No lo entrecomillo, porque no lo ha dicho con esas palabras. Pero de todo lo que ha dicho hoy el ministro de industria (rueda de prensa, convocada por la Asociación de Periodistas Económicos, APIE), la conclusión que saco es que el ministro de industria está convencido de que todo el resto de la población somos tontos. O al menos todos los que le escuchábamos hoy. Y además no tiene ninguna intención de disimular que piensa eso.
Motivos:
1) Sebastián defiende que el Estado compre una bombilla por hogar. 20 millones de bombilla que cuestan 50 millones de euros. El ahorro en electricidad por la utilización de estas bombillas es de 150 millones (ha dicho otra cifra superior, pero da igual, redondeo). La rentabilidad por tanto es del 200%. (Algo por el estilo ha dicho. La realidad me da igual, porque el disparate es tan mayúsculo que he dejado de escucharle)
¿De verdad que mide así la rentabilidad el ministro de industria? ¿De verdad cree que hay que dirigir la economía de esta manera para que el gasto de los ciudadanos sea rentable, para mejorar la productividad y para tener una industria competitiva? ¿De verdad cree que nos creemos que él se cree esos cálculos?
2) La otra propuesta de Sebastián ha sido recomendar que los españoles compremos productos españoles. Si disminuimos un punto porcentual las compras al exterior, asegura Sebastián, contribuiremos a que no se destruyan 120.000 puestos de trabajo.
¿Necesitamos un ministro para que nos indique a los ciudadanos que le votamos qué y cómo debemos comprar? ¿Es ese su trabajo? ¿No le pagamos precisamente para lo contrario, para que establezca las disposiciones necesarias para que la economía española sea eficiente y que tanto nosotros como los extranjeros prefieran comprar productos españoles? «Si compramos más coches españoles, no habrá regulaciones de empleo en la industria española» ha dicho. ¿No es consciente de que exportamos más del 80% de nuestra producción? ¿No se da cuenta de que si en Europa hicieran lo mismo nos comeríamos nuestras fábricas de coches con patatas? ¿No se da cuenta de que cada economía tiene que comprar lo que resulte más eficiente para los intereses de cada comprador. Que si compramos por motivos nacionales en lugar de por motivos de eficiencia nos cargamos nuestra economía para siempre. ¿Quiere regresar a la autoarquía franquista? Por qué es bueno reducir un punto y no dos puntos. Y si es bueno dos ¿Por qué no cuatro? ¿O por qué no 1,3 puntos? Si quieres planificar nuestro consumo, hazlo bien al menos, busca la máxima eficiencia de esa planificación exponla, legisla y obliga por ley a que todos los españoles compremos una determinada cantidad. Pero decir eso, «compren español», sin decir exactamente hasta dónde es beneficioso, hasta dónde es perjudicial… En fin. Pavoroso.
(Hoy he entendido por qué Zapatero se enamoró de este hombre. De dónde sale tanta devoción. Zapatero es un ignorante en términos económicos y este hombre le contaba recetas de parvulario, entendibles, como ha hecho hoy con los periodistas. Zapatero lo entendía y se creía que este hombre era sabio. ¡Qué peligro! Qué miedo me dan. Pobre Solbes. Y todos nosotros.)
3) Le he preguntado sobre coches y de dónde iban a sacar toda la electricidad necesaria para alimentar 1 millón de coches eléctricos en 2014.
Me ha dicho que mi visión es pesimista. Que él en cambio es optimista. Que los coches eléctricos servirán para estabilizar el mercado, que servirán para aprovechar la electricidad «perdida» en las horas valle, de poco consumo. Que los coches serán almacenadores de energía y que por tanto servirán para estabilizar la demanda y realizar una generación más eficiente.
Yo estoy de acuerdo con ese punto de vista. Los coches, con sus acumuladores, podrán estabilizar la demanda. Pero, ¿tenemos suficiente capacidad de generación para suministrar energía a todos los coches? ¿Tienen los cálculos hechos? Me temo que no. «Las eléctricas tendrán que acomodar su producción a la demanda» ha dicho. ¿No me digas? Y si no, será al contrario, eso no tiene más dobleces. O se acomoda la oferta o se acomoda la demanda. Pues sí qué.
En fin. El ministro intenta planificar y dirigir el comportamiento de consumo de los ciudadanos, pero no parece que su departamento establezca o estudie algún tipo de estrategia para la industria española. Que en principio parece su trabajo. O quizá no y yo esté equivocado.
no me parece tan mala idea,estimular la producción nacional comprando productos españoles,salen mas caros,pues claro!!!,porque los Chinos los fabrican a millones,y los costes totales por unidad de producto salen muuy baratos.
necesitamos buena planificacion de estimulacion,quiza rebajas de IVA sobre productos nacionales,vamos a exportar lo mismo, pero quiza importemos algo menos,y ese algo menos,sera perjudicial para nuestros bolsillos(cosas españolas cuestan mas que los Chinos)pero a la larga:mayor produccion nacional,mas puesto de trabajo,menos paro,mas dinero para obras publicas,(menos radares??,lo dudo…jeje)
esta claro que nuestro ministro tiene una idea de primaria de economia,pero es un politico, es su funcion hablar pensando que somos tontos….
Este chiquito fue profe mío en Economía de 1º de empresariales en la Complutense y claro debía de ser por mi juventud, pero parecía majete. El caso es que me da que como a todos, les ha tocado el poder y se han vuelto tontos, o eso o como tú dices Jefe, los tonto somos los demás, que pa eso el es ministro y ha sido universitario
Cerrar la economía la destruye. Abrirla unilateralmente, también (así hizo el gobierno uruguayo en la década de 1990).
Joer Javier, vaya descubrimiento tu tambien, que Sebastian es , directamente, gilipollas. Y chulo, sobre todo lo ultimo, e inutil, y un enchufado y y…dios, cada intervencion de ese hombre supone un ecupitajo en la cara del ciudadano y a la inteligencia.
Cuando yo era niño, a principios de los 80, hubo una época en la que en los telediarios no se hablaba de otra cosa que de la «reconversión industrial». A mi el concepto me escamaba, pero no lo acababa de entender. Luego entendí que se trataba de un gran pacto para intentar modernizar una industria española que estaba obsoleta y sobredimensionada, en definitiva, que no era nada competitiva.
A estas alturas hace falta una segunda reconversión industrial. El país tiene problemas estructurales importantes que jamás se han resuelto, y por eso, por una economía tan dependiente del ladrillo y de los servicios, cada vez que vienen mal dadas el golpe es importante. Como ahora. Además, no somos competitivos como país manufacturero, aunque muchos sigan sin querer darse cuenta (los sindicatos).
Y los políticos, ninguno de ellos es capaz de organizar un plan para que nuestra economía sea competitiva en el futuro. Tan sólo se habla de grandes planes a largo plazo, pero nada realista ni elaborado, aunque eso suponga impopularidad y 10 años de travesía por el desierto. Como no hay nadie que agarre el toro por los cuernos, así seguimos y seguiremos, con una Seat que anuncia un coche híbrido a correprisa para enseñarlo al ministro Sebastián y que caiga la pasta de las subvenciones. Para 2014, a lo mejor.
Y en ese contexto se puede entender que las ruedas de prensa de Sebastián sean surrealistas. Sólo en ese contexto de anunciar planes y medidas (qué bonita palabra) que no son mas que propaganda absolutamente hueca de contenido. No se si saben llegar, pero desde luego no les interesa llegar al fondo de unas cuestiones que probablemente, por la inmadurez de la mayoría, les harían perder el poder en las urnas. Intentar chocar con Sebastián es intentar chocar con una tapia.
Ni los ciudadanos empujamos para atravesar ese desierto, ni nuestros gobernantes tienen la valentía y la capacidad para hacernosla pasar, como hizo por ejemplo Finlandia.
Esto es lo que tenemos. Está claro que un plato de lentejas tiene mucho más valor de lo que se podría pensar.
http://www.youtube.com/watch?v=R6GQ-5-Kb7Q
http://www.youtube.com/watch?v=ZBuKZLyqJ8g
Una salida rocambolesca más del ministro Sebastián, o lo que se ha dicho ya, arenga preferentemente dirigida a los no-pensantes (me encanta esta sentencia de JotaEme, «Tratar a los hábiles como ineptos igualando a todos al nivel de los últimos, es la radiografía de nuestros tiempos»)
En mi opinión España perdió, o mejor, no supo aprovechar todo lo posible, la situación de lanzamiento en que quedó tras la crisis del 92, un país europeo con ganas, bajos costes de producción en comparación con nuestros vecinos, pero con calidad e infraestructuras suficientes para poder surtirles y autosurtirnos; además en aquella época la capacidad manufacturera de los paises asiáticos no era la de ahora, no eran una competencia a temer.
En vez de aprovechar a tope esos años de expansión para asentar una economía de cimientos fuertes, con más I+D, buscando la oportunidad en el medio y largo plazo, el valor añadido, por supuesto sin renunciar a producir siempre que fuera rentable y sostenedor de las otras búsquedas, en previsión de lo que podría venir en el futuro y que de hecho ahora tenemos … pues no, se buscó el pelotazo, el dinero fácil epidérmico sin reforzar el interior, los españolitos empezamos a ver un duro, que nos sirvió de aval para que los bancos hicieran su Agosto dándonos en el presente 4 duros más que en realidad eran del futuro, y se los dimos todos a avispados promotores y constructores y especuladores de viviendas que a su vez hicieron también su propio Agosto.
El resultado es el actual, cierta gente se ha ido con las manos llenas, la media se ha empobrecido, hay cientos de miles de casas vacias, muchas de ellas inacabadas afeando paisajes; no tenemos ese cimiento económico que tienen nuestros vecinos que les permitirá salir antes que nosotros de la crisis, y hemos perdido para siempre, o por lo menos durante unos cuantos años (tantos cuanto dure su acercamiento económico al primer mundo y puedan consumir al ritmo nuestro …. si quedan recursos en el mundo para ello, claro, que ese sería otro tema) la competitividad con los países emergentes a la hora de producir; los bancos que tanto han ganado en estos años (los que no ganan o corren peligro están así por haber abusado …) ahora no quieren soltar un duro porque así igual ganan menos.
En fin, un panorama bastante feo. Y luego tenemos unos gobernantes que son «lo mejor» y unas alternativas de gobierno que no le van a la zaga, así que no pinta bien esto.
Muy de acuerdo con Wilfredo, realmente no tenemos I+D y las ayudas que se dan son de risa.
Es una pena que no se aprovechen los fondos que hay para este tema en asuntos con futuro y en donde todavia estamos a tiempo de coger el tren ( y si es que de verdad lo estamos):
– Baterías recargables eficientes
– Coches eléctricos
– Combustibles alternativos
– Aprovechamiento de los residuos (atómicos, electrónicos, las mismas batrías)
Y seguro que hay muchas mas cosas.
Da envidia el ejemplo de Corea o el de Irlanda, como han sabido evolucionar hacia un futuro que en los años 70 no existía.
Eso si, allí no habrá Poceros ni Albertos…..(aunque en todas partes cuecen habas).
En fin, lo de Sebastián muy pueril, pero a lo mejor sirve (como cuando este verano quitó las corbatas en su ministerio para subir un punto el aire acondicionado….)
Hola a todos.
Este hombre no para; de vez en cuando saca el ramalazo de socialista utópico y reparte frases y ocurrencias para la posteridad que no desentonarían ni en el mismísimo No-Do. Como dice Javier, creo que debería centrarse en hacer mejor su trabajo, que no es otro que gestionar convenientemente su cartera de Industria.
Quizá cuando logre que los productos fabricados en nuestro país nos parezcan interesantes, los consumidores sopesaremos si, a igualdad de características, compramos lo autóctono o lo foráneo. Y para que nos parezcan interesantes, quizá debería proponer un plan industrial para equiparar a los fabricantes en calidad, diferenciación y eficiencia con respecto a los mejores.
¿ Bajará el consumo de Armanis, Hugo Bosses o Chaneles, y subirá Adolfo Domínguez, Zara o Loewe? ¿ Dejaremos de comprar discos de Duffy o de The Script, y compraremos sólo Ramoncín o Rosario Flores? Buff …
Saludos desde Zgz.
Pues lo peor de todo es que este señor da esas ruedas de prensa porque se está postulando, poquito a poquito, como posible Ministro de Economía. Todo lo que ha hecho desde que ha entrado en el gobierno -anuncios de medidas, contramedidas y recontramedidas incluídos- están únicamente encaminados a ese fin. Y, si este señor llega a Ministro de Economía, podemos echarnos a temblar. El problema es que el Sr. Sebastián no tiene ningún interés en gestionar bien nada. Sólo quiere generar titulares. Eso sí, titulares favorecedores y que le den el aura que sus asesores le recomiendan. Estamos perdidos. Me temo.
Este señor tiene un enfermizo afán de protagonismo. Después de hacer el ridículo como candidato a la alcaldía de Madrid (con aquel ataque rastrero a la vida privada de Gallardón), PetaZeta nos lo ha metido con calzador como ministro de industria «teletubbie». Sí ahora lo promocionan a Economía es fácil imaginarse todo tipo de soluciones de «todo a cien» para salir de la crisis. Salvese quien pueda.
hoy me han enviado un enlace a un artículo de opinión que habla también de Sebastián y los tontos:
http://elperiodicodearagon.com/noticias/noticia.asp?pkid=471663
Raziel, conté un día por aquí que soy lento. Así me va. Este hombre fue director del Departamento de Estudios del BBVA y no sé por qué me daba la impresión de una persona rigurosa. (Me equivoqué)
De cabo a rabo, pero vamos ya te digo que a mi también me emgañó. Debería de haber seguido siendo tecnócrata, pero eso habría supuesto que no le hicieran ni puto caso, y cuando a uno le ponen delante la zanahoria del poder, se vuelve tonto, el si que lo ha hecho
Por si había dudas
http://www.cotizalia.com/cache/2009/01/26/noticias_65_caras_economista_llamado_miguel_sebastian.html
No solamente la producción de electricidad no está prevista para un millón de coches eléctricos, sino que, además, la red de distribución tampoco, y le falta mucho.
Y, por si fuera poco, el coste de la energía eléctrica para el ciudadano de a pie no para de subir, y para más recoña, el sistema de consumo de la energía de las horas valle se ha transformado, a peor para el usuario final.
Todo un cúmulo de despropósitos, vaya.
Hasta luego.
No, no, don Juan Antonio: todo forma parte de un plan totalmente definido por el Sebas y el Cejas desde principio a fin.
Cuando consigan que todos los españolitos circulemos con el 600 del siglo XXI (el SEAT León eléctrico de 15 cv.) conseguirán atajar varios problemas a la vez:
– Recaudarán más dinero por la «crucigrámica» factura eléctrica (más demanda)
– Plantarán más molinos de viento que produzcan energía eólica (justificarán, al fin su empleo)
– Si no hay suministro -tanto por capacidad como por distribución-, no se preocupe que circularán menos coches, se reducirán los accidentes y los problemas con las nevadas.
– Justificarán los 6 años de desarrollo y los 800 millones de subvención, y alguien de la quinta de Maragall nos recordará que ya hubo un SEAT Toledo eléctrico en las olimpiadas de Barcelona 92.
Ains, qué país …. 🙁
Como ya hemos dicho otras veces, la red es sufuciente para la recarga de coches,puesto que lo es para el funcionamiento del aire acondicionado doméstico, que consume mas.
Lo que no se podrá es poner las dos cosas al mismo tiempo, como ocurre con el lavaplatos y la lavadora, pero eso ya es sabido.
La pega no es esa, lo son las baterías acumuladoras de carga, que aun no están logradas, pero para que lo estén, tan solo es necesario que se popularicen los coches eléctricos, entonces progresarán como lo hicieron en los teléfonos móviles.
Las de Ion-Litio, creo que tienen algun problema de temperatura pendiente, por eso el nuevo Prius no las lleva.
Hola Joaquín.
Pero, y si yo (o muchos miles) necesito recargar diariamente el coche, ¿nunca voy a poder poner el lavavajillas y el A.A. a la vez? Ojalá me equivoque, pero cuando esté listo el vehículo eléctrico recargable domésticamente, creo que tendremos que seguir importando electricidad. En España creo que el parque móvil anda por los 20 millones de vehículos; ¿habrá suficiente energía para todos, aunque sea dentro de 20 años?
Antes de pintar una habitación me suelo asegurar de que hay suficiente pintura y de que el rodillo es el adecuado: no le puedo decir a mi mujer que ya puede pensar en muebles de color blanco si no puedo acabar de pintar las paredes en gris teja, por ej.
Saludos desde Zgz.
Sebastián defiende que la compra de bombillas de bajo consumo será la mejor inversión de la historia:
http://www.elpais.com/articulo/economia/Sebastian/defiende/compra/bombillas/consumo/sera/mejor/inversion/historia/elpepueco/20090205elpepueco_15/Tes
los del PSOE cada día están más chalaos.
Buen artículo Boss, crítica con fundamento, que no fundamentalista. Y sí, el artista éste es más corto que las mangas de un chaleco.
Bueno, pues si tan rentable es la jugada de ls bombilllas, ¿por qué una bombillas por hogar? ¿no será mejor dos? ¿tal vez tres? Impresionante.
Lo de apelar al consumo de productos nacionales ya es de traca. Si este señor tuviera el poder de prescripción suficiente, y los ciudadanos le siguieran, podría ser calificado de medida proteccionista. Que no se ande con chorradas, a ver si al ministro de industria alemán se le ocurre decir que no compren seats ni naranjas y encima le hacen caso… Por otro lado ¿no se da cuenta en la red comercial y de servicio de las marcas «extranjeras» también hay puestos de trabajo?
Nuestro querido Pere ya ha dejado claro que la mortalidad en carretera es culpa de los ciudadanos que corren y ahora nuestro Miguel va a cargar en mis espaldas la responsabilidad de 120.000 puestos de trabajo. Resulta que esto de ser alto cargo consiste en encontrar a quién se carga la culpa.