El Tudor es un prototipo con carrocería cupé que Škoda presenta en el Salón del Automóvil de Ginebra.

El principal objetivo del mismo es mostrar «la capacidad creativa de su departamento de diseño y desarrollo» y no está previsto fabricarlo; «Škoda no está considerando incluir este prototipo en su actual gama de modelos».

Está fabricado a partir del reciente Superb, con el que comparte la plataforma (aunque el Tudor es un poco más bajo), un motor y otros muchos elementos. El interior es diferente al del Superb y tiene detalles que le dan un cierto aspecto deportivo, como las inserciones de aluminio en el salpicadero, en la instrumentación o el volante de tres radios.

El motor es un V6 de 2.8 litros de cilindrada y 193 CV de potencia, que es el más potente que puede tener el Superb. La tracción es a las ruedas delanteras, tiene una caja manual de cinco velocidades y control de estabilidad.