Con esta prueba cerramos, al menos de momento, el repaso que le hemos dado últimamente a una serie de productos del complejo formado por Renault y Dacia, dentro del marco más amplio de la Alianza que también engloba a Nissan. En este repaso hemos revisado, por parte de Renault, el Clio 0.9-Tce con su ligeramente retocado motor, y hace muy poco el Scénic con la novedosa llanta de 20”. Y luego hemos tocado un par de coches de otro corte muy distinto: el Dacia Sandero Stepway y el Renault Captur, el primero con el mismo motor que el mencionado Clio, y el segundo con el mismo 1.5-dCi de 110 CV que montaba el Scénic. Y el círculo se cierra con este Dacia Logan MCV (familiar, para entendernos) que lleva la versión más tranquila de este último motor, de 90 CV y con turbo de geometría fija.
Los Dacia siempre tienen un claro componente utilitario y económico, que en el caso del Logan MCV es claramente detectable desde el primer momento. En esta versión, Dacia ha dejado al margen el intento de darles a sus coches –con las versiones Stepway que tanto éxito parecen estar teniendo- un carácter ligeramente todo-camino, a base de suspensiones más altas y retoques cosméticos. El Logan MCV a secas es un familiar en el más puro y clásico sentido de dicho concepto: carrocería de berlina cuatro puertas hasta el pilar C, y luego continuación del techo hasta mucho más atrás, para caer casi en vertical sobre una zaga con mucho más voladizo que en los “hatch-back” y tanto, o incluso más, que en las variantes Sedán de tres volúmenes.
Ciertamente, el Logan MCV también tiene su versión Stepway, pero la que hemos probado es la “de asfalto”, con suspensión de altura digamos “normal”; el Stepway acaba yendo 38 mm más alto. Y esto es algo que ya se deja notar en el comportamiento rutero, e incluso un poco en el consumo, aspecto en el que también son perjudiciales los aletines añadidos y otros retoques de tipo más bien cosmético. No hay duda de que habrá un cierto porcentaje de usuarios a los que les vendrá muy bien el MCV Stepway, con su mayor capacidad para circular por caminos en mal estado; pero no es menos cierto que incluso habrá más a los que les basta con el de suspensión baja, que con cuidado también puede circular por un camino de tierra que esté en un razonable estado de mantenimiento.
Al fin y al cabo, el promedio de las vías, tanto de asfalto como de tierra, algo ha ido mejorando a lo largo del tiempo; y si durante muchas décadas la gente ha salido adelante con un familiar que no tenía más que un único tipo de suspensión (en algunos casos reforzada pero apenas más alta, si es que lo era), malo será que al menos dos tercios de los usuarios no puedan funcionar tranquilamente con un familiar de suspensión normal, que les ofrece mejor comportamiento rutero y consumo todavía más económico.
En fin, este es el Logan MCV normal y esta su ficha técnica resumida:
Dacia Logan MCV 1.5-dCi 90 CV:Motor: 1.461 cc; 90 CV a 4.000 rpm; 22,4 m.kg a 1.750 rpm. Transmisión: Caja de cinco marchas, con 39,9/54,4 km/h a 1.000 rpm en 4ª/5ª. Neumáticos: 185/65-15 (GoodYear DuraGrip, tipo comercial). Cotas (longitud/anchura/ altura): 4,50/1,73/ 1,52 metros. Peso (sin conductor, con depósito lleno): 1.090 kg. Velocidad máxima: 173 km/h. Consumo extra-urbano: 3,4 l/100 km. Emisión ponderada de CO2: 90 g/km. |
El motor 1.5-dCi –probado en su versión de 110 CV en dos ocasiones muy recientes, en el Captur y el Scénic- es sobradamente conocido; pero la de hoy es su versión más económica. La cual cede 20 CV y 40 Nm (4,1 m.kg) respecto a la más potente. La diferencia fundamental –aunque quizás no la única- radica en que el de 90 CV monta un turbo de tipo clásico, por no decir antiguo, de geometría fija en sus álabes, mientras que el de 110 CV dispone de uno con geometría variable. Y luego, la gestión de soplido e inyección está retocada, y de ahí viene el incremento de potencia y par.
En lo que se pierde, al margen de en los valores máximos, es en la respuesta inicial a medio y sobre todo bajo régimen; en el de 90 CV es más progresiva, sin esa “patada” casi instantánea que se consigue –a partir de 1.300 a 1.500 rpm, según modelos- cuando se mete bruscamente el pie a fondo. Y luego, al cabo de uno y medio a dos segundos, el empuje se podría igualar, si bien en este caso la diferencia de gestión hace que el de 110 CV tenga siempre más par; pero esto ya no depende tanto de que el turbo sea de un tipo u otro, sino de los tarados de soplado e inyección. En este caso concreto, el motor tira decentemente desde 1.300 rpm, pero pisado a fondo vibra hasta 1.500, dando la impresión de que no va a gusto. Pero esto puede deberse a un montaje más elástico de la mecánica sobre el monocasco; ya dijimos en la prueba del Logan Stepway que casi todos los elementos elásticos de los Dacia, ya sean en el bastidor como en la sujeción de la mecánica, dan la impresión (y la realidad) de ser claramente más blandos que en los Renault.
Los frenos traseros son de tambor, pero con 228 mm de diámetro interior de pista, son de bastante buen tamaño, y garantizan una firme sujeción para estacionar; lo cual parece ser una preocupación recurrente en los coches destinados, al menos en parte de su producción, a mercados emergentes. Actualmente, y dado que la gran mayoría de los coches ya llevan frenos de disco traseros, no está claro que los de tambor vayan a resultar ni tan apenas más baratos, pues se producen en mucha menor cantidad. Lo del freno de estacionamiento parece ser una, o quizás la única, razón para seguir utilizándolos. No obstante, algunos coches típicos del mercado europeo, como las versiones básicas de Renault y Grupo VAG, siguen montando frenos de tambor traseros; así que la cosa no acaba de estar clara.
También hay una peculiaridad en la servoasistencia de la dirección, que lo mismo que en el Sandero Stepway (y parece ser que en todos los Dacia), es de tipo hidráulico; resulta un tanto lenta, con sus 3,2 vueltas de volante de tope a tope. Probablemente para que la bomba no tenga que ser muy potente, ni chupe demasiado par de la polea del cigüeñal; y eso que los Dacia no se distinguen precisamente por utilizar neumáticos muy anchos, que exigen notables esfuerzos para maniobrar a coche parado. Eso sí, el tacto y la transmisión de sensaciones son buenos, sin los tirones que daban las de tipo eléctrico antiguas; éste era el caso de las primeras de Renault, y quizás por eso (entre otras razones) en Dacia se decidieron por la asistencia hidráulica.
El neumático montado en nuestra unidad de pruebas –y suponemos que en todos los MCV, aunque de suministradores diversos- es básicamente para ser montado en vehículos comerciales ligeros, y presume de garantizar un alto kilometraje, sin duda por la utilización simultánea tanto de una carcasa como de un compuesto de goma tirando claramente a duros. Pero de ahí también se deriva una baja resistencia a la rodadura, aunque oficialmente no se les considere como tales.
Pasando ya a la carrocería, el Cx oscila entre 0,343 y 0,35 según diversos datos, con una variación que no es demasiado grande. En cuanto a la sección frontal S, es de 2,214 m2, compensando el ser relativamente estrecho con tener bastante altura. Así que, unas cosas con otras, el producto final S.Cx está sobre 0,76, que es un resultado bastante malo para un turismo, categoría en la que el Cx rara vez supera actualmente el 0,32/0,33.
Pero la compensación, de cara a la economía de consumo, está en toda una serie de factores favorables: el turbodiesel con turbo de geometría fija, que es más económico en las aceleraciones, a cambio de perder esa “patada” inicial que tanto gusta al conductor habituado al turbodiesel; luego los neumáticos relativamente estrechos y de fácil rodadura; un peso que en vacío no llega a los 1.100 kilos, pese a tratarse de un coche de cuatro metros y medio; y finalmente, unos desarrollos claramente muy largos para un motor de 90 CV y 220 Nm de par máximo.
Pero es evidente que el Logan MCV es un coche pensado específicamente para una buena economía de explotación, y el consumo es un factor esencial en esta ecuación. Está claro que va muy largo de desarrollos; pero es porque la faceta prestacional se supedita a un bajo consumo. Y esto vamos a comprobarlo con los datos que vienen a continuación, relativos al resultado obtenido en nuestro recorrido de pruebas; por supuesto que cubierto al actual ritmo de 100 km/h en carreteras y 120 en calzadas desdobladas. Y estos son los datos concretos:
Resultado Dacia Logan MCV 1.5-dCi 90 CV en el circuito habitual: Ritmo económico NUEVO: Consumo: 4,67 l/100 km. Promedio: 97,2 km/h. |
El tiempo empleado es de tipo medio: 5h 11m, tirando a lento, a pesar de haber disfrutado de un buen día, con tráfico prácticamente nulo, y que en ningún momento frenó el ritmo de marcha. Pero es que dicho ritmo era de tipo más bien reposado, condicionado no tanto por la relación peso/potencia (que desde luego no es brillante), sino por unas recuperaciones pausadas, con un motor sin “patada” inicial. Por otra parte, sin control de crucero, y por lo tanto conduciendo “a pedal”, siempre se acaba circulando un poquito más lento que con el citado control, que detecta caídas de 1 km/h de crucero; mientras que sin dicho control, la atención del conductor está centrada básicamente en la carretera, y el velocímetro se consulta en lapsos de tiempo variables, en función de la dificultad del trazado y de la densidad del tráfico (poca en este caso).
Así que, unas cosas con otras, el promedio conseguido puede considerarse como más que bueno, para el tipo de coche que estábamos manejando. El desarrollo de 5ª es muy largo, como ya se ha dicho; y es preciso recurrir con mucha frecuencia a la 4ª, y bastante a la 3ª. Por otra parte, el salto entre 4ª y 5ª es muy abierto: 1,36:1 dando como “directa” a la 5ª, o bien 0,73:1 suponiendo que la “directa” fuese la 4ª. Es casi como aquellos cambios 4+E que se pusieron fugazmente de moda en la década de los 70s del siglo pasado, a raíz de la primera crisis del petróleo.
Pero lo realmente notable es que, a pesar de estos condicionantes, el consumo obtenido es el récord absoluto en gasóleo a este nuevo y más pausado ritmo de marcha. Sin duda, la mayor parte del mérito corresponde al motor, que en todas sus variantes –pero específicamente en esta de 90 CV- siempre ha dado excelentes resultados. Como ya se ha comentado unos cuantos párrafos antes, hay toda una serie de otros factores que compensan una aerodinámica nada favorable; y el resultado hubiese sido muy otro de haber realizado esta prueba dos años atrás, con los cruceros 20 km/h más rápidos, pues entonces la aerodinámica hubiese adquirido mucho mayor protagonismo.
El comportamiento rutero es más que aceptable; las DuraGrip comerciales van muy bien en seco, y es la suspensión la que condiciona algo más, puesto que el MCV va bastante blando tanto de suspensión como sobre todo de amortiguación. Es una característica típica de los Dacia, como ya se ha comentado con anterioridad en otras pruebas; son coches planteados tanto para el mercado europeo como los emergentes, y por ello los tarados y los silent-blocs de todo tipo están pensados para pavimentos no siempre en perfectas condiciones.
Y vamos ya con las capacidades; aspecto muy interesante en un vehículo de carácter marcadamente utilitario. La del maletero es sobresaliente: 573 litros, sin eliminar la bandeja situada tras los asientos posteriores. Y en cuanto a la del depósito de combustible, esta prueba nos ha confirmado, litro arriba o abajo, lo ya descubierto en la prueba del Sandero Stepway; y que conste que este último era de gasolina, mientras que el MCV va con gasóleo. O sea que la curiosa diferencia entre el dato oficial y el real no depende de que pudiese haber un depósito distinto para cada tipo de combustible.
En este caso, lo que entra desde que la pistola dispara por primera vez hasta conseguir el llenado total oscila entre 15,5 a 17 litros, sobre los 50 teóricos; en el caso del Stepway, y en plan conservador, dijimos que eran 15 litros los que entraban “de clavo”. Y aquí se repite la jugada; hasta el punto de que realizamos nuestra prueba de 500 km sin que el indicador se hubiese movido. Con un consumo de simplemente 23,5 litros en total, debería estar a punto de eliminar el primer segmento. Segmentos que, siendo ocho en total, teóricamente corresponden a 6,25 litros cada uno; pero lo habitual es que el primer segmento corresponda a un poco más que el promedio. Así que entre los 15 a 17 litros que entran “de más” y los 7 a 9 que pueden corresponder al primer segmento del indicador, ya tenemos los 23,5 litros de un consumo que aparente, casi milagrosamente, parecía no haber tenido lugar.
Ahora sí que no cabe ya ninguna duda; la capacidad oficial del depósito es de 50 litros hasta el disparo de la pistola del surtidor; y luego entra un mínimo de 15 litros más. Porque si lo oficial fuesen 35 litros más el suplemento de 15 para completar los teóricos 50, sería imposible que el indicador no se hubiese movido en 500 km de prueba. La capacidad real está, en la práctica, por encima de los 65 litros; lo cual permite una autonomía como para aburrir a cualquiera. Digamos, para completar el panorama, que ese llenado final de 15 a 17 litros es lento, pero relativamente fácil; no es de los que cogen 10 minutos. Y por otra parte, el ordenador es totalmente exacto: marcaba 4,7 l/100 km, cuando el real ha sido de 4,67; no se puede pedir mayor precisión.
Así pues, este Dacia Logan MCV familiar cumple a la perfección con lo que tradicionalmente se venía entendiendo por un vehículo utilitario; que no tenía por qué coincidir siempre con uno de tamaño alambicado, sino poniendo el énfasis en la practicidad. Y aquí tenemos un coche que ciertamente mide 4,5 metros de longitud, pero dispone de cinco plazas y un maletero gigantesco, modulado además por el carácter abatible del asiento posterior y la capacidad y facilidad de carga que permiten el portón trasero alto y la luneta próxima a la vertical.
Queda una incógnita: ¿cómo se comportará este coche a partir de llevar de media carga en adelante? Porque aquí lo hemos probado, como siempre, con el conductor solo a bordo; y dadas las características de la curva de par del motor y su valor máximo, de los desarrollos y de la capacidad de carga, tanto las prestaciones, el comportamiento rutero y sin duda el consumo podrían tener notables variaciones respecto a lo observado en la prueba. Pero esta es una incógnita que, con mayor o menor incidencia, puede estar presente en el análisis de la mayoría de los coches de este carácter utilitario.
Un consumo muy bueno. Me recuerda a las versiones optimizadas que hubo hace 20 años (por ejemplo una del Astra diesel), que tenían neumáticos 175-185 de anchura y una caja con una quinta marcha como un día sin pan.
Muy buen resultado, lástima de esas barras en el techo que tanto penalizan aerodinámicamente y de las llantas de sólo 15″. Si montase unas de 20″ el récord sería prácticamente insuperable…
para gustos colores
pero me gustan mas los dacia
que sus primos nissan o renault
Estos siempre me parecen demasiado rococo.
mas limpios y sencillos los dacia
15 litros de más? De verdad eso es posible? Quiero decir, ¿Cómo se puede saber que en un momento concreto (con el primer click) ya hay dentro del depósito los 50 litros que entran según la marca? ¿Puede que el surtidor que sirve el gasóleo esté mal? Perdón que me he liado
Sí que gasta poco este motor. Tiempo ha conduje una Trafic de 90 CV, en este caso era el 1870 cc., y me pareció muy económica. Coincido en el barroquismo de los Renault actuales, no parece que la marca tenga clara una línea de diseño (cuando ha tenido modelos, en su tiempo, de innegable atractivo), pero tampoco me parece que los Dacia sean ni hayan sido nunca coches de línea vistosa. Eso sí, la relación calidad-precio-practicidad es, junto a Skoda, de lo mejor del mercado.
Salvo lo de ser diesel… creo que a D.Arturo este coche le ha gustado bastante. A priori es de esos coches honestos… uno sabe lo que hay… y las sorpresas tienden a ser agradables.
Un claro candidato para sustituir ese Nissan Micra inmortal, de ruedas y aceite imperecedero … ya veo por donde van las alabanzas a los Bridgestone industriales
Siempre me ha intrigado cuanto tiempo se necesita para llenar toda esa cantidad en el deposito. Despues del primer click. Con la moto o el coche da igual, para llenar un litro de mas, me paso minutos! Todo el rato me salta el click o me rebosa…
2. Esas barras de techo deben de tener la capacidad de mejorar el Cx, dado que el SCx es el mismo que el del Sandero y este con menos superficie frontal (no tiene barras)
7. En un Sandero lo intenté, pero abandoné al 4º o 5º intento, con muy poco combustible llegaba a la boca y al rato bajaba. Eso sí, la autonomía pasó bastante de los 1000 km para un consumo medio de 4.8.
Pues qué buen resultado el de este Logan, y eso sin complejidades técnicas ni alto precio de adquisición, muchas veces menos es más.
Alabo la simplicidad, la eficacia de lo ya probado y el resultado final.
Y la prestación es desde luego ampliamente suficiente para lo que se necesita hoy día. Conduje algún tiempo un amplio segmento D, Peugeot 405 Turbodiésel 1.7 90 CV 5 marchas, quizá pesaba 1150/1200 kgs y su desarrollo en quinta era 41 o 42 km/h, neumáticos 185/65-14. La realidad es que andaba muy bien aunque con pocos bajos y tenía un tirón considerable y se acercaba a los 180 reales, aunque sus consumos iban de 6 a cruceros de 120 y cerca de 9 litros litros a 160.
Cifras muy muy parecidas a las de este Logan, y hoy no se corre como entonces.
Así que el planteamiento del Logan lo veo muy razonable, que la quinta es larga pues muy bien, ahí están la cuarta y la tercera para utilizarlas y disfrutar del silencio y economía en autopista en quinta. Y por apenas 12.000 euros es una oferta estupenda, y con unas dimensiones y visibilidad que no hacen nada inçómodo aparcarlo.
En cuanto al posible resultado a largo plazo de los Dacia, he tenido la oportunidad de conducir un Logan 1.5 DCI 68 cv con más de 250.000 kms y me asombró lo bien que iba todavía, en este caso sin problema alguno de motor según su dueño.
Enrique, el motor 1.5dci 90cv gasta bastante menos que los 1.8 y 1.9 de PSA. Y si ponemos desarrollos un 135% más largos (de 40 a 55) ….
@9 Enrique. Que tiempos, salias por la autopista a 160 de crucero tranquilamente, para ir de Lleida a Zaragoza y plantarte en poco mas de una hora, sin sentirte un criminal.
A mi me gusta Dacia como concepto, estos coches que son «simplemente coches» sin más florituras.
Lástima que al ser tambien coches eminentemente low cost e incluso diseñados para mercados emergentes sus elementos mecánicos están adaptados a tales circunstancias (motores poco potentes, suspensiones blandas, etc).
Ojalá hubiera algún coche que fuera con el mismo espiritú pero más de «conductor».
@11 Ferrer. Totalmente conforme con tu opinión.
@9,
Tiempos en los que se mataban cuatro o cinco veces más personas en las carreteras, con un parque movil del orden de la mitad del actual. No sólo debido a la velocidad, por supuesto, pero creo que en general la falta de conciencia sobre seguridad vial que había entonces no es algo a echar de menos.
*mi comentario era sobre todo al hilo de @11, Oscar de Lleida, no @9.
Disculpen el enredo
@ 14. Respeto mucho su opinión, pero no la comparto. Si se fija he hablado de una autopista y encima de una autopista deficitaria entonces (no se ahora) por el escaso tráfico, si hago este comentario en Alemania se reirian de mí.
Por supuesto se entiende aplicando una conducción prudente respetando a los demas, con anticipacion y advirtiendo de la presencia si es el caso.
De un repaso a las pruebas de A de A de los 80 y vera los cruceros que aplicaba en vias rapidas y las medias que obtenía.
-Fiat Uno Turbo 105 CV 180 crucero = 163,3 de media.
M3 EVO e-30 175 » = 143 » .
M 635 SSI 180 » = 170,7 » etc.
Diego, si hace 30 años la mortalidad en carretera era cinco o seis veces mayor que ahora -yo diría que más incluso, por el menor parque automovilístico que circulaba entonces- no era por ir rápido, sino porque 1) las carreteras eran mucho peores que ahora y 2) porque los coches eran mucho más inseguros, en caso de accidente, que ahora.
Hay una correlación clara entre ambas variables y la mortalidad en carretera. Curiosamente, la accidentalidad no lo ha hecho en la misma medida, incluso ha aumentado, pero en vías de segundo orden. Y es que la letalidad en accidentes es ahora 1/5 de la de hace 25 años. También ha caído espectaculamente la tasa de hospitalización por accidentes. La tasa de fallecidos en accidente de tráfico es 3 veces mayor en el caso de los coches con más de 20 años que en los que tienen menos de cinco.
Creo que son datos concluyentes.
La velocidad excesiva en una variable presente sólo en el 9% de los accidentes con víctimas. Lo mismo que las drogas. Las distracciones, por ejemplo, lo están en el 25%.
Por cierto, me pregunto si la letalidad de un Dacia recién comprado se parecerá más a la de otros competidores m-as recientes o a la de coches de hace 20 años…
Muy buen artículo Arturo, mucha precisión y objetividad en sus descripciones. Sé que es un «cacharro» pero este coche me encanta, es lo que debe ser un verdadero utilitario y ya con la información de tener unos 65 litros de depósito ya me enamora. Hago 160 kms diarios de autovía y carretera convencional y en mi actual Corolla 1.6 vvt-i tengo que repostar cada 4 días, eso sí es una roca. Pero como nada es eterno, este vehículo me vendría muy bien por practicidad y consumos. Lo único que me genera dudas es la calidad de rodadura y agradecería comentarios al respecto. ¿Es muy ruidoso en autovía a velocidades legales (entre 105 y 120 km/h)?
Hola Eduardo,
he tenido que coger un logan mcv como el de la prueba hace un par de meses y es más ruidoso que la media, tanto a baja velocidad (que se oye bastante el traqueteo del diésel) como a alta por el ruido aerodinámico y de rodadura.
Si es demasiado ruido depende de cada uno.
19. Como propietario de un Sandero dci 90, tengo que decir que la insonorización es mala, pero que el motor es muy silencioso (más que la competencia)
A partir de 90-100 se oye la rodadura y el aire, si es mucho o poco dependerá de cada uno; así que le digo a Eduardo que lo pruebe y decida si le vale o no.
Como de costumbre, estupenda prueba de Arturo de Andrés al que leo con deleite desde hace 45 años. Me encanta, como a varios de vosotros, la honestidad de este coche: sin alardes, ofrece muchísimo espacio para equipajes/perro/bicis… Gasta muy poco (como casi todos los modelos con motor DCI de 90 ó 110cv), pero es una pena lo del desarrollo de 54km/h. Existe una «solución»: irse al Stepway y se matan varios pájaros de un tiro: la quinta se queda en 49km/h justos* (un 10% más corta, que se debe agradecer un montón), la carrocería está bastante más protegida de los roces y, por fin, su aspecto «crossover» lo hace más simpático (y permite licencias en caminos malos). *https://www.cdn.daciagroup.com/content/dam/Dacia/UK/Brochures/logan-mcv-stepway-brochure.pdf Cuidado, que son millas por hora.
me encanta el sitio muy buen contenido
gracias muy buen vehiculo
Yo tengo el 1900 td de 90 cv con 2 años y 46000km es cierto que le metes 17 litros desde que salta 1 vez he llegado a hacerle 1300 km con 1 depo media 4.3 todo carretera y media 105.coche sin pretensiones un poco ruidoso (aerodinámica) yo personalmente estoy encantado.Ya veremos cuando tenga 10 años.
Perdón es el mcv 1500 dci de 90cv
tiene mucha potencia de arranque y bien espacioso para toda la familia o amigo , para salir de vacaciones
Hola a Todos…. Poseo un logan diesel laureate de 2006…. Es un auto magnífico, poco refinado pero fiable y encantador… Ningún problema en 12 años… ¿Alguien da más? Creo que este familiar de ahora debe ser magnífico y más útil por su carrocería familiar. Será mi próximo coche. El motor dci hecho en Valladolid, es irrepetible, maravilloso.