Ésta es la segunda generación del Mercedes-Benz CLS —una berlina de cuatro plazas y ciertos rasgos de cupé, entre ellos, las ventanillas sin marcos—. Deriva del Clase E y cuesta, a igualdad de motor, entre 9000 y 15 000 € más. Está en venta desde 62 400 € (todos los precios).

Bien por tener un diseño relativamente distinto al habitual entre este tipo de berlinas de lujo o por la gama de motores, el equipamiento disponible o el precio, el CLS es una alternativa a modelos como el Audi A6, el Audi A7 Sportback, el BMW Serie 5 o el BMW Serie 5 GranTurismo, el Jaguar XF o el Porsche Panamera, entre otros.

A pesar de que el CLS y el Clase E estructuralmente son muy similares, hemos notado diferencias entre las reacciones de ambos. Y estas diferencias concuerdan con las explicaciones que Mercedes-Benz ha dado sobre los cambios que ha hecho en la suspensión (más información técnica) y que hacen del CLS un coche más ágil. También es distinta la dirección, que ahora es de tipo electromecánico (más información).

Hay cuatro versiones, dos Diesel —204 y 265 CV— y dos de gasolina —306 y 408 CV—, además de la versión AMG (más información). A diferencia de lo que ocurría en el modelo precedente, todas las versiones —excepto la AMG— se denominan «BlueEFFICIENCY», que suponen ciertas medidas para que el consumo sea bajo. Desde octubre de 2011 hay versiones de tracción («4MATIC»), con los motores de 265 y 408 CV.

Hemos probado con detenimiento la versión Diesel de 265 CV. Por lo poco que gasta y el confort que proporciona, en el sentido más amplio que se nos ocurre y que abarca los asientos, la climatización, la suspensión y el confort acústico , es un coche muy recomendable para hacer viajes largos, tanto como un Audi A7 Sportback.

Y casi tanto como un Clase E, siempre que la menor habitabilidad del CLS y una suspensión ligeramente más dura no suponga un inconveniente a sus ocupantes. Porque sí, el diseño del CLS condiciona la habitabilidad —principalmente la altura, pero también el espacio para las piernas en las plazas traseras (mediciones interiores)— y también hace menos cómodo a algunas personas entrar y salir del coche (más impresiones del interior).

Las prestaciones que hemos medido son buenas y corresponden a las de un coche Diesel de su tamaño y potencia. Además este motor gasta muy poco en el CLS. Por lo que pudimos comprobar en la presentación de este modelo, el motor Diesel de 265 CV es preferible al gasolina de 306 CV por su respuesta y capacidad de aceleración en condiciones de conducción normales (más impresiones de conducción), además de por su consumo.

Gasolina			Diesel
Versión	CV	Tracción	Versión	CV	Tracción
CLS 350 BlueEFFICIENCY	306	Trasera	CLS 250 CDI BlueEFFICIENCY	204	Trasera
CLS 500 BlueEFFICIENCY	408	Trasera	CLS 350 CDI BlueEFFICIENCY	265	Trasera
CLS 500 BlueEFFICIENCY 4MATIC	408	Total	CLS 350 CDI BlueEFFICIENCY 4MATIC	265	Total
CLS 63 AMG	525	Trasera

La variante CLS 350 CDI BlueEFFICIENCY, es la única que no tiene el sistema de parada y arranque automático del motor en las detenciones («Start/Stop»). La Diesel menos potente —CLS 250 CDI BlueEFFICIENCY de 204 CV— tiene un consumo homologado menor que el de cualquier otro turismo de un tamaño similar y motor Diesel (listado). El CLS 350 BlueEFFICIENCY tiene un motor de gasolina de 306 CV distinto al del modelo anterior (más información).

El CLS de 2011 reemplaza al de 2004 (más información), que fue actualizado en 2008 (más información).

Equipamiento

La unidad de pruebas tenía los faros con diodos luminosos (LED) para todas las funciones y que no me ha parecido que alumbren mejor ni peor que unos faros de xenón. Con esta opción, hay tres tiras horizontales, que en total suman 71 diodos.

La tira superior es la de los intermitentes, mientras que la central es la de la luz corta y la iluminación adaptativa y la inferior la de las luces largas y los proyectores de infrarrojos para el sistema de visión nocturna. Las luces de marcha diurna están en el paragolpes (imagen).

Audi también ofrece en el A8 y el R8 unos faros de diodos, aunque supone prescindir de la iluminación adaptativa que sí tienen esos mismos modelos si llevan faros de xenón. Lexus, en el RX 450h, tiene unos faros con diodos para el alumbrado de cortas con la función de alumbrado en curva pero las largas y la luz de posición es mediante bombillas de filamento. Los faros de LED del CLS sí tienen iluminación adaptativa.

Es posible optar por varios elementos de equipamiento que estrenó el Clase S en 2009, como el sistema de alerta por cambio involuntario de carril («Active Lane Keeping Assist ») y el dispositivo de detección de objetos en el ángulo muerto («Active Blind Spot Assist») que pueden actuar sobre los frenos de un lado del coche para cambiar la trayectoria y evitar una colisión lateral.

También puede llevar un sistema de aparcamiento automático («PARKTRONIC») capaz de medir los huecos —hasta 36 km/h— para estacionar y girar las ruedas para hacer las maniobras. El conductor sólo tiene que accionar el acelerador y el freno, guiado por el sistema.

Hay diversos paquetes que modifican ligeramente tanto el aspecto exterior como interior. Además, puede llevar, de serie o en opción, elementos de seguridad como un sistema de alerta por cansancio («ATTENTION ASSIST»), un programador de velocidad activo («DISTRONIC PLUS»), un dispositivo de visión nocturna («NIGHT VISION PLUS») o un sistema de frenado automático ante una colisión frontal («PRE-SAFE»). Desde octubre de 2011 está disponible opcionalmente una conexión a internet wifi que permite navegar con varios dispositivos simultáneamente (fichas de equipamiento).

Precio y seguro

Con el motor Diesel de 265 CV, el CLS cuesta más que el BMW Serie 5 y el Jaguar XF, parecido a un A7 Sportback y un Serie 5 Gran Turismo y menos que le Porsche Panamera, todos ellos con motores de 240 a 275 CV (listado).

Con la versión de gasolina CLS 350 BlueEFFICIENCY de 306 CV sucede algo similar (listado).

Asegurar a todo riesgo sin franquicia un CLS 350 CDI BlueEFFICIENCY para un conductor de 50 años, con 25 de carné y sin siniestros en los últimos 5, casado, residente en Madrid y que recorre hasta 30.000 km al año tiene un coste mínimo de 1437 €. Esta póliza la ofrece Reale y según nuestro comparador de seguros es de alta calidad —8,07 puntos sobre 10—. Si se prefiere un seguro que sólo cubra siniestros importantes, una opción es un seguro a todo riesgo con franquicia de 900 € de Mutua Madrileña. Cuesta 728 €, pero tiene una calidad baja —4,23 puntos sobre 10—.