El nuevo Kuga, del que hablamos en este artículo de km77.com, es un todoterreno de esos que no están pensados para ejercer como tal. Respecto a un turismo ofrece una mayor altura libre al suelo y, en el caso de algunas versiones, un sistema de tracción total mediante un embrague multidisco que acopla las ruedas traseras a las delanteras cuando lo considera necesario. No hay reductora, bloqueo de los diferenciales y la suspensión no tiene recorridos grandes.
Pero aunque el Kuga no parece que esté pensando para utilizarlo por zonas abruptas, acepté la invitación del club MonegrosTT para acudir a sus instalaciones y meterlo por sitios donde no creo que el comprador de este coche tenga intención de hacerlo. Y si la tiene, siento comunicarle que se está equivocando. No lo digo porque el coche vaya mal pero para tales exigencias es mejor decantarse por otros modelos más enfocados al campo. La versión probada es la Diesel de 163 CV, que va asociada sí o sí al cambio automático Powershift. Los neumáticos eran los de serie, unos Goodyear Wrangler de medidas 235/55 R17.
MonegrosTT tiene su centro operativo en Mozota, un pueblo de Zaragoza. La semana que fui con el coche había sido de lluvias intensas y frecuentes, así que me esperaba, sin duda alguna, el barro.
Tras una primera foto con el coche aún limpio, subimos a la zona donde hay montado un pequeño recorrido de un kilómetro para hacer manos con los coches o las motors. Es al que corresponde el vídeo que hay más abajo. El vídeo no sirve para nada concluyente respecto al coche, pero lo he subido para que puedan hacerse una idea de la cantidad de agua que había. Porque sí, esas minilagunas que se ven no son tales, son charcos, en algún caso inmenso.
[youtube https://www.youtube.com/watch?v=EojcuS1q2gM]
Tras remojar el coche (no, no encoje), bajamos a las zonas trialeras. En primer lugar, toco subir una trampa —con algo de carrerilla—.
Después bajé por una pendiente resbaladiza. El coche se iba cruzando poco a poco, parecía que las ruedas traseras querían bajar antes que las delanteras. En estos casos, la solución es dejar de frenar e incluso acelerar, tal y como Jose Manuel Fernández, el responsable del circuito, me gritaba. Pero a la vez que me decía eso no se movía de donde estaba, justo en la trayectoria que el coche iba a tomar si yo hacía lo que el pedía y yo quería hacer. Al final, aguanté hasta que ví que la cosa se ponía muy malita.
Pocos metros después, apareció él. El barro. Barro que, sin parecer muy resbaladizo, lo era. En el vídeo apenas se percibe cómo, por la ligerísima inclinación que tenía el camino, el Kuga comienza a deslizar hacia la izquierda, hasta que queda atascado. En las imágenes parece que soy yo el que apunta hacia fuera del camino, pero nada más lejos de la realidad. Afortunadamente nada que no solucionase un Land Cruiser con buenas ruedas y bien colocado.
Visto lo visto, dudábamos muchísimo de que el Kuga fuese capaz de pasar la siguiente zona de obstáculos, unos agujeros colocados alternadamente a izquierda y derecha, en la trayectoria de las ruedas. Pues nos equivocábamos. Siendo cariñoso con el acelerador y jugando con la inercia, el Kuga pasó el obstáculo. En el vídeo se oye una anécdota que cuenta Jose respecto a los problemas que tuvo un Montero en esa misma zona.
Animados por el éxito, Jose me dirigió hacia una zona más exigente, empezando por una inclinación lateral. No sé a cuántos grados quedó el coche, pero os aseguro que era difícil manterse sentado en el sitio sin caerse hacia el lado derecho.
El Kuga avanzó en ocasiones sólo con la rueda delantera derecha y la trasera izquierda en el suelo, porque las otras dos quedaban colgando en el aire. Eso no se ve en el vídeo ni en las fotos y tampoco lo cerca que la carrocería quedaba de la pared. Sirve para hacerse una idea cómo, en el minuto 3.47, tengo que plegar los retrovisores para que el derecho no golpeé. La salida de esa zona era espectacular por lo alta que quedaba del suelo la rueda delantera izquierda (y parte del coche :D)
Intentamos pasar por una cresta pero fue imposible ya que el Ford se quedaba empazando. Era un obstáculo dificl donde lo que se necesita es mucha altura libre al suelo. Inténtando sacarlo apareció el aviso de transmisión sobrecalentada (no recuerdo exactamente la expresión), bastó con un par de minutos de reposo para que todo volviese a la normalidad.
De ahí al último obstáculo, un cruce de ejes con mucha profundidad. La limitación la ponen los ángulos característicos, no el sistema de tracción. Las partes del coche que rozan contra el suelo son de plástico sin pintar, así se evitan marcas feas y el tener que repintar esas zonas.
Y el vídeo:
[youtube https://www.youtube.com/watch?v=TzazA6OvKqI&w=700&h=394]
Por último, me queda agradecer a MonegrosTT y a Jose Manuel Fernández su colaboración para la realización de esta prueba.
Alfonso Herrero
Lo que disfruta uno leyendo y viendo las pruebas de TT/TC.
Yo pienso que algunos (ahora llamados) todocaminos «bien pensados» (altura decente, paragolpes recortados, buena transmisión, marcha corta/s) pueden ser una alternativa muy real a los todoterrenos, entendiendo esto por quienes realmente van a usar el coche por pistas y caminos reales de nuestra España. Cada vez más pienso que los Monteros, Land Cruiser… «quedan muy grandes».
La mayor limitación que yo les encuentro a los todocaminos es la ausencia de reductoras o marchas cortas. Porque para pasar por una puntual rodera, un badén transversal al camino, una fuerte pendiente con curva, para descensos prolongados… es dónde marca la diferencia (y la seguridad) de disponer de un elemento MECÁNICO que te permite avanzar a baja velocidad, de forma cómoda, práctica y sin dañar embragues (o paragolpes, cárter… por recurrir a la carrerilla)
A Celedodio, que dé las gracias que era un Kuga automático… y no es su coche.
Aun así, resulta sorprendente por donde hacen pasar al Kuga, si fuera mio yo no lo habría hecho.
Entiendo que al ser automático, la baja velocidad no hace que se cale, lo que es una gran ventaja respecto a los manuales.
Pero los diferenciales, controles de descenso, embragues de acoplamiento, etc. electrónicos, se calientan y dejan de funcionar cuando mas falta hace, es decir, en barro, como en la prueba.
Pero ya no venden 4×4 con diferenciales mecánicos, como el Land Cruiser que acude al rescate, siento haber vendido el mio, que además era de ese color.
Aunque el Kuga con unos buenos neumáticos TT creo que hubiera sido otra cosa, pero en carretera son incómodos, hacen ruido y agarran poco en mojado. No se puede tener todo (o si, un buen Land Cruiser de los antiguos tiene casi todo…..salvo capacidad de curvear en montaña)
Que bien se lo pasa usted bardeando… Tendríamos que haber llevado un Kuga a Marruecos…
Qué decepción el nuevo RAV4 si resulta que es más incómodo, más torpe y menos capaz en offroad que el Kuga ¿no? Debo decir que no he tenido ocasión de conducir el RAV4 y el Kuga de nueva generación pero sí ambos de la anterior y el Kuga parecía un GTI en comparación. En cuanto a esta interesante prueba, lo raro es que la transmisión no tirase antes la toalla por sobrecalentamiento. Hay que tener en cuenta que este circuito tiene una pinta bastante dura, sólo apto para 4×4 auténticos y, de no haber habido barro, habría pasado por todas partes sin ayuda. Impresionante. Esos Wrangler ¿son M+S o mixtos? Pienso que para un uso 80% carretera 20% offroad light unos mixtos tipo Conti Cross Contact AT deben de ir fenomenal en este coche.
Sorprende por donde puede pasar, aunque duele un poco. Sobre todo meter los discos calientes en ese charco. Los discos de embrague se pondran finos también, tal vez la diferencia con un Land Rover es que este puede hacer esto muchas mas veces antes de estropearse.
¿Este que va a ser, KM0 Gerencia de los que usa el jefe del conce para ir a los recados o el que entrega ese dentista ya mayor para sacar un Mondeo?
Desde Club Kuga http://www.clubkuga.org os queremos dar las gracias por este estupendo reportaje. Es justo la faceta donde no se suele ver este tipo de vehículos pero que algunos nos encanta.
Si le quitan la «j» al verbo encoger, ya les doy un 10.
Me encanta el último vídeo. Flipante.