Amigas y amigos,

Qué tal?

Dicen que mañana vuelve el frío a occidente (entendiendo ‘occidente’ como el Mediterráneo) y no puedo ser más feliz.

Luego resultará que ni frío, ni nada, pero la ilusión no me la quita nadie: es lo que tiene ser idiota, que te conformas con cualquier cosa.

Esta semana se estrenan varias cosas.

Les señalo primero lo que se pueden saltar: el especial con la entrevista de David Trueba a Woody Allen, el documental de Netflix sobre un acosador cibernético, la segunda temporada de Machos alfa y casi todo lo demás. Nada está del todo mal, pero tampoco está tan bien como para que valga la pena perder el tiempo con ello.

Les aconsejaría el primer capítulo de Constellation, la nueva serie de la mejor plataforma que nadie tiene: Apple tv.

Explica la historia de una astronauta después de un accidente en la Estación espacial internacional empieza a notar cambios en su realidad diaria. Como si las piezas no encajaran. La verdad es que, de entrada, la cosa tiene muy buena pinta, pero es que -de entrada- casi todo lo que he visto últimamente empieza muy bien y luego acaba en un barranco del que ya no se sale. Por ejemplo: el último episodio de la última temporada de True detective. Empezaba como un tiro y acababa que era yo el que quería que le pegaran un tiro. También Monarch, o Fargo, o El señor y la señora Smith. Las hay a patadas.

Así que, si tienen Apple tv, les aconsejo que le echen un vistazo y si están viendo Masters of the air en esa misma plataforma, les aconsejo que sigan haciéndolo, porque la serie sigue a un nivel espléndido.

Y ahora vamos al plato principal, porque esta semana se estrena Desconocidos.

Desconocidos cuenta la historia de un guionista en medio de un bloqueo creativo que un buen día conoce a su misterioso vecino, Harry. Gracias a éste llega a un paraje en el que sus padres (que habían fallecido años antes) siguen vivos.

Ya, parece bastante delirante, pero les aseguro que funciona, porque Desconocidos es un auténtico peliculón y una de las mejores cosas que pueden ver en pantalla grande no solo esta semana, ni este mes: todo el año.

La pareja protagonista es magia pura, dos integrantes de la mejor escuela británica con una capacidad indescriptible para atrapar al espectador y llevarlo a un mundo que en papel puede sonar naif, pero que en la pantalla de un cine resulta magnético.

Desconocidos es una película elegante, tremendamente delicada, un drama que nunca llega a pasarse de vueltas y que a veces parece un thriller en blanco y negro y otras una preciosa fantasía onírica.

Sea como fuere, Desconocidos es una maravilla. Inexplicablemente, no tiene una sola nominación a los Oscar. Pero bueno, no ganó Bill Murray, no ganó La llegada, no lo ganó Alfred Hitchcock y no va a ganarlo Desconocidos.

Sí, así de buena es. Vayan a verla. Rápido.

Este fin de semana también se estrena Secretos de un escándalo. Una suerte de comedia negra protagonizada por Natalie Portman y Julianne Moore que gira en torno al edadismo y a los líos que se montan cuando uno se deja llevar por sus instintos en lugar de pensar con la cabeza. Para mi gusto, una estupenda muestra de gran cine.

Dirige Todd Haynes, que es un monstruo. Lejos del cielo, Safe o Dark Waters dan buena cuenta de ello.

No se quejarán: dos buenas películas para ver en pantalla grande. Ya firmaba yo para cada fin de semana un panorama igual.

Hala, sean buenos.

Abrazos,

TGR