Amigos y amigas,
¿Qué tal todo?
Nuevamente, pasaré por alto el tema pandémico.
Ya tenemos todos bastante con lo que tenemos, así que hablaremos de mierdas audiovisuales, que son las que nos importan.
Ayer vi una película. No puedo decir cuál es, pero voy a aclarar que en esa película caen cosas del cielo y que me pareció sorprendentemente cojonuda, porque no esperaba nada de ella. Les podré contar más antes de que acabe el mes y espero que vayan a verla a un cine, porque vale la pena que lo hagan.
Prometí hablarles de Mulan, así que aquí va.
Aunque primero voy a tomar un pequeño atajo para comentar algo que me parece interesante.
El estreno de Mulan ha molestado a mucha gente, especialmente en la industria. Es lógico, por primera vez una súper-producción se estrena usando un modelo mixto: en algunos países ha llegado a las salas (su hábitat natural) y en otros se ha lanzado en la plataforma (Disney +) con un precio de 22 euros.
Ha habido quejas, algunas muy agudas y otras menos, percutiendo en la idea de que esto hace daño a los cines.
Yo tengo mis dudas sobre este tema. No sé si Mulan era una película que pudiera aspirar a llenar salas o algo parecido y tampoco creo que este modelo mixto pudiera ser aplicable a una de las grandes películas de animación. Mulan es un bicho raro, una peli pensada para romper el mercado asiático.
Pero -sobre todo- es una película soldado. Me explico, hay pelis que son peones, pelis que son alfiles y pelis que son reinas. Mulan es un peon, puede ser sacrificado para probar una idea, un patrón. Para eso ha servido: para hacer un gigantesco test; para analizar si esta manera de lidiar con el estreno de un blockbuster puede generar los beneficios suficientes como para hacerla rentable.
¿Y la peli?
Pues aunque prescindan del dragón que era lo mejor de la versión animada, funciona de puta madre (con perdón) como película de aventuras, tiene un gran ritmo, está muy bien rodada y se maneja muy bien mezclando la parte más intimista del relato con la épica.
Es la mejor, sin duda, de todas las adaptaciones en imagen real a las que hemos asistido en los últimos años. Mejor que El libro de la selva, La bella y la bestia, Dumbo y El rey león. Es verdad que tampoco era tan difícil, pero lo han conseguido. Teniendo en cuenta, además, que hablamos de un reparto desconocido y que no hay animales que hablen. En principio, no soy muy fan de los animales que hablan.
Dicho esto, le veo un problema: no creo que sea una película familiar.
Y no creo que valga la pena gastarse 22 pavos en verla, porque 22 pavos es mucho dinero.
SI tienen una cuenta compartida y les sale por 6 o 7 y tienen una tele grande y un proyector, adelante.
Si no es así, yo me lo pensaría más… porque además en diciembre ya estará disponible para todos en la propia plataforma.
Y hasta aquí mi opinión.
Sean felices o inténtenlo con intensidad.
Abrazos/as,
T.G.
Se nota que no tiene usted varios hijos. Piénselo: o día del espectador, o te gastas más pasta en las entradas para usted, su señora y sus dos retoños, todo ello sin contar Coca-Colas industriales y cubos de palomitas. He ahí la gracia de estrenarlo en Disney+, plataforma mucho más enfocada a la familia que, por ejemplo, Amazon Prime.
Sería curioso conocer el perfil de los usuarios de Disney+ frente a los de HBO y Amazon Prime, la verdad.
Un saludo
Wenas!
Ostrás! gran reflexión amigo @patoaparato. En mi caso que soy mucho de bélicas, tiros, explosiones, coches y velocidad, me viene como añillo al dedo Amazon (amén de que sólo con los envíos gratis ya me salía a cuenta estar inscrito) Pero en el momento tenga descendencia, el Disney+ va a ser obligado tenerlo.
A parte, a mi la del Libro de la Selva me gustó mucho. Las otras adaptaciones se las podían haber ahorrado. Si la de Mulán va mejor, habrá que apuntarla.
Por cierto, rescato de uno o dos post antes la recomendación de la serie «THE BOYS». No pude ver sólo el primer capítulo. De hecho me tragué tres del tirón y eso que duran una hora. Y no me vi la primera temporada entera porque ya era tarde. Muchas gracias por la recomendación 🙂
A mí 22 euros para ver una película en casa me parece una salvajada, se mire como se mire. Y todavía más para esta película en concreto.
Pues en mi humilde opinión es un error. Mayúsculo además. Para Disney y sobre todo para la industria del cine, la directa (las salas) y la auxiliar (palomitas, restaurantes, tiendas de los centros comerciales donde están los multicines, etc). ¿Por qué? Porque en el momento en que está disponible en digital, al día siguiente te la puedes descargar de las numerosas páginas que hay, en HD además, no grabada del cine en pe´sima calidad y con el audio que parece que los actores están metidos en una tinaja. No, en HD. Ahí queda eso.
Es como cuando Sony Music se quejaba de la piratería… al mismo tiempo que ellos, Sony, eran el primer fabricante en sacar al mercado el grabador de CD. Hipocresía en estado puro.
Si «Mula´n» la hubieran estrenado en salas, yo habría ido a verla con mis dos hijos. 3 entradas, 15 euros. Y habría comprado palomitas. Y habría comido antes o después de verla en algén restaurante o hamburguesería o donde fuese. Pero la vi anoche porque me la había descargado. En HD gracias a la genial y revolucionaria idea de Disney+.
Yo prácticamente todas las películas que estrenan las veo en el cine, al menos las que llegan a mi ciudad. Y cuando al cabo de los meses están ya colgadas (insisto, en buena calidad, no grabadas de la pantalla) me las descargo y las vuelvo a ver, con los niños o solo según el tipo de película que sea. Si ya la he visto en el cine y he pagado no voy a pagar de nuevo por verla. Una cosa es el mercado y el justipecio y otra exprimir eternamente al espectador. Exprimir por no decir robar.
Disney en mi caso ha conseguido la siguiente recaudación por Mulán: 0 euros. Repito: 0 euros. Con el añadido de los efectos colaterales, de que gracias a su «experimento» se joden todos los de la industria: las salas, la hostelería, las tiendas, etc. Y estos efectos colaterales no tienen nada que ver con que yo me descargue la película o no, ocurren sí o sí. Ocurren tanto si me gasto 22 euros en Disney+ como si me la descargo, porque en ambos casos no voy a la sala a verla.
Y ese es el gran problema: que se van a cargar las salas. Creo firmemente que salas y plataformas son compatibles. Tengo Netflix y Amazon Prime, y me veo en salas casi todo lo que se estrena. Son modelos compatibles, pueden coexistir. Pero insisto en que Disney la está cagando al no estrenarla en salas.
Van a recaudar menos y de paso le están dando una puñalada a la industria del entretenimiento. Lo único que espero es que esta puñalada no sea mortal.
La semana pasada fui a ver «Tenet». La sala estaba a la mitad, lo que en tiempos de pandemia equivale a decir que estaba llena. Seguro que dentro de unos meses echarán cuentas y verán que no han perdido dinero estrenándola. Evidentemente no habrán ganado la millonada que habrían ganado de no haber pandemia, pero perder seguro que no pierden. Por eso espero que sigan estrenando películas en salas, que se aprieten un poco el cinturón mientras dure la situación. Porque si se cargan las salas, cuando pase esto ya no habrá cines en los que estrenar películas.