Glosario | Acero. Acero de alta resistencia
Es un material metálico compuesto principalmente por hierro, mezclado con carbono en una proporción que puede variar entre el 0,03 y el 2 por ciento. También se añaden otros elementos como silicio, níquel, volframio, vanadio o molibdeno, para configurar los aceros de aleación. Si el acero tiene poco carbono (hasta 0,2 por ciento) se dice que es un acero dulce, porque resulta muy maleable. Cuanto más carbono tenga, el acero se endurece y adquiere mayor tenacidad. En función de los elementos de un acero de aleación, se consigue variar sus propiedades, y hacerlo más resistente a la compresión y a la torsión (con cromo y vanadio); muy duro y resistente al desgaste (con manganeso) o con gran resistencia a la corrosión (aceros con níquel). Pero para variar sus características también se utilizan tratamientos térmicos, como el templado (calentar a elevadas temperaturas y enfriar bruscamente en agua o aceite, con lo que el acero se vuelve muy duro) o el revenido (regula la dureza del acero con la temperatura de recalentamiento).
acero de alta resistencia. Tipo de acero que requiere más presión que el acero normal para ser doblado más allá del límite en que no vuelve a su forma inicial. Según la clasificación de USLAB (Ultra Light Steel Auto Body), se considera acero de alta resistencia el que tiene un límite elástico entre 210 y 550 MPa, y acero de resistencia «ultra alta» al que tiene más de 550 MPa. A igualdad de espesor, una plancha de acero de alta resistencia da más rigidez a una carrocería; a igualdad de rigidez, la hace más ligera. El acero de alta resistencia requiere procesos especiales de fabricación, bien para prensarlos o bien para darles un tratamiento final que aumente su resistencia después de prensados. Se puede conseguir acero de alta resistencia por procedimientos físicos (templados) o químicos (aleaciones, entre ellas con fósforo o boro).