Esto de los viajes organizados es lo que tiene. Yo vine el año pasado solo a Marruecos y estuve tan feliz.
Este año vengo acompañado. Nada que ver. Si a uno le toca un grupo de personas pesadas, vagas y chismosas lo mejor es volver para casa, se lo digo yo. Háganme caso, que sé de qué me hablo.
Me voy a quedar un par de noches más en este hotel, que tiene una magnífica conexión a internet. Por donde estuve yo el año pasado no conseguí tanta calidad. Selecciono alguna de las fotos que he hecho, las publico y me vuelvo para Madrid.
Ya se lo digo yo. No se les ocurra viajar en grupo. Siempre hay pesados que llegan tarde, otros que ni siquiera se paran con el coche para esperar, otros que corren como locos. Nadie hace lo que a mí me gustaría y eso no puede ser.
Lo siento. No habrá imágenes de dunas. No les podré contar trucos de cómo se suben y se bajan. No habrá fotos del desierto arenoso. Nada.
Como decía ayer Lucas, esto no hay forma de contarlo. Tiene razón.
Ustedes lo saben. Yo me debo a mis lectores. Si estoy aquí y no hay forma de contarlo, les doy envidia y encima voy con un grupo de personas indeseables lo mejor que puedo hacer es volver para casa.
Yo lo he intentado. Lo siento. Es mejor decir que no a tiempo. Que se apañen ellos con los coches, ya que son tan chulitos, que lo hacen todo tan bien.
Vendo participación en revista. Que lo sepan.
Imagino que este post es de broma y que, en realidad, todo está saliendo a pedir de boca, pero que tiene que volverse a Madrid porque se ha dado cuenta de que tiene un cartón de leche abierto y no quiere que se eche a perder.
¿Los conocía bien de antes? Seguramente solo de tomar algún café y poco mas…
Hay que estar muy compenetrado para hacer cualquier cosa en grupo, no solo viajar, ni te cuento montar un negocio. Se tiene que conocer bien a «los otros» y aún así a veces hay que tener tragaderas.
Por convicciones, creo que la mitad de la humanidad es buena gente. Lo malo es que las vísceras me dicen que la otra mitad son unos desgraciados. Pero si le sirve de algo, al principio siempre concedo el beneficio de la duda.
Viajar acompañado es de las cosas más difíciles que hay; casi todas son posturas legítimas y sin embargo irreconciliables. Unos quieren madrugar, otros no. Unos quieren dejarse llevar e improvisar sobre la marcha, otros quieren programar cada minuto al instante. Unos comen en cualquier lugar, otros quieren un mínimo personal. Unos quieren mezclarse con la gente, otros no.
Por lo que al desencanto personal, separe la profesionalidad de la personalidad; uno no tiene por qué hacer negocios con gente que le caiga bien. Uno puede hacer negocios con gente que le caiga fatal porque el negocio y la amistad son cosas que tienden a estar disociadas entre sí.
JM
Vende? no me lo creo. Tan pronto no, me da que no es de los que se rinden tan facilmente. 😉
A mí la gente me mira raro cuando digo que me voy solo de viaje. Que es muy aburrido, que dónde vas sin conocer a nadie.
Ir acompañado si, como se ha dicho, tienes buena compenetración y confianza con quien vas, mola. Pero ir solo es un lujo. Llegas, te levantas, acuestas, sales, entras, vienes, vas, comes, tomas café, miras a la gente, visitas los sitios, lees, haces fotos, etc, etc, cuando y como te da la gana. Dejas de disfrutar unas pocas cosas en compañía, pero muchas otras las disfrutas al máximo porque son el único motivo por el que estás ahí, no el pasar tiempo con otra persona. Que puede ser estupendo, insisto, pero ya es un motivo distinto.
Y yendo solo, además, no hay riesgo de que el acompañante te amargue el viaje, como parece que ha sido el caso.
Le entiendo perfectamente.
Sin duda lo he pasado mejor en mis viajes sólo (o con la compañía justa para ser llamada compañía) que en grupo.
Conociéndole (no se si poco, mucho, o todo lo contrario) grave ha tenido que ser, sin duda.
Intente Ud. disfrutar los días que le quedan.
Por cierto, no puedo estar más de acuerdo con JM y su comentario acerca de los negocios y la amistad, aunque sin duda es más gratificante cuando lo haces con gente que te inspira al menos algún «sentimiento positivo».
Saludetes.
Es Ud. un gruñón. Su frase de «nadie hace lo que a mi me gustaría» Lo dice todo. 😉
Sr. Moltó, sabe que me haría ilusion ^^?
Ver una foto con todos los escritores de este blog, es decir;
Usted, Celedonio, Ramiro, A. de A. , Marta, Jose B. , etc… 😀
Salu2!!
Decías en tu anterior post: «No es posible tener mejor compañía y mejor guía. Bueno, eso espero.»
Lo de «eso espero», ¿era porque ya tenías alguna duda?
Siento que te haya salido al revés. La próxima vez irá mejor. Seguro.
Saludos,
Gabriel.
Espero que se lo este pasando bien. Donde sea que este…
Pienso igual que Exeo. ¿Seguro que ya les ha dado la última oportunidad?… ¿la última?.
¡Ánimo pase lo que pase!.
Sr. Moltó, si sus compañeros de viaje se han cansado de que sea usted tan paquete y tengan que ir esperándole continuamente por ir pisando huevos y por pasearse por Marruecos con un Montero como si fuera con un Golf…..no se lo tome así. Entiendalos, ellos han ido a divertirse y no quieren ir de carreras pero tampoco es plan ir parando en cada cruce a esperarle a usted para que no se pierda….
Cada día que pasa entiendo más a Freud (en sus últimos días de autoexilio) ¿ud. también?
Para compartir mucho tiempo hay que tener un mínimo de compenetración.
Cuando hacemos viajes en grupo, siempre reservamos por lo menos una tarde para ir cada uno a nuestro aire. Que nos llevamos muy bien, pero 15 días y 15 noches seguidas juntos es mucho tiempo.
No hace falte que culpe a sus ex-acompañantes de quedarse donde está. Yo también lo haría…….levantarme y lavarme la cara en un lavabo de cobre, salir a la piscina exterior con jacuzzi, ir a la cafetería que seguramente contará con una preciosa barra de cobre repujado, disfrutar de una blanca tumbona junto a la piscina mientras se deleita con preciosas vistas…..
Venga ya hombre! ud. estaría chalao (o xaluca como se dice por mi tierra) si en vez de disfrutar de su estancia se dedicara a pegar botes en un vehículo con chásis de travesaños.
Descanse y vuelva a casa.
Los viajes en grupo solo salen bien cuando hay gente con sentido del humor que se dedica a desdramatizar y a coaligar el grupo. Y cuando se admiten variaciones on-line sobre lo planificado y no se empeña uno en que todo salga como se planificó. Y cuando uno sabe reirse de si mismo y es algo humilde en las situaciones difíciles. Y sabe ceder la razón, aunque la tenga.
Y siempre sale mal cuando hay soplagaitas creidos que quieren que todos se acoplen a su ritmo y que no tienen ninguna de las cualidades antes citadas.
Pero el mejor viaje, el que hace que todos los paisajes sean mas verdes y las camas mas confortables y la comida mas rica, es el que se hace en pareja, enamorado de la persona adecuada y esta nos corresponde. Es como circular con gafas de sol que mejoran el paisaje.
Ay, Joaquín, que estaba yo muy de acuerdo con usted hasta que ha volcado el azucarero sobre el teclado; hijo: qué empalago con el amor y eso, quite, quite.
Croq. hiperglucémica
¡¡¡Subidón de azúcar!!!
Publicado el pasado sábado: «Será imposible que lo pasemos mal»
Hay que tener mucha paciencia y tolerancia para viajar en grupo.
Yo no la tengo. Por lo que jamás viajo en grupo. Mi tesorín y yo vamos hasta el fin del mundo las veces que haga falta… pero solos los dos.
Y si alguna vez es con compañía… sólo para vernos en momentos puntuales. En un viaje de 2 semanas, nos vemos 4 ó 5 tardes y punto. Luego, cada uno a su aire.
Me parece inconcebible hacerlo de otra forma (no se vuelva usted tan pronto; disfrute usted sólo de Marruecos).
Hay algo que no cuadra.
Es como si pensara que no es usted quién escribe. Siempre tan ecuánime. Tan razonable. Y aquí es como si dijera: ya no puedo más. Como si el que escribe fuera otra persona en un momento de extremo conflicto o enrabietado por algo. Y sólo digo esto por el final de su post. Por lo demás, entiendo que hay tiranteces en un grupo de viaje… pero imagino que los conocía no? que eran amigos, no?
Estamos preocupados. Por usted.