La frase no es literal. También ha podido ser «¡¡Embajador, a mí la guardia real!!» o ¡¡Señor embajador, aquí la guardia real!! o… cualquier cosa.
A mí me ha sonado a «Los tres mosqueteros» o anterior. Uno para todos y todos para uno. No sé qué hacía el embajador esta mañana en el ministerio de asuntos exteriores, pero sí sé que a causa de la presencia del señor embajador de cualquier país, a media mañana de un día laborable, por lo menos una decena de guardias urbanos estaba dedicada a cortar el tráfico en la Plaza de las Provincias, en el centro de Madrid, una o más decenas de policías y guardias civiles se dedicaban a ordenar el paso de los ciudadanos, algunos fotógrafos hacían fotos, y varias decenas de señores disfrazados de no me puedo imaginar qué iban montados a caballo, tocaban cornetas y timbales, movían las espadas sin concierto hasta que, en un momento dado por la solemnidad del momento, un caballo alazán o de cualquier otro color ha avanzado tres pasos con sonido recio sobre el adoquín madrileño y su jinete ha espetado:
– «¡Señor embajador, la guardia real está lista!» o cualquier otro sucedáneo de milonga.
¿Hay alguien en su sano juicio que crea que estas monsergas representativas representan algo? ¿Puede algún gobernante en su sano juicio pensar que el dinero de los ciudadanos se puede gastar en estas cuchufletas? ¿Son de verdad estas necedades propina para alguien? ¿Agasaja a alguien esta recua de desfilantes desfiladores que desfilan sin orden ni concierto?
Lo llaman el chocolate del loro y creen que con esa frase justifican algo. No queremos a más majaderos. Fuera de nuestras instituciones. Queremos a personas serias, no a incapaces que babean con tres espadones de cartulina. En pleno siglo XXI tenemos que acabar con las embajadas, los gastos estúpidos, la pompa y la necedad galopante.
¡Señor embajador, en verdad le digo que se vayan de nuestras instituciones! ¿No hay nadie de ustedes capaz de aprovechar nuestros votos para restaurar un poco de cordura? ¿Ninguno es capaz de cuestionarse las estupideces más obvias? ¿No se dan cuenta de que no pueden ir disfrazados y llamarse guardia real? ¿Me dice usted en serio que hay que seguir haciendo el memo en plena calle, a estas alturas de las comunicaciones por internet y videoconferencia, con caballos que cagan y mean en las aceras, para decirle bobadas reales al embajador de turno y para mostrarle respeto? ¿Nadie que tenga un poco de poder piensa poner fin a burlas como ésta? ¿Será que les gusta a todos que les coman así la oreja y nadie quita la suya?
Al menos, si lo hacen, háganlo bien, generen un espectáculo cierto, creen expectación y delirio en la masa. Hagan algo serio. Si no, retírense.
¡A mí la guardia real! ¡Échenlos a todos!
Hola Javier,
La ceremonia de presentación de credenciales es IMPORTANTÍSIMA. La finalidad es muy sencilla de explicar: Demostrar que seguimos siendo un país importante, comparable por historia, tradición y peso político internacional a Inglaterra. Este asunto es demasiado serio para discutirlo aquí. El email no es falso, podemos discutir por ahí y le puedo remitir a alguien que sepa más para que se lo explique.
Janderfield, ¿Cómo va a ser demasiado serio como para discutirlo aquí?
Me río exactamente de esa pretendida seriedad, de que alguien todavía pueda pensar que con estos actos se hace algo importante. Lea lo que ha escrito, por favor y piense usted solito, sin escuchar con devoción y fe lo que dicen los presuntos expertos.
¿Cómo cree que puede ser posible que con una ceremonia podamos demostrar que «seguimos siendo un país importante, comparable por historia, tradición y peso político internacional a Inglaterra».
Para demostrar eso, si es necesario demostrarlo, que también está por ver, hay que trabajar durísimamente cada día.
Alguien, en algún país, dirá alguna vez que el rey está desnudo y esta ceremonia, como usted la llama, dejará de hacerse. Pasarán diez, cien o 500 años, pero dejará de hacerse.
El boato está reñido con la eficiencia. Los embajadores son un anacronismo y por tanto desaparecerán. No sé si antes o al unísono, desaparecerán estas representaciones igual de anacrónicas.
Por favor, traiga aquí a quien nos ilustre. Estaré encantado. Leeré lo que tenga que contarnos con mucha atención, pero no espere que haga reverencias ante sus opiniones, como no quiero que nadie las haga ante las mías.
Estoy totalmente de acuerdo con el señor Moltó.
Ya está bien de tanta mamarrachada inservible solo para mantener ese aire de aristocracia que les gusta tener a los políticos (y monarcas) a costa de la gente trabajadora.
Por no hablar de que ese gasto se extiende a más que ese día; porque los caballos y los que los cuidan no comen del aire.
Cuántas cosas hay que quitar…
Está bien, lo dejaré clarito:
1) El 20% de las exportaciones españolas son coches, producto que conoce bien. Los acuerdos, muchos, que permiten eso… cree que se firmaron solos?
2) Viaja por Europa y por el Mundo varias veces al mes. En zona Schengen basta con decir ¡hola qué tal! para pasar de un país a otro… cree que el acuerdo se firmó solo?
3) Cuando va a EEUU, al salón de Detroit, por ejemplo, basta con que rellene una hojita por Internet. A veces la agencia de viajes lo hace por vd. Allí puede moverse como ciudadano respetable que es, haciendo todas las preguntas que le de la gana… Cree que eso se ha hecho solo?
4) Cuando va a Marruecos a curarle la miopía a los niños… y tan pancho, por qué cree que no pasa nada?
5) En esa misma situación, viajando un poquito más al sur, le detienen en alguna parte y le acusan de cualquier cosa… o incluso le raptan. Quién cree que dará la cara por vd, arriesgando su vida si es necesario?
6) La paz que disfrutamos en buena parte del Mundo… cree que es gratis? Si no fuera por el servicio exterior, el único idioma que entenderían las Naciones es el ruido de los cañones.
7) A propósito de la ceremonia que desprecia. Tiene fama internacional. Embajadores de otros países desean fervientemente estar destinados en España sólo por la ceremonia. Todos se emocionan, algunos hasta lloran. Vd sabe cual es el poder de negociación de España en la escena internacional? Pues en parte es por la ceremonia. Por otro lado, es un reclamo turístico que van a ver miles de personas al año, que se toman su cañita en la Plaza Mayor, que pagan noches de hotel y como no son unos gárrulos, irán a uno bueno. La chusma va a Lloret del Mar a emborracharse.
8) Cuando esté en un país jodido y tenga que pedir ayuda… acuérdese de esta conversación. Sin estar en una mala situación, cuando diga que es Español y le miren bien, le abran la puerta y le hagan la pelota, acuérdese también.
9) Por último, un poco de responsabilidad. Sólo le pido a los periodistas eso.
Janderfield, ¿De verdad cree usted que todas esas cosas son por tener embajadores y por montar estos numeritos?
¿en cuántos países montan estos numeritos y siguen sin ser «un país importante, comparable por historia, tradición y peso político internacional a Inglaterra». (España, sin ir más lejos)
¿De verdad cree que el servicio exterior sólo puede ser organizado como lo está ahora y que no hay forma de mejorarlo ni de hacerlo más eficiente? ¿Quién amenaza con la catástrofe mundial si lo cambiamos? ¿Qué intereses tiene quién lanza esas amenazas?
Las razones de o yo o la muerte no son razones, son amenazas. ¿De verdad cree que no se pueden mejorar los procesos?
¿Usted sabe cuántas veces han retenido en los aeropuertos de Estados Unidos y cuántas veces han devuelto a ciudadanos españoles por motivos inexplicables en los aeropuertos de EEUU a pesar de ser ciudadanos tan respetables como cualquier otro?
¿De verdad cree que la seriedad consiste en que los ciudadanos no nos cuestionemos las cosas? ¿Por qué le parece más serio defender que no cambie que defender que cambie?
Sin amenazas, sin anunciar el fin del mundo si cambiamos las cosas. Discutamos tranquilamente y cuestionéos todo lo que nos dé la gana cuestionar. no hay otra forma de avanzar y de mejorar que cuestionarse cada paso que damos. Cuestionarlo no implica cambiarlo, implica analizarlo y ver en qué se puede mejorar.
Sería doloroso que el futuro y la economía de un país dependiera de estas piruetas hechas en la calle. Si dependiera de eso, si eso fuera tan relevante, ser una potencia mundial sería muy fácil. Se me ocurre darle la receta a varios países con menor renta per cápita que la nuestra y con más guerras que la nuestra. Ya ya, me dirá usted que no es condición suficiente, pero sí necesaria.
Me lo tendrá que demostrar. Mi responsabilidad me impide creerme las proposiciones sin mayor demostración. Mi responsabilidad, que viene condicionada por mi formación.
Yo le pido a usted la misma responsabilidad. Desconfíe de quien le amenaza con cataclismos cuando se cuestiona cómo mejorar un proceso. Que se lo demuestre.
El temor al cambio proviene generalmente de privilegios adquiridos, de una comodidad con la situación actual que no tiene por qué convenir a la mayoría. Si algún país amenazara a España por no seguir estos rituales o ceremonias, ese país sería digno igualmente de ser amenzado.
Uno es respetable cuando toma decisiones soberanas y los demás las respetan. Uno no es respetable cuando se somete al dictado de los demás por temor a sus amenazas. ¿De verdad cree usted que China o EEUU tienen que hacer estas pamplinas para que los demás países estén interesados en negociar con ello y en tener relaciones pacíficas con ellos?
He escrito un mensaje desde mi iPad pero creo que se ha perdido. Era largo y costoso de reproducir. Mañana, desde un ordenador completo con teclado de verdad, intentaré reproducirlo. Buenas noches.
Me parece pura demagogia. Usted agarra el cabreo generalizado por el despilfarro existente y lo agita en toda dirección posible, se erige en defensor de la eficiencia y para ello le sacude palos a todo lo que se ponga por delante bajo el principio, cierto, de que todo es mejorable; sin embargo no he leído una sola propuesta, nada positivo, nada constructivo, nada que diga cómo mejorar aquello que usted censura y, al fin y a la postre, se convierte en otro triste iracundo indignado que brama al aire escupiendo saliva sin aportar nada más que asco y rabia a una ciega turbamulta con palos como el suyo.
Le sugiero que antes que escupir, sin aportar nada, use su tiempo y su intelecto en proponer cómo mejorar lo que no le parece bueno.
No pretendo defender la teoria del Sr. Moltó a capa y espada y creo que al hilo de esta entrada faltaría un especialista en protocolo que diese una explicación del fruto de esta «historia de caballos» y porque unos dirigentes que yo tomo por inteligentes la mantienen, pero desde mis miras, Sr. janderfield, ¿de verás cree que cuando Nissan (o cualquier otro fabricante de turno) decide traer o llevarse la producción de esos coches que le recuerda a Molto es porque nuestros caballos son más altos, más guapos o más listos que los del país vecino? y que si la prima de riesgo es ahora más baja que hace 9 meses pero más que hace 2 años ¿es porque la coreografía ha quedado anticuado? Cuando hay que rescatar a alguien en Mali ¿mandamos el ejercito, el ministro de asuntos exteriores o la peña de tamborileros de Peñafiel? ¿Dan mejores resultados económicos gastar dinero en adiestradores de caballo y cepillas para las crines que en gente de bata blanca y microscópios? Podría seguir indefinidamente pero tanto usted, como los demás lectores se hacen una idea de por donde van los tiros. Hasta donde llego a entender, la época donde los grandes británicos eran Sir, los alemanes se apellidaban Von y los españoles Condes se acabó tras la Primera Guerra Mundial. Ahora cuentan los resultados, por suerte para el futuro, y eso es lo necesario. Los resultados son directamente proporcional al rendimiento e inversamente proporcional al despilfarro (bien sea en forma de mariscada, copas de champán, chicas de buen ver y mejor probar o caballos espoleados con jinetes y cepillos en la cabeza). Tal vez no consigamos hacer llorar a los embajadores pero con mejor rendimiento si que puede que consigamos la aprobación del BCE, de los mercados o del CEO de una corporación importante.
Dentro de dos años quiero terminar mi ingeniería en Alemania y lo que voy a necesitar para ello es aprender alemán relativamente bien, no recordarle a Merkel (si es que está en la presidencia para aquel entonces) que la Guardia Real de mi país la recibió mejor que lo hubiese hecho el de Burkina Faso.
Le he preguntado, Sr. janderfiel antes de que pudiese enviar su texto adecuadamente. Mañana lo leeré por ver si había contestado a mis preguntas antes de que las formulase.
P.D. Si dentro de unos años la educación en España no me permite terminar la carrera, una vez que esté en Alemania las condiciones de aquí no me dejan volver o mi hermano no tiene con alimentar a su hijo por que las cosas van peor…yo no se el Sr. Moltó, pero yo si me acordaré de esta conversación y de los caballos que la pario.
Saludos desde Murcia.
Caperucita me irrita,
Estoy de acuerdo con usted con que este es un asunto facilón, pero no pretendo hacer demagogia. Me encontré la función en la calle, me hizo gracia el dislate y me he reído un poco de tanto desvarío en el que nadie parece reparar nunca.
Es cierto que no doy soluciones, pero cuando un médico diagnostica un cáncer tampoco da soluciones. Es fundamental diagnosticar primero.
En el texto digo: «En pleno siglo XXI tenemos que acabar con las embajadas, los gastos estúpidos, la pompa y la necedad galopante.»
Esta opinión no es originariamente mía, como la mayoría. Esta afirmación, o parecida, la introdujo un profesor durante un máster en relaciones internacionales. Muchos expertos en relaciones internacionales abogan por modificar el sistema actual de representación.
Esto es un blog, no un curso de relaciones internacionales. Muchas veces critico un coche sin dar una solución. La mayoría de las veces sólo sé esbozar el problema. Para encontrar la solución es necesario hacer prueba y error o buscar acuerdos entre muchos o… yo qué sé.
Acepto la crítica. Le puede llamar pura demagogia. No soy capaz de hacer nada con esa definición. Podría no haber escrito el artículo y no pasaría nada. Tampoco pasa nada por escribirlo y publicarlo. El debate puede ser más o menos profundo, podemos debatir mejores o peores soluciones entre todos o simplemente cuestionarnos un asunto sobre el que alguien pueda no haber pensado.
¿Si no lo escribo, si no digo nada sobre estos disfraces es menos demagógico, si no juego a debatir y no me río del boato soy más respetuoso?
A mi juicio, somos una sociedad adulta. Defiendo que nos podemos reír de todos nuestros sistemas y tradiciones, analizarlos, pensarlos y tratar de mejorarlos. A veces es posible un análisis profundo. Otras quien inicia la conversación no es capa de nada más que de señalar al rey desnudo. ¿Mejor no señalarlo? ¿Por qué?
Estas prácticas no van a desaparecer nunca.
Contrariamente a lo que siempre decimos, el ser humano de racional tiene poco, y recurre constantemente a soportes que nada tienen que ver con nuestra supuesta superioridad de pensamiento (ritos, supersticiones…).
Por otra parte, ya se habrá fijado en que hasta el país más pobre de la Tierra compite sin complejos con el más rico en pompa, boato y ostentación en los actos oficiales. En parte es así por el ego desmesurado que suelen tener los dirigentes, y en parte por la necesidad que tiene el rebaño de ver que la oveja que les dirige no es una oveja, sino un ser diferente (si el engaño funciona, aceptan a la oveja como perro guía, si el engaño no funciona, la defenestran).
Soy de natural, un poco mal pensado. Si yo fuese un embajador, me daría mucha vergüenza ser el centro de atención de un hatajo de fulanos a caballo vestidos para una película de época; me imaginaría que me odian, que les caigo mal por hacerles ir vestidos como en una peli en invierno, y aporreando tambores. Me imaginaría que los vecinos a los que he reventado la mañana me odian también. Y que, coño, yo sólo soy un representante de un país extranjero, hablo en su nombre porque le represento, y que para eso, me bastaría presentarme tras un café y con una charla.
No sé cómo mejorar el sistema, y eso que yo tengo un posgrado en relaciones internacionales, pero sí sé que simplificaría el ornato y la pompa porque alguna es necesaria para que la forma dignifique a la función. Siempre es necesario que la función tenga un cortejo de ornato, los jefes tienen sillas mejores, es un atractivo para llegar a ellas desde un desempeño eficiente.
JM
A mí no me parece ridículo este acto, lo cual no quita que uno deba indagar un poco si quiere entender su significado.
¿Criticable? ¿qué? ¿el dispendio? ¿el no presentar las credenciales via email? Ya puestos, para que tener embajadas.
Mi hermano viaja hoy a Macao, estará un periodo de dos años, me quedo más tranquilo sabiendo que tenemos una embajada en China y no una dirección de correo a la que recurrir en caso de que tenga algún problema. Soy consciente de que la ayuda será poca en caso de algún problema grave, pero al menos hay alguien de mi país.
Aquí se defiende gratis a los chorizos y los vagos, se subenciona toda absurda actividad y hasta la inactividad (PER), se le da sanidad a quien no ha cotizado en su vida y pensiones no contributivas a los mismos.
A usted, D. Javier, le proponen presentaciones de un vehículo en lugares lejanos, cuando sería suficiente que le mandaran un email diciéndole que en tal parking, plaza X tiene usted tal vehículo, las llaves le han llegado por mensajero y las características técnicas en archivo adjunto. Pero no se hace así, un mensaje de correo nunca puede sustituir el trato personal.
Es como la casi anacrónica carta de correo ordinario, tiene un algo que la hace especial, algo que agrada.
Si usted viene a mi casa, le invito a un café, o a comer o a una copa o a lo que sea, algo de cortesía, innecesaria ya que ni yo ni usted seremos diferentes, pero el encuentro es más agradable.
La ceremonia de presentación de cartas credenciales es exactamente así desde Carlos III. Forma parte del patrimonio cultural Español. Esa ceremonia es como La Puerta de Alcalá, El Parque del Retiro, los cuadros del Museo del Prado o los silbidos de la Gomera. Nunca se ha dejado de hacer. La ceremonia impresiona y tiene fama internacional por ello. Si ya han leído ya sobre el tema en las últimas horas creo que no tiene mucho sentido que describa aquí los detalles externos del acto. No obstante puedo explicar para qué sirve la ceremonia realmente, tiene el fismo fin desde el principio: Persuadir conmoviendo. Lo que no encontrarán en la wikipedia es lo que se habla en el interior de la carroza una vez que al embajador de, pongamos, Serbia, le tiemblan las manos de la impresión tras después de ser recibido así. Blanditos se quedan.
Si no entienden esto, es que no tienen ni idea de como es el ser humano, sus reglas, sus estructuras, el Mundo donde viven. Y antes de proponer algo nuevo y llevarlo a cabo es necesario conocer en profundidad lo que está establecido. Se sorprenderían cuantas cosas no se dirimen en el campo de lo racional y que nunca lo harán mientras sigamos siendo humanos. Se lo dice científico.
@12.- Es interesante la comparación que ha puesto usted. El adorno de la ceremonia no persigue más que darle prestancia a un acto necesario.
En cambio, que las marcas se lleven a un puñado de periodistas a lugares exóticos a gastos pagados a hoteles que muchos de ellos no pueden pagarse, que los obsequien y regalen, que les den imágenes de calidad para su medios, metraje para sus blogs, que los agasajen, les paguen caras comidas sí persigue un fin y es comprar al periodista.
Claro, unas son corporaciones privadas y otras tiran de dinero de todos; pero ¿ataca Javier el ornato por el ornato?. Al menos la ceremonia con los jamelgos no persigue comprar nada.
Mmmh me da que pensar y eso me produce hambre, así que me voy a fusilar un flan. Hala.
¿de vainilla o de huevo?
Si es de huevo, obviamente le recomiento Dhul.
No sé si los flanes son ornato o onanismo (La u queda muy mal ahí en medio. Una o en cambio resulta mucho más sensualmente ornática)
¿Le gustan los hoteles que les enseño? Tengo muchos más, pero no los enseño porque muchas veces pienso que los aburro. ¿Quieren verlos?
Yo no me puedo pagar ni uno solo de esos hoteles. Salvo que me los pongan con flan. En ese caso me lo pienso.
Luego (seguramente esta noche) prometo que contesto con algo de seriedad. Mucha no. ¿Para qué? Ahora me tengo que ir a probar un Ford Fiesta. No viene con flan, pero trae una llave que se llama «My key».
@14 y 15.- Entro al quite de esta cuestión.
EJ, no entiendo la disyuntiva que plantea, entre flan de vainilla o huevo. No existe una tal distinción, porque el flan siempre es de huevo. O sea, no puede dejar de ser de huevo para ser de vainilla. Podrá tener vainilla, pero huevo no puede dejar de tener, porque si no, no sería un flan.
Enmiéndese.
http://es.wikipedia.org/wiki/Flan
El ingrediente principal es el huevo, ya que, al cocerse al baño María, sus yemas se cuajan y toman la forma del molde, adquiriendo una textura ligera y gelatinosa y/o cremosa. Junto a los huevos, son necesarios otros ingredientes que le aporten sabor: generalmente, se trata de leche cocida con vainilla, canela o cáscara de limón; aunque también existen recetas que utilizan zumos y compotas de frutas, chocolate fundido, café, queso cremoso o yogur. Existen muchas otras variaciones que incluyen almendras, pistacho, cajeta, limón y otras variedades de frutas; antiguamente había recetas con pimienta y miel, así como otro muy peculiar elaborado con azúcar, queso, almendra, pescado, canela, espinaca y crema pastelera.
Acaso cuando usted va a una fiesta se presenta igual que cuando esta en su casa un domingo a la mañana? La formalidad y la cortesía pueden parecer exagerados o ridiculos, como esas pelucas que usan algunos jueces, pero ayudan a mantener el orden de la sociedad. De todas maneras, todos estos formalismos van cambiando (la gente ya no se quita la galera para saludar). Aceptaria usted con beneplacito que su presidente o su rey recibiera a los colegas en traje de baño porque hace calor?
La idea es que con el dinero privado una empresa lo puede dilapidar en lo que quiera sin tener que dar mas explicaciones que los resultados finales para con sus accionistas.
O sea que si Porsche se lleva a los periodistas del mundo entero en plán despilfarro a un hotel superguay, su director se arriesga a que el consejo le de puerta.
Pero con el dinero público no debería suceder lo mismo, en una democracia real hay que explicar porque se gasta el dinero y en que se gasta, no vale con decir que ya lo hacía Carlos III, eso no tiene actualmente mas importancia que la anecdótica.
Y que Inglaterra tenga una reina anciana con muchos perritos y muchos guardias con copete, no nos da base para tener un Borbón anciano y una guardia real de 1237 personas, 418 caballos y 112 coches que comen y beben del erario público.
Y aquí al ministro, al presidente del gobierno e incluso al jefe del estado, no los echa nadie a pesar de los sobres, de los cohechos, de las infantas, de las gasolineras, de los PER…
Casi prefiero lo de Porsche, no me digan…
La idea es que con el dinero privado una empresa puede hacer casi lo que quiera sin tener que dar mas explicaciones que los resultados finales de rentabilidad para sus accionistas.
O sea que si Porsche se lleva a los periodistas del mundo entero en plán despilfarro a un hotel superguay, su director se arriesga entre otras cosas a que el consejo le de puerta.
Pero con el dinero público no debería suceder lo mismo, en una democracia real hay que explicar porque se gasta el dinero y en que se gasta, no vale con decir que ya lo hacía Carlos III, eso no tiene actualmente mas importancia que la anecdótica.
Y que Inglaterra tenga una anciana con muchos perritos y muchos guardias con copete, no nos da base para tener también a un anciano y una guardia real de 1237 personas, 418 caballos y 112 coches que comen y beben del erario público.
Y aquí a los políticos de alto rango, no los echa nadie a pesar de los sobres, de los cohechos, de las gasolineras, de los PER…
Casi es preferible lo de Porsche, no me digan…
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El flan debe ser con huevo, pero para aquello que no les gusta se hace un sucedaneo con sabor vainilla.
Es popular el flan «Mandarín», elaborado a base de polvos y leche…..
Busque en las estanterías de su supermercado favorito, Mercadona, DIA, Lidl u otro de su elección, verá como encuentra un producto bajo la denominaciòn»flan» que no lleva nada de huevo.
¿y las natillas?: Idem, no, peor, es raro encontrar que contengan huevo.
Y ya que estamos, pruebe el tocino de cielo Dhul, es cojonudo. Infarto miocardio asegurado al mes, eso sí, con una sonrisa.
D. Javier, a mí me gusta que enseñe los hoteles, no deje de hacerlo, y no se haga diplomático.
D. Javier, el blog funciona fatal, los comentarios no se pueden leer hasta un buen rato después de haberlos enviado.
Esto corta mucho el rollo, es así como blogus interruptus.
Arréglelo, que para eso le leemos.
Flan Mandarín, sin huevo.
http://www.oetker.es/oetker_es/html/default/debi-8dwffc.es.html
Flan Royal, sin huevo.
http://www.centrodepostresroyal.com/productos/flan-royal/
EJ25MT5, el problema sobre los comentarios ya ha sido resuelto.
Gracias por el aviso.
Estoy de acuerdo en el extraño funcionamiento del blog. Pensé que era cosa de iPad o de la conexión a Internet, pero también me ocurre en el ordenador.
En primer lugar, la mayoría de los cónsules, embajadores, secretarios de embajada, etc. son diplomáticos de carrera, no políticos. Es cierto que algunos embajadores son políticos sin ser diplomáticos por oposición, pero no hay tantos. Con todo lo que está cayendo, hay una enorme confusión entre las personas (que leen los medios de comunicación) sobre los empleados públicos, los funcionarios, los políticos… y es que un diplomático, un Abogado del Estado, un Letrado de las Cortes, son funcionarios muy preparados. Por oposición. Con su preparación y capacidad podrían ganar mucho dinero en la empresa, pero prefieren servir a su país. Algunos, cuando llevan un tiempo, se van a la empresa privada y dejan de cobrar de las arcas públicas. Otros vuelven, como Manuel Valencia, que ha dejado Técnicas Reunidas para ser Embajador en Pekín. Ganará mucho menos dinero, lo hace porque le han llamado, porque es la persona más adecuada para ese puesto, por que es su deber.
Esos funcionarios no son «de ventanilla». No son de «la hora del café». Estos son tíos que trabajan y mantienen las instituciones funcionando independientemente de quien gobierne y legisle. Estos tíos no son como esos alcaldes de pueblo que se meten en un renting de 200.000 € para un A8 blindado.
En segundo lugar, terminar con una tradición ÚTIL y PRESTIGIOSA, simplemente porque se percibe pintoresca y cara, no es un buen negocio. Hay un valor intangible en la ceremonia que merece la pena proteger y conservar. Es el patrimonio histórico y cultural. ¿Venderían el cuadro de la Rendición de Breda para hacer caja? ¿Venderían la Puerta de Alcalá a un multimillonario chino? ¿Sólo por el turismo? No. Forma parte de lo que somos. Es importante en sí mismo. Si esa razón se la repanpinfla porque algo falló en su infancia, o están intoxicados temporalmente por la cultura Belen Esteban, piensen en los 57 millones de personas que entraron el año pasado en nuestro país y vieron la Rendición de Breda o se hicieron fotos en el Palacio Real. ¿Por qué lo hicieron? ¿Acaso es bonito y ya está? Vinieron por que es importante, por que es LEGENDARIO.
España es un país importante donde hay cosas que hacer, que ver, que sentir, con historia y aun hoy, con influencia… y por eso nos tienen en cuenta. Vd lo han entendido todo al revés. Lo que sobra en España es gente inculta, sobran 10 leyes de educación en 40 años, sobran tertulianos, sobra fealdad, sobran borrachos, sobran malos modales, sobran ladrones, sobra egoísmo.
26janderfield
Si usted se ha molestado en ver cómo se preparan esas oposiciones podría sorprenderse con la endogamia existente. Las «clases particulares» que dan los ya cónsules, jueces, registradores de propiedad, notarios…….
… sin ir más lejos, el actual presidente del gobierno viene de una familia en la que ya había más de un funcionario de carrera.
Y dentro de esos puestos, por muy funcionario que se sea; hay muchos asuntos políticos.
Señor Moltó y compañía:
antes de poner el grito en el cielo por estampas y actos de carácter militar que tienen más años que todos nosotros juntos, creo que debieran informarse adecuadamente para hablar con propiedad, cosa que por desgracia en el periodismo moderno y más en los tiempos que corren,¡brilla!, pero por su ausencia.
El acto de entrega de cartas credenciales, como les ha explicado janderfield, es un acto digno de ver, espectacular y emotivo (entiendo que no para todo el mundo), pero sobre todo aúna lo que antes se llamaba «TRADICIÓN». La gente de hoy en día, muy moderna y muy «progre» (verdaderos fascistas), se les llena la boca de críticas demagogas sobre la situación actual, la corona, el trabajo y la política desatendiendo a lo que es y será, aunque se quiera tapar y tergiversar, nuestra historia. Y la historia como tal tiene sus tradiciones y éstas debiéramos conservarlas para no perder nuestras señas de identidad.
Para la información de todos, la presentación de cartas credenciales, está contemplada en el artículo 63, apartado 1 de NUESTRA Constitución Española, el cual dice: «El Rey acredita a los embajadores y otros representantes diplomáticos». Y esa es la representación de la que tanto se mofa usted y compañía: de la tradición y del cumplimiento de nuestra Constitución.
Simplemente como aclaración, el personal que lleva a cabo el acto es, como se ha dicho personal de la Guardia Real, militares que dan servicio a la corona y a España y que sí: van pagados con nuestros impuestos y a mi parecer, muy bien invertido nuestro dinero. ¡Ya está bien tanta demagogia y crítica no constructiva quejándose de todo por doquier!. Si no entienden o no quieren entender estas cosas por lo menos sean tolerantes y no quieran imponer su pensamiento si no radical, intransigente e inflexible.
#28 Marcos.
Que algo se haga por tradición no quiere decir que sea bueno.
Y si quiere demagogia le doy de la buena: La ablación se practica en ciertos paises desde antes de que existiera nuestro ejército y no por ello es moralmente aprobable.
Por otro lado; la constitución suya que tanto proteje al rey… ese rey que todavía no la ha jurado.
No hay más ciego que el que no quiere ver. Y yo no intentaría hacer de cambiar de opinión a alguien que tiene un blog y pone lo que quiere. Sobre todo cuando el que escribe un comentario crítico al blog es un «talibán» fundamentalista de sus propias ideas.
No soy amigo del señor Moltó, pero me repatean estas pantomimas.
@28 Marcos.
Me sumo a lo que escrito Sparks y añado que en el artículo 63 creo que no se expresa la forma o procedimiento de dicha acreditación. Por tanto se puede hacer de muchas maneras. Si los ciudadanos de a pie no nos saludamos como hace cinco siglos no entiendo porque esas recepciones si han de serlo. Y si queremos hablar de demagogia empecemos por no nombrar a la Constitución como algo para silenciar a los demás, ya que en mi opinión (y la de cuatro personas a las que he preguntado de mi entono para asegurarme antes de escribir) lo engrandece por su Titulo I donde se hablan DE LOS DERECHOS Y DEBERES FUNDAMENTALES, esos del derecho a la vida, a ser tratado sin distinción, derecho al secreto en las comunicaciones, etc… pero un artículo del Titulo II, La Corona, la gente lo tiene en otro plano. Puede leerse el Titulo VI, ECONOMÍA Y HACIENDA donde no creo (francamente, no me he leído ese tomo) haber si no se incluye en ningún sitio que las administraciones públicas deben hacer un uso de la «caja pública» digamos… sensata y eficiente. Tengo serias dudas que no lo incluya.
@18 Edosss.
No veo bien en nada que el Jefe del Estado (me gusta más que decir el Rey) reciba, cuando está en representación de su cargo, en traje de baño, pero tampoco lo vería bien si lo hiciese con zapatos de charol, medias rojas, pantalones bombachos hasta las rodilla y no se cuantas pelusas más en la parte superior. Si recibe a los altos representantes internacionales en traje, que es una indumentaria convencional y de pie de calle, ¿porque sus recibimientos no pueden ser también convencionales y de pie de calle?
@26 Janderfield.
Ni por un momento pongo en duda la preparación de embajador, ni tampoco creo que hayan tantos colocados a dedos. Tampoco soy partidario de deshacernos de nuestro patrimonio cultural y mucho menos cuando es generador de patrimonio (en forma de dinero o de futuras motivaciones a seguir creando), pero, a pesar de que sea muy vistosa la ceremonia y atraiga turistas de calidad ¿Compensa el gasto de esos turistas con el mantenimiento de la infraestructura necesaria para mantener este tipo de actividades? Desde un punto de vista global, hay que valorar si algo es eficiente o no (sea la Guardia Real, el Juan Sebastian Elcano o Las Meninas). Lo que es, se queda lo que no, se retira.
Para aquellos que me tachan de radical, pogre, verdadero fascista (…flaco favor le hizo Mussolini a la cultura popular…) o de entenderlo todo al revés, diré que nadie impone ideas ni atenta contra la de los demás y sus «verdades» no son muchos más válidas que las mías. Las mías tampoco lo son más que las suyas, faltaría más.
Para mi estas gilipolleces son aún necesarias mientras sigan existiendo los Estados. Marcan el límite entre poderosos y súbditos. Es no más que una forma maquillada de advertir a la chusma que los poderosos disponen de la violencia para mantener su poder y aplastar a cualquiera que intente invadir el espacio que reclaman como suyo. En la base de toda organización está el control y ejercicio de la violencia.
Hola, buenas noches.
Marcos y Janderfield. Ustedes tienen una opinión diferente a la mía. Me parece maravilloso. Les pido que no pierdan el tiempo en dascalificarme, porque no conduce a nada. Rebatan mis opiniones, pongan las suyas de contrapeso y si son sensatas es muy posible que me convenzan, porque yo soy una persona dúctil, que cambia de opinión cada vez que alguien le convence.
Me piden que me informe. Lo piden gratuitamente. No saben cuánta información tengo sobre este asunto. Lo dicen por decir, porque deducen que no sé nada. ¿Por qué lo deducen? No tengo ni idea, pero con esas deducciones gratuitas corren el riesgo de equivocarse. ¿No se dan cuenta de que yo escribo como escribo de las cosas porque me da la gana escribir así?
También se empeñan en que por ser periodista no debo opinar. ¿Por qué? Yo soy periodista y ciudadano. Cuando informo, informo con todo el rigor del que soy capaz. Lo hago cuando informo de coches. En cambio, cuando opino, opino con toda la libertad que me da la gana, sobre lo que me da la gana y en el formato que me da la gana. ¿Por qué consideran que no debiera hacerlo?
Si ustedes me permiten, les diré que los que hablan sin saber son ustedes. Dicen que el acto ese que vi yo en la calle es digno de vere. No me digan eso, por favor, que lo vi yo con mis propios ojos y les digo que las funciones que hacíamos en el colegio a final de año cuando tenía yo siete años eran más dignas que el saluda de la Guardia Real. No hay embajador que se emocione con eso, salvo que sea tan ignorante como los caballos que revoloteaban como avispas frente al ministerio. El espectáculo es indigno, sin ningún tipo de preparación, con un escenario descuidado
yo ponía al final de mi texto: «Al menos, si lo hacen, háganlo bien, generen un espectáculo cierto, creen expectación y delirio en la masa. Hagan algo serio. Si no, retírense.»
Janderfield. Yo creo que usted no ha leído bien mi entrada. Claro que es posible que esta «ceremonia» merezca ser respetada, por su tradición y por su significado ancestral. No tengo la certeza ni de que sí ni de que no, pero es posible. De eso me quejo exactamente. Si merece ser respetada, respétenla, por favor, que la guardia real que la representa parece una jauría de locas tiradas en el centro de la plaza de las provincias después de ser revueltas en un cubilete de dados. No hay elegancia ni en el entorno de la plaza, cerrado de mala manera con vallas multicolores, ni en la evolución de caballos y jinetes, ni en la puerta del palacio donde unos señores pasean no se sabe muy bien para qué, con un coche en la puerta. Si lo hacen, si se gastan el dinero, háganlo bien, contraten a un director de la función con sentido de la estética y de la dignidad, sean sobrios y majestuosos… entonces hablaremos de otra cosa.
EJ25MT5. Yo no rechazo las representaciones diplomáticas en algunas zonas. Quizá pueden ser útiles. Pero en muchas otras zonas no sirven para nada. Este sí es un asunto serio que requiere de mucho análisis que yo no tengo capacidad para abordar. Pero no tengo duda de que hay que desplumar a las representaciones diplomáticas de todos sus atavismos, olvidar el valor añadido que su formato podía aportar hace algunos siglos y modernizarlas para ahorrar y dar mejor servicio. Cuando el correo iba tan rápido como el más rápido de los caballos, los embajadores eran imprescindibles. Pero hoy en día algo ha cambiado.
Ya,ya…..pero de lo mollar, del tema de los flanes que me dice.
¿Huevo o vainilla? ¿JM o EJ?
¡Decídase o le retiro el brindis de champán!
@33.- No hace falta pronunciarse sobre eso, un preparado con sucedáneos que emulan lo que no son resulta como Justin Bieber, que emula ser un cantante, pero es una impostura; ficción, pretensión, sueño, la musa onanista de imberbes y vírgenes recostadas sobre un consolador de estraperlo de todo a cien.
Coño, qué bonito esto que he dicho.
Varias cosas que tengo que decir, en respuesta a varios de ustedes (señor janderfield por ejemplo, y algunos otros) y otras que pongo porque quiero.
Primero, que me parece muy bien que sea por oposición. Hay oposiciones de muchas cosas, y todos los que las pasan están muy bien preparados para ello. No sólo los diplomáticos se sacan una difícil. Y las oposiciones muy muy MUY pocas veces son a dedo. Es un sistema que se vigila mucho. Los «de ventanilla» como dice usted también han pasado su oposición, que es libre y abierta a todo el mundo; si los envidia, preséntese a ellas y sáquese una plaza (y que conste que soy el primero al que cabrean cuando no me resuelven los problemas).
El argumento de «se hace así desde Carlos III» no me sirve. Si hay que mantener las tradiciones, volvamos a la esclavitud, que me vendría muy bien un esclavo que me planchase la ropa gratis (odio planchar). ¿Para qué son necesarios no-sé-cuántos señores vestidos con ropa extraña y montados a caballo? Que haya un protocolo de recibimiento no me parece mal, pero es perfectamente modificable, y habría que adaptarlo a los tiempos actuales.
Y el flan, de huevo, por supuesto.
Ah, y lo olvidaba. A quien ha mencionado que hay que respetar todo porque viene en la Constitución, decirle que estoy de acuerdo a medias. De acuerdo con que hay que respetarla, pero yo nací en 1981, así que no es una Constitución que yo haya podido elegir y votar libremente, sino que la tengo impuesta. ¿Por qué tienen miedo de cambiarla y de pedirme mi opinión para ello? ¿Y si no quiero que siga habiendo reyes? ¿Y si quiero que se cambien muchas cosas de la política?
@21. Sr. EJ25MT5, coincido con Vd. en lo del tocinillo Dhul, y también le puedo asegurar que de infarto nada… llevo muchos años consumiendolos y estoy estupendamente a mis 64 años.
Hola, propongo que ésta entrada se mantenga abierta permanentemente, he aprendido mucho con sus comentarios, es un tema espinoso, peliagudo y a todas luces necesario. Se lo pido por favor.