Luca de Meo ha presentado hoy en directo y por vídeo el plan estratégico para corto, medio y largo plazo de Renault. Ha sido una presentación brillante. Luca de Meo llegó a Renault hace medio año y en este poco tiempo ha desarrollado el plan estratégico que ha presentado hoy con gran soltura, capacidad de seducción y de convicción. Vale la pena verlo actuar y presentar. No sólo presenta un plan convincente, sino que además camela a la audiencia.
Mi resumen cortísimo del plan es el siguiente: Renault apuesta por incrementar su presencia en la zona de coches medios del mercado, con mejor rentabilidad que los coches pequeños. Lo que buscan es vender mayor valor añadido y obtener más margen. La zona de coches pequeños y baratos se despeja para Dacia y Alpine es la nueva marca que busca un hueco para coches de prestigio, con lujo y prestaciones elevadas.
Una gama eléctrica y electrificada
Ese posicionamiento en el mercado se combina con una apuesta clara por el turismo eléctrico de baterías, por vehículos comerciales ligeros con baterías y pila de combustible como extensor de autonomía y por coches electrificados en toda la gama.
Además del plan estratégico, durante su intervención Luca de Meo ha dicho sin tapujos que hasta ahora se estaban haciendo las cosas mal. De hecho, la primera parte del plan se llama «Resurrección». Sólo puede resucitar quien está muerto. Han elegido tres palabras para definir las fases del plan: «Resurrection», «Renovation» y «Revolution». Supongo que no encontraron otra palabra que empezara por «Re» y acabara en «tion» y que optaron por «Resurrection», pero no estoy seguro de que sea un acierto.
Aparte de esta búsqueda por situar sus productos en esos escalones del mercado, de Meo también ha dicho: «En la actualidad somos una empresa de coches que integra tecnología. En el futuro queremos ser una empresa de tecnología que integre coches».
El plan que de Meo ha presentado para Renault, me recuerda a la estrategia desarrollada en Seat, con la marca Cupra que de una forma u otra tiene similitudes con Alpine y con la marca MÓ de Seat replicada con la marca Mobilize de Renault para el desarrollo de los planes de movilidad futura. En teoría, Mobilize será la principal marca del futuro, de ser cierto el objetivo de convertirse en una empresa de tecnología que integra coches.
Resurrección de Renault
Buena parte de quienes le acompañaban en la presentación eran directivos de Renault «de toda la vida». ¿Estas personas de la cúpula directiva, por lo general brillantes y bien preparadas, aceptan de buen grado que un recién llegado diga que la empresa que han estado gestionando durante estos años estaba muerta? ¿Es una buena estrategia decir que estaban muertos?
¿Estarán estos directivos de acuerdo con el nuevo plan estratégico? Ellos tienen muchas más herramientas y conocimientos que yo para juzgarlo y se les supone capacidad crítica. Tal como lo ha presentado hoy Luca de Meo todo parecía sencillo, desde la resurrección hasta el cambio de posicionamiento en el mercado. Sus planes, no se ha cansado de repetirlo, son conservadores. Y lo cierto es que suena bien. El único problema que le veo es que parece muy fácil intentarlo. Supongo que muchas marcas se dirigen hacia los mismos objetivos. ¿Por qué va a conseguirlo Renault y no los otros? ¿Hay sitio para todos? De Meo apuesta a que el mercado europeo recuperará en 2025 los niveles pre-Covid, pero muchas afirmaciones parecen destinadas a un mercado diferente, de menor volumen.
¿Y los concesionarios? Luca de Meo ha dicho que quiere recuperar la rentabilidad de los concesionarios y que si los concesionarios ganan en rentabilidad «sin grandes inversiones, somos pragmáticos» estarán satisfechos. Además asegura que tiene un plan para ellos en la movilidad futura. Un plan para ellos lo puedo entender, pero un plan para ellos a medio plazo en el que ganen dinero con coches eléctricos y compartidos, me parece más difícil de conseguir.
Y resurrección del Renault 5
La presentación de Luca de Meo me ha parecido brillante. Me encantaría tener la capacidad de preparar un plan así en seis meses, aunque sea con alguna receta conocida, y exponerlo con la brillantez y la sonrisa con la que de Meo lo ha presentado hoy.
Que el plan estratégico funcione o no funcione, será más lento de ver. Por lo que ha dicho hoy, está claro que de Meo no está feliz con los coches que Renault tiene actualmente en el mercado, pero esos son los coches que tiene ahora mismo para vender. ¿Es necesario que diga con tanta claridad que lo que han hecho hasta ahora estaba mal hecho?
«Pues lo vas a tener que vender durante unos años, guapito de cara» es lo que se me ocurre que le diría alguna persona pragmática.
En la portada de km77 tenemos información de los prototipos que ha anunciado hoy Luca de Meo: el Renault 5 Prototype y el Dacia Bigster Concept.
El Renault 5 me ha recordado a un Renault 5 Copa inmediatamente. Y he pensado que quizá en lugar de Alpine les hubiera gustado crear una marca que se llamara Copa, innegablemente cercana a cupra :).
La huida de las marcas de los salones, las presentaciones mesiánicas y la simplificación de los productos me recuerdan a Apple, y Luca de Meo, como Steve Jobs en su regreso, no tiene por qué hablar bien de lo existente.
Tendemos a minusvalorar a esos directivos, pero estoy seguro de que charlando un minuto con ellos se ha de notar que son inteligentísimos. Por ello saben que el 99% de los coches los compran empresas y conductores que, al contrario que nosotros, no están locos por ellos, no los prueban antes de comprar, no saben ni donde está la batería y no saben siquiera si son de tracción delantera o trasera.
Puede que también como hizo Apple, las marcas después de huir de los salones, huyan de los distribuidores y monten sus propias tiendas, pocas, y en la que la imagen sea más importante que el taller.
Hola cafedelasartes.
No seré yo quien minusvalore a Luca de Meo. Ni a Luca de Meo ni a nadie.
No sé si tiene que hablar bien de lo existente o no. Él sabrá (o no). Me parece que no le hace ningún bien a la empresa hablar mal de lo existente, pero puedo estar absolutamente equivocado. Me parece que es innecesario y que esas afirmaciones no aportan ningún eneficio ni a las ventas ni al bienestar de los trabajadores. Pero, efectivamente puedo estar equivocado y si él lo hace puede ser porque sepa que beneficia a la empresa. Aunque tengo la duda de si lo hace porque cree que le beneficia a él.
Sea como sea, es mi apreciación, totalmente irrelevante. Me sorprende y lo cuento.
Si fuera verdad que el 99% de los coches los compraran empresas, entonces no sería necesario ni Luca de Meo ni ningún gestor brillante. Pero no es así. Las ventas que interesan a todos los fabricantes, al menos de momento, son las ventas que realizamos los particulares, porque son las ventas de mayor margen.
El modelo de distribución está en cuestión. Así es.
Pienso que Luca de Meo siente (legítimamente, no sé si con razón o no) que Renault ha perdido los últimos años una oportunidad muy grande frente a otras marcas.
Mientras BMW se ha hinchado a vender Minis y Fiat ha hecho lo propio con el Fiat 500 (como decía A. de A. sin sonrojarse por llamar Fiat 500 a todo lo que no fuera un camión Iveco) Renault tenía un modelo no menos mítico (R5) sin explotar comercialmente.
Ojo que no a todas las marcas les ha salido bien el revival, por ejemplo VW con el Beetle no ha tenido tanta suerte.
A mi el concept para la resurrección del R5 me parece impactante pero casi una caricatura, con esas ruedas de 22 pulgadas (a ojo lo digo). Pienso que los tiempos eléctricos no demandan esas ruedacas poco eficientes y que quitan espacio al maletero, a las puertas y sobre todo a las baterías. Pero es un concept y nada más, el modelo de producción será diferente.
No me entendió bien, Javier. Dije que el 99% de las ventas de coches las hacen conductores y empresas que no sienten la pasión que sentimos nosotros por los coches. La empresa compra fijándose en el valor residual (por eso vemos tantos SUV o incluso marcas premium de coche de empresa o alquiler) mientras que el particular sigue un impulso de marketing, no se fija en la calidad del producto ni en la evolución de la marca y no tiene en cuenta que si los coches anteriores envejecieron mal, el nuevo modelo también lo hará.
Por eso creo que cuando llega un nuevo directivo, intenta crear una ola a la que se suban los trabajadores, los distribuidores y los clientes y no se preocupa necesariamente del producto porque el cliente final no lo valora mucho.
Supongo que, del mismo modo que añoro los coches de los 80, en los 80 los cuarentones añoraban los de los 50. Supongo que siempre ha sido así y que siempre lo será.
¿La nostalgia? Le ha funcionado a MINI. Vemos muchos FIAT 500, pero me da la impresión que son de flotas y a Volkswagen e incluso a Renault que con el actual Twingo ya emuló al Renault 5, no les ha ido bien.
Siguiendo con el ejemplo de Apple. Acabaron con sus distribuidores, se centraron en pocos productos de llamativo diseño y precio alto, abandonaron las ferias y los presentaron en eventos y, sin descuidar la calidad (aunque siempre hay nostálgicos de los Mac de los 90), triunfaron. Pero eso no siempre resulta bien, no hay tanto hueco para fabricantes premium.
A mi me parece que lo que hay actualmente en el mercado mas similar a la propuesta al R5 de DiMeo es el Hondita eléctrico. Pero sin menospreciar a nadie, me parece penoso que haya que recurrir a los revivals para poder tener un cierto éxito. ¿Tan mal andamos de diseñadores y creadores? Quizá el no haber dado continuidad a una saga, como hace VW con el Golf haya sido un error. ¿Cómo lo ven?
El modelo de SEAT más Cupra (y Renault mas Alpine), ya lo importó Luca de su estancia en Fiat donde además de ser director general (CEO) de Abarth, fue Jefe de unidades de negocio de Lancia, Fiat y Alfa Romeo. Fue uno de los responsables del nuevo 500.
Hola cafedelasartes, tiene toda la razón. No le entendí bien.
El ejemplo de Apple tiene sentido porque de Meo dijo que quería convertirse en una empresa tecnológica que integrara coches. No sé cómo se integran los concesionarios en ese concepto, pero de momento, el volumen de negocio sigue estando en los concesionarios. Veo muy difícl que Renault genere una legión de fanáticos seguidores como tiene Tesla.
Óscar de Lleida. No recordaba que fuera de Meo fuera uno de los responsables del nuevo 500. Mi memoria es muy mal. Gracias por el apunte.
Me gustó mucho el caso de Apple, y muy interesante el blog. Gracias por compartir!