Entremos directamente en materia: hoy anunciaban que la Generalitat va a promulgar una ley por la cual la mitad de los estrenos cinematográficos en su territorio (y el mío también) deberán ser doblados o subtitulados al catalán.
Como catalán que soy, y ya que la obligación de un bloguero es mojarse, me declaro favorable a la segunda parte de la ley, es decir, a que se subtitulen las películas (lo cual conllevaría que se estrenaran en su versión original) ya sea en catalán o en castellano.
¿ Y porqué? Pues porque aunque soy catalán y creo que nadie debe obligar a un tercero a proyectar sus películas en uno u otro idioma, también es verdad que no nos iría mal a todos refrescar nuestros idiomas secundarios y ya de paso darme a mi la oportunidad de ver una película en V.O. en condiciones (en cines que no fueran cutres o llenos de tipos con gafas de pasta -benditos sean) y hasta, en el colmo de la desfachatez, poder ver pelis comerciales en salas grandes donde tuviera la oportunidad de escuchar a Damon o a Clooney o a Pitt o a la Blanchett, la Tomei o la Paltrow, hablando en inglés.
¿Y porqué? Pues porque a mi me gusta oír las voces de los actores/actrices de turno y porque me gustan muchas pelis “comerciales” (un adjetivo que algunos usan con asco). Igual soy un bicho raro.
Dicho esto, recuerdo una incursión del gobierno Pujol hace muchos años en este mismo asunto y también recuerdo la marcha atrás que tuvo que dar el President porque las majors americanas (los grandes estudios hollwoodienses, pa que nos entendamos todos), y especialmente su ariete en aquellos tiempos el señor Jack Valenti (un tío de esos que le vendería una nevera a un esquimal) dijeron que NANAI. He pegado una foto del señor Valenti, ya fallecido, para que le pongáis cara. La cuestión es que el buen Jack hizo unos números y dejó bien claro que la ley no se iba a aplicar.
Así fue, y es que las majors son muy majors.
También me llama la atención que se anuncie justo ahora, con la que está cayendo, una ley como esta, en lugar de –entre otras muchas cosas- bajar el IVA de los productos culturales, aplicar una rebaja en las retenciones, tomar medidas eficaces contra la perdida de empleo y, atención amigos/as, ayudar a los autónomos/as (como un servidor) que las están pasando canutas.
Con esto me queda claro que el gobierno (no importa el color, la ubicación geográfica, el ala, o la orientación religiosa) solo tiene un objetivo: que nos pasemos el día discutiendo de chorradas. Porque eso es lo que es esta ley señores: una auténtica chorrada. En menos de un año (si alguien quiere apostar, aquí estoy) ya la habrán retirado y una comitiva (encabezada por los de siempre) ira a Los Ángeles a pedir perdón. Estoy seguro de que el idioma de mis padres , y de mis abuelos antes que ellos, necesita toda la ayuda que mis políticos le puedan dar, pero también estoy seguro de que esto no es otra cosa que una cortina de humo, un invento coyuntural para los amantes de la polémica barata y la paparrucha ocasional. Y como cantaba Julio Iglesias: “la vida sigue igual”.
Si queréis opinar, aquí os arrojo el guante, si no, decidiré que estáis de acuerdo conmigo y me sentiré realizado.
T.G.
P.D.: Naturalmente, y en mi humilde opinión, tenemos los políticos que nos merecemos (y el cine que nos merecemos, en el idioma que nos merecemos y las salas que nos merecemos, en las condiciones que nos merecemos).
P.D.2: Por favor los que decidan insultarme o llamarme quintacolumnista/demagogo que lo hagan con corrección. La descalificación tranquila es siempre más civilizada.
Yo no le voy a insultar, ni nada. (Aunque adoro mis gafas de pasta que no tengo)
Sólo le pido que ponga una línea en blanco entre los párrafos, después de los puntos y aparte, y que intente poner párrafos más cortos (poner más puntos y aparte)
Sus textos se leerán mucho mejor y habrá más gente que le descalifique tranquilamente.
Una abraçada
Javier
muy buena javier!!!le agradezco que se preocupe por los demas,pero no se preocupe cineacuatroruedas,me lei todo su comentario,como siempre.
yo soy de valencia,pero no naci aqui,y para mi seria un poco desgracia de que las peliculas las doblaran en valenciano. Pienso que lo mejor seria es ampliar un horario cuando se pudiera verse en grandes cines tanto subtitulada con en VO o doblada al valenciano.
Eh, eso ha sido rapidez de reacción. Muchas gracias.
En España tenemos muy buenos dobladores, y nos gustan tanto, que doblamos todas las películas. Como bien dice usted, incluso en Madrid, para poder ver alguna en V.O. hay que acudir a cines muy concretos, que no suelen estar precisamente a quince minutos de casa.
En muchos países de Europa, en los cines se proyectan mayoritariamente películas en V.O. Y supongo que ello estará relacionado con el hecho de que mucha gente hable inglés con fluidez. En Suiza o en Luxemburgo, casi todos los taxistas o camareros hablan un buen inglés. Cosa que en España es aún difícil de encontrar.
Mientras tanto, aquí nuestros políticos se empeñan en intervenir en todas las esferas de la vida, incluida la cultura. Las lenguas autonómicas, como oficiales, merecen todo el respeto y apoyo institucional. Pero más respeto merece el futuro de todos, y eso pasa por potenciar el conocimiento del inglés desde la infancia más tierna. Y de paso, dejar al personal que decida cómo le apetece ver una película. Dentro de nada nos van a decir cómo cortarnos el pelo.
J.
Estoy de acuerdo en que se dé la posibilidad de elegir el idioma. Pero que por ley tenga que ser un 50%… por ahí no paso.
En Madrid hay unos cines muy céntricos (no recuerdo el nombre, a pesar de haber ido un par de veces) en los que ponen algunas películas de las comerciales en V.O.S.
Hola a todos.
Me pueden llamar lo que se les ocurra pero, ¿no podrían poner auriculares en cada butaca para que cada uno oiga la película en el idioma que quiera? Al fin y al cabo los sonidos que no son conversaciones salen por los altavoces de las salas a alto volumen y se seguirían oyendo.
A lo mejor es la tontada de las 17:00 o a lo mejor no. Opinen (la idea no está puesta en práctica en ninguna sala -creo-).
Saludos desde Zgz.
Javier (#3), digo lo mismo. Altro71, el sonido envolvente de una sala de cine se destruye cuando uno se coloca auriculares.
En Montevideo, Uruguay (no desde hace cuánto tiempo), la norma es subtitular las películas habladas en idiomas distintos del español. La excepción son las películas para niños, y a veces las familieras. Pero las películas animadas de Pixar, Dreamworks y las de aventuras fantásticas (Harry Potter, Narnia…) también se suelen exhibir en idioma original y subtituladas al español. Hay pocas salas de cine en otras ciudades uruguayas, y tengo entendido que llegan con aún más atraso que acá.
Prácticamente todas las películas que se muestran en las salas de cine uruguayas son hollywoodenses. Cada tanto salen las películas uruguayas (después de que se lleven premios en festivales extranjeros), o un puñado de comedias europeas (sobre todo francesas y británicas). Para encontrar cine latinoamericano y de otros países europeos, es obligatorio ir a Cinemateca.