Durante la presentación del Porsche 911 Turbo estaba Walter Röhrl en el circuito de Estoril. Los periodistas pudimos hablar con él durante unos minutos y, sobre todo, pudimos ver sus pies en un video de cuando corría con el Audi Quattro en el Campeonato del Mundo de Rallies. En este video se ve alguno de los fragmentos de los pies:
Después de ver el video junto a nostros, Walter Röhrl dijo algo que me parece obvio: «Yo no soy consciente de que hago eso con los pies. Lo hago de forma automática, sin pensar«.
Yo entiendo lo que decía Röhrl, porque opino que para conducir con seguridad no hay que pensar. Las reacciones tienen que estar incorporadas. La respuesta tiene que ser refleja, automática. Para llegar a ese grado, hay que haber conducido mucho, repetido mucho y practicado mucho en diferentes condiciones.
Siempre me ha gustado Röhrl como piloto. Alguna vez he ido sentado a su lado y lo he disfrutado. Por eso, porque me gusta su forma de conducir y casi porque me lo esperaba, me sentó bien oirle decir:
«El Lancia 037 ha sido el mejor coche de rallies para mi forma de conducir. De todos los coches que he pilotado en rallies es el que me permitía afinar más y sacarle mayor rendimiento«.
Del Audi Quattro dijo que era el coche más brutal que había llevado en carretera. «Pasaba de 0 a 100 km/h en 35 metros y esa aceleración es muy difícil de controlar si se quiere aprovechar al máximo«.
También dijo:
«Dadme las gracias por las palancas de cambio opcionales que lleva el nuevo 911 Turbo en el volante. Me enfrenté al presidente para conseguirlo. Al menos nos han permitido ofrecerlas como opción»
«Nunca he pensado participar en el Dakar. Odio desenterrar los coches atascados en la arena.»
«En el garaje de mi casa tengo dos coches: un 911 Turbo y un Volkswagen T5»
En el día de autos (Nunca he sabido porque se dice así cuando se refieren a un crimen, por ejemplo. En este caso, en cambio, está clarísimo) Walter Röhrl no paraba de dar vueltas al circuito de Estoril en un Porsche 911 GT1. Aproveché para hacerle una foto durante una parada en el box. A sus años, Röhrl parece estar en forma, porque sus sesiones de trabajo no son cortas.
Cuando dejó el coche aproveché para hacerle alguna foto. Estaba junto al de la adivinanza:
Grande, grandísimo!!!! Me recordó un rato al volante con un instructor alemán de Audi de pasajero en un Driving Experience hace algunas semanas -salvando las diferencias-, al lado de alguien tan experimentado en el ámbito de la conducción uno puede llegar a ser muy torpe.
2 muestras. Hace años con el RUF Yellow Bird
http://www.youtube.com/watch?v=VqZO-xURLqc
Unos mas reciente, haciendo el Ring a la inversa, con climatologia adversa.
http://www.youtube.com/watch?v=gnKARl8HJjY
Dos cosas:
1) Ahora ya sabemos porque frena Vd. con el pie izquiero: Para parecerse a Rohrl!
2) No se como nadie puede comentar si los grupo B de esa época eran o no mas rápidos que los actuales coches de rallyes viendo este vídeo. Sin cambios automáticos, ni controles electrónicos. ¡Que bárbaro!. Tampoco estaba mal el malabarismo de Ragnotti o de Blomqvist, o de Makkinnen con los minis (pena lo que está pasando con Saab, los 99 en nieve eran todo un espectáculo en sus manos).
Lo de frenar con el pie izquierdo creo que no lo sabré hacer nunca.
Hombre, dar frenazos patosos por falta de tacto es lo que hacemos todos. El rollo es ir frenando y acelerando a la vez para perder velocidad sin perder tracción. Y no liarse al volver a pisar con el pié que no es. Digo yo que será cuestión de entrenarse (y de tener dinero para cambiar con bastante mas frecuencia pastillas y discos).
Bestial… impresionante. Röhl es para mi un mito vivo: Ya le seguía y era mi favorito en su lucha con Vatanen y luego Salonen en el 85 y el 86. Ahora es piloto docotorado en mi marca favorita. Y por lo que leo un auténtico lobby nuestro, por lo que comenta J.Moltó del tema del volante con levas…
genial las tres frases… Como genial es él. Por cierto Javier Moltó, la envidia nos corroe con estas cosas que nos cuentas… 😉
El vídeo está claramente acelerado ¿no? En cualquier caso, espectacular y sobre todo ¡PELIGROSO! Hay que ver la temeridad del público, de los organizadores y de los propios pilotos. Era de locura.
Simplemente genial… sobran las palabras.
Saludos cordiales,
James Marshall.
auto1.
(De acto).
1. m. Composición dramática de breves dimensiones y en la que, por lo común, intervienen personajes bíblicos o alegóricos.
2. m. Der. Forma de resolución judicial, fundada, que decide cuestiones secundarias, previas, incidentales o de ejecución, para las que no se requiere sentencia.
3. m. desus. Escritura o documento.
4. m. ant. Acto o hecho.
5. m. pl. Der. Conjunto de actuaciones o piezas de un procedimiento judicial.