Acabamos de votar y el panorama se complica. Los líderes de los partidos se echan los trastos a la cabeza. Los ciudadanos echamos la culpa a los líderes de los partidos y renegamos de ellos. Los comentaristas de televisión, de uno y otro bando, ponen a caldo a unos y a otros.
¿Por qué? ¿Por qué no asumimos que nuestros vecinos, que nuestros hermanos, que nuestros amigos piensan diferente y que los gobernantes tienen que gobernar para todos?
Analizamos el resultado de las elecciones como el producto de una guerra. Vencedores y vencidos. Y no es así. Lo que hacemos los electores es dibujar el panorama de nuestras preferencias. Ninguna mayoría debiera dar títulos de vencedores y de vencidos.
Convivimos personas de izquierdas, de derechas, independentistas, centralistas, gentes con mayor conocimiento con otras de menor conocimiento, también dentro de cada familia, y entre todas dibujamos un mapa de preferencias.
El PSOE, que es el partido más votado, tendría que realizar una política situada en el centro geométrico del mapa dibujado. Encontrar ese punto no es fácil, pero si de verdad gobierna para todos los españoles lo lógico es que realice una política ligeramente de izquierdas (su supiéramos bien lo que eso significa), pero cerca del centro porque el peso del voto a la derecha es elevado.
El día que gane la derecha, tendría que hacer lo mismo. Por mucha mayoría que tenga. Hacer una política teniendo en cuenta a la otra mitad del electorado.
A mi juicio, el error de Pablo Iglesias fue pretender desplazar mucho hacia la izuierda la política del PSOE. Lo creía legítimo porque sus votos eran imprescindibles para formar gobierno.
No, señor Iglesias. La mayoría absoluta, en este país, se forma siempre con la suma de los votos del PSOE y del PP. Las corrientes ideológicas situadas en los extremos debieran aspirar a desplazar ligeramente el fiel de la balanza hacia sus planteamientos, pero con mucho cuidado. Un 15% del total de los votos no es significativo, especialmente si se compensa con otro 15% equivalente en el extremo opuesto del espectro.
Seamos cuidadosos. Nos necesitamos todos. Votantes de cualquier signo y de cualquier partido. Sin cualquiera de las dos mitades, este país se va al garete. Podemos tener más simpatías o afinidad por unas ideas y por unos ciudadanos que por otros, pero nos necesitamos todos, votemos lo que votemos.
No son nuestros enemigos, son nuestros vecinos. Y entre todos pagamos las pensiones.
Busquemos gobiernos para todos. Los resultados de las elecciones siempre son perfectos. Son el mapa exacto de la suma de deseos individuales. Una política que sea la resultante de todos los vectores es la que dejará a una mayor número de ciudadanos medianamente satisfechos.
No podemos seguir jugando a la guerra. A ganar y a perder. Adorando a nuestro líder y destrozando al de cualquier otra ideología o partido. Seamos civilizados. Trabajemos entre todos por entendernos y por hacer políticas para todos, no contra la otra mitad.
Todos somos imprescindibles. Con mayor o menor talento. Con menor o mayor capacidad de trabajo. Con mayor o menor sentido de la solidaridad, de la independencia, del egoísmo.
Los únicos que sobran son los corruptos. Y hay muchas clases de corruptos. Pero, por ideología, no podemos sobrar ninguno. Nos necesitamos a todos.
Sr, Moltó, lea (si no lo ha hecho ya) la paradoja de Karl Popper y deje de blanquear el fascismo.
CERO TOLERANCIA CON LOS INTOLERANTES.
Porque puede que usted considere que no son sus enemigos sino sus vecinos, pero muchos de ellos si consideran a todo el que piensa diferente como un enemigo.
Así que, mucho cuidado, que en este país nos puede faltar la memoria, pero las cunetas siguen llenas de cadáveres. (De personas como usted y yo que fueron arrancados de sus hogares por sus «vecinos»).
Javier, serán nuestros vecinos e incluso alguno de nuestros familiares, pero no puedo respetar a la cúpula de un partido (no así a mis vecinos o a alguno de mis familiares) a quienes niegan el dolor y la desigualdad de las mujeres, que aborrecen a los inmigrantes, que llaman enfermos a los homosexuales o que niegan la parte de la historia que está fuera de su pensamiento. No, no respeto a la cúpula de VOX y a sus ideólogos que, por otra parte, solo representan ideologías arcaicas que restan y no suman.
Dos que irán de tolerantes, progresistas, feministas, han escrito, sí señor.
Joder! qué se creen esos putos fascistas que no votan progresismo, feminismo y tolerancia.. Hombre ya.
Yo es que soy ecologista y voto verde.
#1 ¿Hay algún partido fascista en el arco político español? Puede, pero no en el extremo donde está mirando.
Si busca a los herederos de los de las cunetas, tendrá que mirar en los que han recogido el testigo del Frente Popular (Unidas Podemos, me temo), que también contribuyeron a llenar fosas, y por el otro lado, a los herederos del bando Nacional, que no se corresponden con ningún partido actual – la ene con la o, no.
Si no ha superado perder la Guerra Civil, no dé la plasta al resto de los mortales, no es nuestro problema, es suyo. Dignifiquemos a los muertos, faltaría más, pero entierre la retórica victimista, y deje de ver fascistas donde no los hay, debería conocer a algún fascista de verdad.
Sr. Moltó,
Le leo desde hace muchos años y hoy, por fin, voy a dejar mi primer comentario.
Firmo uno por uno todos los pensamientos que ha compartido en su artículo, pero me temo que estamos prácticamente solos. Basta con leer los comentarios previos al mío.
Por supuesto que me duele ver a un partido que quiere retroceder medio siglo en derechos sociales con tanta representación, como me ha dolido tantos años ver otras opciones justificando violencias inadmisibles.
Pero opino que el parlamento debe igualarnos a todos, en España (y obviamente en el resto del mundo) hay gente que piensa y actúa de manera repugnante, pero si nos polarizamos todos, vamos a hacerles sentir cómodos en sus actitudes. Si en cambio somos todos más conciliadores haremos más evidente quiénes son los que están fuera de lugar.
Un cordial saludo.
neuromancer. Si no recuerdo mal, leí La sociedad abierta y sus enemigos más o menos alrededor de 1993 (hablo de memoria) cuando se produjo un golpe de estado militar en Argelia a raíz de una victoria de los musulmanes en unas elecciones democráticas.
Mi memoria es débil. Creo recordar que era Argelia y todo el resto de circunstancias. Tampoco estoy seguro del año. No voy a consultarlo porque es irrelevante para el caso.
Me preocupa la intolerancia. Me preocupa el totalitarismo. Me preocupan estos asuntos. Creo que también es lectura obligada los orígenes del totalitarismo, de Hannah Arendt por estas fechas, para que vayamos siempre con cuidado.
Dicho esto. No sé qué significa blanquear el fascismo ni cómo se puede blanquear el fascismo al aceptar el resultado de unas elecciones democráticas. ¿Sostiene usted que debiéramos hacer lo de los militares en Argelia? (Otras veces han hecho lo mismo en Turquía, con golpes de Estado aplaudadidos por las democracias occidentales, es cierto.)
No es una cuestión fácil. Todos los partidos de la democracia española tienen pulsiones totalitarias. No puede entenderse de otro modo la falta de transparencia y la obsesión por controlar las televisiónes piúblicas centrales y autonómicas.
Las pulsiones totalitarias de Podemos y de VOX quizá sean mayores que las de otros partidos y se reflejan también en sus problemas de vetos y de control de los medios. Todo son indicios y síntomas que debemos vigilar. Pero los partidos grandes del espectro también tienen esas pulsiones bien aceradas.
Los ciudadanos tenemos una responsabilidad cuando votamos y yo debato con todos los ciudadanos que puedo, voten al partido que voten, para hacerles ver su responsabilidad y para discutir la bondad del voto y de las ideas.
Pero yo también tengo una responsabilidad. Si no soy capaz de convencerles, o me explico muy mal o mi teoría no es perfecta, porque los demás no son tontos, la responsabilidad es mía, no de ellos..
Pensar que mi voto es el bueno y el de los demás es el infierno, el fascismo y la plaga probablemente muestre poco más que falta de autocrítica.
Yo voto en todas las elecciones y nunca me gusta lo que voto. En VOX y en Podemos habrá fanáticos, como en todos los partidos, pero también habrá críticos.
Vivimos en la sociedad que vivimos. Es posible que, como en Argelia, no sea una sociedad preparada para la democracia y la libertad y vote libremente y mayoritariamente a favor del totalitarismo religioso.
¿Cuál es la solución? ¿No respetar el voto de los que nos parecen poco fiables? ¿Cómo podemos hacerlo cuando el programa electoral cumple con la ley?
No existe otra solución para la civilización que la integración y el trabajo para convencer a quienes piensan de forma diferente.
Segregarlos, discriminarlos, tratar sus votos como votos de segunda no me parece una buena idea. Entre otros motivos porque puedes reforzar su postura.
A mí me falla la memoria, pero tengo siempre presente la amenaza del totalitarismo. No es una amenaza, es un hecho diario. Nuestra democracia es imperfecta y por sus imperfecciones se cuela totalitarismo.
Dar a todos los votos el valor que tienen y aceptar su legitimidad cuando el programa cumple la ley es un paso en contra del totalitarismo. Negarle su legitimidad y capacidad de influencia favorece el totalitarismo.
Seamos todos cuidadosos.
(Seguiré contestando, pero hoy tengo otros asuntos urgentes. Gracias por participar)
Sr. Moltó, críticos en Vox?
– «Avanzamos»
Y sobre el supuesto intento de controlar los medios de Podemos, supongo que no se referirá a los medios que publicaron cuanta mentira encontraron o inventaron sobre ellos, los que difundían el informe PISA de la policía patriótica, o los infundios del prevaricador juez canario, o etc.
Por qué estos hechos no tienen el raca-raca de las mentiras anteriores?
Como ya le he comentado anteriormente el subidón de la extrema derecha es porque el capital ha invertido (e invierte) mucho dinero en ellos, tienen miedo de que el chiringo capitalista se les caiga, por motivos distintos a los de los años 30, y es el mismo que inventa mentiras contra sus enemigos, sean ecologistas o de Podemos.
Blanquear el Fascismo es comparar a VOX con Podemos.
ESO ES BLANQUEAR EL FASCISMO.
Lo que hay que leer.
Hola, Javier
La política de «izquierdas» postula que acabar o reducir al mínimo los privilegios sociales y económicos de las clases dirigentes (aristócratas, burgueses, sacerdotes, militares,…) y acomodadas (grandes propietarios de todo tipo de empresas, tierras, minas, industrias,…), es el modo más eficaz para lograr la paz social, y la prosperidad material de los ciudadanos, de modo que todos ellos se sientan libres e iguales políticamente, independientemente de su riqueza material, y de sus responsabilidades sociales (empleado, empresario, autoridad pública institucional,…).
Por contra, la política de «derechas» defiende la existencia, en mayor o menor medida, de ciertos privilegios sociales y económicos para las clases dirigentes («capitalistas» o «comunistas») y acomodadas, de modo que la mayoría social asuma como «normal» la estratificación social y económica, o incluso la falta de libertades u oportunidades para ciertos colectivos marginados por cualquier razón (pobreza, raza, género, orientación sexual, religión, planteamientos políticos,…), o en el peor de los casos, la abolición de todo tipo de libertades sociales y económicas, excepto para la clase dirigente.
El problema radica en que la mayoría de personas que han heredado el poder político o económico, prefieren mantener o incrementar su «patrimonio» a corto plazo (liberando mercados internacionales, construyendo paraísos fiscales, privatizando recursos básicos -agua, energía, telecomunicaciones, fármacos, semillas transgénicas…-, aplicando legislaciones laborales y medioambientales laxas,…), aunque eso suponga una cada vez mayor desigualdad económica, o más injusticias sociales, a largo plazo.
Y son muy pocos los poderosos que con una visión a más largo plazo, a lo largo de la historia, se han atrevido a financiar estados más democráticos, con ciudadanos cada vez más libres e iguales, ya que antes o después, se verán obligados a compartir su poder político y económico con ellos, lo que generará multitud de dificultades (procesos de independencia de nuevas naciones, rebeliones contra las clases dirigentes o contra sus postulados filosófico-político-económicos,…) a la hora de tomar decisiones de gobierno de todo tipo (desde las cuestiones más básicas en los ámbitos más locales, a las más complejas con multitud de implicaciones geoestratégicas).
Desde un punto de vista general y a largo plazo, creo que la cuestión fundamental está clara: ¿Estamos dispuestas las personas que disfrutamos de mayor calidad de vida en el mundo, a aminorarla en cierto modo, o a que crezca en menor medida (pagando unos impuestos directos mayores y más progresivos -IRPF, sociedades,..-.. y menos impuestos indirectos -IVA, especiales…- , o incluso deduciendo al 100% los indirectos de los directos, para reducir al mínimo el fraude fiscal), en beneficio de las personas más desfavorecidas -de nuestro país o de otros países-, o preferimos olvidarnos de ellas, o mantenerlas marginadas de una u otra forma, aunque eso nos suponga un mayor aislamiento social, y unos gastos cada vez mayores en sistemas de defensa, armas, instituciones caritativas, ONGs «solidarias»…?
Gracias a todos por compartir su tiempo y sus reflexiones.
Un saludo
Qué hartazgo, todos los necios que se llenan la boca de «progreso» como si eso fuese algo exclusivo de una opción política andan revolviendo otra vez tumbas, como si la constitución que nos dimos TODOS los españoles incluyendo a socialistas, comunistas y conservadores y nacionalistas no hubiese servido de nada.
Ahora resulta que votar a VOX es blanquear el fascismo, pero todos los millones de muertos de los comunistas (bastante más) son fenomenales y muy democráticos, claro.
Cansado de burros con orejeras
Mequieroirdestepaís, si está cansado de orejeras, quíteselas, es posible.
Ah! y es mejor leer a historiadores que a histeriadores.
Queridos Sres @4 y @10,
No me puedo extender, pero les recomiendo que lean Vds más.
Vale, al final me he extendido, de política ni idea, de historia he leído mucho y de muchas fuentes.
Empecemos así:
Por favor no mencionen con tanta facilidad los muertos de las cunetas.
Pónganse a leer:
– «Francisco Franco un siglo de España», editado cuando D. Manuel Fraga Iribarne era ministro de Información y Turismo. Dirigido el texto por Ricardo de la Cierva, el responsable nombrado por el régimen para «reescribir» la historiografía de la guerra y el régimen franquista» un departamento de estado entero. Si son Vds 2 capaces de leer hasta la página 100 les invito a cenar. D. Ricardo falleció en 2015 y hasta entonces fue un fiel defensor del franquismo.
Fue publicado con otras «cosas» tras la publicación en los 60s de «Historia de la guerra civil» de Hugh Thomas.
Luego leen Vds. «la guerra civil contada a los jóvenes» mas que para jóvenes es para niños, pero les va poniendo en onda.
Después continúan Vds con «el holocausto español…» de Paul Prestón. Particularmente leerlo me ha supuesto un esfuerzo personal muy grande, seguramente a Vds. no les costará.
Y pal postre «España refugio nazi» de Carlos Collado Seidel.
Les puedo recomendar al menos otras 20 buenas lecturas, tanto para poder hablar sobre violencia y represión en la guerra civil como del entorno socio-económico Español y Europeo de la época. Entorno en el cual decenas de miles de españoles vivían en condiciones de miseria.
Y vuelven por aquí luego y hablamos de Guerra Civil, de represión franquista y de muertos en cunetas, y de quien produjo los muertos. Porque hasta donde llego, salvo en los casos de Paracuellos de Octubre +/- a Diciembre de 36, (recordar que ante la inminente caída de Madrid, el gobierno legítimo de la república se había trasladado a Valencia) no se ha podido establecer una relación del gobierno republicano con el asesinato directo, ni siquiera en estas famosas sacas aparece ni un solo documento firmado por el gobierno mas que la orden de trasladar a los presos a cárceles lejanas al frente.
Y busquen Vds. por ahí alguno de los memorables discursos de Radio Sevilla con Queipo de Llano dándolo todo «matadlos en el vientre de sus madres» era lo mas fino.
Que sí, que hubo muchísima violencia y asesinatos, pero por favor no mezclemos actos cometidos por vulgares asesinos, por turbas de ciudadanos, comunistas, socialistas, sindicatos, asociaciones agrarias y 10.000 grupúsculos mas, con una violencia orquestada por los que iban a salvar a España asesinando a los españoles. Y eso lo decían ellos.
Y por cierto que esos ciudadanos o al menos muchos de ellos estaban absolutamente desesperados por la situación de ese momento, y por el hecho de que salvo el gobierno del Frente Popular, que no tuvo tiempo de nada, porque lo reventaron los militares africanistas, las reformas prometidas por los anteriores gobiernos fueron absolutamente pisoteadas por unas riquezas nacionales basadas en vender productos agrícolas de sus territorios (conseguidos en épocas feudales) y cultivados en condiciones penosísimas por jornaleros que eran esclavos. Y sí, en muchos pueblos en los primeros momentos de la guerra se quemaron iglesias, se asaltaron cortijos, se asesinó al cacique, al dueño del cortijo, se persiguió y asesinó al clero.
No confundir esta situación revolucionaria con una violencia de Estado promovida y patrocinada por los militares sublevados a los que rápidamente se unieron milicias de terratenientes, sus capataces y milicianos (pagados) que arrasaron pequeños pueblos de zonas agrarias.
Tampoco nos olvidemos que fue el gobierno militar (los sublevados, no lo olvidemos) durante la guerra el que cometió el gravísimo error de permitir y además facilitar medios para miles de asesinatos. Estos sublevados permitieron que un partido de corte faccioso, se encargará de hacer auténticas limpiezas “étnicas” en territorios ya conquistados.
Y tristemente esa historia solo la conoce quien realmente ha querido buscarla con cientos de horas de lectura y visitas a lugares y personas.
Obviamente adquirir conocimiento de donde venimos es complejo y mas hoy en día que Twitter, Facebook, las fake news, la des-información rápida y sin contrastar nos ha ganado. Y el tiempo libre que nos deja internet lo ocupamos con lo de siempre, el fútbol y la barra del bar.
Así que los muertos de las cunetas no me los mencionen con tanta facilidad por favor.
Saludos.
Hola a todos. Gracias por participar, por escribir, por dar su opinión.
Este blog es ejemplo de lo que digo. Participamos en él personas con diferentes ideologías, todos pagamos nuestros impuestos, todos votamos a unos o a otros, todos buscamos un mendo que nos parece mejor y todos podemos estar equivocados.
Belén.
Haces lógicamente lo que te parece mejor. Pero tienes la obligación de respetar a las personas, aunque no respetes sus ideas. Todos tenemos que respetar a las personas, porque es un principio básico de nuestro ordenamiento jurídico.
¿Qué significa no respetar a la cúpula de un partido? ¿Podemos insultarlos, podemos denigrarlos, podemos ejecutarlos? No podemos hacer nada de eso. No debiéramos hacer nada de eso. Ni a ellos ni a nadie.
Mi ideología es lejana a su ideología. Pero soy muy torpe. Debato con muchos votantes de Vox y no consigo hacerles entender que su ideología es perjudicial para el bienestar de la mayoría.
Además de asumir que puedo estar equivocado, rechazo la idea de que todos los votantes de Vox son malas personas o ignorantes profundos. Sé que no es así. Conozco a varios. Algunos cultísimos e inteligentísimos. Otros, padres ejemplares que cuidan de su familia. ¿Son poco solidarios? Entiendo que sí, pero la solidaridad no puede ser una obligación.
Muchas personas autodenominadas de izquierdas y votantes de izquierdas también son poco solidarias. He conocido muchísimas. Muchas de ellas sólo votan a la izquierda porque están convencidas que ese voto les permitirá mejorar su posición personal, sin pensar ni un minuto en la cantidad de gente que está peor que ellos y que está abandonada también por los partidos de izquierdas.
La solidaridad (como sentimiento) no es exigible. Podemos exigir el pago de impuestos para repartir la riqueza, pero muchas personas (de izquierdas y de derechas) pagan a regañadientes. Y muchas personas, que se denominan de izquierdas y que votan a la izquierda más izquierdosa defraudan al fisco todo lo que pueden.
Yo no respeto la ideología de nadie. Ni la mía. La machaco todo lo que puedo, para intentar mejorarla. Pero la ley nos obliga a respetar a las personas, incluso a las de izquierdas que defraudan. si comenten ilegalidades, tenemos que denunciarlas y tienen derecho a la presunción de inocencia.
La civilización obliga a compartir el espacio, el Estado, los impuestos y la tolerancia con los que piensan diferente, mientrs no cometan ilegalidades.
Hay un factor que en mi caso pesa mucho en todo esto que digo. Soy un defensor absoluto de la libertad de expresión. Los señores de Vox tienen que tener derecho a defender todo lo que defienden. Incluso para decir que ellos eliminarían ese derecho.
Si no estamos preparados para asumir ese reto de la democracia es que no estamos preparados para la democracia. Y si no lo estamos, la democracia se romperá. De hecho, la romperíamos si les priváramos de ese derecho.
manuel xvi,
El control y los vetos a medios de Podemos a los que me refiereo no tienen nada que ver con esos casos que cita. Conozco al dueño de Canarias Ahora y ese no es un medio ni de lejos controlado por Podemos. Ni su pareja, aunque sea candidata de Podemos, está controlada por Podemos. No me refiero a ninguno de esos dos casos que cita. Pero conozco de primera mano casos de vetos a medios en Podemos. Y de intentos de control y de maniobras para controlar medios.
Una muestra más de la obsesión de Podemos con los medios fue su interés por controlar RTVE en la anterior negociación con el PSOE. Para mí la independencia de la televisión pública es determinante. Una democracia no puede denominarse tal con una televisión pública a las órdenes del gobierno.
Zapatero aprobó una ley ejemplar para que el presidente de RTVE fuera aprobado por una mayoría amplia del Congreso (5/8 si no recuerdo mal). Lo primero que hizo Rajoy fue cargarse esa ley. No he visto nunca a Podemos ni siquiera insinuar que quiera recuperar esa independencia de RTVE.
Conozco su argumento de que el capital invierte mucho dinero en fomentar la extrema derecha. Es un argumento muy viejo. ¿Usted cree que en el año 1982, cuando el PSOE obtuvo mayoría absoluta de 202 diputados, poquietos años después de muerto Franco, el capital no invertía mucho dinero (más proporcionalmente que ahora) en fomentar la extrema derecha, y con una única televisión, en manos del estado.
Esa teoría es vieja, pero hace aguas. Los ciudadanos podemos elegir lo que queremos escuchar, ver y leer. En el 82 la tele pública estaba totalmente sesgada y los medios de izquierda como los conocemos ahora no existían.
Mis valores están escorados a la izquierda, aunque las personas de izquierdas en ocasiones me llaman facha y los de derechas me llaman rojo, la mejor de las veces, y en otras ocasiones me insultan groseramente.
Echarle la culpa al empedrado (al capital) es una excusa fácil, pero estéril. Utilicemos buenos argumentos para convencer al resto de ciudadanos, en lugar de tratarles como si fueran tontos (que es lo que les estamos llamando cuando decimos que no se pueden sustraer a los reclamos del capital, al marketing). Si piensa que el resto de ciudadanos es tan tonto que no sabe discernir lo que usted sí cree que sabe discernir no me extraña que no les conveza de nada.
Yo, que no los considero tontos, tampoco les convenzo de nada, dicho sea de paso. Y lo entiendo, porque hay muchos matices y muchos factores que influyen y muchas creencias que hemos mamado (en la izquierda y en la derecha) y muchas formas de entender la solidaridad. (La caridad bien entendida empieza por uno mismo es una frase muy extendida que no sé cómo interpretar, pero que sirve para justificar todas las ideologías).
El camino de la convivencia y de la civilización es largo. Con enfrentamiento no sólo no avanzamos, sino que retrocedemos. La civilización es contraria al depredador que llevamos dentro. Para alcanzarla tenemos que utilizar la cabeza y no la entraña.
Neuromancer. Si blanquear el fascismo es comparar a Vox con Podemos, usted también blanquea el fascismo.
Cuanod dice que Podemos es mejor que Vox, o preferible a Vox, o cuando considera que Podemos es un partido digno y Vox no lo es, no para de compararlos.
Yo comparo a Podemos y a Vox. Lo comparo todo en esta vida. No tengo otra forma de analizar elementos diferentes que comparándolos. Al compararlos veo igualdades y diferencias.
Uno puede elegir no comparar, que es equivalente a no poner en cuestión. Yo intento cuestionarlo todo. Mis ideas, mis actuaciones, mis propiedades, mis preferencias, los partidos que elijo para que me representen (esos son los que más cuestiono y a los que más exijo, porque les entrego mi mandato de representación).
Compar y cuestiono. Sí. Y veo cosas que no me gustan en todos los partidos. Y lo digo. No decirlo no ayuda a que las cosas que no me gustan mejoren. Para lo único que sirven es para esconderlas. No va conmigo.
vicente gómez
Pregunta usted si «¿Estamos dispuestas las personas que disfrutamos de mayor calidad de vida en el mundo, a aminorarla en cierto modo, o a que crezca en menor medida (pagando unos impuestos directos mayores y más progresivos -IRPF, sociedades,..-.. y menos impuestos indirectos -IVA, especiales…- , o incluso deduciendo al 100% los indirectos de los directos, para reducir al mínimo el fraude fiscal), en beneficio de las personas más desfavorecidas -de nuestro país o de otros países-, o preferimos olvidarnos de ellas, o mantenerlas marginadas de una u otra forma, aunque eso nos suponga un mayor aislamiento social, y unos gastos cada vez mayores en sistemas de defensa, armas, instituciones caritativas, ONGs «solidarias»…?»
Mi respuesta es que no queda más opción a que aminoremos las diferencias. Lo podemos hacer por las buenas (de forma consciente y planificada) o por las malas (mediante revoluciones y saqueos). en momentos de mayor pobreza (que yo creo que se avecinan por un largo periodo de tiempo) y de una comunicación global, estas diferencias son insostenibles. Nadie (ni el capital al que se refiere manuel xvi), tiene capacidad para mantenerlas.
A mí el cuerpo me pide reducirlas y la razón me pide reducirlas de forma ordenada, para beneficio de la mayoría.
El mayor peligro que veo en esto es, que incluso teniendo el mismo fin, algunas propuestas de la izquierda (algunas herramientas que propone la izquierda) para reducir esta diferencia (me parece que) no son efectivas y conducen a mayores diferencias, a una aceleración de la pobreza y a mayor riesgo de violencia.
Por tanto, aunque estoy de acuerdo con la necesidad de reducir las diferencias de riqueza, discrepo de las herramientas propuestas para conseguirlo en muchas ocasiones.
(Por ese motivo algunas personas de izquierda me llaman facha con relativa frecuencia. Sólo porque discrepo de ellas en cuáles son las mejores herramientas para conseguir el mismo fin. Ellas creen que para alcanzar los objetivos es necesaria una llave inglesa y yo sostengo que es mejor un destornillador porque con la llave inglesa van a redondear la cabeza del tornillo y va a ser peor. Quizá esté equivocado yo, pero no consigo que los teóricos de la izquierda «tradicional» me convenza de que su herramienta es la buena.
Álex. Le voy a hacer caso. Voy a leer todos los libros que propone. Gracias.
VOX es un partido fascista, xenófobo, machista y que incita al odio y a la violencia contra inmigrantes, «rojos», mujeres, LGTBI, vascos, catalanes y todos aquellos que no piensen como ellos.
Como ejemplo (tristemente reciente) el caso de los 3 «MENA» (niños extranjeros sin familia que son tutelados por el estado) que han sido atacados gravemente (1 sigue en la UCI con el cráneo aplastado) después de ser señalados por los instigadores de VOX, atacados por sus «vecinos».
Este año han repuntado gravemente los casos de asesinatos machistas y no creo que sea casualidad que coincida con el auge de esta gentuza y su constante desprecio contra las mujeres y sobre todo las feministas. Y sobre todo relativizar la violencia y su gravedad.
Se podrá estar o no de acuerdo con los ideales que defiende Podemos, pero no incitan al odio contra otras personas, ni a la violencia contra nadie.
POR ESO NO SON NI REMOTAMENTE COMPARABLES SR. MOLTÓ
@Neuromancer
https://elpais.com/sociedad/2019/02/06/actualidad/1549439631_636546.html
50 mujeres asesinadas por sus parejas este año en lo que se llama «violencia machista». Ese es el «repunte grave» al que vd. se refiere. Equivalente a 10 dias de victimas mortales en accidente de trafico. Equivalente a 5 dias de victimas por suicidio (de las cuales, 3 de cada 4 son hombres).
Habla vd. de los MENAS. Quiere vd hablar de victimas de los MENAS para ver en que lugar nos encontramos?
Quiere hablar vd. de como se señala a ciudadanos en Catalunya por el hecho de creer que la independencia no es una buena idea? De como se atropellan los derechos basicos de movilidad y convivencia de un 50% de la poblacion que no esta de acuerdo con la deriva independentista?
Quiere hablar de como dirigentes del grupo que vd. esta defendiendo como adalid de las buenas formas dan por buenos los escraches contra personas que no piensan como ellos? Me esta diciendo que eso no es incitar a la violencia ni al odio contra otras personas? Le parece bien que se decida «rodear el congreso» porque no le han gustado los resultados de unas elecciones?
No soy votante de Vox, ni de Podemos, ni de nadie. Pero su mensaje es igual de deleznable que cualquier posicion extrema.
#19
En cuanto ha comparado asesinatos (actos conscientes y premeditados de violencia letal) con accidentes (sucesos fortuitos) he parado de leer.
Lo siento.
Javier,
Desafortunadamente, muchos de los «teóricos de la izquierda» creen que con substituir a la clase dirigente aristocrática o empresarial («capitalista»), por otra burocrática («comunista»), ya se solucionan todas las injusticias sociales y económicas, y no se dan cuenta que el problema político y económico fundamental, no radica en «quién» dirige la sociedad y la economía, sino en «cómo» se dirigen estas cuestiones.
Un gestor virtuoso de la «res publica» no debería: considerar a los ciudadanos como seres incapaces de organizar su propia vida; ni creer que los trabajadores son incapaces de comprender los problemas de los empresarios, y viceversa. Sintéticamente, estos prejuicios son los que en demasiadas ocasiones, imposibilitan que los teóricos de la «izquierda moderada», y los teóricos de la «derecha democrática», se pongan de acuerdo en los regímenes «democráticos», a la hora de gobernar.
Gracias a ese desencuentro histórico, promovido por las auténticas «derechas radicales y antidemocráticas», estos grupos de poder ejercen una influencia política y económica excesiva en los países «capitalistas», o incluso alcanzan el gobierno en repúblicas «comunistas», «islámicas», autocracias,….
Mientras los teóricos de la «izquierda moderada», y los teóricos de la «derecha moderada» sigan enfrentándose políticamente de forma tan beligerante, y no sean capaces de ponerse de acuerdo en construir estados más fuertes (ejército, policía, justicia, supervisión pública y transparente de los mercados -agua, energía, telecomunicaciones,…-, sistemas públicos de sanidad, educación, pensiones,…), que sean capaces de combatir con más eficacia la corrupción política y económica, y las ineficiencias de todos los servicios públicos, difícilmente se podrá frenar a las «derechas» o a las «izquierdas», más reaccionarias, antidemocráticas, o antiliberales (según el caso: libertinaje económico «neoliberal» vs autoritarismo económico «progre»; o autoritarismo moral más «tradicionalista» vs autoritarismo moral más «progre»).
Un saludo
Neuromancer.
Lo que usted debe querer decir es que no son equiparables. Yo no los equiparo, pero sí tienen alguna cosa en común. Y sus votantes, tienen más cosas en común que los propios partidos. Por ejemplo, que todos contribuyen a pagar las pensiones.
Si tienen cosas en común, de nada sirve negarlo.
Sobre los delitos que usted menciona, debemos actuar. Pero es contraproducente criminalizar a todos los votantes de VOX.
Dicho esto, estoy absolutamente de acuerdo con que desde VOX se incita al odio. Y no podemos caer en su trampa. También le digo que aceptar la libertad de expresión implica saber encajar con desdén esas incitaciones al odio.
El camino que queda por recorrer es muy largo. Más nos vale utilizar la cabeza lo mejor que sepamos, que caer en la espiral de tensión y violencia no produce beneficios para nadie.
En lo que respecta a España, los dirigentes de casi todos los partidos políticos, son alérgicos a la «centralidad política», a la «moderación política», a la «deportividad política», y sobre todo, a la auténtica Democracia, aunque se llenen la boca con algunos de estos términos. Basta observar a aquellos políticos supuestamente más «moderados» y «demócratas», hablando mucho de «centralidad» y de «regeneración democrática», pero a la hora de la verdad, cuando tienen que votar en el parlamento, no se atreven a pasar de la teoría a la práctica.
¿Por qué Rajoy e Iglesias, votaron NO al gobierno del PSOE de Sánchez, pactado con Cs, tras el 20D, si ninguno de los dos fueron capaces de pergeñar una propuesta de gobierno alternativa (PP en solitario, PP+Cs, PSOE+Podemos)?
¿Por qué Sánchez no quería abstenerse para conformar un gobierno del PP, pactado con Cs, tras el 26J, si no era capaz de convencer a Iglesias y Rivera, para formar un gobierno alternativo?
¿Por qué Rajoy no aceptó su substitución por otro dirigente del PP, tras la sentencia del caso Gürtel, y propició la moción de censura que llevó al gobierno al PSOE de Sánchez?
¿Por qué Rivera no apoyó esa moción de censura a Rajoy, ni tampoco apoyó un gobierno de Sánchez tras el 28A?
¿Por qué el PP de Casado no aceptó su derrota del 28A, y de forma paradójica, votó NO al gobierno del PSOE de Sánchez, al mismo tiempo que incitaba a Cs a votar a favor, o a abstenerse?
¿Por qué tras el 28A, Iglesias no aceptó un gobierno en solitario del PSOE, ni tampoco el gobierno de coalición que se le ofreció? Y por otro lado ¿por qué Sánchez no aceptó el gobierno de coalición que le ofrecía Iglesias, sabiendo que todos los ministros, incluidos los de Podemos, no tienen competencias independientes en ningún caso, y cualquier actuación ejecutiva debe votarse en el Consejo de Ministros, en el que el PSOE tendría siempre mayoría de bloqueo?
¿Por qué el PP de Casado, tras el 10N, «celebró» su derrota electoral, e insistía en dificultar un gobierno del PSOE de Sánchez en solitario, obligando a este último a pactar con Iglesias?
Y lo mejor de todo es cuando observas a estos políticos supuestamente más o menos «moderados» y/o «demócratas» (PP, Cs, PSOE, Podemos,…), preocupándose hipócritamente del auge de VOX, así como de los partidos nacionalistas, cuando todos ellos están dispuestos a sembrar la semilla de la discordia política, con su corrupción, o con sus posturas poco dialogantes, o incluso antidemocráticas, siempre que se les presenta la oportunidad.
Es una pena que su madurez política y democrática sea tan baja, ya que eso les impide conjugar una sana «soberbia» y/o «engreimiento» a la hora de defender sus principios políticos durante las campañas electorales, con una necesaria humildad y comprensión intelectual del panorama sociológico-político, a la hora de conformar gobiernos, y legislar PARA TODOS, y no sólo para los votantes de cada partido.
Mientras exista esta debilidad política y democrática, los poderes en la sombra más abyectos (aunque cada vez se ocultan menos), seguirán aprovechándose de la situación, corrompiendo el mundo en la medida de sus posibilidades, e intoxicando física, intelectual, y moralmente, a las capas sociales más débiles, dificultando su progreso. Esos son los auténticos enemigos políticos del progreso social en el mundo, y espero que más pronto que tarde, una mayoría social más ilustrada (se autodenomine políticamente más de «izquierdas», o más de «derechas»), despierte del letargo, y empiece a apoyar a partidos políticos o dirigentes verdaderamente empáticos y dialogantes, cuya única línea roja, sea la libertad de expresión. Gracias a esta libertad, se consiguen todas las demás libertades y derechos sociales, pero sin ella, todos los sistemas políticos y sociales, antes o después, sólo pueden aspirar a la decadencia.
Un saludo
D. Javier, si lo hace, le recomiendo empiece por «El holocausto español… » de Preston, es absoluto periodismo histórico datado.
No creo que precise mas.
Además es un libro perfecto para levantar 6 cm el monitor del ordenador 🙂
Saludos.
Leyendo a @neuromancer uno se da cuenta del problema rápidamente: los que se auto proclaman antifascistas resultan ser los verdaderos fascistas. Personas que censuran cualquier atisbo de diálogo por el simple hecho de no estar de acuerdo a sus ideales. Es complicado buscar el consenso del que habla el señor Moltó cuando una persona se niega siquiera a escuchar tus argumentos. Y desgraciadamente esto se está convirtiendo en una tónica muy habitual en la izquierda española, la cual hace años era el símbolo del «progreso», mientras que hoy en día rezuma odio por todos sus poros. Como contraposición a todo esa intolerancia y hartazgo aparece VOX, partido que juega en esa misma liga.
En los 40 años de democracia española, no ha habido más censura que hoy en día a la hora de expresar tus opiniones. Es lo que se conoce como el «progrefascismo».
@ 12 Álex, el problema no es de contabilidad – quién llenó más fosas-, porque los números no legitiman al que mató menos ¿comprende? Por supuesto que el gobierno de Franco llevó a cabo la represión desde el Estado. Porque ganó la guerra y tuvo esa oportunidad.
Pero si hubiera ganado el Frente Popular, habría pasado lo mismo. O peor, si atendemos a la sublime experiencia represora del socialismo en sus 100 años de historia y en los cinco continentes, con idéntico -y trágico- resultado. (Incluya en sus lecturas a Solzhenitsyn).
Y ahora ¿me puede explicar por qué algo que pasó hace 80 años, y que a todos nos avergüenza, tiene la menor relación con el panorama político actual, salvo por el interés de despertar odios y rencores para obtener rédito político?
De los comentarios que hace Javier en su blog éste me ha parecido muy razonable. No suelo estar nada de acuerdo con lo escribe y en cómo lo escribe.
Lo que no me parece constructivo es que, en total relación con ello, salga la típica gente que en el primer comentario empiece a hablar de muertos en las cunetas.
Yo tengo 40 años, uno de mis abuelos era franquista y el otro republicano, como cualquiera de nosotros si hubiera una guerra ahora mismo. Unos seríamos de un bando y otros, de otro. Y nos mataríamos igual que se mataron ellos. Y haríamos las mismas salvajadas que se hicieron ellos. En la transición el poder decidió dar paso a la democracia y seguro que a unos nos parecen cosas mejores y peores de ese proceso. Pero creo que es indiscutible, que los que se mataron se dieron una oportunidad para mirar hacia delante y hacer un pacto. Y años después gente en el poder trata de reventar ese proceso que según se estudian en muchos sitios, fue ejemplar, aunque seguro, imperfecto. A mí eso me parece un sinsentido. Se apañaron entre ellos… pues ya está. Sus nietos ahora están más dolidos que ellos.
Por supuesto que hay cosas que no me gustan de la constitución, si me preguntan, por supuesto que votaré para cambiarlas, pero no vivo pensando en lo que pudo ser y no fue.
A mí hablar del culatazo que le dió un guardia civil a mi abuela y por el que perdió a un hijo no me aporta nada, igual que tampoco me aporta nada hablar de los dos sacerdotes asesinados por los republicanos familia de mi mujer. Me parece infinitamente más importante el futuro.
Tengo hijos y lo que me preocupa es que tengan oportunidad de ganarse la vida en paz y en justicia, que sean juzgados por lo que son y por lo que hacen con leyes justas e iguales. Por supuesto que no me gusta que mi hijo pueda ser juzgado distinto a mi hija por el mismo delito, por el mero hecho de ser hombre. No porque sea un fascista (que lo soy, obviamente, tra, tra) sino porque me parece injusto. Como no me parecen justas otras muchas leyes que a otros les pareceran muy necesarias, correctas o simplemente otras leyes más.
Por supuesto que creo que un violador no debe salir de la carcel.
Por supuesto que creo que un asesino (o asesina) de su pareja no debe salir de la carcel.
Por supuesto que no entiendo que tenga más carcel los de la gurtel que los del golpe de estado de Cataluña.
Por supuesto que no me parece normal que el hombre que dijo que azotaría a una mujer hasta que sangrara sea el referente de algo que llaman feminismo y que promueve leyes con las que no estoy de acuerdo… Que un cartel después de su baja se le anunciara como VuELve y luego echaran cuentas de que a lo mejor no era lo más apropiado… Si alguna de esas cosas las hubieran hecho otros…
De todo ello no puedo opinar libremente en el trabajo y en muchos ámbitos de mi vida. Por eso me llaman fascista, que no sé muy bien lo que es… porque no leo mucho, la verdad.
Creo que hay demasiada gente con demasiado dolor con cosas del pasado. Creo que tenemos suficiente con el puto presente como para estarnos acusando de lo que hicieron nuestros abuelos como si nosotros lo hubiéramos hecho sólo un poquito mejor.
Saludos
@ 26 Angel,
Yo no hago cuentas, ni adivino, y no puedo adivinar que hubiera ocurrido si el gobierno legítimo hubiera conseguido “ganar la guerra”. En las guerras nadie gana, todos perdemos. Y el gobierno republicano, repito, legítimo, navegaba entre corrientes, tenía que defender a la población y el estado de derecho y al mismo tiempo intentar controlar la revolución nacida del golpe de Estado. Las 3 Españas descritas muchas veces.
Y mientras Europa se recuperaba de la guerra y evolucionaba. España seguía siendo un territorio de pobreza y emigración y gracias en parte a aquella emigración quedo algo de trabajo para los que aquí se quedaron y además se consiguió riqueza enviada por los emigrantes que reconstruían Europa.
Y no me vengan con “el milagro español”a partir de los 50s. Gran parte de la evolución de la economía española se debió al acuerdo con Estados Unidos. Gastando ellos muy poco se garantizaban un país en Europa que les permitió poner bases aéreas y marinas desde las que realizar las maniobras militares necesarias en el contexto de la guerra fría.
No se puede comparar:
– violencia revolucionaria / popular, nacida de años de brutal injusticia social, de la falta de libertades, de la pobreza y la semi-esclavitud que aprovechó el golpe de estado de los militares mayormente africanistas para ejecutar a aquellos que los oprimían.
-violencia orquestada, organizada, patrocinada por los militares sublevados y en la que se permitió a un partido político decidir quien vive y quien muere en territorios ya conquistados, caso de Galicia. Además, está la violencia ejercida contra civiles, hombres, mujeres e incluso no natos por parte de las tropas del ejercito “Nacional”. Esta violencia era ordenada por unos militares que querían España para ellos, no para los españoles, y que buscaban el mayor Nº de cadáveres posible y se permitían lujos como decir que lo que ocurrió en Badajoz (por ejemplo) sería nada comparado con lo que harían en Madrid.
Tampoco se puede olvidar que los militares sublevados permitieron directamente que tropas y equipamientos extranjeros, (si ya se, alguien dirá que el gobierno republicano compró equipamiento, obsoleto y caro a Rusia) realizarán acciones tipo el bombardeo de Guernica, en el cual la Luftwafe demostró como era posible machacar literalmente un núcleo urbano civil durante horas. Según la historiografía franquista, los mineros asturianos habían dinamitado la ciudad.
El primer bombardeo masivo contra una población civil, realizado por el ejército alemán en territorio español. Permitido y promovido por los militares españoles sublevados
La historia es jodida, es muy jodida.
@27 Luis, a mi hablar de lo ocurrido en mi familia tampoco me sirve, pero el desconocimiento de la historia del siglo XX y el permitir que determinados “políticos” falseen o directamente mientan sobre nuestra historia y convenzan a personas no informadas pueden hacer que se repitan los mismos errores.
Léase lo rápido que ahora todos arriman el hombro para sacar un gobierno adelante.
Los que nos hemos preocupado de conocer esa parte de la historia no debemos callar ante los que la manipulan en su propio interés.
Terminada la 2ª guerra mundial cuando se descubrió el horror de los campos de exterminio nazi, el general al mando de las tropas USA en Europa (perdón por la laguna, no recuerdo ahora su nombre) permitió el acceso libre a los medios de comunicación a los campos para que fotografiaran y filmaran todo el horror “por que algún día alguien dirá que esto no ocurrió” y efectivamente, varios regímenes políticos han negado ese holocausto.
Saludos.
Sr. Moltó.
Me resulta curioso, o no, que a ud. le preocupe más una propuesta de P.I. (que no recuerdo ni cuando ni como la hizo) que las actuaciones en contra de un partido emergente que hicieron las cloacas del estado (jueces, policías, medios, etc.)
A los que hablan de golpe de estado en Cataluña, les aconsejo que se leen la entrada de la Rae, viene en golpe y bajando está «de Estado». En ella aparece la violencia, cosa que, a pesar del TS, no hubo por los independentistas. Espero que los tribunales europeos corrijan esta sentencia, como hicieron tantas veces con otras.
Lo que no me gusta nada es el pastizal que vamos que tener que pagar para indemnizar a los «políticos presos por motivos políticos» una vez que salga la sentencia de la corte europea.
@Luis
Aquellos privilegiados que han dispuesto del poder económico y militar, a lo largo de la historia, son siempre los máximos responsables de los cambios políticos, de modo que cuando algunos de estos personajes abusan de su poder, tratando de modificar e imponer nuevas legislaciones, sin el consenso del resto de esos poderes, lo habitual es que se produzcan conflictos violentos.
En caso de golpes de estado (necesariamente violentos, ya que en caso contrario no deberíamos utilizar este término), las sanciones y penas aplicables no sólo deberían depender del nivel de violencia ejercido, sino también de la responsabilidad social de sus artífices. Personalmente, creo que es mucho más grave que cargos militares, políticos, o grandes empresarios, en ese orden, quieran imponer su «razón» por la fuerza, a que las clases populares asociadas, se alcen violentamente contra aquellos poderes establecidos, que no tienen en consideración sus problemáticas vitales.
Algo parecido sucede con la mal llamada «violencia machista». Desde mi punto de vista, a aquellas personas con mayor fuerza física (en este caso los hombres, aunque podría no ser así necesariamente) que traten de solucionar un conflicto violentamente, para imponer su «razón» a otras más débiles físicamente (en este caso las mujeres, aunque podría no ser así), debería aplicárseles sanciones y penas mayores.
Y el mismo criterio, creo, debería aplicarse cuando se produce cualquier abuso en un conflicto cotidiano, aunque no se recurra necesariamente a la violencia física (militar/policía vs ciudadano, funcionario vs ciudadano, empresa vs trabajador, empresa vs cliente,…).
Desafortunadamente, el problema principal, casi siempre es el mismo, la falta de cultura y madurez para solucionar conflictos de forma dialogada o diplomática. Y España, por mucho que haya cambiado desde un punto de vista material o de calidad de vida, aún le queda mucho camino por recorrer en el plano cultural y moral. Y con los referentes intelectuales (políticos, periodistas, expertos de todo tipo,…), tanto de «derechas» como de «izquierdas» -casi todos ellos muy poco dialogantes, tolerantes, y empáticos- que pululan por los grandes medios de comunicación, la ciudadanía lo tiene francamente difícil para progresar, o incluso se podría decir que estamos involucionando.
Un saludo muy cordial
vicente gómez.
De izquierdas en grandes medios de comunicación?
Va a ser que no, a no ser que se refiera a la izquierda de modo relativo. En modo «absoluto» nos quedamos con la definición previa a la revolución francesa, no?
La derecha está con el poder establecido y la izquierda quiere cambiar ese poder. En su origen eran corona, aristocracia y clero, en la actualidad es el capital.
@manuel xvi
«La derecha está con el poder establecido y la izquierda quiere cambiar ese poder. En su origen era corona, aristocracia y clero, en la actualidad es el capital»… y las burocracias comunistas, autocráticas,… ¿Por qué se olvida Vd de estos casos?
La revolución francesa, como la revolución rusa, la revolución china, la revolución cubana, las revoluciones islámicas…. en principio, parecen revoluciones de izquierdas… pero en el momento en que coartaron ciertas libertades individuales, sociales y económicas, dejaron de serlo.
Desde un punto de vista intelectual, con la revolución francesa se sentaron las bases y se fijaron los objetivos políticos para construir una sociedad más libre, igualitaria y fraterna. Sin embargo, a la hora de hacer cambios políticos y sociales, el «qué» se quiere cambiar, es mucho menos importante que el «cómo» se hacen esos cambios, de modo que resulten aceptables por la mayoría social, habitualmente tradicionalista, conservadora, o incluso reaccionaria a cualquier cambio.
La impaciencia. la intolerancia, o incluso la beligerancia de la izquierda política, supuestamente más auténtica, a la hora de hacer cambios políticos y sociales, más o menos radicales, consigue frecuentemente que buena parte de la ciudadanía los rechace, al igual que ocurre cuando la derecha más reaccionaria en lo social, o más libertina en lo económico, toma medidas en sentido contrario.
Si de verdad queremos que todas las democracia progresen (y los países que aún no lo son, aspiren a serlo algún día), lo mejor que podemos hacer es luchar por las libertades individuales y económicas (siempre con ciertos límites, para no caer en el libertinaje económico, que genera tanta o más pobreza que riqueza), así como por unos derechos sociales básicos (vivienda, agua, energía, telecomunicaciones, sanidad, educación, pensiones,…). Y para lograr esos objetivos, más vale que las «derechas» y las «izquierdas» se moderen, y dialoguen de forma más comprensiva y tolerante, ya que con diálogos de sordos, no se aprende nada, y las sociedades difícilmente consiguen progresar de forma equitativa.
Un saludo fraterno
vicente.
No me olvido de nada, solo que si suelto que según la definición canónica la nomenklatura era de derechas puedo dejar a algluien turulato.
Sobre moderar a la derecha, cree ud. que es posible? Solo con verlos y oírlos sabemos que no; aparte, cómo se van a moderar los ganadores de la guerra de clases si la están ganando (Warren Buffett dixit, o pixit)
Espero su respuesta a izquierdistas en grandes medios de comunicación.
@manuel xvi
Para calificar o definir algo o a alguien, con cierto rigor, es conveniente fijarse en el mayor número posible de características, y evitar simplificaciones. En el caso de tener que definir políticamente a una persona o a un sistema político, existen multitud de variables que habría que considerar, de modo que lo de «derechas» e «izquierdas» resulta bastante pobre intelectualmente, aunque reconozco que facilita la labor.
Aristóteles nos enseñó que el nivel de virtud o de corrupción moral, de un sistema político, era el aspecto clave a la hora de valorar un sistema político. Siguiendo este criterio, las monarquías podían ser virtuosas, y ofrecer prosperidad y equidad económica, así como algunas libertades a sus súbditos (excepto la libertad política, de asociación,…), o por contra, corromperse, y convertirse en tiranías, si sólo disfrutaban de esa prosperidad y libertades unos pocos, mientras la mayoría social sufría carencias materiales y de libertades de todo tipo. Del mismo modo, los sistemas aristocráticos virtuosos, podían dejar de serlo, para convertirse en oligarquías corruptas, o los sistemas más o menos democráticos, en demagogias.
Simplificando bastante, imaginemos que en lugar de la habitual línea (izquierda-derecha) que se suele utilizar para calificar políticamente a un sistema político, o a alguna persona, ampliamos el espacio geométrico a un plano (2D): en cuyo eje de abscisas, graduamos la capacidad de sus ciudadanos, para participar activa y libremente en todas las decisiones políticas, de mayor a menor; y en el eje de ordenadas, de menor a mayor, los grados de prosperidad y equidad económica, así como los niveles de libertades laborales, económicas, educativas,…, y de derechos sociales -vivienda, educación, salud, pensiones,…- de sus habitantes.
En el extremo superior-izquierdo, tendríamos la Democracia más virtuosa, en la que todos los ciudadanos participan en todas las decisiones políticas, en igualdad de condiciones y de forma democrática, con su voto directo. Y además, gracias a la virtud intelectual y moral de la mayor parte de los ciudadanos, las decisiones adoptadas logran construir una sociedad próspera y perfectamente equitativa económicamente, al mismo tiempo que se alcanza el máximo en libertades y derechos sociales.
En el extremo inferior-izquierdo, tendríamos la Demagogia, un sistema político perfectamente «democrático», en el que todos los ciudadanos participan activamente, pero como las decisiones adoptadas carecen de la virtud necesaria, la prosperidad económica es injusta y muy poco equitativa, y/o no se consigue avanzar lo más mínimo, en otras libertades y derechos sociales.
En el centro, por la parte superior-izquierda, estarían las democracias imperfectas más prósperas y equitativas económicamente, así como las más avanzadas en libertades y derechos sociales.
Y a medida que nos vamos hacia abajo y a la derecha, nos encontramos con democracias, autarquías, o sistemas comunistas, con unos mayores o menores niveles de prosperidad y equidad económica, o de libertades y derechos sociales.
Aplicando este mapa político, creo que es fácil responder a su pregunta de los referentes intelectuales (políticos, periodistas, economistas, contertulios varios,…) de «izquierdas», que aparecen en los grandes medios de comunicación.
¿Le parecen a Vd de «derechas», personajes como Iñaki Gabilondo, Gran Wyoming, Beatriz Talegón, Iñigo Errejón, Manuela Carmena, Pablo Iglesias, Ada Colau, Gabriel Rufián, JC Monedero…? Si es así, siento curiosidad por saber qué izquierdistas auténticos cree Vd que deberían aparecer en los grandes medios de comunicación, para conseguir «moderar» en alguna medida, a la derecha política y mediática.
Un saludo fraterno
Triste hilo.
En un portal del automóvil, todos, o casi todos, mirando al retrovisor -sea a la «historia», sea a ideologías- y casi nadie mirando al horizonte.
Y miren que llueve, nieva y graniza. Y que la carretera tiene el firme regular y la señalización padece años sin mantenimiento. Más aún cuando vienen curvas. Y habilidades al volante reguleras, cuando no malas.
Por supuesto, si esto es representativo de la calle, nos acaberemos estrellando.
@34
vicente.
No sé si tomar a Aristótoles es buena idea, para él la forma más pura de gobierno era la monarquía, y la más impura la demagogia (que era como llamaba a la democracia de los pobres)
Sobre el gráfico del espectro político, siempre que lo veo me recuerda a los santos del catecismo, el dogma entra mejor con dibujos.
Y digo dogma porque admitir que el capitalismo es compatible (cuando no su máximo defensor) con la democracía, lo es.
Veamos esos periodistas en grandes medios de comunicación. Gabilondo, por más que me caiga bien, no deja de ser un psoeista, y el psoe dejó de ser de izquierdas en 1974, en Suresnes. Wayo de periodista no tiene nada. Y del resto, que yo sepa ninguno trabaja en un gran medio de comunicación.
@35
Pragmático, y que ve ud. en el horizonte? Yo lo que veo, como sigamos por este camino, de la mano del capital, es una gravísima crisis medioambiental y la masacre de miles de millones de personas.
@35 Prágmatico,
Pues mire, yo uso mucho el retrovisor cuando conduzco, lo que veo por detrás condiciona y mucho lo que va a ocurrir en el futuro
Saludos.
@manuel xvi
El capital no es más que el conjunto de bienes productivos (tierras cultivables, bosques, ríos, acuíferos, minas, flora y fauna salvaje y domesticada, instalaciones industriales, infraestructuras, inmuebles, bienes de equipo, personal técnico cualificado, artistas y expertos en cualquier tema, empresas públicas y/o privadas…) que necesita una sociedad, para sobrevivir como tal.
Ese capital puede ser gestionado por actores privados («capitalismo»), administradores públicos («socialismo» o «comunismo»), o por una mezcla de ambos («socialismo capitalista» o «capitalismo socialista»), de una forma más o menos democrática, y/o con mayores o menores cotas de libertad económica individual o empresarial.
Con cualquiera de las combinaciones, teóricamente, se podría construir una sociedad próspera y equitativa en términos materiales, y en la que sus ciudadanos se sientan suficientemente libres en el plano social (personal, familiar, laboral, educativo, sanitario…), aunque sus libertades individuales económico-empresariales o sociales (libertad de expresión, de asociación,…) estén limitadas en mayor o menor medida.
El problema fundamental, como ya he comentado anteriormente, no es «quién» gestiona ese capital, o gobierna a la sociedad, ni «qué» cambios o decisiones habría que adoptar para mejorar el sistema socio-político-económico, sino «cómo» se deberían implementar esas medidas, para que buena parte de la ciudadanía se sienta conforme con ellas, al observar como su calidad de vida prospera en el ámbito material (y a poder ser, de forma lo más equitativa socialmente), así como ven cada vez más ampliados, sus derechos y libertades sociales, económicas,…
En lo que respecta a «los referentes intelectuales (políticos, periodistas, expertos de todo tipo,…), tanto de «derechas» como de «izquierdas» -casi todos ellos muy poco dialogantes, tolerantes, y empáticos- que pululan por los grandes medios de comunicación», es evidente que me refiero a todos los personajes que aparecen en esos medios, y exponen su opinión política, económica,… aunque no trabajen en ellos necesariamente ¿de dónde ha sacado Vd esa idea?
Un saludo fraterno
Vicente.
A qué idea se refiere?
@manuel xvi La idea de que para que una persona pueda ser considerada como un «referente intelectual» mediático, es imprescindible, ser periodista, y/o estar asalariado en un medio de comunicación, como condiciones necesarias. Yo no pienso así, pero según parece, Vd sí ¿me equivoco?
Cuánta gente hablando sobre lo que los políticos necesitan decir, según sus estúpidos asesores de campaña.
¿No sería mejor que en lugar de repetir soplapolleces dichas por aspirantes a tiranos (de todos los colores) exigieseis a los diputados a los que parecéis haber votado que resuelvan vuestros problemas REALES?
Porque recuerdo cuando empezaron a preguntar a los diputados de hace tres o más legislaturas cuántas cartas, llamadas o visitas recibían de sus electores y la respuesta era CERO. Algo que no parece en absoluto democrático. Ni tan siquiera propio de un sistema de representación delegada de los intereses colectivos. La democracia o se hace entera o no existe.
Al final van a tener razón los alemanes y es que aquí solo nos ocupamos de tonterías como que el Sevilla no baje a segunda o el registro en el ídem civil de las relaciones inguinales entre parejas (nunca tríos ni cuaternas) de cualesquiera género o géneros.
O, peor, tendrán razón los franceses y será que África todavía empieza en los Pirineos. Aunque visto cómo votaron para jefe del estado al anterior ministro ¿socialista? Macron de cuya gestión económica no parecían satisfechos en absoluto, quizá los franceses estén en la luna de Valencia.
40. Vicente.
Yo solo he hablado de que no hay, ni puede haber, periodístas de izquierdas en grandes medios de comunicación.
41. el que trocea….
No sé cuales son sus problemas reales, los míos son que se mantenga el sistema del estado de bienestar (por si tengo una enfermedad grave y cuando me haga mayor) e intentar frenar la enorme crisis medioambiental que no afecta y afectará cada vez más.
Crisis que, no lo olvidemos, está creada por el capitalismo.
@manuel xvi
A ver si me aclaro. En su primera interpelación, cuando Vd decía «De izquierdas en grandes medios de comunicación? Va a ser que no…», se supone que yo debía haber aplicado un planteamiento de la cuestión, tan restrictivo como el suyo, y haber imaginado que Vd se refería exclusivamente a periodistas.
Desde ese punto de vista, y la vista de sus respuestas ulteriores, supongo que Vd considera a Jesús Maraña, Maruja Torres, Jesús Cintora, Mamen Mendizabal, Jordi Évole, Iñaki Gabilondo… como periodistas de «derechas» en alguna medida. Por curiosidad, ¿qué planteamientos filosófico-político-económicos debería defender una persona, para que según Vd, la humanidad pueda calificarlo políticamente como de izquierdas, en sentido estricto?
Si no le gusta mi «dogmático» (según la RAE «Inflexible, que mantiene sus opiniones como verdades inconcusas) y simplificado mapa político 2D, con sólo 2 variables, que utilicé para ubicar políticamente a alguien o a algo, siéntase con libertad para ampliarlo a 3, 4,… n variables, o a utilizar otras diferentes de las mías, para que todos podamos entender mejor sus «dogmas»: ¿de verdad cree que es posible construir un sistema político-económico alternativo, que no esté basado en el Capital (tierras cultivables, bosques, océanos, mares, ríos, minas, fauna y flora, conocimientos agrícolas, biológicos, tecnológicos, artísticos, filosóficos…)?
Un saludo fraterno
@manuel xvi Olvidé a Antonio Maestre, a Antonio Baños… ¿qué opina Vd de ellos?
@ vicente gómez.
Ya le he contado el baremo que uso para señalar como de izquierda o de derechas (y plus ultra), aunque si ud. considera que F.G., A.G., Bono, Vázquez, etc. son de izquiedas está en su derecho de hacerlo.
Me pregunta acerca de mis dogmas, y estos son pocos, los principios de la termodinámica y poco más. Principios que el capital ignora, p.e.
Y sí, no solo es posible, sino imprescindible si queremos mantener un planeta habitable para la humanidad. Y tenemos que empezar por adecuar la economía a la ciencia (eliminar lo del crecimiento infinito, las sumas distintas de cero, la aberración de la oferta-demada; resumiendo, hacer que la «ciencia» económica obedezca a la termodinámica).
Ah! y de forma urgente, planificar la economía para favorecer a todos y no solo a unos pocos (y los episodios de desertización y DANA que padece el Mediterráneo son una muestra de ello), cosa que la sacrosanta iniciativa privada ni puede ni quiere hacer.
Ráfagas.
@manuel xvi He releído sus comentarios, y el único «baremo» que he encontrado, para calificar algo o a alguien, como de izquierdas o de derechas, según su opinión, es el siguiente: «La derecha está con el poder establecido y la izquierda quiere cambiar ese poder. En su origen eran corona, aristocracia y clero, en la actualidad es el capital.»
Siguiendo esos postulados, me encuentro con el siguiente panorama. Si la derecha está siempre con el poder establecido, en el momento en que la izquierda se hiciere con el poder político-económico, aparecería inexorablemente una nueva «derecha» política, que apoyaría ese nuevo poder establecido. Del mismo modo, también surgiría una nueva «izquierda» política, formada por todos aquellos que quisieren cambiar ese poder (sean ideológicamente más de izquierdas o de derechas). Esa visión de la «izquierda», tiene mucho más de destructiva que de constructiva, y suele llevar a la anarquía, la misma que tanto anhela la derecha más insolidaria, reaccionaria, y recalcitrante, para justificar la imposición de su injusto orden social, como «mal menor».
Dejando a un lado estos juegos lógico-lingüístico-filosóficos, sigo esperando su respuesta a mis preguntas acerca de ejemplos de periodistas de izquierdas, en sentido estricto, que según Vd, puedan «moderar» a la derecha mediática… Aunque a la vista de sus comentarios, supongo que su ideal político-económico es una economía planificada por una elite de expertos científicos, en la que todas las actividades laborales, y todos los productos y servicios, sean asignados personalmente, de modo que el dinero no exista como medida del valor relativo de las cosas, ni del muy diferente talento de las personas, ni tampoco sirva como incentivo económico, para la mejora de la eficacia y eficiencia de todos los procesos productivos, productos, servicios… Por cierto ¿esos expertos científicos serán elegidos democráticamente entre todos los ciudadanos que se consideren a sí mismos como «científicos», o sólo se podría elegir entre aquellos «científicos», previamente seleccionados por una elite política? ¿o ni siquiera se podría elegir democráticamente a esos «científicos» gobernantes?
En lo que respecta al «crecimiento económico infinito», a medida que se «agotan» los recursos naturales, puede parecer que la capacidad de «crecimiento» económico está limitado por ellos. Como Vd muy bien dice, la termodinámica nos enseña que la suma siempre da cero (balance de energía o materia en el universo, siempre nulos), de modo que los recursos naturales, nunca se agotarán (podrán ser más o menos complicados de obtener, pero siempre estarán ahí).
Sin embargo, la economía no tiene esa limitación, ya que se trata de una ficción, en la que no sólo se puede asignar un valor (monetario o no), a todos y cada uno de los recursos naturales (átomos o Julios), y/o productos derivados de ellos, sino también a todas las interacciones que puedan llegar a producirse entre ellos (de forma natural o artificial, a través de procesos químicos, biológicos, nucleares,…), durante toda la eternidad.
A medida que el aire, el suelo, el agua de los ríos y océanos, se contaminen, la «economía» debería darse cuenta que aquellos pueblos y ciudades más «limpios», así como aquellas explotaciones agrícolas, pesqueras, mineras, industriales,… más ecológicas o sostenibles medioambientalmente, serán un valor al alza a largo plazo, ya que esta «limpieza» medioambiental, es la única forma de garantizar beneficios futuros, para que la «economía» pueda seguir creciendo indefinidamente. Del mismo modo, la «economía» debería darse cuenta que una sociedad que garantice unos derechos sociales básicos (salud, educación, energía, agua, alimentos, vivienda,…) a la ciudadanía, es la mejor fórmula para que la «economía» disfrute de un «crecimiento sano», a muy largo plazo, aunque a corto y medio plazo, no satisfaga a los agentes económicos más avariciosos.
Un saludo fraterno
Hola manuel xvi y vicente gómez. Gracias por debatir.
Manuel xvi. Estoy de acuerdo con su petición de que tengamos en cuenta la termodinámica para la planificación económica futura. Teniendo en cuenta esa premisa, cuando habla de «estado de bienestar», se refiere únicamente e Europa o reclama el estado de bienestar en todo el mundo.
Habida cuenta de que la riqueza es global y la generación de rentas también es global, un estado de bienestar global parece imposible, porque requeriría un consumo de energía global que ahora mismo no somos capaces de obtener.
Dicho esto, al menos desde una visión de izquierdas, esa energía debe pertenecernos a todos, por lo que si sólo mantenemos el estado de bienestar en algunos lugares del planeta será a costa de «explotar» a poblaciones de otros territorios.
Ante esta disyuntiva. (Que supongo que aceptará). ¿Qué propone usted? ¿Que reduzcamos el estado del bienestar en occidente para transferir energía y rentas a otros lugares o que mantengamos el «capitalismo» de la propiedad privada e intentemos en la medida de lo posible preservar la situación actual de desigualdad mientras nos sea posible?
No es una pregunta trampa. Yo, que me considero de izquierdas y que considero que proteger y cuidar al débil va en beneficio de todos, no tengo una respuesta a esta pregunta.
Utilizo sus ráfagas y su saludo fraterno.
Muchas gracias por debatir. (Sobre periodistas de izquierdas en grandes medios. Tengo que decir que los grandes medios ya no existen.)
Ante todo no logro comprender la insistencia en que todos seamos blancos o negros , de izquierdas o de derechas , que nos guste el café o el té . Remarcar que como concepto, quizás » la Derecha » o la Izquierda » puede existir en la mente de algunos . Como ideológia y como metodo rector de organización politico-económica claramente no . Uno puede sentirse cercano a una ideologia liberal , conservadora , socialista …. etc, etc o a una mezcla de todas ellas . Por otra parte no comprendo la satanización de un partido como VoX. Tampoco comprendí la satanización de Podemos . Recomiendo leer los programas de todos los partidos politicos y sus idearios .
Remarcaría muchos comentarios de este debate y los subscribiría como mios también . Un buen resumen de la situación actual sería las ultimas frases del contertulio 26# . No comprendo la razón por la cual ningún partido politico actual reconsidera si la monarquía es un bien o un mal necesario en una democracia moderna como la nuestra . No comprendo porqué los intelectuales no participan mas de la vida pública o no se les da mas voz. El gran problema del españolito medio , y yo soy uno de ellos , es un simple problema de mentalidad y de picardía . Nos empeñamos en perder el tiempo en disputas inútiles y el concepto de avanzar unidos en aras del bien común no se encuentra dentro de nuestra esfera de pensamiento en ninguno de los ambitos de nuestra sociedad . Y no os olvideis , algunos periodistas reciben » sobre » y hasta algunos medios también ….. Hay que pagar facturas y el plato de lentejas…..
Un saludo cordial.
@vicente gómez, no sé si en este o en otro hilo ya comenté que en la URSS y su órbita la nomenklatura era la derecha (por supuesto según mi concepto de izq-drcha).
Y no, no tengo ningún ideal para el futuro y sé que la única solución es el consenso, la aportación de todas las ideas que buscan un futuro mejor y, por ello, sostenible. Cosa que el capitalismo no puede ofrecer.
Esa ficción económica de la que ud. habla no es tal ficción, es real, es un monstruo que lo devora todo, todo lo que mora en el planeta y en otros si fueran accesibles.
Y a la vista de su post me da la impresión, que puede estar equivocada y lo más probable es que lo esté, de que ud. sigue viendo al emperador con lujosos ropajes, ignorando lo que le dicen los «niños»: que va en pelota picada (https://s3.eestatic.com/2019/09/30/ciencia/ecologia/Medio_Ambiente-Cambio_climatico-Clima-Manifestaciones-Ecologia_433216879_134554249_1706x960.jpg)
Sr. Moltó.
Lo que propongo es sincillo de decir y muy complicado de hacer: cambiar el modelo económico capitalista por otro que sea sostenible.
Y ese modelo implicaría un estado de bienestar global, que fuera del modelo capitalista es barato: sanidad, educación, sociedad y poco más, estas son las necesidades reales del ser humano y si paises con tan pocos recursos como Cuba las satisfacen …
Pero en la avaricia capitalista son muy caras de mantener (véase USA) aparte de que el propio sistema crea necesidades imposibles de satisfacer (lo que crea infelicidad y, por ello, males) que cada vez van a más, es lo que tiene la publicidad que crea seres eternamente insatisfechos.
Me deja estupefacto con lo de los grandes medios, que yo sepa la BBC, la NBC, la Fox, la CNN… o sin salir del país, Mediaset o A3media no han desaparecido.
Ráfagas, y con cautela.
The Outsider, al citar ud. el comentario @26 lo he leído, y tengo que añadir que el holocausto nazi contra los judíos fue precidido por otros 3 holacaustos nazis: comunistas, socialdemócratas*, y sindicalistas, como bien nos cuenta Niemoller** y olvidan interesadamentes quienes hablan de los nazis.
* socialdemócratas de los años 30, que hoy en día llamaríamos de ultra-izquierda.
** Cuando los nazis vinieron a llevarse a los comunistas, guardé silencio,
ya que no era comunista,
Cuando encarcelaron a los socialdemócratas, guardé silencio,
ya que no era socialdemócrata,
Cuando vinieron a buscar a los sindicalistas, no protesté,
ya que no era sindicalista,
Cuando vinieron a llevarse a los judíos, no protesté,
ya que no era judío,
Cuando vinieron a buscarme,
no había nadie más que pudiera protestar.
@manuel xvi «… la URSS y su órbita la nomenklatura era la derecha…», así como las cúpulas burocráticas de Rusia, China, Cuba, Corea del Norte,… hasta llegar a las cúpulas de oligopolistas privados y/o de burócratas públicos de los países «capitalistas». Todos ellos crearon estructuras económicas ficticias, al asignar cierto valor económico relativo, a los bienes y procesos físicos (tierras cultivables, bosques, minas, industrias, bienes de equipo, edificaciones e infraestructuras, conocimientos científicos, filosóficos, artísticos…) más relevantes, que conforman el Capital de cada país.
El objetivo de esa asignación de «valores económicos» relativos, no es otro que incentivar el trabajo y el comercio, de modo que buena parte de la sociedad, pueda satisfacer sus necesidades vitales (alimentación, vestido, vivienda, salud e higiene, educación, seguridad, justicia…) de la mejor manera posible, y a poder ser, de forma pacífica con respecto a nuestros semejantes (desde los más próximos, con los que compartimos pueblo, ciudad, país,…, hasta los más lejanos).
La historia económica nos muestra multitud de casos en los que un cambio radical en la asignación de «valor económico» a ciertos activos físicos, es capaz de generar riqueza y prosperidad en mayor o menor medida (avances científicos y tecnológicos disruptivos; nuevas formas de organización industrial -economías de escala,…-; revoluciones políticas y económicas -URSS, China,…-), pero también crisis económicas y pobreza (por especulación bursátil, inmobiliaria,…-Crisis del 29, burbuja inmobiliaria española del 2007,…-; por aperturas comerciales a países con costes industriales, agrícolas, mineros,… más bajos -tratados comerciales internacionales, disolución de la URSS,… -; por reformas económicas que degradan salarios, pensiones públicas, servicios públicos,…; por corrupción política y económica;…).
Me alegra saber que para Vd, «la única solución es el consenso, y la aportación de todas las ideas que buscan un futuro mejor», aunque discrepo en que el «capitalismo» no lo pueda ofrecer. Como ya le he comentado, sin Capital no puede sobrevivir ninguna sociedad, y por tanto, prescindir de alguna forma de «capitalismo» económico («capitalismo comunista», o «capitalismo» más o menos «socialista», o «liberal»), es imposible. Si tiene dudas, le recomiendo leer algún manual de economía sin demasiados prejuicios político-económicos, como el Samuelson/Nordhaus.
Un saludo fraterno
vicente gómez, no dejo de asombrarme de que no sean, o no quieran, capaces de ver a dónde nos conduce el capitalismo, que está esquilmando y deforestando el Amazonas (este año fue el de mayor superficie destruída de la mano de Bolsonaro, ferviente defensor del capital), y a la vista de los resultados del COP25 parece que, como decía Siniestro «juntos de la mano…»
Y a mi este resultado de la cumbre no me parece raro, el calentamiento global le interesa al capitalismo, así habrá nuevas tierras y recursos que explotar cuando los hielos se retiren aún más, nuevas ciudades e infraestructuras que construir cuando el mar anegue las actuales, y como la tierra no podrá sustentar a la población actual habrá grandes guerras y masacres que se realizarán con las armas que vende el capital.
No, si el capitalismo es perfecto, a grandes males, grandes beneficios.
Ah! no pienso leerme ningún tratado económico (de economía capitalista) prefiero antes leer algo de astrología, que compartiendo la misma base científica, acierta bastante más.
De todas formas, gracias por su interés en mi formación.
@manuel xvi Si el «capital», según la RAE, es el «conjunto de activos y bienes económicos destinados a producir mayor riqueza», resulta inexorable que todos los sistemas económicos sean siempre «capitalistas» («comunistas» burocráticos, o más o menos «socialistas» o «liberales»), ya que sin «riqueza» ni «bienes» de ningún tipo, no puede sobrevivir el ser humano, ni cualquier otro ser vivo. Por tanto, necesitamos que el «capitalismo» evolucione, sea más ecológico, y más humano, ya que de otra forma, el entorno ecológico y social colapsará, y el «capital» seguirá la misma suerte.
El hecho de que a corto o medio plazo, tras ese colapso, algunos privilegiados pierdan menos «capital», o incluso ganen «capital» por otros medios como los que Vd describe, sería sólo un espejismo, ya que es muy probable que ese «capital superviviente», se devalúe de forma rápida, y antes o después, la miseria les alcance a ellos también.
Un saludo fraterno
@neuromancer, no se nos olvide que además en las cunetas hubo asesinados inocentes en otras cunetas. Pero lo más grave fueron los asesinatos en masa, en Iglesias, encerrados y quemados vivos de religiosos.
Si contamos la historia la debemos contar bien. Porque si no trasgiversamos la realidad. Cuidado con esto.
@55 Álvaro, debería leer todos los comentarios antes de escribir algo tan simple. Demuestra mucho desconocimiento de la historia, tanto de los años de la II república como de la guerra civil.
No se puede simplificar así, en ningún caso hay registros que demuestren que el gobierno republicano ordenara torturar o asesinar a ningún religioso, como tampoco hay constancia de que ordenara asesinar a nadie en Paracuellos (aunque seguramente les hubiera gustado hacerlo). Si es cierto que en la revolución social producida tras el «alzamiento nacional» hubo ataques a religiosos, sus iglesias y sus monasterios, así como a personas por el hecho de ser cristianas, enmascarando habitualmente terribles venganzas personales. Sin embargo si hay constancia (busque Vd. que yo no tengo tiempo) de asesinatos de religiosos ordenados directamente por los mandos del bando sublevado. Hay un monasterio que se estaba usando como hospital en Asturias donde los militares sublevados cometieron verdaderas aberraciones. Y si quiere hablar de aberraciones en masa, busque información sobre las aproximadas 19.000 personas que perdieron la vida por la represión en Badajoz.
No se debe simplificar sobre un tema al que muchos españoles solo hemos echado un vistazo de lejos.
Saludos
Últimamente no consigo distinguir los comentarios «tan simples» de los autodenominados sesudos.
Y mira que lo intento.
Un saludo a todos.
@edjmar No nos deje con la duda. Si no distingue los comentarios «simples», de los «sesudos», díganos al menos, si le parecen todos ellos una cosa… o la otra. Y sobre todo, no olvide decirnos qué opina de sus propios comentarios… quizá los suyos sí son la clave de bóveda del pensamiento universal, y no nos hemos dado cuenta… Anímese, e ilústrenos con sus «argumentos» y/o «criterios de valoración», aunque a unos les parezcan «simples»… y a otros «sesudos».
Saludos
El primer comentario de Neuromancer habla de no tolerar la intolerancia. Lo que no sé es de qué extremo está hablando; imagino que de el de la izquierda, que últimamente tiene la actitud más intolerante de «progreso» (para ellos, progreso es ir en su dirección) o muerte; conmigo o contra mí; sólo hay una opinión y una forma aceptable y ética que es la mía; y con su ejército de ofendiditos, ha instaurado una censura y una autocensura que nos ha hecho retroceder 40 años en libertad de expresión. Yo no recuerdo que la gente tuviera que medirse en los 80 para hablar como ahora, que basta que salte alguien, en algún lado, diciendo que algo le ofende para que lo censuren.
El caso es que en esto les encuentro poca diferencia a los extremos; la política se ha polarizado y ahora mismo está gobernando un polo, pasando el rodillo a cambio de vender su alma a quien sea con tal de avanzar en su definición de progreso, que no tiene por qué coincidir con la mía.
Pero sé que si dijera en un medio que no estoy de acuerdo con esto, un ejército de extremistas usaría el comodín del «facha», cuando no «Hitler», para descalificarme y sostener que mi opinión es automáticamente inservible y censurable porque no es la de ellos. Pues si tengo que ser «facha» para tener opinión propia, lo seré y a mucha honra, aunque no haya votado a Vox.
Lo que sí que me queda claro es que ese otro extremo me respeta más a mí, aunque tengan la fama de lo contrario.