Desde pequeño me han gustado los coches. Ningún regalo de Navidad me podía hacer tanta ilusión como un coche en sus diferentes facetas (de Scalextric, de Bburago, maqueta de Tamiya, incluso los de chapa que venían muchos en el mismo paquete). Sin embargo, mi pasión alcanzo cimas insospechadas cuando empecé a ver, leer y disfrutar del automovilismo deportivo de una forma más concienzuda; ahí supe que me quería dedicar a los coches sobre cualquier otra cosa.
He tenido la suerte de estar en el Jarama viendo el debut del Tyrrell de seis ruedas (el P34), más tarde buscaba contactos que me pasasen cintas de VHS en las que poder ver a los Grupo B (para mí la época dorada del automovilismo) de rallyes con los 205 T16, Quattro, RS200, Delta S4 y similares luchando a brazo partido en destinos que me sonaban tan lejanos como Kenya o Finlandia. Recuerdo también como durante una guardia en la mili escondí un transistor en la garita para intentar buscar una emisora que me confirmase la victoria de Sainz por primera vez en Montecarlo. También guardo en la memoria como uno de los momentos más impactantes de mi vida el estar en medio de un bosque en Gales, pasando mucho frío de madrugada tras 24 horas de ferry y coche, y ver pasar a escasos metros de mí a Colin McRae a bordo de su Subaru Legacy con colores de Rothmans (RAC Rallye) en la cruzada más larga, suave y precisa que jamás haya contemplado en directo. Aquello era ballet y me dejó en trance durante horas. Un pequeño tributo a aquello es mi seudónimo en este blog.
En resumen, me encanta el deporte del motor.
Como profesional del sector he tenido el privilegio de trabajar en marcas con todo tipo de actividades deportivas. He podido estar presente en F1, rallyes, resistencia, raids, turismos… en ocasiones con mucho éxito y en otras ocasiones con pocos resultados. En algunos casos con pilotos y personal español presente, en otros casos con equipos enteramente extranjeros.
Desde luego disfrutaba la experiencia, pero teniendo una responsabilidad en temas comerciales y de marketing, más de una vez me costaba encontrar la forma de transformar esa actividad deportiva en resultados comerciales. Una frase célebre de Henry Ford decía Ganar el domingo, vender el lunes, pero yo siempre he sufrido para hacerla realidad.
Supongo que gran parte de ello se debe a la cada vez menor vinculación (a nivel de productos, tecnología, etc.) entre las diversas especialidades deportivas y los coches de calle. Incluso en especialidades que usan coches derivadas de coches de producción, los coches que corren acaban por tener muy poco que ver con el modelo de origen. Un Fiesta S2000 o un C4 WRC comparten con el coche disponible en el concesionario muy pocos elementos, y creo que pocas similitudes encontraremos entre el Renault F1 de Kubica y un Megane Scénic (posiblemente tampoco haya muchas más entre el Ferrari de Alonso y el Ferrari California disponible en los concesionarios). Cuando para competir con un Grupo B había que fabricar un mínimo de 200 unidades de calle (muchas más para Grupo A y Grupo N) la gente sí podía ver una vinculación más directa entre el éxito de Carlos Sainz con su Celica GT4, de Chus Puras con su Escort Cosworth o de Borja Moratal con su Peugeot 205 GTI (por nombrar ejemplos de diversas categorías de rallyes) con el coche que podían llevarse a casa pagado en cómodos plazos.
Hablando con un anunciante que tenía fuerte presencia en el equipo de Fórmula 1 de la marca para la que trabajé durante un tiempo, me decía que para él la inversión era casi siempre rentable. El espacio sobre el coche en el que anunciaba su marca era visto por millones de personas dos fines de semana cada mes, y que la gente asociaba su marca al ambiente de vanguardia, tecnología y sofisticación que rodea a la F1. Volviendo a hablar con él algunos años más tarde, me comentaba como ahora en el patrocinio del automovilismo tenía que computar (para bien) el incremento de repercusión que había supuesto la presencia (y con éxito) de pilotos españoles, pero que al mismo tiempo (ahora para mal), tenía también que ponderar el potencial impacto negativo que podía tener en la imagen de su producto que dichos pilotos obtuvieran malos resultados.
Su perspectiva era que mientras el automovilismo deportivo fuese un evento en el cual el espectador no tuviese un favorito (por no haber piloto español) conseguía casi siempre un impacto publicitario positivo. Sin embargo, con pilotos locales que aumentaban drásticamente la audiencia y por tanto el potencial de resultados positivos, también tenía que contemplar el impacto mediático de las críticas que van asociadas al fracaso. Visto en perspectiva no le falta razón.
No dispongo de datos, pero me pregunto si la imagen de Toyota se ha beneficiado más de los dos títulos mundiales conseguidos por Sainz a los mandos de sus coches o si eso no compensa la imagen repetida mil veces del Corolla averiado casi al final del rallye de Gran Bretaña con Luis Moya diciendo su célebre frase y arrojando con rabia el casco contra la luneta trasera del coche que estaba a punto de darles su tercer Mundial. Renault claramente ha tenido grandes beneficios con los dos Mundiales de Alonso, pero también ha tenido que soportar a toda la prensa española la temporada pasada preguntando por qué no eran capaces de darle un coche competitivo a Alonso. Incluso Sainz con su reciente victoria en el Dakar ha generado tanto artículos positivos para VW como artículos negativos diciendo que la marca no era capaz de poner orden con su segundo piloto que había realizado “maniobras sucias” contra el español. El último ejemplo lo tenemos con Citroën, capaz de generar un coche con el que domina el Mundial de Rallyes pero que en estas últimas semanas ve como en la prensa deportiva, foros de internet y bares se comenta con vehemencia su decisión de relegar a Dani Sordo del equipo oficial al equipo junior por sus resultados, acusándoles de chauvinistas por promover a Ogier en su lugar.
Conclusión: desde que los pilotos españoles tienen relevancia en sus competiciones, los responsables de marketing disponemos en el automovilismo de una herramienta más potente que nunca, pero que también tiene más riesgos que nunca de volverse contra nosotros.
Pero, al final de todo, lo que más importa, es si el éxito (o la simple participación) en eventos deportivos se puede traducir en más (o menos) ventas.
¿Es ese factor importante para los compradores de coches? Me encantaría conocer su opinión y les invito a dejar sus comentarios.
Mientras, voy a volver a deleitarme viendo a Ari Vatanen subir a Pikes Peak a bordo de su 405 T16, el mismo coche que le llevó a la victoria en el París – Dakar y que hizo que intentase con todas mis fuerzas intentar convencer a mi padre para comprarse un 405 Mi16 que Peugeot acababa de lanzar. Finalmente me dijo que accedía siempre que el vendedor se lo pusiese al mismo precio que el Renault 21 que era el coche que de verdad le gustaba.
Yo no acabo de ver claro qué beneficio aporta a marcas generalistas, y cuya gama no tiene como centro la deportividad, participar en la alta competición. ¿No plantea una contradicción con el posicionamiento de marca?
¿Algún comentario al respecto?
¿Al final compró el Peugeot?
No, parece que se compró el anodino Renault aka sopor psicomotriz.
Con lo de Alonso y el Megane,creo que habrian vendido mas si en vez de «Megane F1 team» hubiese sido «Megane ed. Fernando Alonso»,como hizo Fiat con Schumi.Nadie ,o eso creo,piensa que su coche se va a parecer en algo a un F1,pero si muchos admiran(admiramos) a F.Alonso.
Cuando me compre mi coche,Alonso estaba en Renault;y estoy convencido al 80% que si hubiese habido un Megane ed. F. Alonso,me lo hubiera comprado.
Puede parecer a muchos de subnormales comprarse un coche solo por eso,pero es que es superior a mi…jeje
Sr. McRae: Por el contrario a Chibukis, pienso que a las marcas generalistas si les aporta ventas la imagen que de ellas se desprende en competición, ya que el público en general no sabe que los coches que están compitiendo tienen poco o nada que ver con lo que está disponible en el concesionario. Si la imagen es de marca ganadora, pues el público general que no sabe de coches (esto habría que matizarlo, puesto que saben perfectamente que es lo que buscan) lo interpreta con que los coches de esa marca son rápidos, deportivos, fiables, etc. (y en algunos casos, mas chulos y fardones que otras marcas).
A mí no me aporta nada en cuanto a ventas la participación en eventos deportivos, salvo que el coche con el que se compita tenga elementos mecánicos que luego yo pueda encontrar en el coche que se me ofrece en el concesionario, o al menos vestigios de estos. Pero estos elementos son desconocidos para el gran público. Seamos realistas ¿quien se fija en que un subaru tenga un motor boxer? ¿y un Porsche? ¿sabe el comprador medio que es lo que implica? Pues la verdad es que no tienen ni la más remota idea, por mas que se esfuercen en los catálogos. (o al menos eso creo).
Entiendo que participar en competición les proporciona a uds. (creo que así lo llaman) «imagen de marca», pero es una influencia que llega al comprador medio de una forma, digamos, difusa. En el caso de marcas menos conocidas, volvamos con el ejemplo de Subaru, si es provechoso el competir, ya que a los compradores medios les suena de «algo».
Lo que no se es si a ud. le es rentable la inversión. Puede que sea mas util la mera propaganda en televisión o prensa escrita, pero como no le hago mucho caso no puedo darle mi opinión.
Sr. McRae. Gracias por darnos el punto de vista desde el interior de las entrañas de las marcas.
En cuanto al trabajo de consultoría que los lectores de este blog de KM77 le vamos a regalar, le aconsejo que premie al Sr. Moltó con una buena tanda de banners de su marca.
Oiga, no vea como me ha dolido que JM me llame holgazán, como se nota que va de jefe. Jeje, aunque no tan libre como yo. Chincha rabincha.
Creo que influye, en venta de vehículo nuevo, quizás en un target de edad concreto, mas joven, donde la deportividad se conjuga mejor en la gama con la juventud y donde alcanzar un cierto volumen de ventas es mas factible. En postventa creo que influye menos, bastante menos. Por los datos que me han podido llegar de colegas que están en ese negociado, no influye mas que las campañas y descuentos que puedan emprender sin explotar la imagen de pilotos o escuderias.
Durante tres años me portaba pero que muy bien con mi padre para que me cediese su Mi16 rojo con techo solar. El alerón trasero integrado en el maletero me parecía una obra de arte. Pena que ese excepcional motor diese la potencia a tan altas vueltas. Como profesional pude probar posteriormente un Mi16 4×4 que se lanzó más tarde y era mucho peor coche.
Gracias a todos por la labor de «consultoría.»
Muchas marcas están y han estado en competición. Más allá de la imagen de marca que es hecho intangible, es un negocio que lo estén, la cantidad de piezas que venden, y de carrocerías completas es algo fuera de este mundo. Casi no hay carrera en la que no sea necesario comprar alguna pieza.
Algunas marcas tuvieron una presencia formidable y quedaron empañadas en sus últimos años cuando un velo cayó sobre ellas. Hyundai, por ejemplo, nunca debió haber sacado eso de la Copa Getz con la que quedó empañada la magnífica labor que E.S y su equipo con JAS en la parte técnica hicieron en los años de la Accent y la Coupe. La retirada en falso y el cerrojazo por los vientos de cambio en la dirección dejaron una sensación agridulce.
Renault siempre ha estado ahí, desde la época de la R8 TS. La última encarnación de la Clio (¿para qué un servofreno en un coche de carreras?) es una máquina muy competitiva con un cambio magnífico. Lo del Mini Challenge es un petardo con un coche que es estrictamente de serie. Honesta la 207. La Leon es una pedazo copa y los coches, bastante competitivos, más que algunas de las cabezas que los llevan.
No sé. Como sea, la venta de piezas es un buen negocio, indague sobre ello, que usted lo sabe.
(EJ: holgazán)
JM
Pues si y no…
Que seria Ferrari sin competición? Y Porsche? Mire a Aston Martin y Jaguar, ahora vuelven desperados a la competición e intentan hacerse un hueco… No queda «vacilón» el anuncio de Porsche haciendo referencia a sus éxitos en distintas competiciones que anualmente publica? ( a mi me encanta, aunque sepa que nada tiene que ver con un 911)
Creo que la competición, solo aporta algo a las marcas premium, véase, Ferrari, Porsche, Audi, BMW y en menor medida, Mercedes, pues por ejemplo ha sido la forma de ganarse un nicho en deportividad lo que ha llevado a Audi a competir en los circuitos, ya que lamentablemente, los rallys solo interesan a una pequeña panda de pirados… Cuanto alardea Audi de sus éxitos en circuitos? Cuanto le ha valido esto para posicionarse como una marca deportiva? ( aunque en mi opinión diste de serlo) Creo que la competición es necesaria pero mas por el know how que proporciona que por la publicidad que se obtiene, quizá hace años, aportaba imagen y conocimientos y ahora muchas marcas viven de la herencia del pasado, es posible que se vendan mas Meganes en España si Alonso gana, pero y en Alemania? Alguien se acuerda del constructor o por el contrario quien pasa a la historia como campeón, es el piloto? Creo que solo para un publico entendido u objetivo lejano a las seducciones del marketing es importante la competición. Si bien es cierto que existen casos como el de Lancia o el Alfa Romeo, que han perdido todo lo que ganaron en su historia, no cree usted que si hubiesen planteado un producto realmente seductor, como un Integrale actualizado, su imagen se refrescaría? Esta claro, que la competición fue lo que hizo a unas marcas mejores que las otras, pero actualmente tengo mis dudas, hace mejores motores Mercedes que BMW por estar siempre por delante en la F1? Los International Engine of the Year Awards, no lo creen así.
Conclusión personal, la competición puede vender mas coches entre un publico que conoce el sector, que sabe lo que busca y que gracias a que la marca en cuestión compite produce coches mas deportivos. Es decir competir vende si el resultado se transmite al producto final. Jamás compraré un C4 por mucho que me excite ver a Loeb danzando con el, en cambio si compraría un Impreza, pese a que hayan abandonado la competición.
PD: Conste que no tengo nada contra Audi, pero si hay un fabricante que ha sabido vender una imagen durante los últimos 15 años, ese ha sido Audi, ha inventado de la nada una deportividad unida a un sistema tracción a las cuatro ruedas, vendiendolo como mas seguro y mas deportivo, siempre con el punto de mira en BMW y ahora, creo que finalmente lo ha conseguido, el comprador medio de automóviles, esta poco informado y muy expuesto al marketing, desconozco el motivo, quizá usted lo sepa, pero la deportividad, vende y otorga a las marcas un carácter juvenil, actual, vanguardista y eso vende, coche hoy en día no tiene en su catalogo el «paquete deportivo»? cuantos comerciales usan esa palabra mágica para vender? cuantos usuarios saben lo que realmente significa? A cuantos seduce? Quiere vender mas coches estudie el «caso Audi» seguro que usted dispone de mas posibilidades, pero, existe algún milagro mayor al esfuerzo del grupo VW por posicionar a Audi como una marca deportiva? Y tanta competición no han desarrollado, ni tienen tanta historia en competición como Mercedes o BMW, por citar sus rivales mas cercanos.
Para mi, los exitos en competición de una marca o modelo en concreto no tienen ninguna influencia a la hora de elegir el coche a comprar.
Antesdeayer Renault ganaba títulos en F-1 y ayer era la antepenúltima escudería , entonces… ¿el Clío Renault Sport ha pasado a ser peor coche?
No tengo ni un solo dato interno de ninguna marca. Siempre doy el mismo ejemplo. Volkswagen y el Golf fueron durante años y años el coche más vendido en europa y Volkswagen no se gastaba un duro en competición, en ninguna especialidad, nada. Ahora compite con el Touareg (Ellos sabrán por qué, yo encantado) pero lo que sigue vendiendo son Golf y Passat. Muchos.
Mi impresión (sin un solo dato más) es que la presencia de las marcas en competición y las ventas de sus coches no tienen relación alguna.
Me pregunto si la presencia en salones del automóvil da el mismo resultado que la presencia en competición.
Soy Ferrarista desde que por primera vez mi padre me llevo a Montmelo a ver la F1, era el año 1993, recuerdo perfectamente, aparcar en la puerta del circuito, comprar las entradas en taquilla sin realizar ninguna fila, recuerdo esperar mucho tiempo viendo copas de promoción hasta que el circuito se vio inundado del sonido de esos Ferrari, era Gerhard Berger seguido de Jean Alesi, el 28 y el 27 (la F1 no es lo mismo sin esos dos números) ellos solos por la pista, fue increíble nunca más en ningún otro GP he sentido los mismo, en aquel GP de España corría un dios, Ayrton Senna y no por que se acostara por aquella época con Xuxa (icono de la infancia de muchos) porque era un dios de La F1 que hacía sentir a todo el mundo su talento en cada curva, desde entonces no habido año en que no haya asistido a un GP de F1 incluso algunos años a tres, me emociona ir con mi padre y ver en el brillo de sus ojos el recuerdo de cuando él y mi madre eran novios acudían a Montjuich, Jarama, Monza, etc…. las cientos de fotos de F1 que hay en casa en blanco y negro se ven en el brillo de sus ojos.
Dicho esto personalmente pienso que en los últimos 5 años la gran mayoría de los aficionados a las competiciones del motor o la F1 son neófitos captados por las constantes campañas de marketing que nos acosan, hemos pasado de ver las carreras de F1 en tve2 casi siempre en diferido por que había tenis futbol etc… A dejar de emitir incluso un telediario, hecho que solo estaba reservados a deportes tan generalistas como el futbol.
Marcas como Renault se han aprovechado y mucho de sus resultados con Fernando Alonso, aunque tenga una gran historia en la F1 no nos engañemos, solo tienen dos campeonatos del mundo 2005 y 2006 el resto son de otras escuderías como Williams que montaban el motor Renault.
Entiendo que los aficionados recientes si se dejen influenciar aunque usuarios como yo siempre consideraran a casas como Ford, Renault, Audi, Honda, Mercedes etc… Simples y generalistas siendo Ferrari, Mclaren, Lotus, Williams etc… Los grandes constructores de deportivos y los únicos que pueden sentirse así.
Siento mucho el rollo nostálgico pero es agosto y estoy en el curro.
Ptrufero.
Me parece muy revelador que McRae nos pregunte estas cosas. Alguna duda debe albergar sobre los métodos y suposiciones del márquetin.
Yo no sé si Renault (por citar una marca) saca más partido a su presencia en la competición que, por ejemplo, HP o ING. Creo que la ventaja diferenciadora de estar en competición, en términos de imagen, tiene más que ver con el halo de excelencia que rodea a las disciplinas de los deportes de motor. Si lo pienso, supongo que las marcas de coches tienen más que ganar que las aerolíneas o las tabacaleras, porque entre la sofisticación de los coches de carreras y el producto que venden hay mucha más proximidad conceptual. Yo creo que el comprador no es tonto, y que sabe que el Touareg de Sáinz no tiene nada que ver con el que se compra en el concesionario, pero quizá alberga la fantasía de que quienes han diseñado y fabricado su nuevo vehículo lo han hecho aprendiendo de la muy avanzada tecnología utilizada en la competición.
Mi opinión es que la mayoría de los mortales qué compran un coche no llegan a tanto; ni a nivel negativo ni positivo (Renault sigue siendo la 1ª en ventas antes y despues de Alonso) más que nada porque la afición al motor es mínima (excepto f1 y lo cuestionaría) y nadie llega a un concesionario a por el modelo que conduce fulanito (cuanta gente que se compra un C4 sabe que hay un piloto español conduciendolo en wrc, un 0.05% por decir algo).
Un ejemplo es la rentabilidad le pudo sacar Peugeot a la victoria de Gené el año pasado en Lemans, un hecho a la altura de los mundiales de Sainz o Alonso.
Hola a todos.
Yo creo que hay tan poca diferencia entre los coches hoy en día que cualquier pequeño factor que nos parezca diferenciador nos mueve la balanza hacia uno u otro lado. Los éxitos/fracasos deportivos en un momento dado pueden suponernos ese factor diferenciador. Lo creo incluso para todos los segmentos de vehículos, no sólo para los de corte pretendidamente deportivo.
Para mí, la presencia en competición de la marca sí que suma ventas: siempre hay algún fanboy suelto e indecisos, ni te cuento.
Aún recuerdo la leyenda urbana de que bajó la venta de MB en España cuando en McLaren estaban discriminando a Alonso.
Además, ¿quién no ha intentado sacar alguna vez el piloto que lleva dentro? A todos nos gustaría vivir en primera persona lo que viven los pilotos deportivos, y ahí es donde entra el márketing: en convencernos para hacernos creer que podemos pilotar el mismo coche que Alonso o Sainz, aunque sea mentira de todas todas.
Saludos desde Zgz.
A ver, según lo veo yo, a las marcas les interesa vender a la turba en general (señores, hay que facturar) pero el automovilismo deportivo NO interesa a todo el mundo, sólo a fanáticos y oportunistas (ya sean de F1 o lo que aplique según modas).
¿Cómo extrapolar entonces esa supuesta influencia?
En coches no tengo ni pajolera idea, pero en motos la competición lo es todo si quieres vender, y si no que se lo pregunten a Ducati…
«No tengo ni un solo dato interno de ninguna marca. Siempre doy el mismo ejemplo. Volkswagen y el Golf fueron durante años y años el coche más vendido en europa y Volkswagen no se gastaba un duro en competición, en ninguna especialidad, nada. Ahora compite con el Touareg (Ellos sabrán por qué, yo encantado) pero lo que sigue vendiendo son Golf y Passat. Muchos.»
Mentira! Volkswagen está implicada en la competición de forma más o menos oficial desde los tiempos del Escarabajo. Fueron muy exitosos en los primeros East African Safari gracias a la tracción que les proporcionaba su motor trasero. Más adelante hubo la aventura de Porsche Salzburg con los 1302S y 1303S con pilotos como Tony Fall y algun que otro resultado remarcable en rallyes cómo el Acropolis.
En la era del motor y tracción delanteros Volkswagen estuvo presente en competición desde que sacó el primer GTI. De hecho el GTI Mk I con el motor 1800cc fue el último coche que se homologó en el Grupo 4 antes que los Grupos N, A y B tomaran su relevo. Y los coches competían de forma oficial con sus matrículas de Wolsburg.
Con la segunda generación también hubo un equipo de fábrica, esta vez ya más serio y bastante competitivo en el Grupo A, aunque siempre a la sombra de los monstruos del Grupo B. En estos años Ericksson fue la punta de lanza del equipo, primero con los 8 válvulas y mas adelante con los 16 válvulas, coches que por cierto también corrieron aqui en el campeonato nacional, con un tal Salvador Servià.
El problema fue que en el 87 el Delta HF dejo a todos los otros Grupo A de andar por casa obsoletos de la noche al día. O tenías un motor sobrealimentado y tracción a las cuatro ruedas o no había nada que hacer. Y Volkswagen, como muchas otras marcas, ciertamente lo intento con los G60 y Rallye, un coche de homologación especial con tracción a las cuatro ruedas que a pesar de todo no fue competitivo.
A partir de aqui si que la presencia de la fábrica en los rallyes se redujo. Pero no desapareció. La tercera y cuarta generaciones aún se desarrollaron como Kit Cars de dos ruedas motrices y motores atmosféricos de dos litros por la filial inglesa, aunque eso si sin resultados excesivamente relevantes.
Así que Volkswagen, y el Golf en particular, has estado presentes en competición.
PD. Me uno a James Hunt en su aprecicación sobre Audi. Siempre me ha maravillado con unos coches técnicamente bastante mediocres se vendan tanto. Ciertamente en el departamento de marketing son unos ases.
Creo que el hecho de que despues de un siglo de competición las marcas sigan invirtiendo dinero en ello demuestra que algun efecto tiene aunque sea de forma indirecta.
Añadir a lo que ha dicho Ferrer que VW tambien compite en F3 y tiene la Scirocco cup. No se implican mucho en competición pero algo hacen.
El departamento de marketing de Audi es bueno, pero el Harley Davidson se lleva la palma, vender a miles tecnologia de hace 50 años es para quitarse el sombrero.
Creo que a la gente le puede gustar que una marca este interesada en desarrollar al maximo tecnologías en la alta competición, sean o no sean luego extrapolables al coche que estan pensando en comprar. Lo que es peligroso es que la marca esté la tira de años presente sin comerse un colín. No sé si Seat notó en terminos de ventas la victoria en el mundial de rallys (grupo loquesea) con el Ibiza Kit Car, pero creo que a mucha de la gente que se enteró (!) le gustó ver que eran capaces de hacer un coche competitivo y ganar un mundial al cabo de no demasiados años en la cometición. Evidentemente el Ibiza del concesionario no tenía nada que ver con el campeón (a mi me encantaba esa carrocería ensanchada) ni por dentro ni por fuera, excepto las luces pero……vaya, a ver si dentro de unos años pudieran aplicar algo de lo aprendido en suspensiones, chasis, o lo que sea, al coche que venden en el concesionario!
Por otro lado, la presencia en competición puede servir para dinamizar la imagen de una marca. Volviendo al caso de antes (hoy tengo fijación con Seat), el perfil que (yo personalmente, y obviando el pasado de los 1430, etc, etc) tenía de la marca era que hacían utilitarios normalicos y tirando a baratos, pero que habían tenido la grandísima suerte de poder utilizar (sí, ya sé que es del mismo grupo) los míticos motores tdi. Una vez que ví ese Ibiza amarillo cruzado, derrapando, subiendo a los podios de los rallys…. supe que al menos tenían espiritu de competición y que les interesaba llegar más lejos y ganar a sus rivales. Y a mi eso me gusta en una marca. ¿La presencia de una marca en competición me haría comprar un coche de esa marca? No lo tengo claro del todo, pero si ayuda a cambiar la percepción que tenemos de esa marca, creo que algo sí hemos ganado. Ahora, convertir eso en números para justificar la inversión……debe ser todo un arte.
Saludos y gracias por el artículo.
P.D. Por qué los pocos 405 Mi16 que se podían ver, siempre eran rojos? Es posible que el 405 sri fuera el más vendido de esa gama en su dia? Que bien le quedaban esos tapacubos!!
Yo considero que para los compradores de versiones deportivas si es importante que el vehículo gane pruebas y puede ser un factor determinante. Me contaron que los subaru impreza tenían como opcion las pegatinas de propaganda de «555» por 600 eurillos de nada. Nunca mas volví a verlos igual.
Despues hay las versiones seudo-deportivas de los quiero y no puedo. Como los pack M o S, AMG, Abarth…
Bueno partamos de la base que cualquiera que haya ido a un parque cerrado donde reparan los coches de rallis, sabe que no tienen de serie ni la placa de logo de la marca. Así y todo la gente pierde el culo por llevar llantas como de competición, alguna ralla pintada en el capo, inscrustaciones de imitacion de fibra de carbono (¡que son mas bonitas que las de verdad!), asientos y cosas así.
El volkswagen golt gti no es un coche deportivo, es un coche pijo. Las cosas por su nombre. Si corre mucho y es muy buen coche,etc… pero no es deportivo no transmite rabia transmite pijeria y sensación de pertenecer a una determinada classe de gente. A parte que es sinónimo de pillar cacho. En esto los de marketing si se lo han currado.
Otro dia puede hablar si el deseo de ligar y pillar cacho, influye en la compra de un determinado coche.
Ferrer, tiene razón. He dicho que no se gastaban ni un duro en competición y he exagerado. Había algunos Golf más que los que usted menciona en la década de los 80, pero a mi juicio no cambia la idea de que la presencia de Volkswagen en competición era testimonial en las dos últimas décadas. Ninguna proporción con su situación en la lista de ventas.
Los aficionados podemos recordar que estaban en las carreteras, pero la apuesta de la marca por el deporte nunca se acercó ni de lejos a presupuestos como los de Citroën, Renault, Peugeot, Ford, incluso Opel, todos competidores de Volkswagen.
Señor McRae no trabajará usted para skoda no?? es que me ha parecido curioso que poco despues de exponer este tema en el blog haya aparecido en television el anuncio que pongo mas abajo 😀
Pero no decían que de los coches que compiten en el wrc, no hay ni un 1% de similitud con los equivalentes de calle??
[url]http://www.youtube.com/watch?v=68_n-NbrlUw[/url]
Yo creo que la epecialidad que ha ayudado mas a las marcas ha sido ( en pasado), los rallyes.Pero basicamente porque eran coches muy parecidos a los que cualquiera se podia comprar. En la epoca dorada del desafio peugeot, los 80 y 90, en el que competian los 205 GTI/rallye y 309 16V, Peugeot se hincho a vender estos coches, igual que Renault con los 5 GT turbo o los Ford cosworth, delta integrale, corsa, kadett y astra gsi. La gente veia en el coche que competia a «su» coche; coche que era basicamente el mismo,solo que con la logica preparacion tanto en medidas de seguridad como para hacer-los mas competitivos y que muchas de las piezas que se usaban tambien las podia comprar un usuario normal y asi poder tener su » coche de rallye replica».
Ah, y el ibiza kit car no era tan diferente del ibiza cupra 2.0 16V de calle;de hecho compartia la maisma disposicion mecanica, motor delantero transversal, traccion delantera,que el de serie; eso si cada componente de ese coche estaba especificamente creado para la competicion..
Caso muy diferente el de los actuales WRC, que, estos si,no guardan ningun parecido a ninguna version de venta al publico, por mas que Ford nos quiera vender el Focus RS como un WRC ( sin demerito del RS, faltaria mas, pero de WRC nada de nada).
Idem en la actualidad con el caso de skoda.
Hola a todos.
yo creo que la competi es un escaparate impagable,
Esto no obsta para que haya marcas que prescindan de esta opción, pero así y todo la huella del deporte es innegable.
Por ejemplo quien no recuerda los lancia estratos o los delta integrale y sin embargo qué es hoy lancia?
Un saludo.
Muy bueno
En cuanto al ejemplo volkswagen ¿se hubieran dado los mismos resultados teniendo una referencia en competición, o ha sido más rentable aplicado en I+D de producto y publicidad y marketing? Quizás el exito vino de ser «el coche del pueblo» y nada más… ¿Se debería haber mantenido honda en F1? durante años asocié honda a la más moderna ingeniería de motores por su publicidad de F1. ¿Les merecerá la pena abandonarla por una reducción de costes? ni ellos mismos estarán seguros de lo que han hecho hasta que pasen unos años…