasta un tigre zombi, y que además el casting funciona de perlas con un Dave Bautista que ya demostró en Guardianes de la galaxia que tenía una retranca considerable.
Con eso, efectos especiales de los que cuestan pasta y mucha potencia de fuego, pues claro, a Snyder le salen los números.
Ahora está en los cines, pero a partir de pasado mañana también en Netflix.
Así que no se la pierdan. Si es en pantalla grande, mejor.
Abrazos/as,
T.G.